Mi Caos Ruso

By articsmonkeys

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Mi nombre es Nyx Evans, mi vida se volvió una rutina monótona sin emociones hace años, todos los días las mis... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15 Parte 1
Capítulo 15 Parte 2
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20 Parte 1
Capítulo 20 Parte 2
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Aviso
Capítulo 30
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37 Parte 1
Capítulo 37 Parte 2
Capítulo 38 Parte 1
Capítulo 38 Parte 2
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
¡Sorpresa!
¡¿Otra Sorpresa?!
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Capítulo 53
Capítulo 54 Part.1
Capítulo 54 Parte 2
Epílogo
Nota

Capítulo 31

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By articsmonkeys

Mi corazón late a mil kilómetros por ahora, necesito ser más clara pero dudo que pueda formar palabras sin sonar como una lunática. Necesito ser objetiva en mis palabras, necesito decirle todo porque estoy casi cien porciento segura que después de hoy entrar a mi casa será ilegal.

-¿Qué tal el clima?-

Buena idea Nyx, habla sobre el clima

-¿Campanita?- su voz dormilona me causa un poco de gracia- Creo que me quede dormido- ¿Qué hora es?

-Las seis de la tarde- reviso el celular -Xav, Yo...Yo -balbuceo como una demente.

Buen giro genio, quizás te ganes un premio por payasa

-Quiero dormir nena- su cabeza cae en mi hombro, mis brazos van a su espalda y trazo círculos- Vamos al cuarto antes de que caiga al suelo.

Ambos caminamos a la habitación con cuidado, su cabeza es realmente pesada pero adoro sentir su calor en mi cuerpo. Pasamos lentamente el cuarto de Iván, la puerta como de costumbre está cerrada pero ningún ruido es audible quizás fingió nuevamente sufrir un infarto para llamar la atención de Mara otra vez o simplemente desapareció.

-¿Y la princesa de las nieves?- Xavier se acuesta en la cama mientras toma un libro gigante en sus manos e intenta abrirlo-Sabes que esta al reves- niega con pereza pero continua leyendo.

-Tiene cita para chequearse el brazo con su Doctora Corazón- sus ojos hermosos se cierran con cada palabra- ¿Donde estabas?-

Momento para hablar Nyx Evans

-Voy por comida guapo- mi boca se abre antes de que pueda pensar lo que necesito decir en realidad- Mejor dicho voy por agua y comida-

Salgo de la habitación horrorizada, me golpeo con la palma de la mano la frente, mi estómago claramente no está para consumir nada en un par de horas y dudo que Xav pueda mantenerse de pie por más tiempo. Ya no soporto los malditos zapatos, me deshago de ellos tirandolos a un lado de la cocina, puedo sentir como mis dedos sienten paz luego de un día de tortura.

-Veamos que tenemos- abro la nevera, solamente tenemos restos de comida china y lo que creo que es pizza- Agua será- saco un pequeño vaso de vidrio para llenarlo de agua hasta el tope.

Con el vaso en mano me dirigo al cuarto, Xav continua medio dormido intentando leer pero el libro sigue al revés, dejo el vaso en la pequeña mesa y me dirigo al armario para sacar una camisa de manga larga rosa junto un short negro con manchas. Sin darle mucha importancia, me saco la ropa para colocarme mi deliciosa pijama el material es cálido al tacto dando un delicioso brote de calor en las manos.

Ansiosa, me volteo, necesito hablar antes de que inicie a limpiar el apartamento de pies a cabeza.

-¿Xav?- pregunto con cautela- ¿Sigues despierto?- veo un leve movimiento con su cabeza, más que suficiente para mi- Tenemos que hablar- odio esa frase- Mejor dicho tengo que hablar y tú escuchar-

Sus hermosos ojos verdes me ven atentos, intentando mantenerse despiertos. Inhalo con calma, me siento sobre la cama para evitar que mis piernas fallen en cualquier segundo. Siendo conservadora dejo un espacio entre ambos para evitar que me desconcentre.

-Soy todo oídos Campanita- siento una de sus manos alcanzar la mía.

-Termine con Enzo- escupo sin pensarlo mucho- Ya... no hay más idiota- su mano juega con mis dedos- Pero eso no es todo- añado con pánico- Hable con mi madre, se puede decir que nuestra relación ha decaído hasta descomposición-

-Nyx, si esa...- mi dedo se posa en sus labios.

-Mi madre ha estado cogiendose a su jefe desde hace mucho tiempo- no entiendo porque una sonrisa se forma en mi rostro- Luego la llame zorra salvaje y la amenace con una cuchara de bebé-

En mi cerebro, sonó mejor pero ahora mismo me siento una perra.

-Un día productivo Campanita- su mano sube hasta mi muñeca e inicia a hacer figuras- ¿Estas bien?-

-Creo que ya no tengo casa, ahorros o madre pero me siento genial-

Ahora sí quiero llorar, creo que la realidad me ha caído de golpe.

-Nyx, tienes un hogar- siento sus manos en mi mejilla- Se que mi familia es un poco peculiar- una risa se escapa de mis labios- No soy millonario, pero si quieres puedes formar parte de mi pequeño mundo-

Puedo sentir las lágrimas en mis ojos,

-Solamente te necesito a ti en este jodido mundo Xav-

Mi corazón se ha derretido pero hay algo más que necesito decir antes de la cena.

-Sabes- digo mientras lo veo a los ojos - Ayer, en clase de astrología hablamos sobre las estrellas fugaces- susurro y no se porque demonios lo hago - Son pequeñas partículas que al entrar a gran velocidad en la atmósfera de la Tierra se "queman"- hago comillas con mis dedos para ilustrar más la idea - por la fricción y producen el trazo luminoso que surca rápidamente el cielo- tomo aire- Pero eso no es lo que en realidad llamó mi atención- los ojos de Xavier se ven aburridos con cada una de mis palabras- Lo que me pareció curioso es que cuando pasan por la órbita terrestre van a una velocidad de 180 000 kms/s- comienzo a jugar con mis dedos- Significando que nuestros ojos no son capaz de diferenciarlos e observarlos de manera correcta porque son tan rápidos que nuestras córneas solamente los puede percibir como flashes de luz.-

- ¿Me estas dando una clase de astrología Campanita ?- dice con los ojos cerrados- Que cambio de tema.

-En realidad, no- respondo- Lo que trato de decir es que...- mi voz tiembla un poco- lo que siento por ti, lo hago con la velocidad de una estrella fugaz-

- No entiendo- dice bastante serio.

-Pues- tragó con fuerza- Como te dije antes, las estrellas fugaces son mínimas, pero pueden alcanzar una velocidad de 180 000 kms/s significando que son inminentes e imposibles de replicar por la humanidad - ahora si empiezo a temblar- Mi amor por ti es como una estrella fugaz- vuelto a citar- Quizás pueda ser inmutable para algunos humano pero...- su mirada está pendiente de cada movimiento de mi cuerpo - Es inevitable, te amo con tanta fuerza que mi corazón parece latir a otra velocidad cuando te ve - respiro- va tan rápido que aparenta no latir y cuando no estas,sus latidos son casi efímeros; también, es imposible de replicar- suelto de una- me enamore de ti quizás no al principio como lo haría cualquiera- ríe por lo bajo- si no que fui descubriendo y amando cada micropartícula de tu ser- vuelvo a temblar- desde tu mal genio, tus emociones volátiles- negó con la cabeza- tu gran corazón, tus deseos de mejorar y lo más importante- respira Nyx- simplemente ser siempre tú- mi voz comenzó a fallar- me enamore completamente y perdidamente de todo tu ser Xav a una velocidad tan grande que aunque pudiera o quisiera no podría evitarlo nunca.

Ahora si puedo cenar, el nudo en mi garganta ya no me atraganta sin embargo la cara de Xavier no me da mucha confianza. Quizás mis palabras fueron demasiado prontas pero creo que es demasiado tarde para decirle que me retracto.

-Xav... Yo... Yo...- joder sus ojos no se separan de los míos- Di algo-

-Campanita-

Escucho la voz pero no la reconozco, es casi como si las palabras no llegaran a mi.

-Me...me- di la palabra- ¿Amas?-

La perfecta sonrisa de Xav me cautiva pero creo que ahora el miedo me esta comiendo.

-No, no puedo vivir sin ti que es distinto...- mi estómago cae al suelo -Juro que me enloquece cada partícula subatómica de tu existencia- su mano viaja hasta mi mejilla- Necesito verte, hablarte tocarte, acariciarte, besarte entre muchas cosas más...-

-Pero no me amas- puedo sentir las lágrimas rozar mis ojos, trato de soltarme pero su agarre no me lo permite.

Genial ahora estoy sola sin ahorros ni futuro.

-Campanita, escuchame una vez antes de crear conclusiones- intento quitar la mano pero nuevamente no puedo- En el corto periodo de tiempo que llevo conociendote, has tenido el poder de adentrarte en mi, te amo con cada nervio de mi cuerpo Campanita- vuelvo a mirarlo a los ojos- Te amo Nyx Evans-

Mis ojos caen en sus labios, quiero besarlo hasta no poder más y sin pensarlo, salto en sus brazos uniendo nuestros labios en un beso algo salvaje porque ahora mismo la cordura y lógica me importan un pepino. Casi por instinto, sus brazos por mi cadera, pegandome cada vez más a su cuerpo. Luego sus labios inician a besar cada parte de mi cara, abriéndose paso hasta mi cuello e iniciar a succionar la piel.

-Campanita- murmura entre besos- Joder, Nyx- capturo su labio entre mis dientes.

-¿Despierto?- Una sonrisa casi oscura se forma en su rostro para luego volver a besarme con fuerza.

Sus manos se posicionan en mi trasero, levantándome de la cama un par de centímetros, lo suficiente para moverme ahora estoy semi acostada mientras que el se coloca sobre mi. Se quita la camisa dejándome ver su perfecto cuerpo, joder me va a dar un infarto al ver el cuerpo de este hombre.

-Mierda- hablo en voz alta, mi mano pasa por todo su abdomen haciéndolo gruñir con fuerza.

Sus manos se dirigen al dobladillo de mi camisa, muevo mi espalda para que la prenda salga con facilidad, los ojos de Xavier se dirigen a mi brasier blanco con puntos azules.

-No es muy sexy- mis manos intentan cubrirme pero Xavier toma mis manos y las besa.

-Te ves hermosa Nyx- besa mi clavícula- Eres mi perdición moya zvezda- su voz me dejan sin palabras, solamente quiero besos.

-Callate y besame Xavier-

Cogo su rostro entre mis manos, juntando nuestros labios nuestras lenguas inician un beso a la vez que sus traviesas manos se van moviendo hasta el cierre de mi sujetador.

-Tú eres mía- susurra

Lentamente, su boca se mueve hasta mis pechos e inicia una deliciosa tortura mordiendo la piel que resalta del sujetador mientras que sus manos cierran y abren el maldito broche. Siento como mi cuerpo ruge de deseo con cada mordida, sus dientes apenas tocan mi piel pero su aliento calienta cada nervio de mi cuerpo casi de una manera intolerable.

Intento tomarlo del cabello para que me vea pero su dulce tortura continúa, su toque es el tipo de conección que no se olvida por más que mi mente se pierda mi cuerpo siempre va a recordar su tacto.

-El juego para después-

Entonces, Xavier ríe por lo bajo pero el cierre al fin se abre, con ansiedad lo retiro de mi cuerpo, vuelvo a acostarme y en menos de un segundo comienza a besar mis pechos con furia.

-¡Joder!- gimo con fuerza, espero que Iván en serio no esté.

Como puedo, muevo mis manos hasta llegar al cierre de sus pantalones para finalizar con el dolor cada vez más punzante entre mis piernas pero antes de que pueda deshacer el botón Xavier ya se ha arrancado el pedazo de ropa dejándolo solamente en un boxer negro. Siguiendo su idea, me deshago también de mi short, tirándolo con la pila de ropa y mostrando mi ropa interior a juego.

Su respiración se agita aún más, la mía ya no tiene ritmo solamente es una marejada de suspiros mezclados con gemidos ocasionales.

-Campanita- mis manos se mueven por toda su espalda hasta llegar al elástico de su ropa interior- Si quieres parar es ahora- besa mi estómago- Porque no creo ser capaz de detenerme- su lengua se mueve hasta llegar al inicio de mis bragas pero no hay palabras en mi garganta para decirle que pare- Sientes esto- su erección hace fricción con mi ropa interior haciéndome gemir con fuerza.

-Xav- asiento y él vuelve a crear fricción entre ambos.

-Me tienes así desde que te conocí Campanita-

Sus labios vuelven a ceñirse contra los míos pero ahora mi cuerpo demanda mucho más que un simple beso para calmar mi creciente deseo. Baja sus labios hasta mis pechos para continuar torturandome, devorándome con cada toque y su traviesa mano izquierda se mueva hasta mis bragas pero no se mueve solamente traza pequeñas líneas.

Mis caderas se mueven en busca de su toque y él no desperdicia un segundo para liberarme de la molesta prenda, dejándome totalmente desnuda y a su merced; con la luz del cuarto puedo ver que el verde de sus ojos se ha reducido dejando solamente una sombra oscura, todo su cuerpo está tenso mientras que su respiración es cada vez más y más agitada casi como si el aire fuerza acero.

-Me encantas- vuelve su atención a mi cuello para lamerlo y hacer una línea hasta el centro de mis pechos- Me vuelves loco-

Mis piernas tiemblan como gelatina al escucharlo, si no fuera por la cama estaría en el suelo.

-¿Qué quieres Nyx?- muerde mi cuello con intensidad pero el placer es mayor que el dolor- Dímelo pequeña-

-Quiero...- mi voz es cada vez más ansiosa- que me hagas tuya Xavier Volkov- puedo sentir como nuestras respiraciones se vuelven más violentas.

-¿Tomas la pastilla?- asiento con torpeza, luego le agradecere a Anne por sus consejos- Seré delicado Campanita- veo como su ropa interior vuela.

Joder... mierda es imposible que su amigo entre en mi sin matarme.

-¿Campanita?- continuo con la vista clavada ahí- Pídeme que pare- pero no digo nada- Envuelve tus piernas en mis caderas-

Hago lo que me pide sin cuestionarlo pero la ansiedad y el miedo están comenzando a llegar. Con cuidado, se posiciona sobre mi sosteniéndose con sus brazos para no aplastarme con su peso pero lo que me hace gemir es el sentimiento de su miembro en mi entrada, todavía afuera pero joder siento como el calor me quema viva.

Según lo que se, la primera vez duele como la mierda pero hay que ser positivas quizás solo sea un mito.

Beso su mandíbula, puedo sentir la tensión en todo su cuerpo casi como si se estuviese conteniendo así que continuo mi camino hasta su cuello para iniciar a morderlo, espero dejar una gran marca.

Ansiosa, acaricio su estomago marcado hasta llegar a su abdomen bajo dónde puedo sentir la jodida v tan definida siento como un gruñido escapa de su garganta entonces me muevo otra vez hasta su clavícula para bajar lentamente hasta su pelvis.

-Nyx- susurra con necesidad en su voz, creo que ambos estamos cansados de los juegos del otro.

Desesperada tomo su cabello entre mis manos para besarnos nuevamente pero mi mano continúa explorando su cuerpo siendo específica paseando por su pelvis pero mis movimientos provocadores se detienen abruptamente cuando siento una de sus manos deslizarse hasta mi cintura.

Él se queda totalmente inmóvil, quemándome con su tacto, uno de sus traviesos dedos se mueve hasta mi monte venus pero no se mueve solamente espera a una reacción. Mi cuerpo se mueve con ferocidad para crear algún tipo de movimiento pero no lo suficiente para calmarme un poco.

-Dilo de nuevo-

Se exactamente a que se refiere.

-Te amo- jadeo

Xav mueve sus dedos más abajo hasta llegar a mi entrada pero vuelve a detenerse.

-Dime que eres mía- gruñe a la vez que succiona mi cuello con desesperación, joder me va a dejar toda marcada.

-Soy tuya-

Otra vez su dedo se mueve levemente más abajo pero no lo suficiente para llegar a donde lo necesito.

-Otra vez-

Mis manos se van hasta su trasero para apretarlo con fuerza, mis piernas se abren para permitir que pueda entrar a mi con facilidad pero no logro que ceda ante mi deseo.

-Joder, soy malditamente tuya Volkov- pronuncio cada palabra con desesperación.

Ahora, su mano sube hasta llegar a mi ombligo y me quedo cegada por el placer así que antes de que pueda moverse dirigo mi mano a su ingle e inicio a hacer líneas horizontales hasta llegar a su miembro.

-Eres mío- imito su voz, mi mano se acerca más a su objetivo.

-Soy tuyo Campanita- mi mano se retira y llega hasta su cabello para tomarlo con fuerza.

-Maldición Xav, hazme tuya de una jodida vez-

-Como desees Campanita-

Sus manos se posan en mis caderas, levantando levemente mi trasero de la cama y suspiro del placer porque su dura polla se choca contra mi entrada. Involuntariamente muevo mis caderas para sentirlo al fin dentro de mi completamente pero Xavier es más rápido y me penetra con fuerza, de un solo movimiento haciéndome gemir con fuerza.

-¡Mierda!- maullo de dolor, puta madre Anne no exagero con sus palabras siento que me estoy partiendo en dos putas partes.

-¿Campanita?- pregunta pero yo solo puedo contener un grito de dolor en mis labios-¿Te encuentras bien?- asiento con dolor. Xav sale de mi eliminando el dolor palpitante en mi entrepierna pero sin previo aviso vuelve a penetrarme pero esta vez más cauteloso quedándose justo a la mitad-¿Mejor?- repite el movimiento.

Lentamente con cada movimiento el dolor disminuye notoriamente hasta que es reemplazado con ansiedad y un placer insaciable por mi parte.

-Eres tan estrecha- gruñe en mi cuello- Tan perfecta para mí- gimo en respuesta porque las palabras abandonan mis pensamientos.

Sin pensar más, me deje llevar por cada embestida y la velocidad creciente de cada una hasta que se vuelve un vaivén lleno de deseo. Me penetra con tanta fuerza que nos movemos como uno juntando nuestras oleadas de placer, se puede sentir el salvajismo y ansiedad que tenemos el uno con el otro con cada segundo.

Torpemente, mis manos se mueven hasta su espalda donde mis uñas se clavan en su piel con fuerza pero de su boca se escapa un gemido con mi toque. Mis piernas entumecidas se ajustan con cada movimiento a sus caderas para profundizar sus embestidas. No tardo mucho en sentir una acumulación de placer en mi vientre, con cada segundo puedo sentir como crece con desesperación, esperando a estallar.

-Me vengo Campanita- sus palabras hacen que el orgasmo me golpee sin piedad, un grito gutural abandona mi garganta junto con un intento para pronunciar su nombre.

Xavi, se sigue moviendo con más fuerza, una, dos, tres embestidas más y siento un calor crecer en mi interior.

-Joder- besa mi cuello una vez antes de acostarse a mi lado pero sin antes tomarme con su brazo y subirme a su pecho, el cual se mueve con intensidad al igual que el mio.

Vagamente mi mano se mueve hasta su corazón, donde me quedo haciendo pequeñas figuras sin sentido. Ninguno de los dos habla pero ahora mismo no son necesarias las palabras, porque en este silence entre ambos se puede sentir el creciente lazo que se está formando entre nosotros.

Nota:

Hola querid@s lector@s!!!!

Aquí sus torturadoras sessis;)

No se nos vayan a calentar mucho;)

P.D: Gracias por las opiniones sobre las portadas, nos encanta escucharlos:D

Ana y Maru.

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