La imagen de la habitación decorada,
De mi mente no se escapaba,
Y eel recuerdo de Mark,
En el bailaba.
Hoy clases con la señora Patterson tocaba,
Y eso me recordaba,
Que tu a mi lado ya no estabas.
Cuando el timbre toco,
De la clase quise salir,
Pero ella me llamó,
Y tuve que volver a dentro.
《Mia》dijo mirandome con pena 《Mia, tus notas han bajado, ¿Qué te está pasando?》 A sus ojos mire y la tristeza me invadió. 《Es por el, ¿verdad?》no conteste.
《Sabes que si el estuviera aquí, no permitiría que esto te pasara, Mia, tienes que olvidarlo y pasar de página, no tienes que vivir el resto de tu vida en la misma página, ahí a fuera hay un montón dr chicos dispuestos a conocerte y a enamorarte》
《Pero yo no quiero conocer a nadie más, yo lo quiero a el》las lágrimas en mis ojos surcaban y amenazaban de salir.
Ella suspiro y a los ojos me miró, 《la libertad esta en ser el dueño de su propia vida, lo dijo Platón, si quieres ser libre de todo lo que te atormenta tan solo se la dueña de tu propia vida, haz lo que tengas que hacer, piensa lo que tengas que pensar, porque, Mia, esta es tu propia vida, si quieres seguir amandolo, tan solo amalo, pero no juegues con tu futuro, no destruyas tu vida por un amor de adolescencia, si crees que el es el adecuado, ve a por el, y ya está, así de simple.》y de mi separó, y a su bolso se dirigió.
De el un sobre sacó,
Y a mi me lo entregó.
《Ten en cuenta que a el le preocupas, y mucho, demasiaso, el quiere tu mejor, la semana pasada hable con el y me pidió que te entregara esto, hoy, no se que hay dentro, tu sabrás, el te quiere》ella sonrió y mis mejillas cogio,
《Haz los que creas adecuado, como e dicho antes, es tu vida, y tu eres la unica que manda en ella》.
Ella me sonrio y añadió 《porqué com una vez un hombre sabio dijo.
La fuerza del pensamiento
Es la luz del conocimiento;
La fuerza de la voluntad
La energía del carácter;
La fuerza del corazón
Es el amor.》
Una sonrisa en mi surgió y de mi boca se escapó 《¿Cómo se llama este gran sabio?》y ella me contesto 《Ludwig Feuerbach》.
Cuándo ella se fue,
Y en la sala sola me quedé,
Mis ojos a la carta viajaron.