Y de nuevo tú- Joe Jonas. {PA...

Coolwatermelonjuice द्वारा

2K 132 54

Busco su mirada en otros chicos, busco su sonrisa en cada rincón de esta universidad, pero no hay resultado... अधिक

Capitulo 1- Y así están las cosas.
Capítulo 3- Lo que estaba deseando hacer desde hace tiempo.
Capitulo 4- No puedo parar de pensar en ti.
Capítulo 5- Que todo vuelva a ser como antes.
Capítulo 6- ¿Dónde están esos rizos?
Capítulo 7- Fantasmas del pasado.
Capítulo 8- Una vez más.
Capítulo 9- Aléjate de él.
Capítulo 10- No tendrías que estar aquí.

Capítulo 2- Sí o sí.

255 10 1
Coolwatermelonjuice द्वारा

El despertador sonaba como cada día, a las 10 de la mañana. Me encanta aprovechar el día, levantarme, ir a desayunar, a veces a correr, aunque bueno, los sábados no. Aunque había dormido bastante poco gracias a mi queridísimo e incansable Noah, tenía energía como para ir a la biblioteca y adelantar trabajos de toda la semana.

Así que este era el plan, llegar a la biblioteca, pasar el resto de mañana allí, comer, y volver a la biblioteca, sobre las 7 volver a la habitación, una ducha, película y a mi maravillosa cama. Fácil. Una vez en la biblioteca me senté en mi mesa de siempre, la que está al final del todo, pero la que está más cerca de los libros que necesito, era una mesa estratégica y me costó bastante tiempo decidir qué sitio era el adecuado. Solté la mochila en el suelo y saqué mi portátil, mis cascos, los apuntes y, muy importante, la botella de agua. La biblioteca estaba en absoluto silencio, sólo una lunática como yo estaría un sábado a las 12 de la mañana estudiando. En un cálido clima de paz y armonía, abrí la agenda y comprobé que, como ya sabía, tenía dos trabajos para dentro de dos semanas, uno de psicología social, que molaba bastante, y otro de la clase más aburrida de la historia, introducción al análisis de datos. Empezaría por el primero. Ya tenía el tema, psicología y antropología, ahora sólo tenía que entrar en el correo que me había mandando el señor Evans y ver qué autor me había tocado analizar. Al abrir el correo me encontré con un montón de publicidad basura, maldita manía de inscribirme y dar mi correo en todas las páginas de libros que me encontraba, y ahí estaba, el correo del señor Evans. Decía "Buenas tardes señoritra blablabla... se que usted va a ser capaz de entender muy bien la forma de pensar de este autor, así que le dejo con Joseph Campbell y su maravillosa mente." Genial, ¿No había otro nombre? No me va demasiado bien con los Joseph en mi vida. La mente del señor Campbell no sé como era pero si que sabía como era la mente del otro Joseph si que la conocía, o al menos eso pensaba hasta hace bastante poco. Sacudí la cabeza para echar esos pensamientos de mi mente. Ahora tendría que escribir su nombre un montón de veces, es estupendo. 

Después de casi 100 páginas leídas y 8 páginas escritas del trabajo pensé que había llegado el momento de comer. Para mi sorpresa no era la hora de comer, si no más bien la de merendar. Había estado más de 5 horas con el señor Campbell y sus teorías conspiratorias sobre el héroe de mil caras. Já, yo sabía quien tenía mil caras señor Campbell y esa persona tenía el mismo nombre que usted, tendría que haberle conocido, te daría para un libro más. Decidí cerrar ese libro tan absorbente e ir a comer, con suerte podría escribir dos páginas más antes de que cerrase la biblioteca. Dejé mis cosas allí y salí al patio con mi sandwich de queso y jamón que me había preparado esta mañana. Era diciembre así que hacía bastante frío, pero nada que no pudiese solucionar un buen abrigo. Sentarme allí enfrente de la fuente del patio de la biblioteca a comer un sandwich un sábado por la tarde era lo más parecido al concepto de felicidad y tranquilidad que tenía. Tardé bien poco en terminar el sandwich y volver a dentro. La bibliotecaria me sonreía y me recordaba, amablemente, que quedaban dos horas para que cerrara la biblioteca. Yo asentía y caminaba a toda prisa, el tiempo es oro y me sentía bastante productiva. Al llegar a mi sitio no había nada. Ni mi mochila, ni mis apuntes, ni el libro, nada. Me estaba dando un pequeño ataque de nervios, empecé a mirar por todas partes, debajo de la mesa, en otras mesas de por ahí cerca, quizá me había equivocado de sitio. Pero no, las cosas no habían desaparecido solas. En la silla había una nota que decía: "Creo que al señor Campbell no le va a parecer mal que lo dejes por unas horas y asistas a una fiesta. A las 9 paso a por ti. Pd: tus cosas están en tu habitación. De nada."

Maldito Noah. Ojalá poder llegar a su cuello para poder estrangularlo, que suerte que sea tan alto y yo tan bajita, maldita genética. Maldita fiesta. Malditos universitarios. ¿No se supone que habéis venido aquí a estudiar? Dejaos de fiestas, joder. Maldecía a todo el mundo que se cruzaba delante de mí mientras caminaba enfadada a la residencia. Cerré de un portazo y,  efectivamente, pude comprobar que mis cosas estaban perfectamente colocadas en su sitio. Blanca me miraba divertida desde la cama, mientras sostenía una revista. 

-Noah ha estado aquí.-

-Lo sé. Tengo que hablar con él y decirle que no puede planificar mi vida como a él le venga en gana.- Dije mientras me tiraba en la cama. 

-Le gustas.- Blanca insistía, mientras se incorporaba y se acercaba a mi cama.-¿A ti no te gusta él? ¿Ni si quiera un poco?- Me miraba entusiasmada. 

-No y no. Sólo somos amigos.- 

-Está buenísimo, eres tonta.- Blanca se encogía de hombros y se levantaba de un salto.-  No sé que debo ponerme para la fiesta. ¿Qué te vas a poner tú?- Dijo mientras se acercaba al armario y empezaba a rebuscar.

-Nada. No pienso ir.- Dije poniéndome la almohada en la cabeza. 

-Vamos, has ido a... ¿Dos?... ¿Tres? fiestas desde que estamos aquí. No te recordaba así de aburrida.- 

Y no lo era. Antes me encantaba ir de fiesta, pasarlo bien. Sobre todo cuando iba a fiestas con Joe. Recuerdo cuando nos encontramos por primera vez en un pub, y cómo nos íbamos acercando el uno al otro hasta prácticamente estar tan cerca que ni una mota de polvo cabría entre nosotros. O la manera en la que me cuidaba cuando bebía demasiado, yo le decía mil tonterías y él simplemente tenía tanta paciencia que se quedaba conmigo a esperar que se me pasase la borrachera...Era tan mono... Basta de pensar en él. 

-Noah no va a dejar que te quedes aquí, lo sabes ¿No?- Blanca definitivamente sacaba un vestido negro ajustado del armario y una chaqueta vaquera. -Creo que este es mi outfit.-

-Noah no es nadie para decidir por mí. Y sí definitivamente ese es tu outfit de hoy. ¿Irá Liam?- Me colocaba bocabajo en la cama con las piernas hacía arriba, y miraba a Blanca a través del espejo.

-Sí y por eso necesito que vengas. Van a estar allí sus amigos. Y yo no me quiero presentar allí sola. Bueno, ya me entiendes, con Noah. Sería bastante raro.- Blanca se giraba y me ponía ojitos.- Porfa.- 

-Joder. Vale. Pero no quiero volver tarde.- 

-Sí sí sí eres la mejor.- Blanca me daba un beso en la mejilla.- Voy a la ducha.- Cogía sus cosas y salía de la habitación.- Deberías ir duchándote también.- Gritaba.

Me levanté sin ánimos de la cama y abrí el armario. Estuve como 5 minutos moviendo las perchas de un lado para otro hasta que por fin decidí qué llevaría puesto. Algo sencillo, cómodo pero arreglado. 

Fui a los aseos, sólo quedaba 1 hora y media para que Noah nos recogiese así que tendría que darme prisa. Entre y dejé la ropa en las taquillas. En aquel lugar había una extraña mezcla de olores que no sabía si me encantaba o me daba arcadas. Blanca se terminaba de vestir cuando llegué a la habitación. Estaba guapísima y se hizo una cola alta que le quedaba genial. Yo simplemente me sequé el pelo y me lo dejé suelto y alborotado, no tenía tiempo. Me puse un poco de maquillaje y me senté en la cama a esperar. Blanca no paraba de hablar y de moverse de un sitio para otro, estaba bastante nerviosa. A las 9 mi móvil estaba sonando sin parar, era Noah para que bajásemos. Ya estaba en la puerta. Blanca se sentó detrás y yo me senté en el asiento de copiloto. Noah me miraba sin articular palabra. 

-¿Nos vamos?- Dije mirándolo divertida.

-Sí claro, claro. Nos vamos.- Noah ladeaba la cabeza y se ponía en marcha.- Vamos a emborracharnos ladys.- Oía como Blanca y Noah gritaban, y yo me limitaba a sonreír. Seguro que esta noche me lo pasaría en grande. 

La fiesta era en una de esas fraternidades enormes dónde todos los que viven ahí son pijos que en cuanto cogen una copa pierden la compostura. Liam estaba en esa fraternidad, y había invitado a Noah porque eran amigos del instituto, más bien, conocidos. Había invitado ha Blanca por, bueno, razones obvias que todos sabemos. Y a mí apenas me había dirigido la palabra cinco veces desde que lo conozco. Así que bueno, no me sentía muy bienvenida allí. Noah aparcó en la misma calle, al bajar me colocó el brazo para que me sujetase en él, y acepté encantada ya que para mí era muy difícil caminar en tacones. Blanca nos seguía de cerca. Noah se abría paso entre la gente, Blanca me daba la mano mientras intentábamos pasar por un minúsculo pasillo que nos iba dejando Noah a su paso. Llegamos al salón y en los sillones podía ver a Liam y sus amigos, bebiendo y fumando como si no hubiese mañana. En el ambiente se percibía un fuerte olor a alcohol, mezclado con nicotina y perfume caro. Noah se acercó primero para saludar a todos con un choque de manos de esos masculinos seguidos de un "que pasa tío". Yo permanecía detrás y saludaba timidamente con la mano y Blanca, bueno, ella no sabía que hacer. 

-Saluda a Liam.- Le dije entre dientes. 

Pero ella no era capaz de moverse, quizá porque no sabría como saludarle, o cómo reaccionaría él. Para la suerte de todos, y el asombro también, Liam se levantó, la agarró por la cintura y le plantó un beso.  Yo me llevé las manos a la boca y todo el mundo empezó a silbar. Blanca se puso roja, y  miraba nerviosa a todos lados. 

-Ven, te llevaré a por una copa.- Liam le daba la mano y se la llevaba de allí. 

-Ahora vuelvo.- Me decía mientras se perdía entre la gente.

-Wow. ¿A qué ha venido eso?- Noah me miraba divertido.

-Supongo que es una forma de hacer pública su relación.- 

-Es verdad. Los pijos necesitan hacer eso. Mostrar a sus parejas en actos públicos. Aunque este tiene muy poco glamour.- Noah seguía con esa expresión divertida que tanto adoraba de él. 

-Que sabrás tú. Sólo eres un macarrilla.- 

-Me...¿me acabas de llamar macarra?-

-Sí porque lo eres. ¿Dónde puedo conseguir una cerveza aquí?- Dije caminando hacia adelante. Realmente sin saber muy bien a dónde ir.

-Eh, esperame.- Noah corría detrás de mi y me agarraba la mano. Acto seguido me giraba y me ponía frente a él, nuestros cuerpos estaban completamente pegados. Miraba hacia arriba y podía ver como sus ojos se clavaban en los míos. Sin darme apenas cuenta me había puesto nerviosa.-¿Acaso sabes dónde está la cocina?- Noah seguía mirándome algo desafiante.

-No. Simplemente estaba improvisando.-Le devolví la mirada.- ¿Acaso lo sabes tú?- 

-Sí, lista. Pero si quieres seguir improvisando allá tú.- 

-Si me sueltas la mano podré seguir con mi improvisación.- Estaba empezando a crearse una tensión algo extraña, o ¿más bien era atracción? Mi corazón empezaba a latir más fuerte y me estaba empezando a poner nerviosa. Pero era Noah, ¿Qué me pasaba?

-No quiero hacerlo. Además, quiero ir contigo.- Noah me soltaba el brazo lentamente e iba bajando su mano hasta rozarse con la mía. 

No aguantaba más ese extraño ambiente, por lo que me giré, le agarré la mano y seguí caminando. Había muchísima gente allí, pero veía como un grupo de chicos salía con vasos rojos de una habitación por lo que decidí que sería la cocina. Seguí abriendo paso entre la gente con Noah pisándome los talones y llegamos a la cocina. Genial. Una vez allí me acerqué a las 30 botellas de alcohol que había y me pusé a observar, había tequila, vodka, ron, ginebra, pero opté por cerveza. Siempre era la mejor opción. 

-No serás tan cutre.- Me decía Noah mientras se servía un buen vaso de Jack Daniel's. 

-Mi especialidad es ser cutre.- Le sonreía mientras abría el grifo del barril. 

-Por tu cutrez.- Noah me acercaba el vaso para brindar. 

-Salud.- Me bebí el vaso de un buche. Noah igual. 

-AAAAGG.- Se le encogía la cara.- Que fuerte. Quiero más.- Se volvía a servir.

Yo me serví de nuevo pero esta vez ginebra con limón. Noah y yo salimos al patio. Había una piscina enorme, gente bañándose y otras muchas hablando, y en una de las butacas Liam y Blanca haciéndose mimos. Que asco el amor. Blanca nos miró y nos hizo un gesto para que nos acercásemos. 

-¿Cómo lo estáis pasando?- Dijo Liam.

-Bien tío, gracias por invitarnos.- Dijo Noah dedicándole una sonrisa.

-¿Viste el partido de los Knicks ayer? Que puta pena dan.- Liam se levantaba y empezaba a hablar con Noah.

-No entiendo como nos gustaba ese equipo de pequeños. Son malisimos a rabiar.- Noah y Liam se pusieron a hablar de baloncesto por lo que Blanca se levantó y se acercó a mí.

-Pero mira quién...- Blanca abría los ojos como platos y miraba detrás de mí.

Mi cuerpo se estremeció. Mi mente se quedó en blanco. No sabía porque una parte mi mente sólo podía para de repetir   "Joe Joe Joe Joe que sea él, por favor que lo sea". Seguramente fuese la parte más irracional de mí, la parte más esperanzada que todavía estaba esperando que Joe se plantase allí a buscarme.  Me giré lentamente pero para mi desgracia no era él. 

-Tía es Cole, ¿no me dijiste que te gustaba?- 

-Bueno, sí, me parece mono. Pero no le conozco.- 

-¿A quién no conoces?- Noah se metía en nuestra conversación. 

-A ese. A Lauren le gusta.- Dijo Blanca.

-No.- La fulminé con la miraba.- Yo no he dicho eso.- 

-¿Cole? Es mi colega. Espera. ¡Cole tío!- Liam se acercaba a él con la mano en alto.

-Pero qué cojones te pasa. Qué verguenza.- Inmediatamente fulminé a Blanca con la mirada. 

-¿Te gusta ese?- Noah me miraba fijamente y luego lo miraba a él.- No te pega.-

-Sí ya, porque para ti solo le pegas tú... Calla Noah.- Blanca le daba un empujón a Noah.

-No he dicho eso simplemente... no me gusta para ella- 

-Noah, lánzate. No vas a conseguir nada así.- Blanca miraba fijamente a Noah.

-Cállate. No sé qué estás diciendo.- Noah desafiaba a Blanca.

-Callaos de una vez. Vienen hacía aquí.- Dije mientras le daba un largo sorbo a mi bebida.

-Chicas, Noah... este es Cole. Cole ella es Blanca, mi chica.- Dijo sonriente.- Y sus amigos Noah y Lauren.-

Cole saludaba a Blanca en primer lugar, después a Noah, y por último a mí. 

-No habíamos coincidido antes no?- Su voz era más dulce de lo que me había imaginado. Parecía tan tierno.

-No suele salir mucho. Básicamente nos pasamos el día viendo series.- Noah interrumpía.

-Ah, ¿Sois pareja?- 

-No, no lo son. Noah acompáñame a por una bebida. Se me ha terminado la mía.- Blanca miraba sonriente a Noah. 

-Tienes la copa casi llena Blanca.- Cuando las palabras acabaron de salir de su boca Blanca con un movimiento ligero de muñeca tiraba la bebida al suelo.

-Ooops. Está vacío, ¿ves?- Blanca agarraba a Noah por del brazo y literalmente lo arrastraba hasta dentro de la casa. Liam nos miró y se encogió de hombros, luego se disculpó y entró también dentro.

-¿Es como una especie de representante que tienes contratado o....?- Decía Cole con un tono divertido.

-Más o menos. Aunque se ha autoproclamado él representante.- Dije algo nerviosa.

-Se ve que tiene voluntad, eso es importante.- Sonreía.- Y bueno, ¿Qué haces por aquí?- 

Cole y yo nos sentamos apartados del ruido, apartados de los demás. Siempre me había fijado en él en la facultad, era de tercero y siempre iba rodeado de gente por los pasillo. Me parecía un chico misterioso. Estuvimos hablando por lo que me parecieron escasos minutos, aunque realmente fue una hora. Cole, en el poco tiempo que pude estar con él, me demostró que era un chico gracioso, con mucha capacidad para dialogar sobre cualquier cosa y sobretodo monísimo a rabiar. Decidimos entrar a por algo de beber, ya que a ambos se nos había acabado la bebida hacía bastante tiempo ya. Se levantó de la butaca y me tendió la mano. Mi sorpresa fue que cuando me tendió la mano para ayudarme a levantarme no me soltó, sino que la agarró con fuerza y me arrastró al interior de la casa. Una vez dentro me sirvió un vaso de ginebra con limón, bastante cargado para mi gusto y para él se sirvió lo mismo. Me ofreció ir al salón a bailar un poco, aunque yo realmente quería ver qué estaban haciendo Noah y Blanca. Me gustaba el chico pero desde lo de Joe, había perdido confianza en mi misma, y también algo de confianza en los chicos. Me daba miedo salir con un chico. De todos modos me hice la valiente y acepté ir a la pista a bailar. 

En el salón cada vez había más gente y la sala cada vez parecía más pequeña. Una vez allí, eché un vistazo a la habitación, pude ver a Blanca y Liam en el sofá riendo y pasándolo bien, pero ni rastro de Noah. Pensé que estaría en otro sitio por lo que no le dí importancia. Estaban sonando un montón de canciones de reggaeton, no sabía muy bien como reaccionar y me quedé un poco parada. Era incómodo, nos conocíamos de 1 hora. Le dí un buche largo a la bebida, notaba como el alcohol quemaba mi garganta e iba bajando. Cole se había terminado su copa, en apenas unos 3 minutos, me agarraba por la cintura y se movía al ritmo de la música. Me pareció algo raro, y volvía a ser una situación incómoda, volví a dar un trago de la bebida, pero esta vez casi me la terminé. Cole me giraba y me agarraba por la cintura, de espaldas. Entonces vi a Noah, estaba apoyado en el quicio de la puerta del salón, la gente pasaba por delante de mí, me impedía verle, pero podía notar que me estaba mirando fijamente. Vi como se terminaba en vaso de un sorbo y lo ponía de un golpe brusco en una mesa que tenía cerca. Acto seguido se acercaba a Lisa que estaba sentada en uno de los sillones con sus amigas, le agarraba la mano, la levantaba del sofá y la llevaba a la pista de baile. Ella parecía encantada, y segundos después, se besaban. Me quedé embobada mirando como se besaban allí delante de todos, no daba crédito a lo que estaban viendo mis ojos.  Ni me había dado cuenta de que Cole me había soltado y había desaparecido de mi lado. Me puse a buscarlo por todos lados. Y de pronto vi como se acercaba de entre toda la gente para darme otro vaso de ginebra con limón. Genial. Cómo estaba ya casi borracha me lo bebí sin pensarlo, en apenas tres tragos. Cole me miraba divertido, seguidamente me agarraba de la cintura y me atraía hacia él. Olía tan bien. 

-Quiero besarte.- Dijo mientras me miraba los labios, y un segundo después lo besé. Era la primera vez que besaba a alguien desde, bueno, desde el verano. Me sentía bien, quizá por el alcohol, quizá por el momento, o porque Cole me parecía un chico guapo, pero aun así ese beso no despertó nada en mí. Lo volví a besar. Él me agarraba con fuerza y me pegaba más a su cuerpo. 

-Ven, vámonos de aquí.- Cole me agarraba de la mano y salíamos del salón a toda prisa, iba chocando con todo el que pasaba. Cole me arrastró hasta la cocina, me ofreció un chupito que acepté sin pensarlo. Luego me montó en la encimera y volvió a besarme, una y otra vez. Mi corazón se estaba acelerando, y mi cabeza me daba mil vueltas. 

-¿Te apetece venir a dormir conmigo?- Cole cogía directamente la botella de tequila y me la ofrecía. Yo que no pensaba con claridad, o simplemente ni era capaz de pensar la cogía y mientras sonreía bebía de ella. Luego le daba a Cole de beber desde la botella, casi todo el alcohol acabó en su camisa. Él simplemente reía. Luego me volvía a besar. 

-Me... gustas mucho.- Dije de manera entrecortada entre beso y beso. No quería decir eso pero mi cerebro ya había desconectado varias funciones y mandaba órdenes confusas a todas las partes de mi cuerpo. 

-Vámonos ahora mismo.- Cole me bajaba de la encimera. Me agarraba de la mano y cogía la botella con la otra. Me la volvía a ofrecer para que bebiese, cosa que yo hacía sin rechistar. Cole me guió hasta el hall, había mucha menos gente allí. Cuando llegué a la puerta ya no era capaz ni de ver con claridad. Cole abría la puerta. Pero de pronto algo me impedía seguir avanzando. Al girarme vi como Noah estaba detrás de mí y agarraba de mi muñeca con fuerza.

-¿A dónde vas?- Podía notar en su cara el enfado. 

-A...- Yo lo miraba y me reía sin parar.- Ay suéltame me haces daño.- Tiraba de mi mano pero él no me soltaba.

-Vamos a mi casa tío. Mañana la dejaré en la suya, no te preocupes.- Cole le daba un pequeño golpecito a Noah en el pecho y le guiñaba un ojo. 

-Ah no, ella no va a ir ninguna casa.- Noah alzaba un poco la voz, la gente que pasaba nos miraba. 

-Es mayorcita y puede decidir sola.- Cole tiraba de mí.- Dile que te quieres venir conmigo, venga, díselo.- 

-Me...me quiero ir con el.- Me acercaba a Noah y le señalaba con el dedo de cerca.

-Estás borracha no sabes ni qué dices. Te vienes conmigo sí o sí y no hay más que hablar. Te puedes ir Cole.- Intentando calmarse. 

-Te he dicho que no me voy a ir sin ella.- Cole se ponía en entre Noah y yo y desafiaba a Noah con la mirada. 

-Apestas a alcohol no voy a dejar que la lleves a ningún sitio, ¿me oyes?- Ambos se ponían cara a cara, parecía una pelea de gallitos, cada uno a ver quién se ponía más erguido que el otro para parecer más alto. 

-Tío pírate joder no eres su padre.- Cole empujaba con ambas manos a Noah. Éste se balanceaba hacía detrás y casi se caía al suelo. 

-Serás hijo de puta.- Noah empujaba a Cole y lo tiraba al suelo.

Cole sin decir nada se levantaba de inmediato y le daba un puñetazo a Noah en la cara. Su nariz y su labio de pronto empezaron a sangrar. Noah se limpiaba la sangre y se preparaba para dar un golpe a Cole. La gente ya se estaba agolpando esperando más, incluso estaban empezando a corear. De pronto Liam se abría paso entre ambos y los separaba. Yo estaba en la puerta paralizada, no sabía qué hacer. 

-Se acabó el espectáculo.- Gritaba para que la gente se fuera marchando.- ¿Qué coño os pasa?- Gritaba. -Os piráis de aquí ya. Vais a hacer que llamen a la policía joder.- 

-Ya nos íbamos.- Noah seguía quitándose la sangre del labio. Se acercaba a mí, me cogía en brazos,  me cargaba en su hombro y me llevaba pataleando de allí. 

-LAUREN.- Oía cómo Cole gritaba detrás de nosotros.

Noah me montaba en el coche, y aceleraba lo más rápido que pudo. 

पढ़ना जारी रखें

आपको ये भी पसंदे आएँगी

189K 19K 24
"𝙏𝙤𝙪𝙘𝙝 𝙮𝙤𝙪𝙧𝙨𝙚𝙡𝙛, 𝙜𝙞𝙧𝙡. 𝙄 𝙬𝙖𝙣𝙣𝙖 𝙨𝙚𝙚 𝙞𝙩" Mr Jeon's word lingered on my skin and ignited me. The feeling that comes when yo...
663K 33.4K 61
A Story of a cute naughty prince who called himself Mr Taetae got Married to a Handsome yet Cold King Jeon Jungkook. The Union of Two totally differe...
217K 4.6K 47
"You brush past me in the hallway And you don't think I can see ya, do ya? I've been watchin' you for ages And I spend my time tryin' not to feel it"...
376K 13.5K 58
𝐈𝐍 𝐖𝐇𝐈𝐂𝐇 Ellie Sloan reunites with her older brother when her hospital merges with his jackson avery x ellie sloan (oc) season six ━ season se...