El trato y el sacrificio

By Catherine_11k

5.3K 770 294

En el pequeño pueblo Villa Lóbrega, las fiestas de Halloween son muy famosas entre los jóvenes en donde una v... More

Prólogo
Capítulo 1 "Villa Lobrega"
Capítulo 2 "El juego"
Capítulo 3 "Mi informante"
Capitulo 4: Rompiendo las reglas
Capitulo 6 "Fantasmas"
Capitulo 7 "El trató"
Capítulo 8 "Dulces sueños"
Capítulo 9 "Lo correcto"
Capítulo 10 "Morir o Sobrevivir"
Capítulo 11 "Sacrificio"
Capítulo 12 "Pesadillas"
Capítulo 13 "Una Cuenta Saldada"
Capítulo 14 "Juntos"
Capítulo 15 "Dios"
Capítulo 16 "Atrayente y peligroso"
Capítulo 17 "Mirada de Cristal"
Capítulo 18 "Intercambio"
Capítulo 19 "Fiel"
Capitulo 20 "Feliz Halloween"
Capitulo 21 "Monstruo"
Capitulo 22 "Jugadora"
Capitulo 23 "Amargas palmadas"
Capítulo 24 "Tú mascara"
Capitulo 25 "La chica bajo la máscara"
Capitulo 26 "La promesa rota"
Epílogo

Capítulo 5 "Supervivencia"

237 39 11
By Catherine_11k

Dentro del casillero, Rachel cubría con ambas manos sus oídos. Los impactos de bala casi rozaron su cabeza. Se agachó y se acurrucó en el rincón más bajo del casillero mientras nuevas lágrimas se derramaban de sus ojos. Estaba asustada.

La tormenta de preguntas mentales la asaltaba igual que los impactos de balas a los estantes: "¿Qué está pasando? ¿Quién era ese chico? ¿Y cómo haría para escapar?"

De repente, el agua de los aspersores contra incendios comenzó a chocar sobre los casilleros, sonando casi igual que estar dentro de un auto en una noche lluviosa. Rachel lo imaginó por un momento trayendo un poco de paz a sus pensamientos, pero su cuerpo fue arrancado de la tranquilidad cuando alguien abrió el casillero de un solo golpe, provocando que se sobresaltara.

Su vista fue cegada un instante por la luz exterior. Un chico de ojos marrones entró en el mismo casillero y la empujó bruscamente hacia fuera. Su cuerpo fue impulsado con demasiada facilidad, pero se detuvo al chocar contra el de Derek.

— Gracias — musitó Derek, tomando la bolsa de nylon de Rachel y mirando al chico con desprecio antes de cerrar violentamente la puerta del casillero, dejándolo encerrado dentro.

Rachel lanzó una mirada rápida a la biblioteca, solo encontrando más desastre, muerte, sangre y agua.

Derek, sin apartar su mirada de ella, colocó su mano en su hombro para captar su atención.

— Sin máscaras — explicó, decepcionado.

Pero Rachel dirigió su mirada a las dos que él sostenía en su mano derecha. Una de ellas estaba salpicada de sangre en los lados y la otra con un notable agujero en la sien.

**********🎭**********

Caminando nuevamente por el pasillo, los húmedos borcegos de Derek producían un chillón sonido. Su cabello húmedo ahora le cubría la frente empapada como un oscuro flequillo, mientras algunas gotas de agua, manchadas de la blanca pintura de su cara, caían deslizándose por su nariz hasta morir en el suelo.

Cuatro pasos detrás, Rachel lo seguía. Algunos mechones de cabello le quedaban pegados al rostro, y los brazos los tenía cruzados sobre su chaqueta y camisa blanca, ahora húmeda y transparente.

— ¡Ey tú! — exclamó Derek de pronto, señalando al único chico que corría del lado contrario por el pasillo, quien se detuvo de golpe al verlo.

— No quiero problemas — advirtió, enseñándole las manos.

— Dame tu mochila y no los tendrás — explicó, pero el muchacho intentó alejarse solo para provocar que Derek fuera más rápido y lo tomara de su campera, empujándolo finalmente contra los azules casilleros — ¿Qué te dije? — preguntó, frustrado.

— Aquí la tienes — murmuró el muchacho, quitándose la mochila.

— También tu campera — habló Rachel de golpe, pero el chico no la obedeció sino que y la miró de reojo con duda — Por favor — añadió.

— ¿Qué estás esperando? — preguntó Derek con la misma voz gruesa y demandante de antes.

El chico entonces se quitó también la campera y se la lanzó con frenesí.

— ¿Algo más? — preguntó, observándola detenidamente lo que hizo que Derek clavara aún más su mirada en él.

— Corre — murmuró, haciendo que el muchacho huyera del lugar. Rachel lo observó alejarse con el mismo deseo, pero la oportunidad estaba cerca.

— Tú. Ni siquiera lo pienses — añadió Derek, adivinando sus pensamientos y volteando la mochila, descargó todo su contenido sobre el suelo del pasillo; un cuadernillo, tres lapiceras y una calculadora rebotaron y se deslizaron por el piso. Todos los observó caer y cuando su vista regresó a Derek, se arrepintió al instante — Si escapas. Créeme que lo lamentaras — sentenció.

Luego sacudió la mochila, asegurándose de que estuviera completamente vacía, y dejando todas las máscaras en el piso, comenzó a cargar la mochila con ellas mientras las contaba. Por instantes, la supervisó de reojo, quería saber si su consejo o amenaza había surtido efecto, pero en su lugar se encontró con su pequeña mano extendiéndole aquella campera negra con puños sueltos y el escudo del instituto en su centro.

— Toma. Póntela — ofreció. No la tomó, pero eso no la hizo rendirse — Estás empapado y además con esto podrás pasar desapercibido como un estudiante más — explicó con la voz algo baja, pero segura en su argumento.

— No me interesa pasar desapercibido — murmuró, colocando una máscara más en la mochila.

— ¡Es estrategia! — insistió — De esta forma, nadie pensará en quitarte las máscaras porque creerán que no tienes ninguna — terminó, y Derek la miró detenidamente buscando el engaño en su rostro, pero no lo encontró.

Entonces tomó la campera y se la colocó de mala gana. Ella tenía razón; estaba empapado y, a diferencia de ella, solo llevaba puesta una remera negra sobre unos pantalones tácticos poco abrigados.

— ¿Cuántas tienes? — preguntó, pero él contestó de inmediato. Rachel no sabía si el motivo de su silencio era pura arrogancia o cautela. Tenía la impresión de que aún él no confiaba en ella, y estaba en lo correcto.

— Muy pocas — respondió al fin, poniéndose de pie frente a ella, quien parpadeó repentinamente y dio un veloz paso hacia atrás — ¿Dónde hay más?

— ¿Cuántas? — insistió determinada.

— No las suficientes para ganar — respondió molesto. Comenzaba a entender que había preguntas que a ella no le gustaba dejar sin respuesta — ¿Dónde...

— Esta vez será más peligroso — advirtió.

— ¿Peligroso? — preguntó y sonrió con soberbia — Déjame a mí decidir eso...

— Dejarte es lo que más me gustaría ahora, pero dadas las circunstancias — añadió, extendiendo sus manos para mostrarle el lugar, pero volviendo rápidamente a cruzarse de brazos recordando la húmedad de su ropa.

— Cuidado — se burló — Creo que me quieres dejar ver más que solo tus planes de escapar de mi — añadió, mirándola de arriba a abajo con burla.

— ¿Silent Hill? — preguntó de golpe.

— ¿Qué? ¿El videojuego? — preguntó, intentando esconder una morbosa sonrisa, pero no con efectividad.

— Claro — bufó de lado, desviando su mirada avergonzada y furiosa — Si eres como un friki al que su videojuego favorito se le hizo realidad.

— Oh, GG² — apremió, dándole la razón y dando un paso intimidatorio hacia ella — ¿Jugamos entonces? — preguntó, sabiendo que aunque quisiera, ya era demasiado tarde para darle una respuesta negativa.

**********🎭**********

Rachel escuchó cómo los borcegos húmedos de su nuevo compañero daban impacientes pasos afuera del baño.

— Ya voy — murmuró desde dentro del pequeño compartimiento y bajó de un salto del inodoro mirando por última vez la pequeña ventana del baño que, para su tristeza, no pudo abrir.

— ¿Y bien? — insistió Derek ingresando al lugar.

— Se llevaron todas — explicó desentendiendose de su plan y asomandose a la puerta.

— ¿Todas? — preguntó y, con el mango de su arma, rompió el envase de plástico junto al lavamanos — ¡Eureka! Tenemos dos más — anuncio animado — ¿Ya revisaste ahí? — insistió apuntando al tacho de basura más grande junto al lavamanos.

— Que asco — se quejo.

— Lo siento, princesa, pero con la biblioteca en llamas y el patio hecho un mar de muertos, es lo mejor que pudiste encontrar — él explicó prendiendo la canilla para enjuagar sus manos y beber agua; la misma caía de su rostro y manchaba con un color negro, blanco y gris la bacha. De pronto tomó un trozo de papel para secar su rostro, evitando arruinar aún más su maquillaje. No quería quitárselo aún; claramente, si se había tomado la molestia de generar tal disfraz, era para que le durara.

— Quítatelo — aconsejó Rachel de pronto — De esa manera solo destacas del resto de los jugadores. Lo mejor es...

— Pasar desapercibido — concluyó — A diferencia de ti y tu lindo uniforme, la estrategia del camuflaje no es lo mío — confesó mirándola sobre el reflejo del espejo.

— ¿De verdad? Ni siquiera lo había notado — dijo con ironía.

Derek volteo para mirarla posando su espalda sobre la bacha — ¿De verdad crees que no sé cuál es tu verdadero plan? — añadió y lanzó un trozo de papel al cesto de la basura junto a ella.

Rachel miró al papel y luego a él. Su mirada fija y tan inquisitiva en ella casi le hacía creer que la había descubierto.

— ¿Y cual es? — pregunto astuta.

— Que en realidad te mueres por verme sin esto — terminó.

Rachel no pudo evitar casi sonreír de alivio — Eres patético — murmuró, rodando los ojos.

— ¿Lo ves? Incluso tu rostro me lo delata — dijo apuntándola y sonriendo.

— Con el dinero del premio deberías comprar unos lentes nuevos — aconsejó — Créeme, cómo luzcas no me interesa. Pero si tu bobo disfraz hace que nos maten...

— ¿Nos? ¡Qué considerada! — exclamó con una voz burlona e irritante — ¿Quieres ser mi sacrificio? — ofreció.

— No quiero jugar contigo — murmuró con sinceridad.

— Ya lo estás haciendo, preciosa — anunció con soberbia — Pero tranquila, eso no te va a pasar a menos que tú también rompas las reglas — habló fuerte, como haciendo una aclaración — Y tú... No creo que mates ni a un mosquito — terminó mirándola de arriba a abajo.

— ¡Qué alivio!

— Aunque... — empezó pensativo sin dejar de mirarla con soberbia — De seguro en el juego este año hay uno, dos o tres locos y psicópatas a quienes el premio no les resulta tan interesante como hacer de las suyas.

— Genial. Entonces, mientras tú y yo jugamos al tesoro escondido, varios inocentes salen heridos por personas como tú y tu querido amigo — habló, fluyendo la notable indignación en su voz.

El rostro de Derek se endureció — ¿Inocentes? — preguntó — ¡Vamos! IRL3.

— In Real Life — bufo Rachel — ¿Podrías dejar los códigos frikis a un lado FF4?.

Derek lanzó una carcajada admirado por su perspicacia — En la vida real sabes que este pueblo hiede a lágrimas y sangre — explicó.

— Aun así... — añadió mientras su mirada se detenía en la pared frente a ella y en la escritura que en esta relucía: "Rachel zorra masoquista", escrito con fibrón rojo y negro.

— Aun así. Estamos jugando — le recriminó.

Molesta, tiró el tacho al suelo, encontrando finalmente solo una máscara blanca que no tardó en tomar y lanzársela con brusquedad.

— ¡Entonces no seas tan hipócrita!

— ¿Hipócrita? — preguntó mirándola con sorpresa pero firmeza — ¿Qué quieres decir con eso?

— Quiero decir que todos, sin excepciones, son de la misma calaña — espetó.

— No todos — dijo, e indiscretamente la ira y el dolor se filtraron en su voz y en la forma en que la veía.

— ¡Oh! — exclamó — ¿Acaso también te crees diferente? — preguntó llena de ironía y, por primera vez en toda la conversación, había verdadera sorpresa en su rostro — Permíteme romper tu ilusión... — pidió con una aniñada y falsa voz — Si estás en el juego y sabes a lo que te enfrentas — se acercó aún más a él — Tú — no — eres — diferente — dijo, poniendo énfasis en cada palabra y mirándolo detenidamente — Con seguridad eres igual o incluso peor que esas personas a las que tú llamas locos — terminó, caminando hacia la salida.

— ¿A dónde crees que vas? — preguntó él, como si las anteriores palabras que le había dicho jamás lo hubieran inquietado.

— A revisar el baño de chicas — informó, dispuesta a marcharse.

— ¿Qué me asegura que no me abandonarás otra vez? — preguntó, dejando las cartas sobre la mesa.

— ¿Abandonar? — repitió y le sonrió con sinceridad. Ella también estaría preocupada si fuera él. Ella conocía el lugar, sabía dónde encontrar las máscaras y, ahora más que nunca, sabía cómo jugar. Podía casi valerse por sí sola, teniendo toda la información que necesitaba, pero también sospechaba que tenerlo cerca le sería aún más provechoso, sobre todo si volvía a toparse con Miguel.

Derek ensanchó su mirada, aún esperando una respuesta.

— Hay un principio de la naturaleza que las criaturas conocen bien — empezó y lo miró con seguridad — Se llama supervivencia.

Él le sonrió — Creo que empiezo a comprender por qué estás en este juego — terminó, pero ni él ni ella comprendían aún bien el porqué.

*******♥️******

2. GG: «Good Game» / buena partida. Utilizado en los videojuegos para definir que algo resulta victorioso.

3. IRL: «In Real Life» / en la vida real. Utilizado en los videojuegos para definir que algo está sucediendo en la vida real y fuera del juego.

4. FF: «Fucking Fucker» / Jodido cabrón. Utilizado en los videojuegos para definir un mal jugador.

Continue Reading

You'll Also Like

1.6M 73.9K 45
La atracción entre Samantha y Harry es notoria, y tan fuerte que no conoce de limites, ni barreras. Él es un hombre completamente prohibido, y eso-ap...
59.9K 5.2K 44
Todos tenemos fobias. Arañas, alturas, oscuridad, serpientes... Existen infinidades de fobias, todos tenemos al menos una, pero la mía era diferente...
463K 49.1K 52
"La maldad no se hereda, pero en la familia real parecía ser que se nace con ella. Dios tenga piedad de quienes los rodean."
48.9K 6.9K 40
•TERMINADA• «El, tan difícil de comprender, tan difícil de descifrar. Posee la belleza de un ángel, y la inocencia de un niño, un niño cuyos pecados...