DISCLAIMER:
Naruto pertenece a Kishimoto y Avatar, la leyenda de Aang, pertenece a Konietzko y DiMartino.
ACLARACIONES:
(bla) *bla= notas de autora
bla, bla = flashback u onomatopeyas.
❀❀❀❀❀❀❀= cambios de escenario
Nuestros jóvenes se encontraban bajando de Kurama, pues ya estaban algo lejos y fuera de peligro. Todos habían llegado al lugar de origen de Naruto, pues cuando Kurama aumentaba su chakra *podía correr a distancias enormes y de forma muy rápida.
—Espera y verás Sakura-chan, el templo Uzumaki es de los más hermosos que hay en este mundo.
—No lo sé, Naruto. Han pasado cien años, no esperes encontrar todo igual.
—Pero estoy tan ansioso.
—Es solo que... todo pudo haber cambiado en ese tiempo.
—Lo sé, pero necesito verlo, dattebayo —dijo el rubio al momento de dirigirse hacia Sai quien dormía en una cobija —. Despierta Sai, tenemos que ir al templo que pertenece a mi clan.
—Mmm... Déjame dormir. Después vamos.
En eso Naruto vio una rama, así que decidió hacerle una broma al pelinegro.
—Oh, no Sai. Una serpiente camina en tus piernas —y al decir eso, el mencionado se paró rápidamente y empezó a gritar de miedo.
—Ja, ja, ja, ja, dattebayo. ¡Qué divertido!
—Arg, eso no fue nada gracioso, cosita.
—Ja, ja, ja, claro que sí, además despertaste, ¿nos vamos?
Y así todos se dispusieron a seguir al rubio.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
En otro lado, el barco de Sasuke había llegado al puerto de otro pueblo cercano, era uno que pertenecía a los territorios conquistados por el País del Fuego.
—Tío, quiero que reparen ese barco enseguida. No podemos tardar y arriesgarnos a perderlo.
—¿Te refieres al Jinchūriki?
—No menciones su nombre en estos muelles. Si alguien te escucha, los Shinobi de Katon lo buscarán. Y no quiero que nadie se interponga.
—Se interponga ante qué, príncipe Sasuke —se escuchó una voz acercándose.
—Capitán Danzō.
*Danzō Shimura era un hombre de unos cuarenta y cinco años, piel blanca y cabello negro, con una cicatriz en forma de X en su barbilla. Un hombre para nada agradable a la vista del príncipe.
—Soy comandante ahora. General Kakashi Hatake, gran héroe de nuestra nación.
—General retirado.
—Bienvenidos cuñado e hijo del Daimyō del Fuego. ¿Qué los trae aquí?
—Nuestro barco está siendo reparado —dijo el peligris.
—Pero está muy dañado.
—Sí, no podrá creer lo que pasó —dijo Sasuke —. Tío, dile al comandante Danzō.
—¿Eh? Ah, sí... lo ha-haré. Fue espantoso. Bueno, ¿chocamos o algo así? —dijo lo último en un susurro.
—Sí, con un barco de la Aldea de las Flores.
—¿En serio? Bueno, qué les parece si los invito a tomarse algo para que me cuenten en detalle... todo lo que pasó ––dijo de forma seria el señor.
—Hmp, lo siento, debemos irnos.
—Príncipe Sasuke —le puso su mano en su hombro, Kakashi —,respeta al comandante Danzō. Será un honor acompañarlo. ¿Tiene por casualidad té de ginseng?
—Claro que sí, incluso en la biblioteca privada hay una edición de Icha-Icha Paradise.
—¡Wow! Mi favorita. Desde luego será una visita agradable —decía el peligris mientras iba a la par con el comandante, dejando atrás a Sasuke que hacía corajes.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Kurama seguía corriendo en busca del templo Uzumaki. A Sai de repente le empezó a rugir el estómago.
—Cálmate estómago, ahorita te busco de comer —dijo al momento que abría un costal y al sacudirlo, no salía nada —. Oigan, ¿quién se comió mi carne seca?
—Oh... ¿eso era comida? La usé para encender la fogata anoche, lo siento —dijo el rubio.
—¿Hiciste qué? ¡Oh! Por eso las llamas olían tan delicioso. En fin, mejor leeré un libro.
—Dudo que lo empieces a leer, rarito.
—¿Por qué?
—Porque ya casi llegamos.
—Naruto, antes de llegar, hablemos de los Shinobi Fūton pertenecientes al clan Uzumaki.
—¿Qué hay con ellos?
—Bueno... solo quiero que estés preparado para lo que puedas ver. El País del Fuego es muy cruel. Mataron a mi madre, a los padres de Sai y, quizá a tu pueblo.
—No porque no hayan visto a un Shinobi Fūton significa que el País del Fuego los mató a todos. Seguramente escaparon, de veras.
—Sé que es difícil aceptarlo...
—No es eso, Sakura. Los templos Uzumaki se encuentran en montañas altísimas, difíciles de alcanzar, y a menos que ellos hayan tenido un zorro de nueve colas como Kurama, dudo que el País del Fuego haya podido dar con ellos. ¡Vamos amigo!
Y al decir eso, Kurama volvió a desprender su chakra dorado y empezó a dar brincos gigantes hacia arriba de las montañas. Después de unos segundos, ya se encontraban en la cima de la montaña, donde se podía observar un templo (observen la imagen de la portada).
—¡Listo! Hemos llegado.
—Naruto, es increíble.
—Estamos en casa.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
—Y para cuando termine, la capital del País del Agua será nuestra. El Daimyō del Fuego ganará esta guerra —decía con orgullo, Danzō.
—Si mi padre cree que el mundo lo seguirá de buena gana, entonces es un necio —mencionó Sasuke.
—Tres años en el mar han hecho poco para moderar tu lengua. Y bien, dime cómo va tu búsqueda del Jinchūriki —pero Danzō no pudo terminar de hablar porque Kakashi sin querer le había tirado su colección de armas.
—Oh, lo lamento, eso fue mi culpa.
—Aún no lo hemos encontrado.
—¿Realmente esperas hacerlo? El Jinchūriki murió hace cientos de años atrás junto con los Shinobi Fūton —pero al decir eso el comandante, observó que Sasuke estaba demasiado callado —. A menos, claro, que tú tengas pruebas de que vive.
—¡No! Ninguna.
—Príncipe Sasuke, el Jinchūriki impediría la victoria del País del Fuego. Si te queda una pizca de lealtad hacia tu país, dime qué sabes.
—No he encontrado absolutamente nada. Tal como lo dijo, el Jinchūriki murió hace tiempo. Vamos tío, salgamos —pero antes de salir, Sasuke fue detenido por unos guardias de Danzō.
—Comandante Danzō, interrogamos a la tripulación. Confirmaron que el príncipe Sasuke tuvo al Jinchūriki, pero lo dejó escapar —dijo un guardia.
—Hmp, ahora recuérdame cómo se dañó el barco, príncipe -dijo el comandante hacia el azabache con un tono demandante.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Sai y Sakura iban tras de Naruto recorriendo el impresionante lugar.
—¿Dónde habrá comida?
—Primo, eres uno de los pocos hombres afortunados que visita uno de los Templos Uzumaki y en vez de admirar el bello paisaje, ¿piensas en comida?
—No te alteres feíta, soy un tipo simple, con necesidades simples, al menos eso fue lo que leí en un libro.
—Ash, tú y tus libros.
—Miren chicos, ahí jugábamos *rasenball, en ese lugar vivían los zorros de nueve colas y... wow. Todo está abandonado —decía con aire de tristeza, el rubio.
—Oye, Naruto, ¿cómo se juega ese rasenball? —preguntó Sai al ojiazul tratando de animarlo un poco.
Rato después se podían observar a Naruto y a Sai en un estadio lleno de palos altos de madera (imagínense un juego de fútbol, pero en alto, lleno de palos y con una pelota controlada con aire). Sai estaba en su portería esperando poder parar la pelota que era controlada por el fūton de Naruto, pero por obvias razones, el azabache salió disparado de la portería.
—Ja, ja, ja, ja, ja, Naruto: 7, Sai: 0 —se burlaba Sakura.
—Hacerlo sentirse feliz me trae más problemas —se quejaba Sai levantándose del suelo, pero antes de seguir quejándose, vio un casco perteneciente a un soldado Katon —. Sakura, mira esto.
—Es del País del Fuego.
—Debemos decirle.
—Naruto, hay algo que tienes que ver.
—Bien —dijo a lo lejos.
Y mientras Naruto seguía jugando con su pelota, Sakura mejor decidió utilizar su suiton, para hacer congelar el casco.
—Qué pasó, Sakura-chan.
—Ah... quería que supieras que aprendí un nuevo truco de suiton.
—Oh, qué bien. Pero basta de trucos, vamos al templo —y diciendo esto, Naruto se dispuso a ir al edificio sagrado.
—No puedes protegerlo para siempre, Sakura. Los shinobi Katon estuvieron aquí, no finjas.
—Sí puedo, por el bien de Naruto. Si él descubre que el País del Fuego invadió su hogar, lo destrozará.
—Oigan amigos, quiero que conozcan a alguien.
—¿Quién es ese? —preguntó Sai al ver una estatua.
—Es mi maestro Jiraiya, el mejor Shinobi Fūton de todos los tiempos, era mi padrino también, aunque yo también lo apodaba "sabio pervertido". El me enseñó a usar el rasengan y a dominar todo lo que sé —decía con orgullo el rubio mientras se inclinaba con respeto.
FLASHBACK
—Al fin te encuentro, querido ahijado. Tu padre me dijo que ibas a estar aquí, pero veo que no tienes ánimos de practicar el rasengan, ¿o no?
—Hola padrino, de hecho no. Todo este asunto del Jinchūriki me tiene así. Pensaba que... qué tal si los sabios del clan se equivocaron.
—El único error que cometieron, es el habértelo contado antes de que cumplieras 18. Pero lo hecho, hecho está. Tenemos que pensar en el ahora.
—Pero sabio pervertido, ¿cómo sé si estoy listo para esto?
—Obtendrás la respuesta cuando tengas la edad necesaria para entrar al santuario del templo Uzumaki. Ahí conocerás a alguien que te guiará en el viaje.
—¿En serio? ¿Quién es?
—Cuando estés listo, él mismo se presentará ante ti. Así que por lo mientras, continuaré inspirado para escribir mi libro.
—Ay, viejo sabio pervertido, ja, ja, nunca cambiarás.
FIN DE FLASHBACK
—¿Lo extrañas? —preguntó Sakura.
—Sí.
—¿A dónde vas?
—Al templo Uzumaki. Debo conocer a alguien.
Sai y Sakura decidieron ir con Naruto para no dejarlo solo.
—Naruto, no creo que nadie haya sobrevivido ahí por cien años —dijo la pelirrosa.
—No es imposible. Yo sobreviví en esa cueva congelada.
—Buen punto.
—Esa persona de ahí, pudiera ayudarme con esto de ser un Jinchūriki .
—O eso o puede que te mate.
—¡Sai!
—Lo siento, je, je. Y bien, ¿cómo se abre esto si no hay llave?
—La llave, Sai, es el fūton.
Naruto entonces concentrándose, hizo unos sellos con sus manos y al finalizar sopló mucho aire de su boca, haciendo que el mecanismo de la puerta se abriera. Una vez abierta, los tres se dispusieron a entrar.
—¡Hola! ¿Hay alguien ahí?
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
—Un mocoso de 15 años te venció a ti y a los Shinobi Katon. Eres más patético de lo que pensé —dijo con desaire, Shimura.
—Ya lo subestimé una vez, pero no ocurrirá de nuevo.
—No, no ocurrirá, porque ya no tendrás otra oportunidad.
—Comandante, Danzō, hace dos años que busco al Jinchūriki y...
—Y has fallado —interrumpió el pelinegro mayor lanzando una llamarada —. Esto es importante para que esté en manos de otro adolescente. ¡Es mío ahora! —y al decir eso, Sasuke se le quiso abalanzar, pero fue detenido por otros guardias, así que del coraje rompió la mesa de té.
—Más té, por favor —dijo Kakashi mientras leía su libro muy cómodo a pesar de todo lo que pasó.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Una vez dentro del templo, nuestros jóvenes shinobi podían observar que la cámara secreta estaba llena de estatuas (tipo los guerreros de Terracota, China).
—¿Estatuas? ¿Es todo lo que hay? ¿No hay comida? ¿O libros? —se quejaba Sai.
—¿Quiénes son estas personas?
—No sé, Sakura-chan. Pero... por alguna razón creo conocerlos. ¡Miren! Ese es un shinobi Fūton.
—Sí, y ahí hay uno Suiton —decía Sakura mientras señalaba —. Están alineados bajo un patrón. Fūton, Suiton, Doton, Katon y Raiton.
—Es el ciclo del Jinchūriki.
—¡Claro! Todos son Jinchūriki, todos ellos han sido eso... incluso puede que exista uno que haya sido tu vida pasada.
—¡Guau! Eso es genial, dattebayo.
—¿Vidas pasadas? ¿Tú crees en eso, Sakura? Porque yo no he leído un libro donde diga que...
—Ese es tu problema, primo. Tú siempre tienes que basarte en hechos científicos, cuando también existen cosas sobrenaturales como esto.
Naruto hizo caso omiso a la discusión de sus amigos, cuando en eso vio una estatua que le llamó mucho la atención. Era de un hombre que portaba una banda en la cabeza y un kimono. A pesar de su edad ya madura, se notaba que en su juventud había sido de buen parecer.
—¿Quién es ese? —preguntó Sakura al acercarse.
—Es *Asura Ōtsutsuki —dijo Naruto quien seguía pendiente de la estatua —, fue el Jinchūriki anterior a mí.
—¿Fuiste un *Shinobi Katon? Con razón no confié en ti la primera vez que nos vimos —dijo Sai acercándose.
—No hay nada escrito, ¿cómo supiste su nombre? —preguntó Sakura.
—No me pregunten, pero... siento una conexión muy fuerte con él.
—Tal vez tú eres su reencarnación, Naruto.
—Sí, creo que sí Sakura-chan.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
—Mi pelotón de búsqueda está listo, una vez que esté mar adentro mis guardias los escoltarán y podrán irse —decía Danzō.
—¿Por qué? ¿Acaso te preocupa que intente detenerte? —dijo Sasuke.
—Ja, ja, ja, ja. Tú, ¿detenerme? Imposible.
—Tsk, no me subestimes Danzō, capturaré al Jinchūriki antes de que tú lo hagas.
—Príncipe Sasuke, es suficiente —le reprimió Kakashi.
—No puedes competir conmigo. Tengo cientos de barcos de guerra bajo mi mando, ¿y tú? Tú solo eres un príncipe desterrado. Sin casa, sin aliados, ni siquiera tu padre te quiere.
—Te equivocas. Una vez que lleve a ese Jinchūriki ante mi padre, me recibirá en casa con honor y devolverá mi lugar en el trono.
—Si tu padre realmente te quisiera, te habría permitido volver, con o sin el Jinchūriki. Pero para él eres una desgracia como para el País del Fuego.
—¡Tsk! ¡Eso no es verdad!
—Tu *marca de maldición en la parte izquierda de atrás de tu cuello lo demuestra.
—¡Argh! ¿Quieres que te haga una igual?
—¿Acaso eso es un desafío?
—Sí, *Amaterasu al atardecer.
—De acuerdo, joven príncipe. Es una lástima que tu padre no esté aquí para que vea cómo te humillo. Bueno, al menos tu tío lo verá —dijo el comandante y después salió de ahí.
—Príncipe Sasuke, ¿recuerdas la última vez que desafiaste a un Shinobi Katon? —dijo Kakashi.
—No, tío... nunca lo olvidaré —dijo Sasuke al momento de tocarse su marca.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Naruto se había alejado un poco de donde estaban porque quería seguir explorando, cuando en eso entró a una especie de pasadizo. La curiosidad lo invadió por completo, así que se adentró, pero no esperó encontrarse con lo que sus ojos verían.
—Shinobis Katon —dijo alarmado, pero al hacer rápido una exploración visual, logró observar el cadáver de alguien muy conocido —. ¡Jiraiya!
—¿Naruto, encontraste comida? —dijo Sai quien entraba al mismo lugar, pero no pudo seguir bromeando porque vio que el rubio estaba llorando —. Oye, ¿qué tienes? Lo de tu cosita solo es broma, yo no... ¡oh, rayos! —expresó el pelinegro al ver que su amigo le lloraba a una persona ya fallecida y esa era nada más y nada menos que el hombre de la estatua: Jiraiya —. Ey, todo va a estar bien. Salgamos de aquí —dijo mostrándole una sonrisa, pero esta se borró al ver que Naruto volvía a transformarse en ese ser dorado como la vez pasada.
Sakura seguía en la cámara donde estaban las estatuas, cuando en eso vio que estas empezaban a brillar.
—¡Naruto! —dijo la pelirrosa y al momento salió corriendo en busca del mencionado.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Justo en el momento que esas estatuas brillaban, en diferentes templos de todas las naciones, empezaron a brillar ciertos objetos específicos que tenían los santuarios. Entre ellos, la piedra angular de uno de los templos del País del Fuego, empezó a brillar
—Avisa al Daimyō del Fuego de inmediato que el Jinchūriki regresó —dijo un guardia del templo al otro.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
—¡Naruto! ¡Despierta! ¡Ahhhh! —gritó Sai mientras caí al haber sido empujado por el campo de fuerza poderoso que había creado Naruto.
—¿Qué sucedió? —preguntó Sakura mientras ayudaba a su primo.
—Naruto se enteró de que mataron a Jiraiya, y al parecer a toda su familia.
—¡Oh, no! Es el espíritu del Jinchūriki. Está enfurecido. Yo intentaré calmarlo.
—Sí, hazlo antes de que nos mande a volar a todos.
Y así Sakura, con mucha dificultad, fue acercándose poco a poco a su amigo que ahora flotaba.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
En otro lado, un hombre y un adolescente estaban a punto de enfrentarse en un desafío: el Amaterasu. Este es una pelea por el honor y solamente se gana cuando un oponente quema al otro. El resultado del duelo afecta al honor de ambos participantes.
—Recuerda, príncipe Sasuke, dominar el katon es tu principal arma —aconsejaba Kakashi a su sobrino.
—Me rehúso a dejarme ganar —dijo el pelinegro al momento de quitarse la bata y quedarse con el atuendo especial para pelear (algo así como la foto) ⬇️
Al terminar el sonido del gong, ambos shinobi empezaron a pelear. El primero en atacar fue Sasuke, pero Danzō solo esquivaba sus ataques, provocando a ira del joven príncipe.
—Sasuke, quiébrale la raíz —pero al decir eso Kakashi, el comandante aprovechó y se lanzó con un ataque de fuego a él, haciendo que casi perdiera.
Pero el príncipe no se iba a dejar ganar por segunda vez, así que armando coraje, empezó a atacar de nuevo, pero esta vez, sus ojos se empezaron a tornar rojos y unas tres aspas salieron de sus pupilas.
Danzō al ver eso, se quedó sorprendido y por estar viendo eso, se distrajo y Sasuke aprovechó para poder atacarlo con más fuerza. Continuó y continuó hasta que pudo derribarlo, y aprovechando que él estaba en el suelo, Sasuke se acercó y le apuntó con su puño.
—Adelante, ¡hazlo!
—¡Ahhhh! —gritó Sasuke y le lanzó una llamarada, pero esta no tocó ningún pelo del comandante, sino quemó el piso.
—¿Es todo? Tu padre crió a un cobarde que tiene que usar el famoso *sharingan para poder pelear, ya que sin él, no pudiera hacerlo.
—Tsk. Para la próxima vez que te interpongas en mi camino, no me contendré —y diciendo esto Sasuke, le dio la espalda para irse de ahí.
Lo que no contaba era con que Danzō de puro coraje, se levantó y quiso atacarlo por su espalda lanzándole una llama, pero esta no llegó porque Kakashi lo desvió.
—¡Maldito Danzō!
—No, príncipe Sasuke. No manches tu victoria. ¿Así es como el gran comandante Danzō reacciona cuando lo derrotan? ¡Qué deshonra! Incluso mi sobrino, pese a vivir en el exilio, es más honorable que usted. Muchas gracias por el té. Estuvo delicioso —y diciendo eso, tío y sobrino se retiraron de ahí.
—Hmp. Con que el sharingan, ¿eh? Veamos cuánto le dura a ese principito —decía Danzō con desprecio en su voz.
—¿En serio piensas eso, tío?
—Por supuesto. Te dije que el té de ginseng es mi favorito. Y más si lo leo junto a mi libro Icha-Icha.
❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀
Naruto seguía flotando rodeado de un chakra dorado y flameante.
—Naruto, sé que estás molesto. Sé cuán difícil es perder a quienes amas. Me sentí igual cuando perdí a mi mamá. Puede que tu maestro Jiraiya, tu familia y los demás se hayan ido. Pero aún tienes una familia. Sai y yo somos tu familia ahora.
—Sí, Sakura y yo no dejaremos que nada te pase. Es una promesa.
Y como por arte de magia, Naruto volvía a tomar su forma original y poco a poco se fue desvaneciendo. Sakura tuvo que sostenerlo porque de lo débil que estaba no se pudo sostener de pie.
—Mmm... lo siento.
—Está bien, no fue tu culpa.
—Tenías razón, Sakura-chan. Si ellos encontraron este templo, encontraron otros también. Creo que soy el último Shinobi Fūton —dijo con tristeza y sus nuevos amigos lo abrazaron en señal de apoyo.
Unos minutos más tarde, Naruto seguía contemplando la estatua de Asura.
—Listo, todo empacado. ¿Nos vamos? —preguntó Sakura.
—¿Cómo Asura podrá ayudarme si no podemos hablar?
—Seguro encontrarás la forma.
Y así, los jóvenes volvieron a montar a Kurama, para dirigirse a un nuevo destino. Y aunque Naruto tuviera tristeza en su corazón, tenía que salir adelante, como siempre su padrino Jiraiya le decía.
—Adiós sabio pervertido. Te extrañaré —dijo Naruto en un susurro mientras veía por última vez el Templo Uzumaki del Sur.
N/A: Gracias a
No sé que haría sin tus divertidos comentarios, me alegra el día jeje.
*No sé si sea verdad lo que escribí de Kurama, pero al menos en mi historia sí, incluso da saltos gigantes :)
*En este fic, Danzō no tiene nada de vendas, ni es cojo. Es como si nada de eso hubiera pasado, y no lo puse anciano, sino un hombre de mediana edad. Lo único que conserva es su cicatriz.
*En cuanto a Asura, quise respetar eso de que Naruto es su reencarnación, pero obvio adaptándolo al mundo de Avatar. Sé que él dominaba todos los chakras elementales, pero quise ponerle que con el que él más dominaba era el fuego.
*Aquí la marca de maldición quise ponerla como ejemplo de que cuando un patriarca de una familia importante perteneciente a un clan del País del Fuego se decepciona o avergüenza de un familiar, se les manda a hacer ese sello por medio de un jutsu que quema la piel para que la gente vea que esa persona es un fracaso para la familia. Hasta que demuestre lo contrario se desaparecerá.
*En esta historia, el Amaterasu no es un poder, sino un duelo de shinobis de katon, que viene siendo el equivalente al Agni Kai de Avatar.
*Aquí el Sharingan, no es característico de todos los Uchiha, solo los más poderosos pueden usarlo. He ahí el enojo de Danzō.