La tensión entre las seis ponys incrementó cuando escucharon los pasos de Fluttershy acercarse al salón donde estaban todas reunidas.
E incluso cada una de ellas en sus mentes intentaban descubrir qué palabra dirían cuando la vieran en el marco de la puerta. Se miraban mutuamente sudando la gota gorda buscando la tranquilidad en alguna pony pero no la encontraron.
Había un silencio extraño, cuando se voltearon a mirar hacía atrás estaba Discord de brazos cruzados. No pareció notar la mirada de las seis ponys, parecía muy sumergido en sus pensamientos.
Todas dieron un pequeño brinco cuando se escuchó un carraspeo en el marco de la puerta.
La mirada de extrañeza de hizo presente en Fluttershy, frunciendo una ceja y entrecerrando sus ojos.
—¿Me perdí de algo?— preguntó sospechosa.
Todos los ojos se refugiaron en el suelo con una mirada pasmada. Jugando al quién responderá y qué responderá.
—Cariño Fluttershy, querías decirnos algo. ¿No? Vinimos tan rápido como pudimos,— Rarity sonrió de un tanto extraña, como si buscará la aprobación de Fluttershy.
—¿Verdad, chicas?— dijo entre muelas aún sonriéndole.
—Si, si claro,— dijeron las seis ponys al unísono.
Fluttershy se aterró por la actitud de sus amigas y su mirada hostigadora sobre ella. Dió un corto vistazo a Discord, éste la miraba preocupado sin una palabra que añadir.
Tomó una silenciada y temblorosa respiración.
—Hay algo que debo decirles. Ustedes ya empiezan a saber sobre qué es. Soy consciente que han estado investigando. ¿Exactamente qué es lo que saben?—.
La preocupación de quién respondería les incómodaba. Nadie dijo nada parecían más interesados por escucharla hablar.
—Pues, encontré una fotografía tuya en... Surtencia. ¿Eres tú verdad?— dijo Twilight tranquilizando sus nervios.
—Cuando te ví por primera vez te veías maltra.... mal,— dijo Rainbow Dash curiosa con su torpeza al hablar.
Fluttershy esperaba el momento para hablar hasta que AppleJack se percató de ello.
—Habla, terrón de azúcar. Somos tus amigas no hay necesidad de tanto nerviosismo. Sabes que te apoyaremos,— AppleJack le brindó la confianza que necesitaba.
Fluttershy agradeció con la mirada.
—Verán, antes que nada... um, quiero agrecerles a ustedes por toda su compresión hacía mí. Por como he sido todos estos años...— calló cuando vió que Pinkie Pie saltaba en dirección a ella a darle un fuerte a brazo.
—¡Oh, Fluttershy!— chilló.
—¡Pinkie, deja que hable!—.
Fluttershy carraspeó ya que su garganta por los nervios se había secado.
—Um, para comenzar hay unos que si saben que Los 'Shy' son mis padres biologicos...— hizo una breve pausa mirando a todos sus amigos, quienes la observaban esperando que continuará su testimonio.
—Si tú eres 'Shy', y ellos son 'Shy' y no son tus padres biologicos...— dijo Pinkie con su casco en la barbilla. —¿Entonces como es que tienen tu apellido o nombre?—.
Por más tonta que parecía la pregunta tenía algo de razón, aunque la respuesta era obvia.
—Cambiaron sus apellidos para evitar el interrogatorio. ¿No es así?— razonó Twilight esperando ser aprobada.
Cómo respuesta Fluttershy asintió levemente.
—Pues, mis padres son de allá... Surtencia,— dijo sin ocultar algún rastro de resentimiento. —Antes, no sé si ya lo dije y no. La potra de la fotografía no es una amiga. Soy yo.
Ese dato ya Discord lo había confirmado, sin embargo seguía la duda en el aire. El porqué de sus ojos claros y su melena oscura. Esas características no cuadraban en la apariencia de su amiga.
—Flutterashy, ¿por qué tus ojos claros y la melena oscura?— Discord quien rompió el silencio ganando la atención demás ponys por breves segundos antes de volver a mirar a su amiga.
Fluttershy dijo algo que fué inentendible, fué un pensamiento en voz alta que dejó a los demás confundido.
—De hecho no lo sé, mi melena oscura fue mi padre. Él no le gustaba mi melena,— ella bajo la mirada entristecida con una punzada en su pecho.
—Tienes una melena linda, ¿Por qué querría tu padre cambiarla?— preguntó Spike en el fondo de la sala sentado en una de los asientos más lejanos.
La pegaso amarilla abrió los ojos con una mueca que fué difícil de descifrar.
—No quería que le recordará a mi madre... No sé porqué siendo honesta. No por tristeza, mas bien por odio. Su odio a ella lo llevo a cometer un homicidio—.
Su mente se fué en blanco, ya había sido suficiente. Con eso debía terminar. No podía decir la otra parte, estaba Spike allí, más Discord... Sería vergonzoso contar esa pequeña parte que en un pasado la marcó.
—Con esto es suficiente. Les parecerá extraño lo sé. Pero cuando escuché sobre la fotografía sabía que debía contarles. No quiero tampoco que se relacionen con Surtencia,— bajó las orejas apenada por tener que cortarlo por vergüenza.
—No es nada, Fluttershy. Somos tus amigas y ese es un gran peso que ya no debes cargar tu sola,— dijo AppleJack con una sonrisas en su rostro.
—¿Por qué esos ponys son tan crueles?— ladró Rainbow Dash enojada cruzada de casco mientras aleteaba volando estable.
—Es un milagro que hayas llegado aquí, cariño. Debiste decirnos en un principio, debió ser duro cargar todo eso en silencio,— Rarity se volvió a Twilight Quien parecía querer hablar.
Fluttershy asintió por el compromiso, verdaderamente ya no se sentía igual. Mientras todos estaban envueltos haciendo preguntas ella llevó su casco a su pecho. Es como si toda la tristeza se hubiera marchado, una paz que jamás había sentido.
Y descubrió que se sentía bien. Sonrió complacida sabiendo que tomó la decisión correcta.
—Me siento mucho mejor con ustedes. Realmente,— dijo con una radiante sonrisa en su rostro.
Pinkie Pie saltó con su cola esponjosa rosada hasta Fluttershy para darle un fuerte abrazo en su cuello. Las demás ponys se contagiaron de la atmósfera cálida y se unieron en un fuerte abrazos.
A excepción de Discord quien estuvo allí parado mirando la escena, realmente estaba feliz por ella. Pues deseaba lo mejor para esa pequeña que tanto amaba. Pero aún no podía procesar el hecho que ella haya nacido en un lugar tan vil como Surtencia.
—¿Qué ocurre Discord? No has hablado mucho, y eso es raro en tí,— AppleJack lo había estado observando desde hace unos momentos el cual parecía preocupado.
No creía en el hecho que Fluttershy estaba siendo honesta con ella misma. Creyendo que ella fingía felicidad frente a sus amigas para evitar su preocupación. Discord se volvió al grupo de ponys que miraban con mucha atención.
En silencio miró a Fluttershy con los ojos entrecerrados durante un par de segundos, mientras con su garra de águila jugaba con su barba.
—¿Cómo estás tan tranquila sabiendo lo que tú padre hizo y te hizo?— finalmente habló sospechoso.
—¡Discord!— reprendió Twilight irritada, —Esto es serio—.
—Precisamente—.
—De hecho tiene razón,— le dió la razón mientras lo miraba para responder a su pregunta.
—Yo, pues en un principio lo odié, durante años. Incluso comencé a leer muchos libros sobre pócimas mortales. Um, hice muchas de ellas... Pero nunca probé sus efectos. Hasta un día que lo hice con un animalito indefenso.
—¿Luego?— cuestionó Discord.
—Murió, como era de esperarse. Con ello ya estaba preparada solo debía encargarme personalmente de mi padre allá en Surtencia. Pero dos cosas me estuvieron. Una; sería un suicidio. — tomó una bocanada de aire para liberarla sin dificultad.
—¿Me convertiría yo igual a ellos? Quería ser diferente y me dí cuenta tarde cuando... um, le quité la vida a ese animalito. Supongo que todo se trata del perdón. Solo lo olvidas—.
—¿Olvidar? ¿Cómo eso podría traer tranquilidad? ¡Con una venganza...!—
Fluttershy lo interrumpió.
—¿Con una venganza dices? Venganza es un arma de doble filo—.
—Lo es, Discord. Todos nosotros hemos temidos pequeños problemas y emos tenido que reaccionar diferente a la venganza. Y realmente se siente mejor que hacer daño,— Spike secundó a Fluttershy, Pues estaba en lo cierto.
—Supongo que está bien,— dijo inseguro.
—¡Aún te falta por aprender, Discord!— exclamó Pinkie Pie.
—A todos,— corrigió Rainbow Dash.
—¡Bueno, está bien! Pero no es que tenga que aprender algo que ya sé. He leído sobre la amistad un sinfín de veces. ¡La amistad es inentendible, y lo digo yo!— exclamó azorado.
—Oh vamos, ¿qué es lo que lees?— preguntó Rainbow Dash socarrona.
—¡Los pergaminos!— exclamó para callarla. —Debería ponerle una cremallera en sus hocicos—.
Fluttershy puso sus ojos en blanco ante la tonta 'discucion' entre ellos dos. —Chicas debo irme, Angel me espera allá,— dijo ella queriendo ir a su casa a relajarse.
—Claro no hay ningún problema—.
—Adiós, terrón de azúcar—.
—¡Te veo luego en la fiesta de cupcakes!
—Mi turno—.
—¿Eh?—.
—Ay por favor es obvio,— musitó Discord aprovechando que Fluttershy estaba de espaldas.
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