Alixi uno de los mejores amigos de Alik le pidió que lo acompañara a un bar esa noche, le celebrarían el cumpleaños a Martina y no quería ir solo, tenía varios días discutiendo con Natasha y lo último que deseaba era estar con ella en un bar. Alik no tenía más planes para esa noche, no tuvo problemas en aceptar. Sobre las 10 Alixi paso por el en su Kawasaki ninja h2r. Muchos conocidos al llegar al bar, mal no la iban a pasar, aunque fue victoria quien robo su atención. entre copas no había existido una oportunidad real de acercarse a ella, pocos allí la conocía, era la invitada especial de Martina, estaba parca de la celebración, participaba solo lo necesario, intercambiaba miradas con los invitados como por obligación, se le veía incomoda, fuera de lugar, poco a poco Alik se fue acercando, la invito a una copa y se presento, el ruido del bar no ayudaba mucho, con un gesto ella le pido que salieran un rato, necesitaba respirar aire puro o al menos intentarlo. Se abrieron paso a empujones con los demás invitados, una vez afuera su expresión de agobio desapareció.
- Gracias por ayudarme a salir de allí, me abrumo ahí dentro, el ruido, el humo...
- No te preocupes, te veía un poco agobiada y por eso decidí acercarme, por si necesitabas algo.
- La verdad no sé cómo me deje convencer, vine solo por Martina pero me gustaría estar en casa o al menos en un lugar más tranquilo.
Su sonrisa tímida es algo incógnito para Alik, no quería dejar de mirarla pero si lo seguía haciendo de esa forma la asustaría.
- ¿Por qué el agobio, tan mala compañía somos?
(ella sonríe dejando escapar un sonido de risa controlada.)
- En lo absoluto, solo que hay días de días y hoy no es uno bueno para mí, que digo días, semanas, hasta meses. (Al decirlo lo mira fijamente a los ojos)
- Vaya, al menos saber que no es por mí me deja un poco más tranquilo.
- ¿Y tú, que haces en este lugar? ¿Eres muy amigo de Martina?
- Me la he cruzado un par de veces, fue novia de un viejo conocido, pero nada más, no hay mucho que contar.
- Pensé que eras alguno de esos viejos amigos con derechos como muchos de los que están ahí dentro.
- La verdad no lo recuerdo.
Los dos sostuvieron la mirada por unos segundos pero las carcajadas de ese comentario irrumpieron el silencio.
Victoria mordía su labio inferior, una manía que tenía desde pequeña.
- Será mejor que entremos o se preocuparan si no nos ven.
Alik la tomo del brazo antes de que diera un paso más, la sujeto de forma suave y tierna, no quería dejarla ir, pero sería algo extraño en ese momento. Quería volver a verla, necesitaba verla en otro lugar, en otras circunstancias.
- Está bien, pero antes podrías darme tu número, me gustaría volverte a ver si no tienes ningún problema.
- No pierdes el tiempo. (dijo ella un poco abrumada.)
- Cuando siento que algo vale no hay que perderle.
- Bien... No veo nada de malo en verte nuevamente. (Tomo el móvil de Alik y apunto su número) no olvides guardarlo. Y dio media vuelta para perderse entre el ruido y las personas.
Una vez adentro las cosas seguían como si nada, solo un par de personas se habían percatado de su ausencia, Alixi no le quitaba la mirada a Alik con una sonrisa aterradora, como de alguien que sabe que has cometido un delito pero que no se lo contara a nadie, Alik respondía a esa mirada con un gesto de desaprobación, en realidad nada había pasado, absolutamente nada y eso era nuevo para él. No sabía si le gustaba o le molestaba, pero lo mantenía ahí, en suspenso, con la duda de quien no sabe si al salir de casa dejo todas las puertas y ventanas aseguradas, todos los grifos cerrados, ese tipo de duda que te carcome la conciencia.
La noche término pronto, cuando se percató ya era demasiado tarde, ella no estaba, se había ido sin decir adiós, eso le había molestado, en el ego quizás. Esa respuesta solo se la podía dar el tiempo.