Nada en especial sucede en la pequeña localidad de Yarland, como tampoco en la vida de la devota dueña de casa, Jillian Tanner, quien, a sus cincuenta, veinticinco los ha dedicado a Chase, su esposo y a sus tres hijos. Su vida es rutinaria y apacible, sin embargo, solo cuando destierra de sus pensamientos sus verdaderos demonios como deseos olvidados.
En contraste, y en el mismo lugar, ha arribado Martina Adriano, una escritora y cientista social feminista que no teme decir lo que siente y requiere, desembocando habladurías y malas caras por parte de los citadinos, sobre todo, mujeres. La novelista es el sueño y admiración de Josefina, hija de Jillian, quien anhela seguir sus pasos, a pesar de ser enjuiciada y apuntada por su padre, quien considera que Adriano no es el mejor ejemplo a estimar, más sabiendo sus claros y poco ortodoxos gustos hacia su propio género.
Pero, no solo el mundo adolescente de Josefina se verá afectado, ya que Jillian se encontrará dividida entre salvaguardar y apoyar la pasión e intereses de su hija, mantener su matrimonio intachable de décadas y estable, o atreverse a sacar a la luz su verdadera esencia, y permitirse vivir lo que Martina tanto profesa en sus libros: la autonomía y el amar libremente más allá de los escrúpulos y prejuicios que la sociedad ha impuesto durante siglos.