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-¿Qué haces?- preguntó el blondo, mientras miraba a el azabache, quien le daba la espalda y tallaba algo en un árbol.
-Espera ya casi termino- respondió el azabache, mientras miraba detalladamente el árbol y sonreía orgulloso por su trabajo- ya está listo- prosiguió a hablar, mientras Tweek se acercaba a éste y observaba el árbol.
-Wow- un pequeño rubor se formaba en sus mejillas y le sonreía a el azabache, éste había tallado sus iniciales dentro de un corazón; se abalanzó sobre él y lo abrazó, mientras le daba un beso en los labios, el más alto sostenía de la cintura a el blondo y correspondía los besos, hasta que ambos cayeron al suelo, el blondo miraba a el chico sobre él.
-Oye... ¿no tienes miedo?- preguntó el de ojos verdes, mientras el contrario arqueaba una ceja confuso.
-¿Qué cosa?- preguntó el azabache, mientras le daba pequeños besos en toda la cara a el blondo.
-...Q-Qué nos d-descubran... Ah... Ya deja de hacer eso- ordenó el blondo muy avergonzado, mientras daba pequeño suspiros.
-... Mmm... se que te gusta- habló con una voz pícara, y continuaba besando y dando pequeños chupetones en el cuello del blondo, besos que fueron bajando.
-Ah... Ya enserio- habló avergonzado el blondo, mientras apartaba a el azabache.
-Mmm- gruñó un poco molesto por a verlo interrumpido- no te preocupes, nadie lo descubrirá, tranquilo Honey- prosiguió a responder, mientras le daba un dulce beso en la frente a el blondo.
-¿Crees que sean brujas?-preguntó un poco tembloroso el de abajo.
-Tú mismo viste lo que está pasando en el pueblo, es lo más seguro- respondió con simpleza el azabache.
-¡Ah, Jesús! Andan revisando todo- prosiguió a hablar muy asustado.
-Ni lo menciones, llegaron a mi casa y se llevaron a el pobre gato de mi hermana...- respondió irritado.
-S-Sabes que lo nuestro e-está mal, más para la ig-iglesia...- habló el blondo entre titubeós.
-lo sé, pero Tweek, no importa si nos descubren, prometo que jamás te abandonaré, siempre te amaré, aún si llego a morir- respondió el de ojos azules con una dulce sonrisa.
-I-Idiota, s-si nos morimos n-no volveremos a vernos...- respondió el blondo divertido.
-Pues no me importa, yo me encontraré siempre contigo incluso después de la muerte, te prometo encontrarte y estar siempre contigo- se acerco a la frente del contrario y posó la suya sobre ésta, mientras se miraban fijamente.
-... lo prometes...- susurro el blondo, mientras entrelazaba su mano con la del contrario.
-Lo prometo...- susurro con una sonrisa y ambos jóvenes unieron sus labios, mientras entrecerraban sus ojos y disfrutaban de la presencia del otro.
-Te amo, Craig...
-Yo también te amo, Tweek...
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Tweek abrió sus ojos muy agitado y sus manos reaccionaron a sujetar algo hacia arriba, pero por obvias razones no había nada, unas lágrimas se delizaban por su rostro y ahí estaba ese hueco en su corazón de nuevo...
Por otro lado Craig también se despertó de un gran golpe, haciendo que cayera de la cama.
-¡ Ahhh lo juro madre Teresa no robe el pastel de Token!- gritó Clyde a su lado medio dormido, ese gran golpe lo había despertado, observó muy asustado a su alrededor y se encontró con el azabache en el suelo- ¡Craig!- exclamó preocupado, mientras se levantaba de la cama y se dirigía hacia donde el azabache.
- ah, Cly-Clyde...- titubeó el azabache, mientras temblaba y se aferraba a el castaño, Clyde suspiro al ver que sólo había sido una de las pesadillas del azabache...
-Tranquilo Craig, ven acuéstate de nuevo, yo me sentaré aquí- lo tranquiloso el castaño, mientras colocaba una silla al lado de la cama de Craig.
-¡N-no te irás!, ¡No me dejarás solo!, ¡Tu tampoco me dejes!- exclamó sobresaltado Craig, mientras sujetaba la mano de Clyde y tenía una voz quebrada.
-Sí- respondió Clyde, mientras acostaba a Craig y cobijaba; después de unos minutos Craig volvió a cerrar sus ojos y cayó dormido, el castaño lo seguía mirando, aveces cerraba sus ojos y los volvía a abrir de golpe.
-Pensé que ya lo habías superado-susurró Clyde cansado, mientras miraba a Craig, éste dormía profundamente.
El castaño ya estaba acostumbrado a esto, no era la primera vez que Craig despertaba así, cuando eran niños y dormían todos juntos, Craig solía despertar llorando o hablaba solo, también lloraba mientras dormía... Era Token o alguna monja quien le ayudaba a tranquilizarse... Todos se habían criado juntos...
-¿Qué sueñas?, con tus padres, algún mal recuerdo...- murmuró Clyde, mientras miraba atentamente a Craig.
-... Tweek...- susurró él azabache, Clyde casi se cae de la silla y parpadeo varias veces, acaso había escuchado mal...
-¿Qué?, ¿Qué dijiste Craig? Repitelo de nuevo- habló Clyde, mientras Craig fruncia el ceño y murmuraba dormido.
-Mmm jodete Clyde- el castaño lo observó sorprendido... Tal vez si escuchó mal... Se diririgio a la mesita de noche y sacó un reloj.
-En serio las cinco de la mañana, ahh Dios ya no puedo dormir, una vez que despierto no logro reconciliar el sueño-se quejo el castaño, mientras se dirigía a la cocina y preparaba café.
Pasaron unas horas y tocaron la puerta, Clyde se levantó de la cama y se puso una camisa, mientras se dirigía a la puerta.
-Carta-habló un chico rubio con una sonrisa amable, Clyde le sonrió y agradeció.
Observó la carta y notó que era de Token... La abrió de inmediato y comenzó a leer.
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Hola chicos, me enteré que ya tienen un buen caso y están en el pueblo de South Park, para suerte de ustedes, me dirijo a ese pueblo y estaré ahí en unos tres días, me mandaron como ayudante, qué cosas no.
Craig te felicito por tener ya un buen caso y pueblo, pero no seas idiota, eres tan apurado, pero de igual manera te felicito seremos compañeros muy pronto.
Clyde no le estorbes a Craig y deja de pedir cosas a los pueblerinos.
Atte: Token Black
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-Ahh que ingrato eres Token...- se quejó Clyde, mientras comía una galleta.
-¿Alguna carta que entregar?-preguntó aún ahí parado el chico, Clyde ya lo había olvidado su presencia.
-oh no, gracias- agradeció por segunda vez, mientras el joven le sonrió.
-Ustedes están en el caso del pueblo ¿No?- preguntó el chico con curiosidad.
-Sí, soy Clyde Donovan ayudante y compañero de Craig Tucker- se presentó más formalmente, mientras le extendía la mano a él rubio.
-Mucho gustó, soy Butters Stotch y cartero si necesitan algo solo hablenme- prosiguió a responder con una sonrisa amable.
-Gracias Butters-agradeció Clyde amablemente, el rubio se despidió y se retiro.
Clyde cerró la puerta y se topó con Craig, quien tomaba un café y comía algunas tostadas sentado en la mesa.
-¿Qué pasó anoche?- preguntó Craig al ver a Clyde, quién lo observó molesto.
-No dejas dormir a la gente- se quejó el castaño, mientras se sentaba frente a Craig y éste lo miró confuso.
Pasaron unas horas y la nieve caía en grandes cantidades, Craig y Clyde seguían hablando de lo que el azabache había escuchado de aquellos chicos.
-Ahora que tendremos la ayuda de Token será más fácil- habló Craig , mientras tomaba una taza de café y Clyde estaba muy sorprendido, era verdad lo que decía Token, era un caso de alto riesgo...
-Ahh que miedo- habló Clyde, mientras comía galletas muy nervioso.
-Cada vez estoy más cerca de esa criatura- respondió Craig con una sonrisa victoriosa.
-Un demonio, no gracias, por suerte Token te ayudará...- habló el castaño.
-oh vamos es solo una simple purificación- respondió Craig con simpleza.
-Jumm ya quisieras...- se quejó Clyde al ver que confiado era el azabache.
Escucharon como tocaban la puerta y ambos jóvenes se miraron al mismo tiempo, Craig se levantó, abrió la puerta y se encontró con aquella pareja de policías.
-Buenos días- saludó el peli-negro, mientras el pelirrojo solo se limitaba a sonreír.
-Buenos días-saludó Craig y observando a una tercera persona, detrás de ellos.
-Tenemos a un testigo, el dice que vio a una criatura cerca del cementerio- habló Stan, mientras Craig lo miraba sorprendido y se hacía a un lado para que los tres entrarán.
-Con su permiso- habló Stan mientras entraba serio.
-Buenos días- saludo Kyle con una sonrisa.
Craig observó a el tercer chico, quien se paro frente a éste y sonrió.
-Mucho gusto- saludo con una sonrisa y entrando a la cabaña, era rubio y llevaba una capucha anaranjada.
-Hola Kyle- saludó Clyde con una sonrisa y Kyle le regreso el saludo, ambos se llevaban bien, por otro lado Craig y Stan se consentraban en el trabajo y no le daban importancia conocerce.
Todos tomaron asiento en la mesa y se miraban en silenció, hasta que Kenny habló.
-Mucho gusto, mi nombre es Kenny Mccormick y no me dedico a nada, justo el día de ayer fui al cementerio, quería ir a visitar a mi difunta familia, cuando llegue me encontre con cierta criatura, era mitad humano y mitad animal; unos cuernos decoraban las partes altas de su frente, una cola, alas muy peculiares y garras, sin mencionar que sus partes bajas era de un animal, pezuñas y ya saben el restó- terminó de contar, mientras tomaba un poco de café y todos lo miraban atónitos.
-¿Cómo era físicamente?-preguntó Craig muy sobresaltado y Stan de inmediato tomaba notas, por otro lado Clyde comía con dificultad y Kyle escuchaba muy sorprendido.
-mmm no lo sé, lamento decir que estaba muy asustado, no lo observe muy detalladamente...- Mintió Kenny, mientras se cruzaba de brazos, no iba a hacer tan metiche en esto y no quería tantos problemas... Observó a Craig y éste hablaba con Stan.
-¿Usted es el nuevo pastor?- preguntó Kenny fingiendo no saber, Craig dirigió su mirada hacia éste y asintió.
-Oh que bueno, podemos ir esta misma tarde al cementerio, casi a esa hora me topé a esa criatura en el cementerio- propuso Kenny, mientras tocaba su briente un poco molesto.
-Eso sería una gran oportunidad- habló Craig, mientras Stan aceptaba también.
-Nosotros iremos también- propuso Stan, mientras se levantaba de la mesa y Kyle hacia lo mismo.
-Ok nos vemos entonces gracias por su tiempo gracias, me retiro se despidió Kenny, mientras salía por la puerta y se alejaba de la cabaña.
-Nosotros también nos vamos- se despidieron Kyle y Stan.
-Wow nos vamos a encontrar al fin esa criatura- habló Clyde un poco nervioso.
-Lo sé, debería de ir por Tweek- habló Craig, mientras salía de la cabaña, Clyde por su parte no le dijo nada y siguió viendo unos libros.
De camino Craig iba muy emocionado por contarle la noticia a el blondo, cuando de repente se encontró con aquel chico rubio, éste hablaba con otro chico más pequeño. Ambos se percataron de la presencia del padre y lo observaron.
-Hola otra vez- saludó Kenny, mientras se acercaba a el azabache, quien asintió.
-¿A dónde va?- preguntó Kenny curioso.
-Voy a comentarle a un amigo sobre lo que haremos esta tarde- respondió Craig.
-A sí... Y podría decirme el nombre de ese amigo suyo...- preguntó Kenny, mientras recordaba a aquel demonio y la charla que tuvo en el infierno.
-... Tweek... No es molestia cierto...- respondió Craig; Kenny dio una sonrisa falsa y asintió, sin decir más Craig se retiro un poco confuso...
-kenny...- habló el rubio, mientras se acercaba a éste preocupado.
-No te preocupes Butters, tú solo has como si no sabes nada- prosiguió a hablar el más alto, mientras acariciaba el cabello del menor... Al menos sabía quién era el padre...
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Tweek se encontraba cerca de la iglesia, aún atraído por aquella energía y sus temblores no paraban.
-Ese maldito, escuchó todo lo que tenía pleneado y me vio en el cementerio...- gruñó furioso, mientras se adentraba a el bosque y salía por otra entrada, esta llevaba a él cementerio, se acostó sobre aquellas lápidas y cerró sus ojos, para descansar un poco...
Craig buscó por todo el pueblo a Tweek, pero no lo encontraba y no quería ir al bosque a buscarlo... Era obvio que vivía ahí, pero aveces se paseaba por el pueblo y tenía la fe de encontrarlo, pero parecía que el blondo hoy no había venido al pueblo...
Se dirigió de nuevo a la cabaña y se encontró con Clyde, quien miraba un libro.
-¿Lo encontraste?- preguntó el castaño sin despegar su mirada del libro, deseaba que le dijera que sí y así él no iría por la cantidad de personas...
-No- respondió Craig un poco decaído y acostandose en su cama, mientras Clyde maldecia.
-oh bueno no te desanimes, después de todo es un pueblerino, no debería de estar en este caso, estamos poniendolo en riesgo- prosiguió a hablar Clyde y Craig sentía cierta culpa.
-Sí, tienes razón- respondió Craig un poco desanimado...
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Perdónen los errores, gracias❤️