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— ¡Tengo una buena noticia! — Dije ilusionada cuando me senté en la mesa de la cafetería del instituto, mi primo y Scott me miraron con atención y junte ambas manos antes de empezar a hablar.
— ¿Nos ha tocado la lotería? — Preguntó Stiles y negué haciendo una mueca de tristeza.
— ¡Este viernes tenemos nuestra primera actuación en el partido! — Chillé con alegría y ambos me miraron con cara rara.
— ¿Ya se lo has contado? — Dijo Lydia sentándose con nosotros y también Alison.
— No están muy expresivos — Respondí mordiendo una manzana, a los pocos minutos vi a Isaac entrar junto con Erica y Boyd que habían vuelto de estar con el tío de Derek.
— Si esa ha vuelto se avecinan problemas — Y si, Lydia tenía razón, puede que fuese amiga de Isaac pero no era de fiar y solo era cuestión de tiempo que ella intentase algo.
— Que bonito, el grupo unido — Erica se sentó en una silla y los demás hicieron lo mismo, Isaac me sonrió desde su sitió y le respondí de la misma manera.
— ¡Sky no! — Iba a comer un trozo de pizza cuando Lydia me lo quitó de las manos.
— ¡El viernes tenemos que estar perfectas, no puedes comer pizza, con la manzana es suficiente! — Rodeé los ojos y tiré ese delicioso pedazo de pizza a la basura, eso había sido como una puñalada.
— Por una vez coincido con Lydia — Fruncí el ceño cuando Erica dijo eso, que Lydia lo dijese no me molestaba en absoluto, sabía como era y que no lo hacia como mala intención, ni siquiera me planteé nada pero cuando la rubia lo dijo me hizo sentirme mal con mi cuerpo, como si realmente necesitase dejar de comer.
— Cállate Erica — Escupió Isaac buscando mi mirada pero la ignoré en todo momento.
— ¿Vamos a ensayar? — Preguntó Lydia mirándome y asentí cogiendo el bolso y saliendo de ahí con la pelirroja y Alison.
Estuvimos unas largas dos horas ensayando con el resto de chicas la actuación del viernes, tras muchos intentos e insistencias conseguimos convencer al entrenador para que nos dejara formar un equipo de animadoras y tras un mes practicando y cogiendo algunos pasos básicos ahora estábamos muy contentas y emocionadas.
— Los trajes han llegado chicas — El entrenador llegó con una caja llena de ropa y accesorios del uniforme.
Lo abrimos y cada una cogimos la talla que usábamos, fuimos a dejarlos a las taquillas y cuando estaba por irme me sorprendió Stiles pasándome un papel doblado.
— ¿Qué es esto? — Pregunté mirándole raro.
— Ábrelo — Insistió y le hice caso, cuando leí lo que ponía casi me da un paro cardíaco.
<Scott McCall y Isaac Lahey tendrán que cuidarse las espaldas en el partido porque voy a ir a por ellos y no voy a fallar>
— No pueden jugar — Dije rápido metiendo esa nota en mi taquilla y cerrándola fuerte.
— ¿Crees que vamos a convencer a dos hombres lobo tan testarudos como ellos? — Y por supuesto que Stiles tenía razón, claro que no íbamos a poder y se empeñarían en hacerlo de todos modos.
— Lydia me lleva a casa, nos vamos antes, no tenemos la última clase — Dije mirando a mi primo y asintió, le dije que hablaría con Isaac aunque fuese inútil y el dijo lo mismo de Scott.
La pelirroja me dejó delante de casa y subí a mi habitación a probarme el traje de animadora, el top y la falda eran blancos y granates como los de los chicos, me miré en el espejo y me analicé con lupa, nunca antes había sentido la necesidad de hacerlo pero ahora estaba incómoda, después de lo que dijo Erica ahora Isaac se fijaría más en mi cuerpo y tenía que estar perfecta para él.
Cogí el portátil de Stiles ya que yo no tenía y busqué en internet formas de adelgazar rápido, me salían dietas y cosas de esas hasta que entré en una página que traía cosas eran poco ortodoxas, apunté en un papel algunas de ellas y lo dejé sobre el escritorio, dejé el portátil sobre la cama y me quité el uniforme de animadora.
— ¿Sky? ¿Stiles? — Mi tío había llegado antes a casa, bajé con una sonrisa y me lo encontré en el salón con algo de pena en la mirada.
— ¿Qué ocurre? — Pregunté preocupada.
— No te preocupes, es solo que estoy algo cansado — Asentí poco convencida.
Me dispuse a ir a buscar algo de comer, me estaba muriendo de hambre y cuando tenía un paquete de galletas en la mano lo pensé y lo volví a dejar donde estaba, en cambio, llené un vaso con agua y me lo bebí de golpe, como decía en la página web, eso en teoría debería saciarme.
Lo que quedó de semana me la pasé así, inventándome excusas para no comer o escondiendo la comida cuando no tenía algo con lo que excusarme, o incluso había vomitado alguna vez y hoy era el gran día, por fin era viernes y tendríamos nuestra primera aparición en el campo de lacrosse como equipo oficial de animadoras del instituto, el problema era que hoy cuando me levanté de la cama para ir a clase me sentía débil, con apenas fuerzas.
— ¿Estás bien Sky? — Asentí a las palabras de Alison y me terminé de retocar en el baño de chicas, sonreí para que no se preocupase y ambas salimos para ir a clase.
— ¡Hey! — Isaac me llamó desde el final del pasillo y levanté la mano para saludarlo, se acercó y me besó en los labios, sonreí y pasó un brazo por mis hombros mientras caminábamos a clase y justo detrás venía Alison con Scott.
— ¿Serviría de algo que intentase convencerte para que no juegues el partido? — Pregunté por última vez y el negó sin mirarme.
— Tendré cuidado, además estoy seguro de que es un farol, habrá mucha gente como para que intenten matarnos ahí delante — Dijo seguro y asentí poco convencida, llegamos a clase y cada se sentó donde le tocaba.
El día fue un completo aburrimiento hasta que llegó la hora del partido, todas estábamos listas y calentando para entrar al campo, los jugadores de ambos equipos estaban en el banquillo y era nuestro turno para darle ánimo a nuestro equipo, la música empezó al sonar al ritmo de Bet on it y todas salimos y nos pusimos en nuestros puestos, entre toda esa testosterona visualicé a mi lobito y sonreí viendo como me miraba, todas y cada una de nosotros lo dimos todo, lo mejor que supimos y cuando acabamos la coreografía todo el mundo se levantó y nos aplaudieron, silbaron e incluso nos decían cosas como guapas o ¡las mejores chicas las tenemos en Beacon Hills!
— Ha salido perfecto — Lydia se acercó a mí y nos abrazamos contentas, segundos después Alison se unió y luego todas las chicas del equipo.
— Después de esta gran actuación de nuestro equipo de animadoras demos la bienvenida a ambos equipos de lacrosse — Se escuchó la voz del entrenador por un megáfono, todos aplaudieron incluidas nosotras y mientras nosotras salíamos ellos entraban.
Isaac pasó por mi lado mirándome con una gran sonrisa, le deseé suerte y me guiñó el ojo, maldito idiota que siempre me hace ponerme roja como un tómate, nos sentamos en un banquillo que habían puesto para nosotras y el partido empezó, Alison, Lydia y yo nos miramos nerviosas sabiendo lo que podía pasar.
— Sky — Stiles me llamó desde el banquillo y me acerqué a él.
— ¿Crees qué realmente sea un farol? — Miré al campo de nuevo y todo parecía ir con normalidad.
— ¡No! — Gritó el entrenador y uno de nuestros jugadores había caído y se había lesionado, el entrenador llamó a Stiles para que entrara y me miró con una expresión entre alegría y miedo.
— ¡Lo harás bien! ¡Vamos Stiles! — Grité con una sonrisa y volví con las demás.
Amaba a mi primo y siempre le daba ánimos pero el lacrosse no era lo suyo, me empecé a fijar en los jugadores del otro equipo, todos parecían "humanos" y ninguno destacaba en exceso, y entonces caí en la cuenta de algo.
— A lo mejor no es un jugador, puede ser alguien que venga a vernos, es una distracción, ellos estarán intentando buscar a alguien en el campo, puede que sea incluso del instituto, creo que.. — Iba a seguir contándoles mi teoría cuando se escuchó el grito de otro de los chicos de nuestro equipo, madre mía, nos van a machacar hasta que solo queden Isaac y Scott.
— O pueden estar provocándoles — Añadió Alison mirando al campo, Lydia también estaba concentrada en algo, pero estaba mirando a la gradas, miré en la misma dirección que ella y había un hombre mirando hacia nosotras, en particular a Lydia.
— ¡Expulsado! — El árbitro echó a uno del otro equipo que se había dedicado a machacar a golpes a nuestro equipo, el tipo se quedó mirándonos y se metió para los vestuarios.
El partido continuó con normalidad y nuestro equipo acabó ganando, todos estábamos más que contentos, en especial, porque nadie había muerto en el partido como decía la nota y no había habido ningún tipo de conflicto sobrenatural.
Pero eso no duró mucho tiempo.