HP4
El equipo completo está sumido en el silencio. Harry permanece atrapado sobre la tumba del cementerio maldito al que el traslador de la Copa los ha llevado. Cedric, tomándose su descanso fuera del escenario, pregunta qué es lo que anda mal.
Voldemort se detuvo al recorrer el círculo de Mortífagos, frente a una figura más bajita que el resto, a quien la capa negra le queda grande. La máscara, sin la capucha encima, no oculta el cabello rubio.
—Estoy seguro de que no recluté niños en ningún momento —Menciona, dando otro vistazo a sus seguidores, mientras hace girar la varita entre sus dedos—, ¿alguien reclutó un niño? No tengo Mortífagos tan pequeños.
El pequeño Mortífago no habla. Cuando el Lord hace ademán de arrancarle la máscara con una floritura, se agacha y se escabulle por debajo de su brazo, y corre hacia donde está Harry.
—¿...quién dejó entrar a Draco y le dio la ropa de Mortífago?
—Esto no tiene ningún sentido, ¿cómo llegó aquí? ¿alguien le dio mi Marca Tenebrosa a un niño? ¿hubo cambio en el libreto y no me...?
—¡No hubo cambio en el libreto, ningún cambio! ¡Draco, no intentes bajar a Harry de ahí!
El Mortífago falso sigue sin contestar. Está tironeando de Harry para sacarlo del agarre de la estructura tétrica. Voldemort se palmea la frente y menea la cabeza, mascullando sobre impostores.
—¡Lo están traumatizando con esto! ¡no quiero que mi novio quede...! Oh, oh, ¡espera, espera! ¡Voldy, no! —A Draco se le cae la máscara cuando el Lord lo levanta y se lo sube al hombro. Empieza a patalear y agitar los brazos en el aire, intentando llegar a Harry— ¡Voldy, malo! ¡bájame!
Voldemort lo saca de la escena. Desde la tumba, Harry contiene la risa apretando los labios. Los demás Mortífagos están confundidos.
—...listo —El Lord Oscuro reaparece poco después, alisándose los pliegues que se le formaron en la túnica—. ¿En qué parte del discurso malvado iba? ¿el duelo, me reía de él y su desgracia?
—¿...qué hiciste con Draco, Voldy?
—Lo dejé con su padre —Contesta a producción—, ya no debería-
Un torbellino de cabello rubio y ropa negra atraviesa el cementerio corriendo para llegar a Harry. Voldemort tiene la boca abierta, Lucius se mete a la escena detrás de su hijo para sostenerlo. Todo es un caos.
—¡Draco, no! ¡Draco, no- no tomes el trasla...!
Ambos chicos se escapan. Los Mortífagos permanecen en silencio, mientras su Lord carraspea y mira alrededor, aturdido.
—¿Seguimos mañana?
—...sí, sigamos mañana. Buen trabajo a todos.
—Corte—