-Y recuerda, el embarazo adolescente es una cosa muy grande.- Bromeó Amy mientras Beca se ponía sus botas.
-Uno, no soy una adolescente y dos, que te jodan.-
-Dejemos eso para ti y Chloe, ¿De acuerdo?- Beca rodó los ojos, salió de la casa y se dirigió a la de la pelirroja tocando ligeramente.
Poco después la puerta se abrió y Beca frunció el ceño cuando no vio a nadie, pero sonrió cuando sus ojos vieron a Emma que estaba sonriendo hacia ella.
-¿Está tu mami en casa?-
Emma asintió, -Vamos, te tengo algo.- La pequeña agarró la mano de Beca y la llevó hasta la sala.
-Espera aquí.- Beca asintió.
-Dile a tu mamá que estoy aquí.- Alcanzo a murmurar la morena cuando la pequeña desapareció de la habitación.
-¿Em abrió la puerta otra vez?- Chloe preguntó cuándo apareció en la sala.
Beca sonrió al instante al ver a la chica. -Quizás sabía que era yo.-
Chloe sonrió a pesar de que su hija la desobedeciera. -La voy a acostar, y luego podemos ver Dexter, tengo todas las temporadas allí para ver.-
Beca asintió, sonriendo cuando Emma entró corriendo a la sala y saltó al sofá sosteniendo un pedazo de papel con macarrones pegados en forma de corazón. -Es para ti, ya le hice uno a mami.-
-Gracias, cariño. Voy a ponerlo en mi nevera cuando llegue a casa.-
Los ojos de Emma se iluminaron, mientras miraba de Beca a Chloe y viceversa. -¿En serio? ¿Me lo prometes?-
-Te lo prometo.- Dijo Beca regalándole un guiño a la niña que sonrió alegre.
-Em, ¿Ya te lavaste los dientes?- Chloe preguntó.
-Sí mami, mira.- Em le enseñó los dientes a su madre.
-¿Quieres ir a buscar un libro para leértelo?-
-¿Puede leerme Beca mami?
-Bueno, sí ella quiere.- Chloe miro a Beca.
-Por supuesto, Em.- La niña agarró la mano de Beca y la llevó hasta su habitación.
-Lee esto.- Emma le entregó un libro a la morena.
-¡Emma!- Dijo Chloe con severidad y la niña asintió.
-Por favor.-
Beca sonrió, mirando la portada del libro. -¿Dónde están las cosas salvajes? Leí esto de niña.-
-¿En serio?- Emma preguntó emocionada, mientras se sentaba en su cama, y sus pequeños brazos envolvían al peluche que Beca le había dado.
-Sí, y sabes algo, fue mi favorito.-
-El mío también.- La niña susurró justo cuando Beca se sentó en el borde de la cama.
-¿Lista?- Emma asintió, cerrando los ojos mientras Beca comenzaba a leer.
La morena se dio cuenta de que la niña quedó rendida antes de llegar a la mitad del libro, pero leyó el resto de todos modos, finalmente en silencio se puso de pie para apagar la luz, camino hacia la puerta y la cerró detrás de ella sin hacer ruido.
-Gracias por eso.- Susurró Chloe haciendo a Beca girar, quedando cara a cara con Chloe.
-No hay problema.- Beca murmuró, regresando la mirada a Chloe. Nunca había estado tan cerca de la mujer antes, ¿Sus labios siempre fueron tan atractivos? ¿Sus ojos siempre fueron tan claros y azules?
-Así que, ¿Dexter?-
-¿Quién?- Preguntó Beca antes de que su mente comprendiera lo que Chloe había dicho. -Oh, cierto, Dexter.- Chloe sonrió ligeramente.
-Eres adorable.- Contestó la pelirroja antes de girar y dirigirse a la planta baja. Beca sonrió, la morena estaba sintiéndose como una adolescente mientras seguía a Chloe.
-¿Alguna vez lo has visto?-
-Nope, pero he oído hablar de él.-
Chloe asintió, sacando el primer disco. -Vamos a empezar con la primera temporada entonces.-
-Así que, trata de un tipo que mata a los asesinos en serie. ¿No es un poco irónico?-
-Sí, pero digamos que él es como una especie de asesino en serie adorable.-
-Esa es una frase que nunca pensé oírla.-
-Ya lo verás tú misma.- Dijo Chloe volviendo al sofá pulsando play en el reproductor de DVD.
----
-Oh rayos, tengo clases mañana y tú me hiciste quedar hasta la 1:00 am. Eres una terrible persona.- Chloe bostezo, caminando con Beca hasta la puerta.
-¿Qué? ¿De qué hablas? Eras tú la que se la pasó diciéndome: sólo un episodio más, solo uno más, así que esto es totalmente tú culpa.-
-Bueno, no tenías que decir que sí cada vez.- Chloe levantó una ceja a Beca, cuando ella se apoyó en el marco de la puerta.
-Pero, ¿Quién podría decir que no a una cara bonita como la tuya?- Beca sonrió con superioridad.
-Encantadora.- Chloe sonrió, -¿Lo mismo mañana? Terminó las clases cerca de las cuatro.-
-Me parece bien.- Beca estuvo de acuerdo, y dando un paso adelante le dio un beso en la mejilla a Chloe. -Me divertí esta noche, gracias.-
Chloe sólo asintió, sus ojos siguiendo a Beca cuando dio un paso atrás y comenzó a caminar hacia su casa.
-¿Mañana a las 5:00 pm?- Chloe preguntó, cuando la otra chica estaba por entrar a su casa.
-Es una cita.- Beca respondió, abriendo la puerta y entrando a su casa.
----
Beca estaba tumbada en el sofá con los cascos puestos haciendo algunos arreglos a un demo de un artista callejero que le habían asignado en la disquera esperando a que fueran las cinco para poder ver a Chloe.
Frunció el ceño cuando se escuchó un fuerte golpe en la puerta, pero terminó riéndose cuando desde afuera se oía la voz de Chloe. -Emma, ¡Esa no es nuestra puerta!-
Beca se levantó del sofá y abrió la puerta para ver a Emma sonriendo hacia ella, los brazos envueltos alrededor de Toby él peluche. -¡Hola!- Dijo la niña saltando de puntillas.
-¡Hey, pequeña!- Beca sonrió y se agachó delante de Emma.
-Mami y yo vamos a ir al parque, y me dijo que podría invitarte.-
-No, dije que una vez que te cambies, Em.- La pelirroja debatió dando una sonrisa de disculpa a Beca, mientras colocaba una mano en la cabeza de su hija.
-¿Quieres venir?- Emma preguntó esperanzada.
-Por supuesto que sí, pero ve a cambiarte y yo voy a cambiarme también y las veré afuera, ¿Te parece?- Emma asintió alegremente, corriendo hacia su propia puerta.
-¿De verdad quieres venir?- Preguntó Chloe, y Beca se puso de pie apoyándose en el marco de la puerta. -Claro, de verdad quiero ir, ¿Por qué? ¿No quieres que vaya?-
-No, no... Yo sí quiero, lo que no quiero es que te veas en la obligación de ir solo porque Emma preguntó.-
-No me veo en la obligación. Para tu información, salir contigo y Emma no es una tarea, en realidad me divierto.-
-Bueno, es que yo solo pensé, que tal vez, no sé, seguramente tienes cosas mejores que hacer.-
-Venga Chlo, no puedo pensar en una mejor forma de pasar mi tiempo.- La morena le sonrió a Chloe.
-Mamá, vamos, ¡Quiero ir al parque!- Gritó Emma.
-Nos vemos aquí en diez minutos.- Beca asintió, cerrando la puerta y subió para cambiarse.
Una vez que Beca se cambió bajó las escaleras agarrando su gorro negro antes de salir a dónde Chloe y Emma la estaban esperando.
La niña sonrió emocionada al ver a Beca. -¡Vamos! Quiero ir a los columpios.-
-Apuesto a que puedo columpiarme más alto que tú.- Dijo Beca juguetonamente con una sonrisa.
-¡No te creo! He estado practicando columpiarme por mi cuenta y me voy súper alto ahora.-
-Ya lo veremos, niña.-
-Mami dile, dile lo alto que puedo ir.- Emma jalo la mano de su madre.
-Emma puede ir muy alto.- Chloe le dio la razón a su hija.
-Tendremos que esperar y ver.- Beca miro a Chloe sonriendo.
-¡Así es!- dijo Emma decisiva.
-¿Y cómo estuvieron tus clases?-
-Bien, un poco aburrida, la parte teórica no es mi fuerte.- Contestó Chloe encogiéndose de hombros. -¿Y tú qué has hecho durante todo el día?-
-Comí papas fritas, estuve trabajando en un demo y luego Amy me obligó a ver un programa de televisión.-
-Muy productivo.-
-Si, de hecho fue un programa pingüinos y refuerza mi teoría de que a veces se entregan a la prostitución y la venta de sí mismos por las rocas y los alimentos.-
-Woah, que profundo, no mostraron eso en Happy Feet.-
-Ya sé, es como si la película no fuera un documental fiable.- Beca bufó. -Lo siguiente que dirán es que los pingüinos no bailan.-
-Pero lo hacen.- Emma aseguró.
-Genial, porque ya me estaba preocupando.- Emma sonrió, soltando las manos de las dos chicas y corrió hacia los columpios.
La pequeña saltó en un columpio en un extremo, Beca y Chloe se sentaron en los que sobraron mientras se columpiaban lentamente a sí mismas yendo y viniendo.
-¿Cuánto tiempo hace que conoces a Amy?- Chloe preguntó, haciendo a Beca inclinar la cabeza contra las cadenas. -Las dos parecen cercanas como hermanas más que como amigas.-
-Buff, creo que desde el primer día de preescolar, me metió en la caja de arena diciendo lo debilucha que era, creo que desde entonces se convirtió en cariño de hermanas a primera vista.- Chloe se limitó a asentir, mirando a Beca con una leve sonrisa.
-¡Mira Becs! Mira lo alto que voy.- Emma gritó a la morena y esta dio la vuelta para ver a la niña.
-Vaya, parece que he subestimado tu capacidad de balanceo, mini Beale.-
-¿Cómo sabes que Emma tiene mi apellido?-
-Ella lo confesó.- Contesto Beca volviéndose hacia Chloe.
-Voy a jugar en la resbaladilla.- Gritó la niña a las chicas.
-¿Siempre quisiste hijos?- Preguntó Beca.
-Sí, pero no tan joven. ¿Y tú? ¿Quieres hijos?-
-Sí, sólo que no quiero ser yo la embarazada... En realidad, creo que no nací para soportar todo el sangrado y el dolor... ¡DIOS NO! Siempre dije que si alguna vez iba a tener hijos sería mi mujer quien tendría que embarazarse o que tal vez adoptaría.- Beca bromeo un poco.
-Duele. El peor dolor que he vivido, pero vale la pena, dicen que con la adopción no es lo mismo, como si no tuvieran la misma conexión.-
-Creo que no importa quién lo ha llevado y quién dio a luz, ¿Sabes? Lo que hace a una madre es quien cuida de él y lo ama incondicionalmente.- Chloe tarareo de acuerdo, siguiendo con la mirada en su hija.
-Estas haciendo un trabajo increíble con Emma.- Beca murmuró, atrapando la atención de Chloe. -Quiero decir, el equilibrio entre la escuela, la crianza de Emma, no debe haber sido fácil, de hecho puede que todavía no sea fácil, pero lo estás haciendo bien y ella es el resultado de todo tu esfuerzo.-
-Gracias.- Contestó Chloe tímidamente y Beca simplemente sonrió, volviendo sus ojos hacia la niña. Beca podía sentir la mirada de la pelirroja en ella durante un par de segundos antes de que también volviera a ver a su hija.
Heeeeey, hola! Perdón por tardar un pelín pero es que esto de hacer mudanza es un dolor de cabeza y me vuelvo algo loca con ello! Pero aquí me tienen desde temprano, (bueno, al menos para mi, je!) Espero que os esté gustando!