Symphony (One-Shots Noremma)

By LuBelDR

43.8K 1.4K 959

Serie de One Shots noremma. Contenido maduro (+18)// los personajes tienen 21 años El fanart de la portada es... More

Symphony
Bendita Tu Luz
Sin Principio Ni Final
Plenitud
Plenitud parte 2
plenitud parte 3
Un dulce sentimiento

In The Name Of Love

5.8K 218 157
By LuBelDR

Volvió a contar una vez más para quitarse cualquier rastro de duda. Estaba casi segura que era cierto, pero sentía que debía verificarlo una vez más antes de contárselo a Norman.

Emma había estado jurando de que jamás podría ser madre debido a su herido cuerpo, por lo que había empezado a desistir de esperarlo y simplemente se había dado por rendido.

Pero hace unas semanas atrás, cuando Norman estaba ausente por estar ocupado trabajando y sin tiempo, se había sentido descompuesta y con demasiadas nauseas, además de notar que su periodo no bajaba. Ray quien lo había notado inmediatamente, aún cuando había hecho todo por disimularlo, le había dicho que estaba embarazada.

Estaba asustada y demasiado pero eso no le impedía pensar en lo alegre que estaba frente a la notícia. Su hijo no nacería en una granja ni viviría en un engaño esperando por la dulce muerte.

Emma también ansiaba saber si Norman se emocionaría al igual que ella por la noticia.

En ese mismo momento, cuando Norman entró en su habitación de forma silenciosa y esperando descansar un poco, no pudo evitar sonreír al verla dando brincos y bailando por todo el cuarto, parecía demasiado entusiasmada.

— ¿Cuál es la buena noticia? —preguntó alegre acercándose a ella para envolverla en sus brazos.

— ¡Norman! ¡¿Cuándo has llegado?! —preguntó emocionada brincando hacia él y dejándose envolver por sus cálidos brazos.

— Hace unos segundos —respondió viéndola jugar con las manos— Siento que te estás guardando algo muy bueno y no me lo quieres compartir —comentó besándole la frente.

— ¡Solo estoy feliz! —respondió ella rápidamente y separándose de él. "No le diría todavía, pues quería que fuese una sorpresa"

— Bueno pero pareces más feliz de lo habitual —señaló con diversión. 

— Es que hoy iré a jugar con los niños. Me han pedido jugar a las atrapadas y yo no me he podido negar —mintió, de cierto modo, pues en realidad eso había pasado.

— No creo que eso sea bueno —declaró de pronto Norman, quien nunca se había negado a que ella jugara con sus hermanos, además de eso parecía extrañamente preocupado. 

— Ehh, qué dices, siempre lo hago —hizo un puchero Emma.

— Porque no mejor ayudas en los cuartos, solo pienso que... —iba a explicarse cuando ella se interpuso entre sus palabras.

— Está bien, iré a ayudar en los cuartos —dijo pensando que tal vez aprovecharía y le preguntara a Gilda y a Anna como sorprenderlo, además de hacerle saber sobre su nueva condición. 

Después de todo ellas eran sus mejores amigas.

— ¿En serio? —cuestionó con duda y levantando una de sus cejas. 

Era raro que Emma desistiera tan rápidamente, y más cuando se trataba de jugar.

— ¡Claro! además he estado algo cansada últimamente, jugar solo lo empeorará —respondió dándole un beso fugaz en los labios a Norman para luego salir corriendo por las escaleras.

— ¡No corras y cuídate! —la reto todavía sorprendido— ¡Abrígate! —exclamó pero ya era tarde. 

Norman  se dio la vuelta, suspirando con agotamiento. Dormiría un poco y en la tarde vería de comer junto a Emma, a su vez aprovecharía para hablar de un asunto importante y el cual venía posponiendo bastante.

~

— Te caerás idiota —la reprendió Ray golpeando su cabeza, cuando la vio correr por el refugio.

— ¡Oye! ya no soy una niña para que lo hagas —dijo haciendo un mohín que le produjo gracia a su amigo.

— Pues actúas como uno —después de tanto tiempo, Emma seguía siendo la misma de siempre frente a los ojo de Ray— ¿Ya le has dicho a Norman? —cuestionó sabiendo cual sería su respuesta.

—No —contestó moviéndose hacia las habitaciones.

— ¿Sabes que no lograrás sorprender a Norman? —inquirió siguiéndola para también ayudar en las tareas y a la vez controlar que no se metiera en problemas. Emma era un imán de problemas y siempre lo había sido.

— Ni siquiera se ha dado cuenta por lo ocupado que está —comentó algo apenada, buscando las sábanas recién lavadas.

— Ya lo hará, después de todo es Norman —respondió Ray intentando aliviar el ambiente. 

Emma podría haber jurado sentir un mínimo temblor en la voz de su amigo— Es verdad —dijo apartando sus pensamientos. Pero no permitiría que eso pasara, se las ingeniaría para sorprenderlo de la mejor forma. Esta vez no perdería contra la perspicacia de Norman, esta vez ella saldría triunfadora— Les preguntare a Gilda y a Anna que debería hacer, supongo que tú no me ayudaras —comentó viendo por sobre su hombro.

—Paso —respondió Ray levantando las manos mientras negaba con la cabeza— Te conozco y sé que darás demasiadas vueltas —

— Si serás malo —

— Pero llámame en el caso más extremo ¿entendido?  —le dijo mientras le guiñaba un ojo.

— ¡Eso haré! —contestó llena  de alegría Emma, despidiéndose con la mano elevada, y dirigiéndose a buscar a sus hermanas.

Su camino se vio interrumpido cuando vio a Phil y Chris que corrían hasta donde estaba ella. 

Habían crecido tanto y dentro de poco la superarían en altura. Realmente el tiempo había avanzado y las cosas habían cambiado con su paso. Se habían perdido tantos momentos juntos, pero como compensación divina habían vuelto a ella, aquellos que pensó que jamás volvería a ver.

Su corazón latió en regocijo al verlos tan llenos de vida y energía.

— ¡Emma! ¡Emma! —exclamaron ambos niños al unísono—¡Ven a jugar que Norman la trae! —

— ¡¿Qué?! —Emma se sorprendió al escuchar aquello. Era raro que Norman tuviera tiempo para jugar, pero aún más le molestaba pensar que se lo había prohibido, seguramente, por miedo a perder contra ella— ¡Lo haré con gusto! —dijo con aires de determinación.

~

Lo vio contar hasta diez "era tan hermoso aún cuando estaba simplemente contando con los ojos cerrados" pensó Emma con diversión— ¡Listos o no, allí voy! —exclamó Norman empezando a correr en búsqueda de cada niño.

Emma lo podía observar desde lejos atrapar a cada uno de sus hermanos sin dificultad alguna. Estaba segura que ganaría si saltaba entre algunos árboles para que él no la viera, y así llegar con mayor rapidez al árbol que servía de posta. 

Con aquel pensamiento en mente el juego verdadero empezó para Emma.

Luego de algunos segundos de correr y atrapar, por fin Norman pudo suspirar en busqueda de aire— Bueno ya están todos -dijo con notable cansancio.

Norman no había podido rechazar la oferta de los niños por jugar y distrayéndose de su verdadero objetivo, había aceptado. 

— ¡Eso es mentira! —declaró uno de los pequeños riendo.

— No creo, yo que vea, están todos —comentó volviéndolos a contar uno por uno. 

Definitivamente estaban todos los niños.

— ¡Falta Emma! —exclamó con entusiasmo Chris.

— ¡¿Qué?! —dijo horrorizado Norman, abriendo a más no poder los ojos. 

Era la primera vez que se demostraba asustado frente a los niños.

-¡Sí, nosotros la invitamos! -confesó Phil -¿Pasa algo?-

— No, en absoluto —mintió dándose la vuelta e intentando analizar todas las opciones posibles. 

No la había visto correr cerca de los niños, lo que significaba que o se escondía demasiado bien, vigilando desde una posición alejada o "¡estaba sobre los árboles!" Su mente se quebró ante la posibilidad. Así que se puso en marcha. Tenía que evitar que algo malo le pasase a Emma por andar jugando tan despreocupadamente.

— Ya se dio cuenta —murmuró Emm, escuchando el sonido de sus pasos acercándose con velocidad— Será mejor que comience la persecución —

— ¡Emma bájate de ahí —la reprendió Norman al verla saltar entre los árboles. "Su terrible presentimiento se había vuelto realidad"

"Mierda" "¿Cómo me encontró tan rápido?" pensó Emma acelerando sus pasos— ¡Trata de atraparme primero! —exclamó sacándole la lengua mientras se tambaleaba. 

Norman la veía desde abajo con una mirada de horror. No se detendría hasta que la atrapara o que ella ganara de manera justa— ¡¿No ves que es peligroso?! —cuestionó con un tono de enojo. 

Por una fracción de segundos Emma se asustó al pensar que habría hecho algo malo, pero rápidamente aquel pensamiento desapareció— ¡Lo que digas, Norman! ¡Pero primero ocúpate de atraparme! —gritó Emma percatándose de su repentina ausencia algo que la extraño. Aprovechó aquello para apurar su correr, notando que le faltaba poco para llegar a la meta. 

Por alguna razón empezó a sentirse raro, percibiendo una punzada proveniente de su sien, creyó que tal vez sería un débil dolor de cabeza producto de no haber comido antes. así que cuando terminara el juego, ella iría a robar algo de la deliciosa comida de Ray. Emma tuvo que mantener el equilibrio para no caerse cuando vio aparecer de la nada a Norman, y sin previo aviso en frente suyo.

— ¡Cuidado, Emma! —grito asustado Norman intentando moverse para alcanzarla.

— ¡Preocúpate por atraparme! —dijo escapando de sus brazos.

— ¡Vamos, te ves cansada! —protestó siguiéndola por los arboles.

— Lo estarás tú, porque yo me siento perfectamente bie  —sus palabras se quedaron a medio camino cuando sintió un fuerte mareo y unas nauseas imposibles de aguantar. Tuvo que dar todo de sí misma para no expulsarlo allí mismo.

Para mala suerte ella o tal vez de ambos, Emma perdió el equilibrio de sus piernas provocando que resbalara de la rama— ¡Emma!  —lo oyó decir con la voz quebrada mientras sentía que caía. 

Norman llegó a envolverla entre sus brazos antes de que ambos cayeran al suelo y se golpearan con fuerza— ¡Auch! —exclamó  abriendo los ojos con dificultad y sintiendo su cabeza temblar por unos minutos. Se asustó al ver a Norman tirado a su lado y haciendo un gesto de profundo dolor— ¡Norman! ¡Norman! —lo llamó con miedo— ¿Te encuentras bien? —

— Mm supongo que sí —respondió intentando levantarse, sintiendo un agudo dolor en todo su cuerpo. Norman agradeció haber crecido y dejado de ser tan débil y menos propenso a enfermarse que cuando era solo un niño, sino la caída lo hubiera devastado incluso más de la cuenta— Emma... —habló sobándose la espalda— ¡Emma! ¡¿Te sientes bien?! ¡¿Te duele algo?! —

— Sorprendentemente no —contestó rascándose la cabeza— Solo me maree un poco, supongo que por... por hambre —se excuso recordando que Norman no debía enterarse sobre su embarazo— Por suerte no era muy alto el árbol ¿O no? —bromeo mientras era ayudada por Norman a levantarse, quien aun la miraba con inquietud.

Emma no comprendía del todo su preocupación excesiva.

— Deberíamos llevarte a la enfermería para que te revise —solto sin rodeos Norman.

— ¡Pero estoy sana! —exclamó Emma dando un fuerte chillido que alertó a Norman.

— ¿Donde te duele? —

Emma estaba en pleno silencio viendo hacía abajo, su rostro se había vuelto de un blanco pálido casi enfermo. Norman intentando descifrar la causa por lo que Emma había chillado, bajo su mirada.

Sus ojos se llenaron de miedo al ver la mancha rojiza crecer en sus blancos pantalones.

— Norman... qué me sucede —sintio su corazón latir con rapidez, eso no estaba bien, no debía sangrar. Lo miro con extremo miedo buscando su consuelo, pero él también la miraba con una expresión de completo terror.

— Mierda —murmuró con la voz estrangulada, alzandola entre sus brazos con extrema rapidez.

Estaba sorprendida por escucharlo insultar, pues no era algo muy común en Norman, mucho menos cuando estaba en todos sus sentidos. Entonces pasó sus manos por alrededor de su cuello y cerró con fuerza los ojos, apoyando su cabeza en su amplió pecho.

"El corazón de Norman latía con su misma intensidad e incluso más"

~

Después de lo que se sintió una eternidad, y unas cuantas pruebas incómodas hechas por el mismo Norman; Emma se encontraba en una camilla todavía con miedo y sin saber qué decir. Además de que Norman no había pronunciado ni una sola palabra desde que había terminado de revisarla.

— ¿Cómo sabes tanto de obstetricia? —inquirió viéndolo ir y venir de un lado a otro con algunos papeles. Tenía una expresión de seriedad y más cuando se volteó a verla.

— ¿Y tú cómo sabes que lo que estoy haciendo es obstetricia? —cuestionó levantando una ceja. Emma trago con fuerza, "había vuelto a perder" Por suerte el bebé está sano y tiene alrededor de dos meses —habló con calma y menos preocupación— No debiste comportarte tan imprudentemente, las posibilidades de perderlo fueron muy altas —aquel pensamiento le hizo darse cuenta lo muy afortunados que habían sido.

— ¿C-cómo lo descubriste? —

— Ray me lo dijo —declaró anotando algunos datos respecto al desarrollo del embarazo.

— Ese traidor... —murmuró enojada y prometiendo que Ray se las pagaría.

— Pero ya lo sabía desde mucho antes —confesó apoyándose en la pared frente a ella.

— ¿Qué? —preguntó Emma con estupor— ¿Entonces no fue Ray? —

— Él me lo dijo hace un tiempo atrás, aún así yo ya tenía mis sospechas y por ende, empecé a leer múltiples libros e información, también durante uno de mis viajes hacia los otros refugios me reuní con una partera para ser aconsejado e instruido —declaró Norman cerrando los ojos y descansando su cuerpo contra la pared.

— Pero si hice todo por ocultarlo -hablo con frustración Emma, sintiendo como todos sus esfuerzos se venían abajo, y lo peor es que Ray se lo había dicho.

"Después de todo es Norman"

— Llevas tiempo fijándote en los calendarios fechas, pensando que nadie te ve mirarlos; también vas seguido a la biblioteca del refugio con todo tipo de golosinas o comida chatarra, algo que no es bueno para el bebé —aclaró trayendo a su mente todas esas pequeñas cosas que Emma hacía sin darse cuenta— Lees manuales de medicina, sola o en compañía de Ray; y cada vez que hacemos el amor te muestras más calmada que de costumbre y quieres ir lento, algo extraño en ti —comentó Norman aspirando aire y riendo.

— ¡Oye! —hizo un puchero por aquello último, aunque fuera cierto.

— Estás demasiado activa, incluso más de lo habitual; juegas con los más pequeños como siempre pero los observas de forma diferente... supongo que te imaginas como será el bebé; y cuando doblas la ropa de los menores te quedas viéndola por un largo rato, claro sin mencionar que también eres un desastre llevando la fecha de tu periodo por lo que lo hago a tus espaldas. Antes de irme todavía no había llegado ni luego de que volviese —explicó mirándola a los ojos.

— ¡Norman eso es vergonzoso! —protestó Emma tapándose la cara con ambas manos.

Norman la conocía de pies a cabeza y la entendía mejor que nadie. La había visto hacer cada pequeña cosa, que mientras para ella era algo que hacia totalmente inconsciente, para él quien nunca dejaba de cuidarla y verla, eran detalles fuera de lo normal que habían terminado delatando su estado.

— Has hecho costumbre mirar para todos lados y luego acariciar tres veces tu vientre mientras le sonríes —confesó mirando hacia el techo con una sonrisa y las mejillas levemente enrojecidas.

"Esa era su Emma, su pequeña y loca mujer, que ahora esperaba a su hijo"

— ¿Por qué no dijiste nada? —preguntó Emma con la mirada hacia abajo.

— Esperaba que me lo contaras —confesó observándola con detenimiento— Solo querías sorprenderme y decirles a todos antes que a mí. ¿Cierto? —Norman adivino perfectamente los pensamiento de Emma. Siempre había sido de esa manera, tan perfeccionista, tan observador— ¿Tenías miedo de lo que te fuera a decir? —

— ¡¿Qué?! ¡Claro que no! —exclamó movimiento la cabeza hacia ambos lados— Tal vez tenía mis dudas... nunca lo hablamos realmente y aún cuando yo pensaba lo genial que sería, no quería molestarte —confesó al borde de las lágrimas— Lo siento, no quería que nada pasase y al final lo he arruinado todo —declaró angustiada Emma— Creí que nunca podría embarazarme, ni tener hijos... pensé que estaba rota —

Norman era consciente de que Emma lo sabía, pues cada vez que alguien hablaba del tema, ella solía reaccionar con una sorpresa manchada de tristeza. Por otro lado, no habían tenido el tiempo suficiente para hablar sobre aquello o tal vez no la intención.

Norman en realidad lo deseaba y anhelaba, pero también deseaba pasar el mayor tiempo posible con ella sin tenerla que compartir con alguien. Tampoco era algo prioritario, su relación nunca decaería ni se rompería en el caso de no poder concebir hijos. Su amor por Emma se conservaría ya que iba más allá de esas cosas y en cualquiera de los casos, adoptar a todos los pequeños que quisieran era un posibilidad.

Aún así debía admitir que se había comportado egoístamente al no preguntar por sus verdaderos sentimientos, terminando en aquella horrible situación, con Emma llorando y pensando que estaba rota por dentro, cuando en realidad era él quien estaba roto y cegado por sus propios sentimientos.

— ¡Emma! —exclamó Norman acercándose a ella, para luego abrazarla y estrujarla contra su cuerpo— He estado conteniendo las ganas de felicitarte, de expresar lo pleno que me hace el saber que la mujer que amo me dará un hijo, un hijo fruto de nuestro amor —confesó besándola en los labios— Esto jamás me podría molestar —sus palabras al igual que sus sentimientos eran completamente reales, y Emma lo supo en aquel momento— Pero si debo serte honesto, confieso que me a molestado el saber que hablaste con Ray primero antes que conmigo —declaró apoyando su rostro en el regazo de Emma.

En realidad estaba furioso y más cuando Ray vino y le comentó que ella lo había buscado como consejero ante su situación. Norman se mordió el labio recordando la charla que tuvo aquel día. "¡La embarazaste!", le había gritado Ray.

— Él lo notó antes que yo, y solo me lo dijo —explicó Emma cerrando los ojos y pensando en las palabras de Ray. "Debes considerar que posiblemente haya inconvenientes durante el embarazo, debes pensarlo bien"

Emma sabía que lo hacía por su bien y por eso le había agradecido por su buena intención, aun así ella se había decidido a llevarlo en su vientre hasta el último segundo— Lo siento tanto, en serio Norman, no quería que te sintieras así —se disculpó agarrando las mejillas del hombre al que amaba, mientras lo miraba a los ojos con profundo dolor.

— No puedo hacer nada Emma, tú eres de esta manera tan amable y distraída, alguna vez me matarás por ser así y yo moriré feliz —declaró uniendo sus frentes— Por eso no debes disculparte, yo también debí hablar contigo al notar tus dudas —

Nuevamente unieron sus labios en una tierna muestra de amor, sin embargo el beso que comenzó ingenuo paso luego de algunos segundos a volverse más fogoso y húmedo, y cuando Emma metió su lengua, Norman no pudo evitar gemir ante la placentera sensación.

— Emma... —habló jadeante, separándose un poco de ella— Debes descansar —le indico haciéndose hacia un lado y riendo al verla hacer una rabieta— De ahora en más dímelo todo, no te guardes nada —

— Tú tampoco —reprocho con debida razón Emma.

— Claro —dijo sonriendo.

— ¡Te prometo que serás el primero en enterarte con el próximo! —exclamó con felicidad Emma removiéndose en la cama.

— ¡¿Qué?! —pregunto asombrado Norman.

— Como lo oyes —hablo con entusiasmo Emma— Obviamente debe tener más hermanos para divertirse y no sentirse solo —el uso del plural hizo que Norman se sintiera en total plenitud. Porque mientras él estaba aterrado con ser padre primerizo, Emma al contrario ya pensaba en darle más hermanos a su hijo.

Sin duda sería el niño más afortunado de todos, con una madre tan especial como Emma, no cabían dudas.

— Pero antes de eso creo que deberíamos casarnos —confesó Norman con un ligero sonrojo en las mejillas— De esa forma, estaremos aún más unidos —

— ¡Es verdad! Cumpliría al fin mi sueño de casarme con Norman —declaró sorprendiéndolo— Pero me veré gorda en una vestido como los que aparecen en las revistas de Gilda —protesto cruzándose de brazos.

— Pero siempre te ves bien, Emma —habló Norman sujetando sus manos— Si te hace feliz podemos hacerlo después de que el bebé nazca ¿Qué dices? —le pregunto depositando un beso en su mano.

— ¡Eso suena genial! —exclamó abrazándolo con entusiasmo.

— Pero hablando en serio —dijo Norman antes de apretarle la nariz con fuerza.

— ¡Auch! —

— Nada de juegos brutos ni escondidas ni atrapadas, nada que te pueda herir a ti o al bebé ¿entendido? —cuestionó soltándosela mientras que Emma asentía con vigor, sobándose la nariz— Tampoco comida chatarra, mucho menos dulces —la regaño.

— ¡¿Qué?! —exclamó enojada al igual que lo haría una niña pequeña— ¡Eso no es justo! —protesto.

— Tampoco debes andar desabrigada en las noches o te enfermaras- —dijo levantándose de su lado.

— Eres un mandón —reprocho Emma cruzándose de brazos.

— No importa lo que digas, no lo harás —dijo ayudándola a ponerse en pie.

— Ya lo veremos —susurró sujetándose de su mano.

— Te estaré vigilando —declaró dándole una sonrisa mientras le calzaba los zapatos.

— ¡Entonces te manipulare! —confesó Emma poniéndose firme.

— De eso si me deberé cuidar —comentó Norman riendo, mientras pasaba una mano por la cintura de su mujer.

Emma, al igual que él, cuando se proponían algo nunca fallaban, pero él también tenía sus técnicas y no temía usarlas.

Sería un gran recorrido por hacer, pero si lo caminaban juntos, no habría ningún inconveniente que se les pudiera interponer en su camino.

— ¡Emma! ¡¿Estas bien?! —exclamaron todos los niños al mismo tiempo. Recibiéndolos afuera de la enfermería, puesto que habían visto lo sucedido anteriormente y se habían preocupado.

— ¡¿Estas enferma?! —preguntaron asustados y con miedo de que ella pudiese estar herida, tal vez impulsados por el recuerdo en Goldy Pond.

Gilda, Don, Anna y hasta Ray también se encontraban allí con miedo. Mayormente Ray quien conocía su estado.

— Nada de eso, solo ha sido un golpecito —dijo Emma intentándolos calmar con una dulce sonrisa mientras movía las manos en el aire.

— Por otro lado, tenemos una buena noticia para todos —declaró Norman llamando la atención de todos hasta de Emma quien luego sonrió con más felicidad que antes— ¿Cierto, Emma? —

— ¡Sí, eso es verdad! —dijo irradiando alegría.

— ¡¿Qué es?! ¡¿Qué es?!—exclamaron todos con emoción ante sus palabras.

— Cuéntaselos tú, Emma —dijo Norman pasando una mano por el vientre de ella, para acariciarlo con delicadeza.

— ¡Van a tener un hermanito! —exclanó con entusiasmo apoyando su mano en la de Norman.

— Nuestra familia va a crecer —dijo Norman con calma y una gran sonrisa en sus labios, mientras observaba a su gran familia quienes los miraban con sorpresa.

— ¡Eso suena genial! —grito Don saltando en su lugar— ¡Nuestra familia se agrandara aun más! —

Todos parecían emocionados y al borde de las lagrimas por la noticia. Emma y Norman se sonrieron para luego besarse con amor.

A los lejos Ray se encontraba viendo todo. Estaba feliz por aquellos idiotas y solo esperaba que más felicidad llegara a ellos, realmente después de todo lo que habían pasado se merecían esto, se merecían calma y comodidad para sentirse en casa por fin.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

Nueva actualización!! Me gusto mucho describir las cosas que Emma hacía sin darse verdaderamente cuenta, pero que para Norman no podían pasar desapercibido por que la conocía mejor que nadie. Ayyyyy el amor mismo JAJAJAJAJAJJAJ

Espero que les haya guastado al igual que a mi.

Dejen su comentario y voto. Nos vemos en el siguiente One-Shot!!

Continue Reading

You'll Also Like

287K 19.6K 92
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.
112K 16.9K 59
nacido en una familia llena de talentos aparece un miembro sin mucho que destacar siendo olvidado sin saber que ese niño puede elegir entre salvar o...
377K 34.4K 67
Freen, una CEO de renombre, se ve atrapada en una red de decisiones impuestas por su familia. Obligada a casarse con Rebecca, una joven que llegó a s...
13K 401 5
Peppa era una chica comenzando su adolecencia... Pero un dia como cualquier otro conocio a su mejor amiga,, comenzando su nueva vida lesbica llena de...