Chaeyoung
No habíamos tocado el tema del beso ni nada parecido, estábamos todos tensos, menos Jihyo quién pareció notarlo. Han pasado dos semanas desde mi último encuentro con el grupo de Mina, ya me estaba extrañando sus comportamientos. Siempre me miraba con el ceño fruncido cuando estaba con Momo, Dahyun, Tzuyu o Sana, pero no pasaba lo mismo cuando me encontraba con Jihyo.
Sí, Jihyo se volvió muy apegada a mí, entablamos conversación luego del acontecimiento en el baño de la pizzería y al siguiente día se había disculpado por el comportamiento de su "mejor amiga" Mina, que estuvo muy mal de su parte. Luego me pidió que si podía juntarse conmigo más seguido, porque estaba harta de su actitud y decidió estar de mi lado, todo en un mismo día. El tiempo paso, y me di cuenta de que ella era una buena persona, que de verdad quería acabar con todo esto, como yo.
En gran parte, les cayó bien a todos mis amigos, pero Sana se sentía rara, algo así como nerviosa. La verdad que me interesaba lo que le pasaba, pero no tenía tiempo de preguntarle.
Nos encontrábamos en el patio de la escuela, ya que Tzuyu tenía que practicar ya que era porrista, y como buenas amigas que somos, la acompañamos.
-Entonces... ¿el pollo fue bueno? -pregunto Jihyo, confusa y tonta por alguna razón.
-No, esta sin vergüenza -me señaló -Me había puesto comida de perro en mi plato.
-Se llama ven-gan-za, no es mí culpa de que no entiendas ese concepto, Dahyun -negué con la cabeza mientras hacia una señal de estar rendida -Además, te termino gustando, a mí no me engañas.
-Cierra la boca -asentí en burla, parece que se lo tomó en serio -Gracias.
Mientras Momo intentaba calmar a Sana con su "nerviosismo" y Dahyun hablaba con Jihyo, yo miraba a Tzuyu como hacia sus movimientos de porrista. Pero cuando alguien pasó delante de ella, sacándome de mis pensamientos, me di cuenta de que era, ni más ni menos que Mina. No sé porque la miré ni porque tenía mi atención en ella, pero algo que me pareció demasiado relevante fue su vestimenta. Ella iba exactamente igual que Tzuyu pero en versión Mina, claro.
La falda corta que llevaba le quedaba demasiado bien, resaltando así las piernas largas y las caderas bien curvadas que desearía en este instante poder tocarlas. El top color violeta oscuro con franjas amarillas en los costados hacía ver que sus pechos sean más grandes de lo que eran anteriormente, por lo que pude ver tenía una ligera capa de sudor por el baile. Los movimientos que hacía con sus caderas me dejaron sorprendida, no sabía que bailaba demasiado bien, todo en perfecta sincronía con la música.
Tragué saliva, no sé si me estaba muriendo de calor o era ella la que producía algo en mí, no debería estar pensando en esto. Me encontraba perdidamente embobada con sus movimientos sensuales y al parecer ella pudo notar mi mirada por lo que incremento sus movimientos. Sentí demasiado calor en todo mi cuerpo pero más en mi parte baja.
-¡Chaeyoung por dios! ¡Contéstame! -una cachetada suave paso por mi mejilla, sacándome de la hermosa vista que tenía.
La mirada de Momo de preocupación fue más por otra cosa, que yo no parecía notar hasta que disimuladamente su mirada se dirigió hasta mi parte baja.
Al parecer, estaba teniendo una jodida erección. Por culpa de Mina.
-¿Qué? ¿Qué pasó? -dije tratando de ocultar mi erección, que no sabía que mierda iba a hacer con ella.
-Tu amiguito -dijo susurrándome al oído -Está pendiente de algo... ¿necesitas ayuda?
-Está bien, yo puedo sola.
Dios mío, todo por ver a esa zorra que movía su cuerpo tan sexualmente.
Me levante y me dirigí al baño menos poblado, Momo no me acompaño porque entendió que era algo más que privado para mí. Entré al cubículo y me bajé la falda junto con mi bóxer pudiendo ver a mi amiguito totalmente erecto.
Realmente esto era un puto problema, no era la primera vez que me pasaba en mis 17 años, pero era algo realmente molesto para mí tratar de relajarlo, ya que tenía que hacer todo el jodido "proceso" que no me gustaría contar.
Respiré hondo y comencé a masturbarlo, primero paso lento para ir cambiando cada vez más rápido. Me volví a imaginar una Mina moviendo su cuerpo tan sensual, para después ver a la misma tocando a mi amiguito, ahora ella quien lo masturbaba.
Empecé a largar puros gemidos de mi boca, insultando a la maldita que provocó esta jodida erección. Mi mente estaba en total concordia con mis pensamientos sexuales sobre Mina, el deseo que provoco mi mente por tocar su cuerpo se hizo más grande con el paso de mis pensamientos pervertidos.
-Aah~... M-Mina~...
No estaba a mucho de correrme, entre tantos pensamientos lo haría en menos de un minuto.
No pasaron más de 30 segundos sin haber sentido que me corría, empecé a gemir con más fuerza hasta que todo termino con un alto jadeo diciendo: "Mina".
Tomé mi pañuelo que siempre tenía a mano y limpie todo el semen que había caído en mi amiguito. Me subí el bóxer y la falda, salí del cubículo y me las manos junto con el pañuelo, me asegure de no dejar ningún rastro que pueda involucrarme en un lío. Volteé y para mi suerte no deje nada. Volví al patio, todos, menos Momo, me miraron con cara de pocos amigos.
-¿Qué? No me miren así -me senté al lado de Jihyo y cruce mis brazos -Tuve mis problemas -miré a Tzuyu quien seguía bailando demasiado bien.
-Chae -susurró Jihyo a mi oído -Yo sé que fue Mina la que te provocó eso, no soy tonta -rió.
¿Cómo lo supo? ¿Tan obvia soy?
No tendría que haber venido, ahora no me puedo sacar a Mina de mi mente. Es mala, lo sé, me odio y yo a ella, pero juro que no puedo sacármela desde que bailo así, prácticamente hace menos de una hora.
-¿Yo? ¿Qué dices? No fue por eso... -arqueo una ceja, no creía nada de lo que decía -Tal vez un poco -arqueó la otra, y en efecto, no creía una mierda de lo que decía -Bueno, sí, fue ella en gran parte.
-¿En serio? -arqueó más sus cejas, parece que en cualquier momento se quedaba sin cejas.
-Ahg -bufé -Fue todo por ella -dije susurrando rendida, no quería que los otros escuchasen, pues estábamos un poquito alejados para no interrumpir sus charlas -¿Tanto se nota? -mi voz salió con nervios.
-Prácticamente babeabas por ella, y te estaba provocando, añadiendo que tuviste un pequeñín problema con tu amiguito que te hizo ausentarte por media hora.
-Jihyo, es que mírala, mira cómo se mueve la muy perra -la señale, y no me esperaba que me estuviese observando con el ceño fruncido, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo haciendo que me queje en mi lugar.
-Te está mirando, y no deja de observarte desde que te fuiste -la señalo sin problema -No sé si planea molestarte o es por otra cosa -sonrió para sí, bajando la cabeza avergonzado -Lo siento... -volvió la mirada hacia mí pero yo no le presté atención -¿Chaeyoung?
Yo seguía mirándola mientras ella me miraba. No sé qué sentí en ese instante, porque en vez de fulminarme con la mirada, como siempre, me miró como el otro día, con esa mirada que decía otra cosa que odio y repugnancia.
No estábamos tan lejos una de la otra, ya me estaba extrañando mucho que no se dirija hacia mí y empiece una pelea o me insultase como siempre.
Al parecer, todos lo notaron, incluso su novio que estaba a unos pocos metros de ella. Su cara lo fue todo, expresaba celos y furia, fue hacia Mina y la besó, le susurro un montón de cosas que claramente no escuché. Corrí mi mirada hacia Jihyo, quien susurraba cosas para sí misma.
-Es increíble... -me miró para luego sacar una sonrisa y mirar hacia otro lado.
Momo, Dahyun y Sana se acercaron a mí para mirarme extrañados, por lo que acaba de suceder.
-¿C-Cómo hiciste eso? -Sana frunció el ceño totalmente sorprendida
-¿Hacer qué?
-Eso, que la arpía no te haya dicho nada. Chaeyoung, que le hiciste, eres asombrosa -dijo Dahyun
Momo no dijo nada, miraba a Mina y viceversa, ambas con el ceño fruncido. Si las miradas mataran, ellas hubieran muerto entre sí.
-No sé, yo sólo me quedé quieta y ahí salió la cosa.
-¿Viste la cara de el idiota ese? Tenía que haberle sacado una foto -rió entre dientes -Tiene que pasar todos los días.
-Sana, silencio. No vez que tensas a Chaeyoung, idiota -Dahyun le dio un golpe en la cabeza, como señal de que cierre la boca.
-Auch -sobó su cabeza -Dolió -le sacó la lengua.
-Te lo mereces, estúpida -hizo el mismo gesto que la antes mencionada.
Jihyo seguía negando con la cabeza, como si supiese que estaba pasando. Le iba a preguntar, pero Tzuyu había llegado, toda cubierta de sudor.
-Que hongo, ¿Qué pasa? ¿Por qué tanta tensión? -nos observó a cada uno y miro con confusión a Momo -Que onda, Momo está más rara de lo que ya es.
-Es que Momo está matando a la zorra con la mirada o eso creo -argumentó Jihyo.
-Pues tienes que ver su cara, estuvo mirando todo el día a Chaeyoung, sus amigas preguntaron que le pasaba pero ella no les contesto, y yo me acerqué a averiguar que estaba pasando, hasta que vi lo que acabé de ver hace unos minutos.
-Todos lo notamos, Tzuyu -le replico la castaña.
-Oh vaya, pensé que fui la única.
-Que boba eres -me levante y le di un golpe en la cabeza, me encantaba provocarla -¿Te caíste de la cuna cuando eras bebé?
-Eres una hija de p... -no le di tiempo a terminar la frase porque empecé a correr, seguida de ella.
-¡A que no me atrapas!
-¡Ven para acá Chaeyoung!
-¡Chaeyoung, cuidado! -oí su voz, la voz de esa persona que provoco muchísimas cosas en mí, la que hace unos minutos estaba contemplando con la mirada.
No noté que me había llevado a alguien por delante, lo siento tanto persona que no conozco. Lo que más me sorprendió es que esa persona, la misma que hacia mi vida una mierda, me llamo por mi nombre. Ni fenómeno, ni rarita, ni nada, "Chaeyoung". Me había vuelto loca, lo sé, pero nunca me puso tan tonta escuchar que alguien me llamara.
-¡Fíjate por donde vas, fenómeno! -grito una voz que despreciaba tanto, que cada vez al oírla me provocaba irritación.
-Lo siento B-Bambam -me levante rápidamente, fui ayudada por Tzuyu, quien me alejo un poco de él al ver su furia.
-No me llames así, ni pronuncies mi nombre, me repugnas fenómeno -dijo acusándome y acercándose a mí.
No sé si la furia me consumió o qué, pero deseaba moler a este tipo a golpes hasta matarlo.
-Fenómeno suena más para ti, porque alguna vez alguien me dijo -miré a Mina, quien me miraba ¿preocupada? Y eso me sorprendió demasiado porque nunca tenía esa cara ante mi presencia -"Fenómenos van juntos de la mano" -sonreí cínica, lo deje con la boca abierta al igual que todo su grupo con una perfecta "o", miré a Tzuyu quien me veía sorprendida con una sonrisa divertida, pero Mina no, ella me miraba con una sonrisa plasmada en su cara. Era la primera vez que la veía sonreír.
-Oh, te retractaras de haberme dicho eso -iba a golpearme pero Mina lo detuvo rápidamente.
-Bambam detente, no vale la pena amor -me miró -Vámonos, ya terminamos.
Asintió y se fueron, mientras él pateaba las piedras.
Narrador
Nadie había dicho nada en el camino a sus respectivas casas, sorprendidos ante el acto de la castaña menor. Todos miraban a Chaeyoung, sonriendo y felices, pero no más que esta misma, porque vieron que en ella había un gran avance desde el acontecimiento en la fiesta.
La castaña ya no sentía más cobardía, era hora de ponerle un verdadero fin a todas estas cosas que le sucedían en su vida, desde las burlas por su amigo, hasta las bromas que el grupo de Mina provocaba.
Por otro lado, la otra chica estaba confundida.
Se vio atraída por la mirada de Chaeyoung, quien rondaba en su mente las últimas semanas desde aquel beso. Sintió miedo, porque nunca sintió algo como lo que le provocaba aquella pequeñita mujer, quién contemplaba en silencio, por al menos, estás dos ultimas semanas.
Su "novio" Bambam, empezó a notar estos cambios en "su" chica, y decimos "su" ya que aún no es de él, no había nada entre ellos y eso a la castaña le agradaba bastante. Jugando al juego del novio y la novia era bastante divertido, siendo ciega ante tales sentimientos que sentía por Chaeyoung.
Pero lo que ella no sabía era que esa pequeña interacción se iba a convertir en un gran enamoramiento y aquello era la razón por la que Jihyo sonreía, porque ella sabía perfectamente lo que le iba a amparar a tal pareja, porque ella sabía que algo estaba apareciendo en la chica.
Porque ella sabía que Mina estaba enamorada.