Narra Elsa:
-ELSA, ELSA!!! DESPIERTA!!!- grito alguien en mi oido que me desperto de un susto. Era mi hermana, Anna.
-Anna! Estas bien?- no es normal que me levante tan temprano.
-Mira Elsa!! Esta nevando!!- dijo ella emocionada, amaba la nieve casi tanto como mis poderes. Me rei.
-Hay Anna, casi me das un infarto!! Bueno vamos a desayunar y de ahi jugamos afuera, si?
-Sii!!!- me volvi a reir, tal vez Anna era una mujer ahora, pero aun tenia la mente de una niña. Se fue corriendo y entonces empeze a alistarme, me hice una trenza y caia a un lado y con mi magia forme un vestido azul, no necesitaba mas que uno para cambiar mi atuendo.
Luego de desayunar, salimos al jardin trasero, que estaba cubierto de una delgada capa de nieve. Pero eso se podia arreglar, hice una bola de magia.
-Lista?- le pregunte a Anna
-Ya!!!- dijo ella y lanze la bola hacia el cielo y exploto haciendo que nevara. Anna empezo a saltar de alegria y empezamos a caminar, luego hicimos un muñeco de nieve, no se parecia a Olaf, pero fue divertido, luego vi unas flores cubierta de escarcha... Si hay una cosa que no puedo hacer con mis poderes, es la escarcha. Me quede admirandolas hasta que siento frio en mi espalda. Me doy vuelta, y Anna no esta.
-Anna? donde estas?- dije y senti otra vez frio, pero en mi cuello, seguido de la risa de Anna. Que astuta...
-Con que quieres jugar?- dije y cuando vi a Anna detras de un arbol, forme una bola de nieve con mi magia. Luego la segui y cuando la divise, le lanze la bola. Ella cayo en la nieve. Jugamos por un rato hasta que no dimos mas, empatamos. No importa que tan mayores lleguemos a ser, siempre habran guerras de nieve.