_____ P.O.V
Camila es una estúpida. ¿Como se atreve a pasarse así conmigo? No puedo creer que haya hecho eso. No. Lo peor fue que yo no hice nada para impedirlo ¿Cual es mi maldito problema? Este trabajo va a hacer que me vuelva loca. Tal vez debí haber investigado un poco más, antes de haber aceptado cuidar a esta familia.
-¿_____? _____! Te estoy hablando!-escuchaba una voz alzando la voz junto con unos chasquidos acompañandola. Parpadee un par de veces para darme cuenta que era mi novia la que me estaba hablando.
-Disculpame, ¿que era lo que decías babe?-dije viendola avergonzada por no haberla escuchado
-Te decía que estas muy rara. Desde que viniste, has estado muy ausente. ¿Ha pasado algo?-pregunto extrañada viéndome a los ojos intentando buscar una respuesta, que obviamente no encontraría, y menos cuando intento evitar su mirada
-No, no pasa nada amor. Es solo que he estado pensando en algunas cosas nada más. No es nada por lo que debas de preocuparte, ¿si?-dije dándole una sonrisa para evitar que siguiera preguntado y darle un poco más de tranquilidad. Ella me vio con un poco de duda, pero al final me vio de una forma ya más tranquila devolviendome la sonrisa
-Esta bien, te creo-dijo tomando un poco de la comida que habíamos pedido
-Y dime amor, ¿que tal va la grabación de la serie? -pregunte ya cambiando de tema. Ella me sonrió con una luz en sus ojos al escuchar mi pregunta. Enserio ella ama hablar de su carrera, ya que es un sueño que siempre quizo de niña.
-Pues ha sido muy genial! En el set....-no pudo terminar su oración, ya que su teléfono comenzo a vibrar-Disculpame un momento amor, ya te respondo tu pregunta-dijo tomando su teléfono en mano, para después contestarlo-Erick! Dime, ¿que pasa?-pregunto alegre a su manager. De repente su mirada de alegría, se convirtió en una de fastidio-¿Que? ¿Estas bromeando? Se supone que hoy sería mi día libre Erick, ¡no puedes hacerme eso!-dijo ya ahora molesta al tipo del teléfono-¿No hay manera de que pueda ser mañana? Ahora mismo estoy cenando con mi novia....Entiendo, ahora mismo voy entonces...Hasta luego-y sin más colgó la llamada medio apretando su teléfono con frustración
-¿Pasa algo mi amor?-pregunte preocupada al ver su reacción
-Es mi mánager. Quiere que vaya ahora mismo a grabar unas escenas, porque mañana no tendré tiempo - dijo molesta a lo que yo la mire con tristeza, pero comprendía totalmente la situación
-¿Entonces te tendrás que ir?-pregunte poniendo cara tristeza lo que ella automáticamente tomó mi rostro mirándome con ternura y con tristeza
-Si bebé, pero prometo que te lo voy a compensar, ¿esta bien?-yo solo asentí aún con mi mirada de cachorro triste-Aww porfavor no pongas esas cara-me dio un beso haciendo que volviera a sonreír-¡Esa es la sonrisa que quiero ver siempre!-dijo besando mi nariz. Fue tomando sus cosas y luego se acercó a mi-Prometo que voy a compensartelo mi amor. Nos vemos en casa babe-dijo dándome un último beso para después irse
Suspire al ver como ella se iba alejando de mi campo de visión. Enserio que la noche ya no sería igual sin ella. Pensaba mientras apoyaba mi mentón en la palma de mi mano, aún viendo por donde anteriormente se había ido Dove.
-¡_____!-escuche atrás mío y pude ver a los niños venir hacia mí
-Hey, niños! Que tal están los juegos? -pregunte dándoles una cálida sonrisa
-Pues esta muy buenos, pero mamá dice que su reunión término y que ya nos vamos - dijo haciendo un puchero
-Oww pero, ¿porque esa cara princesa?-le pregunte a la pequeña niña, la cual me abrazo de repente
-Tendré que esperar hasta mañana para volver a verte-dijo y en eso se acercó Andrew también dándome un abrazo.
-Si, y a nosotros nos gusta estar contigo _____-dijo y yo sonreí con ternura al ver que no querían irse solo por el simple hecho de que no me podrán ver hasta el día siguiente
-Créanme que me pone triste también separarme de ustedes-les correspondi el abrazo dándoles un beso en la cabeza a ambos-Quisiera poderme quedar más tiempo.
-Entonces acompañanos a hacer una visita a mi madre-dijo la reconocible voz de mi jefa a mis espaldas
-¿Que? ¿Eso no es solo asuntos familiares?-pregunte un tanto extrañada
-Lo es, pero necesito a alguien que me vigile a los niños. Además, mi madre te conoce. Ella te amaba un montón cuando te conoció-dijo y yo solo sonreí recordando cuando conocí a Sinú
-¿Esta bien que vaya? ¿No habrá problemas con su madre? -pregunte un tanto insegura. Ella asintió con una sonrisa
-Mi madre ya sabe que vendrás con nosotros, así que no puedes decirnos que no. ¿Cierto niños? -dijo buscando ayuda de los pequeños
-Si _____, ven con nosotros. ¡Será muy divertido!-dinero poniendo sus manos en modo de suplica. Yo solo suspire rendida y les sonreí
-Supongo que no tengo otra opción. De acuerdo, iré con ustedes-los niños rápidamente saltaron de la emoción celebrando
-¡Genial! Vamos en mi auto entonces-dijo Camila haciendo camino a su auto.
Junto con los niños, quienes tomaban de mi cada, fuimos detrás de ella viendo una evidente emoción a cada paso que ella dada. Reí por lo bajo automáticamente. Ver a Camila de esa manera, me recordaba a la chica tierna y torpe que había conocido años atrás. En mi interior, sentía una leve emoción al ver que ella, a pesar de los tiempos, no ha cambiado del todo esa faceta de chica de 18 años. Supongo que la observe demasiado tiempo, porque en ese mismo instante, ella volteo a verme. Al conectar su mirada con la mía, me sonrió con su lengua entre los dientes. Definitivamente esa Camila seguía ahí.
-Muy bien, todos a bordo de mi súper auto-dijo a la vez que tocaba el botón para que el auto de abriera
-Lindo auto señora Cartagena-ella volteo a verme con su ceño fruncido
-Ya te dije que no me llames así que tengo nombre, y es Camila-dijo haciendo puchero
-Y yo ya le dije que pienso de ello-dije cerrando mis ojos con fastidio al volver a pelear por la misma tontería
-Como sea. Suban al auto, que tenemos un camino que recorrer-dijo Camila para luego montarse en el carro
Junto con los niños, nos montamos igual. En el camino íbamos tranquilos escuchando música, hasta que se escucho una canción que los niños rápidamente reconocieron.
-¡Esa es la canción nueva de mi mami!-grito la pequeña niña
-Mami, ¡cantala para nosotros!-dijo el niño con una sonrisa en su rostro
-Ay niños, es que que pena con _____ aquí-dijo con un pequeño sonrojo que no se me paso por alto. Inconscientemente, esboze una sonrisa.
-Por mi no hay ningun problema con que la cante señora Cartagena-dije reprimiendo una risa
-¿Ah no? Ow...pues, esta bien. Lo haré-dijo un tanto apenada y viéndome con el ceño fruncido, a lo que yo solo le sonreí inocente
-I love it when you call me señorita... -empezó a cantar mientras los niños aplaudían
En toda la canción, ella no paraba de verme con una mirada seductiva denotando un lado, que jamás había conocida antes de Camila. Su mirada no se despegaba de la mía. Tanto así, que tuve que apartarla un par de veces, ya que esa mirada, llegaba a intimidarme. Ella me miraba con burla cada vez que lo hacía, haciéndome sentir un tanto apenada.
-Ooh, I should be running
Ooh, you keep me coming for you...-se terminó la canción y los niños empezaron a aplaudir
-¡Mi mami es la mejor!-dijeron ambos niños
-Tienes suerte de que ellos no entiendan el significado de algunas palabras Camila-dije a lo que ella me miro divertida. Los niños al escucharme decir eso, me voltearon a ver curiosos
-Es cierto, no entendí a que se refería la última parte de lo que canta mi mami. ¿Que quiere decir _____?-pregunto el pequeño rubio haciéndome abrir los ojos con suma sorpresa
-Si, ¿que significa?-le continuo la niña
-¡Miren llegamos!-grito de repente Camila, a lo que los niños gritaron de emoción bajandose del auto, corrieron a la puerta de la casa
-Oww y yo que tenía tantas ganas de explicarles-dije burlona, haciendo un puchero, a lo que Camila me volteo a ver
-Ni se te ocurra _____-dijo a lo que yo me reí sin poderlo evitar
-Tranquila, era broma. Solo quería saber que me decías-dije entre risas. Ella solo me sonreía mientras me veía reír.
-Había olvidado lo que me encantaba escucharte reír, y que sea por mi tu risa-dijo a lo que automáticamente cese mi risa
-Amm...sigamos. Los niños están solos en la entrada de la puerta-evite responder, mientras salía del auto rápidamente yendo junto con los niños, pero con una extraña sensacion en mi. Es como si algo dentro de mi, se hubiera encendido de repente.
-¡Abuelita! ¡ya estamos aqui! Soy Andrew-gritaba mientras tocaba la puerta
Rápidamente, abrieron la puerta. Pude notar a Sinu igual que antes, solo con la clara diferencia de tener unas cuantas canas debido a la edad.
-¡Niños! Que gusto verlos-envolvio en un abrazo a ambos pequeños
-¿Esta la tía Sofía contigo?-pregunto Hannah emocionada
-Claro que si, esta en su cuarto. Vayan a verla si gustan-al decir eso, ambos niños salieron corriendo en busca de la hermanita de Camila
-Hola mami, ¿que tal?-dijo Camila acercándose a ella para darle un abrazo
-Camilita, mi amor. Que alegría verte con los niños de nuevo por aqui- dijo envolviendola en un gran abrazo
-También me da gusto verte Ma- se apartó del abrazo-Quiero presentarte a alguien mamá-me volteo a ver, a lo que la madre siguió su mirada, que por fin cayó en mi
-¿Pero a quien tenemos aquí? - dijo sonriendome cálidamente
-Mamá, ella es _____ Collins. Es la niñera de mis hijos, y ex niñera mía cuando estaba en Fifth Harmony-dijo sonriendome dulce
-¿No me digas que es la misma _____ de la que te la pasabas hablando tanto?-pregunto haciéndome sonreír apenada por su comentario
-¡Mama! No tenías que decir eso-la repremendio Camila
-Ay, ya. Mejor dime si es la misma o no- dijo a lo que Camila solo se limitó a asentir-¡No puede ser! Que gusto me da conocerte _____. Ven pasa, que esta es tu casa-dijo haciendome pasar.
La señora Cabello, me hizo sentarme en uno de los sofás de la casa para luego ella sentarse enfrente mío.
-Y cuentame algo de tí _____. Me gustaría conocerte y todo-dijo con sumo entusiasmo
-Pues bueno, como ya le menciono Camila, mi nombre es _____. Soy de Londres, Inglaterra, y soy niñera-dijo a lo que su madre me sonrió
-Con que británica. Ustedes tienen un tan encantador acento-dijo sonriendome amablemente
-¿Eso cree? Vaya, me siento completamente halagada. Nadie me lo había dicho antes -voltee a Camila reprochandole con la mirada
-¡Eso no es cierto! -replicó con cierto enfado en su voz
-¿Ah no? ¿Y quien me lo ha dicho aparte de Sinu?-dije a lo que ella trago saliva
-Tu sabes que siempre he creído que tu acento es muy lindo-dijo volteando a ver a otro lado con sus mejillas sonrojadas.
-No recuerdo haberte escuchado decirme eso sinceramente-dije haciendome la tonta, ya que obviamente si lo recordaba.
-¡Ay! Pues te lo digo ahora. Tienes un acento lindo-dijo roja a más no poder. Ya al haber conseguido lo que quería, sonreí
-Pues muchas gracias. En verdad si lo recordaba, pero quería que lo dijeras-confese a lo que ella me abrió los ojos como platos
-¡Eres una tonta! Me hiciste pasar pena enfrente de mi madre-dijo golpeando mi hombro, mientras yo me reía.
-Auch...lo siento, tenía que hacerlo-decia entre risas
-Callate. No te perdono para nada. Maldita seas Collins-dijo sin parar de golpearme
Ella continuaba golpeandome mientras yo reía, hasta que ambas paramos de hacer lo que hacíamos al escuchar una risa enfrente nuestro. Vimos que se trataba de Sinu, quien nos veía divertida.
-¿Que es tan gracioso Ma?-pregunto Camila
-Ustedes. Me parecen tan tiernas ambas-continuo riendo-¿No quieren algo de comer? Junto con Alejandro estábamos por comer uno chilaquiles que el preparó-nos ofreció
-¿No es molestia para ustedes? Porque no quisiera molestarlos a usted y su esposo-dijo a lo que ella sonrió negando.
-Esta completamente bien _____. Nos encantaría que nos acompañarán y de paso conoces a Alejandro-dijo a lo que yo asenti
-Entonces, sería un gusto acompañarlos a cenar-dijo siguiendo a la señora Cabello al comedor
-Alejandro, Camila trajo a una amiguita suya-dijo a lo que el señor me quedo viendo.
-¿Ah si? Entiendo. Mucho gusto ehh...
-_____ Collins señor Cabello-dije extendiéndole mi mano cortésmente
-Nada de formalidades conmigo señorita. A mi me puedes llamar Alejandro-dijo tomando mi mano gustoso, estrechando la de la misma forma
-Ni lo intentes Pa. Ella no deja las formalidades con nadie-dijo Camila a lo que yo sonreí pícara
-El gusto es mío Alejandro. Gracias por dejarme pasar con ustedes e invitarme a cenar-dije amablemente, viendo de reojo a Camila quien tenía la boca abierta de la impresión
-Vaya, una niña muy educada. Te criaron muy bien a ti-dijo Alejandro muy contento
-¡Oye! ¿Porque a el si le dices por su nombre y a mi no? -pregunto Camila con un puchero, que debo de admitir, fue muy tierno de ver
-Porque Alejandro no es mi jefe, y tu en cambio si. Yo con mis jefes tengo mucha formalidad-dije con una sonrisa inocente
-_____ eres una mentirosa-dijo poniendo cara de enojada
-Karla ya deja de molestar a la niña, y siéntate a comer. Por Dios- dijo en español a lo que Camila la vio molesta
-¡Mamá! No me digas así. Sabes que no me gusta que me llamen asi-dijo Camila a lo que su mamá la miro reprendiendola
-No me hagas que te pegue con la chancleta en la boca, enfrente de la que te gusta por hablarme así-dijo amenazante a lo que yo intentaba no reírme
-¡Mama! No digas eso enfrente de _____-dijo muy apenada por lo que le acaba de decir su mamá. Yo sin querer, no pude evitar sonrojarme igual.
-Ay, ella ni siquiera nos está entendiendo mija. Puedo decir hasta cuantas veces me has dicho que la amas cuando me hablas por teléfono -dijo despreocupada
-¡El pequeño detalle es que si nos entiende! ¡Ella habla español también!-dijo a lo que la señora me miro apenada
-¿De verdad puedes entendernos?-me pregunto un tanto dudosa, a lo que yo asenti
-Cada una de sus palabras las comprendo totalmente mi señora-dije en español a lo que ella se tapo la boca asombrada
-Este yo...-no sabía que decir a lo que yo solo me límite a sonreír-¿Les sirvo ya? Esta bien!-dijo entrando a la cocina rápidamente
-_____-voltee a ver a Camila, quien estaba con la cabeza gacha-No le hagas caso a lo que mi mamá dijo-dijo a lo que yo asenti
-Esta bien, no es problema señora Cartagena-dije simplemente, ya que igual me sentía apenada por la confesión por parte de su madre
Me lo había imaginado. Camila me lo dio a entender, pero escucharlo de alguien, y de la boca de su madre, era otro nivel. Mi cabeza estaba vuelta loca. No paraba de repetirse una y otra ves sus palabra. Cada vez que las pensaba, era un pequeño vuelco que daba mi corazón. Trate de no prestarle mucha atención a lo ocurrido, y solo cenar. Esta va a ser una noche muy larga.