Los personajes de Boku no Hero Academia no me pertenecen, solo el amor que les tengo.
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Desde hace unos cuantas semanas había comenzado a escuchar el ruido de la puerta de Kirishima abrirse a la noche, horario donde antes estaba acostumbrado a escucharlo golpear su bolsa de boxeo. Un par de minutos después, lo podía ver correr en la pista de atletismo que se encontraba frente a sus habitaciones. Esa hora era el único que lo usaba, y, sabiendo que estaría allí; se decidió a acompañarlo.
Salió de los dormitorios con la ropa que traía puesta, con solo salir de la puerta la vista de Kirishima se concentro en él. Deteniendo su paso y levantando el brazo para mostrarle su ubicación en medio de la oscuridad.
—¿Te unes? —preguntó cuando ya Bakugou estaba corriendo en su encuentro. Este solo hizo que sus pasos lo superaran, para que Kirishima sonriera y le jugara una carrera.
Comenzaron a correr, sin saber que decir. Tras dar varias vueltas a las palabras que podría soltar, entre comenzar una conversación casual o ser sincero con sus sentimientos; el silencio, y el miedo, comenzó a invadirle.
Solo corrieron, con las miradas dirigidas hacia el otro cada vez concentrándose más en la pista. Hasta sentir que cada uno estaba solo.
Final.