Ambas manos estaban sudorosas, al parecer mientras más las movía más me sudaban. Joder, no podía estar tranquilo, estaba a unas horas de que Jimin se valla por un mes y yo sea padre por primera vez.
Joder siento que voy a dar a luz.
Jimin.
—No Jimin, no te vayas—Dijo sentándose en el suelo abrazando mi pierna fuertemente.
—Rode los ojos.—No seas bobo Jungkook, levántate.
—Es que Jimin, yo soy muy torpe—Hizo un puchero.—Yo los puedo cuidar pero ¿Quién me cuida a mi?
—Ay...—Suspiré y le sonreí.—Estarás bien, mis hijos no son monstruos, bueno Hye un poquito—Admití.
Tampoco podía decir que ambos eran ángeles que no movían ni un dedo, sobre todo mi hija.
Minhye era un poco más extrovertida que Minjae, no me cansaré de decir que son totalmente distintos por más que fueran gemelos. Minhye era de estar al aire libre y corretear, Minjae era de sentarse y ver sus caricaturas. Minjae odiaba el desorden y Minhye odiaba que no le hicieran caso. Si hacías algo que a ellos no les gustará, prepárate para que ambos se junten y te den tu merecido.
Pero de eso Jungkook se dará cuenta solito.
—Jimin puedo incendiar la casa o tal vez inundarla ¿Si todos mueren por mi culpa? No me iré con Diosito.
Reí y negué mirándolo.
—¿Cuál es la verdadera razón Jungkook?—Pregunté.
El abrió sus ojos sorprendido y jugó con sus dedos mirando hacia el suelo.
—Te voy a extrañar.
Baje mi mirada para verlo y sonrió avergonzado mientras llevaba una mano a su nuca.
Sonreí y le tendí una mano para que se pusiera de pie.
—Van a ser cuatro semanas Kook, agradezco enormemente que te ofrecieras para cuidarlos sobre todo aún no sabiendo nada de niños. Esta presentación es muy importante y estaba un poco molesto por no poder ir, sobre todo por Jeongin. Pero por ti lo haré y te lo agradezco—Dije suavemente llevando una mano a su mejilla acariciandola haciendo que se apoye en el toque.—Confió en ti Jungkook.
Suspiro y asintió.
—Lo sé y los cuidaré con mi vida—Dijo tomando mi cadera y acariciandola por dentro de mi camiseta.
—Te quiero—Murmuré para esconder mi rostro en la curvatura de su cuello.
—Rió suavemente.—Yo también te quiero Minnie—Besó mi cabello.
—Y yo también te voy a extrañar Kook.
• • •
Todo estaba bien, habíamos ido a almorzar a la cafetería de Jin con mis hijos, todo bien. Vi como mis dos pequeños se llevaban bien con Jungkook y sorprendentemente MinHye era la que más se pegaba a él. Pero estaba bien, MinJae y Jungkook jugaban a las fuercitas que el competitivo de Jungkook ni siquiera pudo dejarle ganar.
—No te pases—Rode los ojos.
—No me gusta perder—Dijo metiéndose una papa a la boca.
—Pero es un bebé.
MinJae frunció sus labios.
—No soy un bebé—Me dijo.
Reí levemente.
—Lo eres, eres el bebé de papi—Dejé un sonoro beso en su mejilla.
—¡Appa!—Chilló riéndose.
—¿Y yo?—Dijo MinHye.—No me quieles.
—Ambos son los bebés de papi—Dije acariciando su cabello.
—¿Junko tamen?—Preguntó MinHye.
Iba a responder pero Jungkook rió.
—Yo soy el papi pequeña.
Después de darle un patada por debajo de la mesa seguimos comiendo, pagamos y nos fuimos.
Mi maleta ya estaba hecha y en una hora tenía que ir saliendo para el aeropuerto. Pero tal vez me olvide de un pequeño detalle.
—¿Cómo que no les has dicho que te iras de viaje? ¡Son tus hijos!
Le di un golpe en el hombro.
—Cállate que... que tú tampoco lo hiciste.
Me miró con una ceja arqueada y suspiró.
—Tenemos que decirle ahora, ya tienes que ir para allá Minnie.
Terminé de cerrar la maleta encima de mi cama y asentí para seguirlo a la habitación de ellos. Ambos estaban viendo caricaturas uno encima del otro.
Sonreí.
—Bebés—Dije llamando su atención.—Tengo que decirles algo.
Ambos voltearon y se acercaron sentándose en sus puffs de colores señalando los dos de al frente. Me senté en el azul y mire a Jungkook para que hiciera lo mismo.
—Yo quiero el azul—Dijo.
Rode los ojos levantándome y sentándome en el rojo.
Jungkook sonrió se sentó a mi lado.
—Men, ¿Qué quelias decilnos appi y Junko?—Preguntó MinJae.
—Bueno, saben que appi trabaja en su academia de baile—Ambos asintieron.—Y hay muchos concursos en los cuáles participa, esta vez ganamos un pase a una competencia muy importante, en Nueva York.
—¡Ilemos a Nueva York!—Dijo MinHye alegre.
—No princesa, tu papi ira—Dijo sonriendo.—Yo los cuidaré por el tiempo en que él no esté.
—¿Selas nuestlo niñelo?—Preguntó desilusionada.
Jungkook me miró haciendo una mueca.
—Pensé que les agradaba Jungkook—Dije tomando la mano de Jungkook dándole un apretón.
—Si pelo... no como nuestlo niñelo—Respondió MinJae jugando con sus deditos.—Si no como nuestlo appa.
Ambos estaban cabizbajos y Jungkook, Jungkook iba a desmayarse ahí mismo.
—Es bueno que me quieran de esa forma, yo también quiero que sean mis hijos porque quiero a su papi, por eso les cuidaré porque quiero aprender cada cosa y detalle de ustedes.
Se levantó y se puso de cunclillas en medio de ambos que alzaron sus cabecitas mirándolo con atención.
—Es una gran oportunidad para su papi ir allí, estarán bien conmigo ¿Verdad?—Ambos asintieron y lo abrazaron.
—Extlañalemos a appi pelo quelemos que cumpla sus sueños—Dijo MinJae.
Sonreí y me acerqué a ellos.
—Mis sueños ya están cumplidos—Sonreí y los abrace.
• • •
—¡Jimin!—Gritó Jeongin dejando su maleta en medio del aeropuerto para correr y lanzarse a mis brazos.
—Jeongin—Sonreí correspondiéndole a su abrazo.
—Si vino—Sonrió mostrándome sus brackets transparentes.
—Y aún mejor, iré con ustedes.
Me rodeó con los brazos emocionado. Me giré para ver mis maletas y me encontré a tres pares de brazos cruzados mirándome con el ceño fruncido.
Reí internamente y miré a Jeongin.
—Ven, quiero presentarte a unas personas—Dije tomando su maleta y haciendo que me siguiera.—Jeongin ellos son MinHye y MinJae, mis hijos y él es Jungkook.
—Su novio—Aclaró.
—Rodé los ojos.—Mi novio, él es Jeongin uno de mis estudiantes, el mejor de todos.
—No es cierto Hyung—Dijo con las mejillas rojas.—Un gusto conocerlos—Dijo haciendo una reverencia.
—¡Jeongin ven!—Gritó Hani.
—Con permiso—Hizo otra reverencia y corrió para ir con el grupo.
—Bien, creo que ya debo irme—Dije viendo cómo iban caminado para la zona de embarques.
Me puse de cunclillas abriendo mis brazos.
—Te extlañalemos appi—Dijeron al unísono para correr a mis brazos con lágrimas en los ojos.
—No, no lloren—Dije pasando un pulgar por sus rostros.—Yo tambien los voy a extrañar mucho, pórtense bien con Jungkook ¿Bien?—Ambos asintieron.—Y me avisan si se acerca a algún chico—Murmuré para ellos.
—¡Si appi!
Me levanté y me envolvió en sus brazos.
—Cuídate enano—Dijo besando mi mejilla.—No quiero ir a golpear neoyorquinos.
—Reí.—Cuídales a ellos y cuídate tú—Susurré pegando mi nariz a la de él.
—Lo haré—Dijo para acortar la distancia y juntar nuestros labios.
—¡Jimin!
Me giré y vi a mi grupo de estudiantes esperando.
Sonreí.
—Es hora de irme—Tome mis maletas en ambas manos y les sonreí.—Los amo.
—Nosotros también—Contestaron tres voces.
Me giré y comencé a caminar.
Joder, esta era la primera vez lejos de mis hijos y los iba a extrañar demasiado. Y a cierto castaño.
Antes de entrar me giré y los vi.
Jungkook los tenía a cada uno en un brazo y me miro sonriendo. Minjae quito la mano de su boca y agitó su mano junto con Jungkook y MinHye.
Sonreí para por fin entrar.
Estaban en buenas manos.
Ya son 115k voy a morir, son asombrosos.
Uhm, Jungkook ahora esta a cargo.
Espero les haya gustado.
Gukk.