La cicatriz de aquella noche donde pudo conocer a aquel peculiar grupo, que ahora eran sus amigos y familia; pero sobre todo a cierta persona de cabellos azules que le provocaba cierta aceleración en su solitario corazón.
Al fin tenía una cicatriz que la llevaba a un grato recuerdo de felicidad, no solo de dolor y sufrimiento, donde sin querer y extrañas coincidencia del destino, pudo conocer al amor de su vida de nombre Shin-ah.
Narradora
Ryuumiko sin tardarse más limpio su cuerpo, para luego adentrarse a las relajantes aguas, se recargo en una abertura de piedra y cerro los ojos dejándose llevar por los sonidos de la naturaleza inundando su interior en una indescriptible paz.
Despues de unos minutos la voces de Yona y Kaya se aproximaban al lugar, seguida de las voces de los masculinos desde el otro lado del muro.
En poco tiempo las jóvenes ya estaba adentro del agua acompañando a la pelicoral.
Yona._Ohayo Ryuumi~san _ saludo la pelirroja con entusiasmo.
Ryuumiko._ Ohayo Yona~chan _ respondió la joven a la ojilavanda abriendo los ojos con una tierna sonrisa en su rostro _ me alegra mucho que estén aquí _ dijo con suma tranquilidad.
De pronto se escucha las voces másculinas de los chicos desde el otro lado del muro; que igual que las mujeres, decidieron entrar a las aguas y disfrutar de un relajante baño.
La joven mayor decidió ignorar el poco escándalo que hacían los masculinos, y volver a su estado de relajación.
Yona/ kaya._ Se siente bien... _ hablaron las jóvenes al mismo tiempo, aunque la pelicafe lo dijo de forma más relajada, hasta hundir la mitad de su rostro al agua.
Yoon._ El agua es blanca... Debe de tener nutrientes dentro_ hablo el pelicastaño claro _ Bueno, si bien es cierto, tal vez nuestra piel salga bastante suave... _ opinó el joven.
Yona._ ¡Piel suave! _ exclamó maravillada la pelirroja, junto con la pequeña ardilla.
Ryuumiko decidido seguir con su meditación, ignorando las voces de los demás, pero gracias a su agudo sentido del oído, logró escuchar algo inapropiado e insinuante por parte del peliverde que la puso algo tensa; sin embargo gracias a la pequeña intervención del pelinegro la tranquilizó.
Zeno._ ¿Seiryuu... es la primera vez que te vas a meter? _ asintió el peliazul _ ¡Sácate eso de una vez! _ hablo animado y salpicando al joven Shin-ah.
El ojivioleta sin perder oportunidad para ver los hermosos y poderosos ojos del Seiryuu, decidió comenzar a tratar y de hacer de las suyas.
Shin-ah hacia lo que podía para evitar en abrir sus dorados ojos, que con gran insistencia Jae-ha quería lograr ver, pero para la mala suerte del peliverde, eso no sucedió.
La pelicoral se comenzaba a molestar un poco por las acciones del Ryokuryuu hacia el inocente y pobre Shin-ah, sin embargo la voz de Yona la distrajo de su repentino sentimiento negativo contra el dragon verde.
Yona._ Ryuumi~san... _dijo algo dudosa la pelirroja.
Ryuumiko._ ¿Qué pasa Yona~chan? _ pregunto con su característica sonrisa hacia ella.
Yona._ Eto... sino es mucha molestia... quisiera saber... _ hablaba nerviosamente y con algo de pena _ ¿como obtuvo esas cicatrices atrás de su espalda?_.
Aquella pregunta, que aunque solo estaba dirigida a la pelicoral, los hombres al otro lado del muro logran escuchar vagamente lo preguntado por la ojilavanda, causando les una gran curiosidad al saber aquello, ya que realmente no conocían para nada sobre la misteriosa mujer.
Ryuumiko._Ah... asi que lo notaste _ movió hacia un lado su larga cabellera coral, mostrando al aire libre aquellas dos cicatrices _ bueno... pues... _ decía algo incomoda la joven al notar el tenso silencio que se creó a su alrededor.
Yona._ Descuida no tiene porqué contestar a e- _ la corto la ojivioleta.
Ryuumiko._ No es eso... sino que... no se como empezar _ aclaró la mujer _ soltó un suspiro _ bueno... él primero que obtuve _ mostró su espalda a Yona _ el mas grande, fue cuando tenía 8 años _ la pelirroja se sorprendió _ poco después de sufrir de la muerte de mi madre, fui perseguida por varios soldados de la guardia real, que tenían la orden de capturarme y luego matarme _ hablo con seriedad la ojivioleta.
Al escuchar aquello Yona y las personas masculinas del otro lado, quedaron impactados por la nueva información de su acompañante.
Nunca nadie se hubieran imaginado que Ryuumiko desde pequeña sufría tales cosas; sin embargo, el pelinegro que escuchaba igualmente con atención la historia de aquella mujer, pensaba una y otra vez las palabras dichas por la pelicoral, dando asi que su mente y sus pensamientos le dieran una sutil advertencia.
Puso mucho más atención el de ojos zafiros, para seguir escuchando sin perder detalle alguno.
Por otro lado Zeno al escuchar a la joven, en hablar sobre ese tema algo delicado para él, comenzo a recordar aquel suceso como si fuera ayer; adentrándose ante uno de los lamentos del pasado que el pelidorado a toda costa quiso evitar.
Pero por desgracia él llegó demasiado tarde, y como concecuencia perdió a esa muchacha que amaba como a una hermana y por poco perdía aquella niña, que juro proteger por pedido del Rey Hiryuu, que estaba apunto de ser asesinada por un soldado que pronto cortaria la cabeza a la pequeña y debil infante.
Zeno recordaba perfectamente como llego e intervino a la casi probable ejecución de la niña de 8 años.
~FLASHBACK~
El Ouryuu corría desesperada mente hacia la casa de la pelilila con un mal presentimiento inundando en su corazón, sin embargo los gritos de varios hombres se oían a la lejanía, pero al acercarse hacia su cometido logró escuchar con nitidez el grito de una niña acompañado con el sonido de una brutal caida.
El ojidorado sin saber que hacer, ir hacia esa dirección donde provenía aquel grito o dirigirse a la casa de Harumi.
Sin tiempo a pensar decidió rápidamente esperando no arrepentirse en tomar una decisión equivocada corrió rápidamente hacia donde estaba la supuesta niña.
Al llegar estába a las espaldas de un soldado que tenia unas sangrante y pequeñas cortadas en sus piernas y brazos, sostenía una grande espada manchada de sangre entre sus manos que tenían la mera intención de acabar con la víctima frente suya.
Zeno al lograr observar mejor se encontró con la sorpresa de que esa víctima que pronto sería acabada con aquella brutal arma, era nada mas ni nada menos que la pequeña Ryuumiko, la hija del difunto Rey Hiryuu y de su "One~san".
La pequeña niña estaba completamente débil y pálida, tirada boca abajo contra la dura tierra aferrándose fuertemente entre sus brazos unas katanas y a una rota bolsa, la pelicoral tenia sus vestiduras completamente sucias y manchadas de sangre, mostrando al aire libre su espalda con una larga y profunda corta donde brotaba sin parar aquel líquido vital.
Sin perder tiempo, el pelidorado actuó rápidamente y se interpuso quedando frente a la niña protegiéndola y recibiendo aquella mortal cortada, causando la pérdida de su brazo.
El soldado incrédulo por la inesperada intervención, vio quien frustró su cometido quedándose en completo shock.
Era el dragon amarillo.
El ojiceleste gracias a sus poderes que le fueron otorgados, comenzo a regenerar su brazo ante la atenta y aterrada mirada del hombre por aquel suceso frente a sus ojos.
Ya al haber recuperado su brazo Zeno, esta parte comenzó a cubrirse de doradas escamas y tan duras como el mismo acero.
El Ouryuu llevado por la cólera y el miedo de casi ver la muerte de su sobrina frente a él; con su nuevo brazo dio de llano contra el pecho del soldado traspasandolo en una fuerte y minstruosa estocada, teniendo el corazón de aquel hombre dandole un miserable fin.
El ojiazul al escuchar el débil quejido de la niña que estaba detrás de él, causó que volviera su conciencia y trayendo lo a la realidad.
Reapidamente el joven actuó rápido y destruyendo una grande parte de sus vestiduras, cubrió la espalda de la niña haciendo un torniquete para evitar más pérdida de sangre.
Con sumo cuidado tomo a su pequeña sobrina entre sus brazos y a toda velocidad que podía fue hacia el pueblo para que la atendieran y la salvaran de la muerte.
Con el duro golpe de la realidad que el pelidorado no queria aceptar, Zeno sabía que ya era demasiado tarde para salvar a su One~san causando que su corazón rompiera a pedazos y soltando silenciosa lágrimas por una pérdida más de sus seres queridos.
Juro por el amor que tenia a Harumi y por órdenes del honorable Rey Hiryuu, en cuidar y proteger a su sobrina a toda costa.
Llegando justo a tiempo prontamente la pequeña de 8 años fue atendida por los pocos médicos que con un descomunal esfuerzo lograron estabilizar a la niña, que gracias a estos, al tiempo y a sus constantes plegarias a los dioses, Ryuumiko logró sobrevivir de las garras de la muerte, llenándolo de felicidad al no quedarse completamente solo y la esperanza de cumplir el ultimo mandato de su querido Rey.
~FIN DEL FLASHBACK~
Dejando atrás el nefasto recuerdo, otro albergó en su mente llegando la memoria de su querida hermana.
No te preocupes Harumi....
Seguiré a toda costa en cumplir mi palabra aunque me cuesta mi inmortal vida.
Pensó Zeno mirando el hermoso cielo azul con una cálida sonrisa.
Holis mis amadas lectoras 😄 disculpen la tardanza ya que lamentablemente tenía un bloqueo de inspiración 😧 .
Aparte de que mi amado cel se habia descompuesto. 😢😭
Por ello hice el capitulo un poco más largo de lo normal.
Si les a gustado mucho voten 🌟 y comenten que les a parecido .
Sayonara
~ Lunaldyhm Fuera ~