El maestro del Muelle de Loto...

By KaoryCiel

206K 17.1K 21.4K

#omegaverse #xicheng (Lan XichenxJiang Cheng) Ubicado en el mismo universo de "Pequeño Maestro Lan": Jiang Ch... More

Capítulo 1: Las intenciones del alfa.
Capítulo 2- Cortejo agridulce
Capítulo 3: Desasosiego de amor
Capítulo 5: El verdadero rival de amor
Capítulo 6: De amores perdidos
Capítulo 7: La llegada de Huan Huan
Capítulo 8: Los sentimientos más puros
Capítulo 9: Decisiones imborrables.
Capítulo 10: Afrentas familiares
Capítulo 11: Reencuentros y perdidas
Capítulo 12: Acercamientos
Capítulo 13: Sentimientos verdaderos
Capitulo 14: Arrepentimiento y nuevos caminos
Capítulo 15: Verdades y decisiones
Capítulo 16: El futuro es incierto
Capítulo 17: Soñando un futuro a tu lado
Capítulo 18: El banquete de los Lan
Capítulo 19: Lo que el destino nos depara
Capítulo 20: El impulso del instinto
Capítulo 21: En busca del destino.
Capítulo 22: Compromiso
Capítulo 23: El nuevo prometido
Capítulo 24: Mi alfa
Capítulo 25: Completamente tuyo
Capítulo 26: Amor y lujuria
Capítulo27: El deber de un tío
Capítulo 28: Viaje a la secta Jin

Capítulo 4: Sentimientos incompletos

8.9K 777 1.8K
By KaoryCiel

La primera gran confrontación con la secta Wen se avistaba cercana. Entre todos existía una sensación de desasosiego por el futuro. Muchos sabían que quizás no volverían a ver a sus seres queridos. Ese sentimiento no era ajeno para Lan Xichen. Llevado por ello, antes de marchar a la batalla que marcaría un hito a favor en la guerra contra la secta Wen, se despidió de su hermano. Conocedor de los sentimientos del menor, le alentó a no perder la esperanza de encontrar al joven Wei.

Sin embargo, no solo sintió necesidad de despedirse de su hermano, sino que su corazón le señaló otra persona a la cual quería ver por última vez si es que debía de sacrificarse por el bien mayor. Aquel ser era Jiang Cheng.

Antes de comentar algo, le observó detalladamente, queriéndose grabar su imagen para que le acompañe en la soledad: Este lucía decidido, pero veía cierto temor en su mirada.

—Gracias por cruzar estas últimas palabras conmigo, Jiang Cheng.

—Usted suena demasiado dramático. No es como si no nos volviéramos a ver. —Murmuró el omega que se sentía ligeramente más cómodo con aquel alfa que con todos los demás seres humanos en ese instante.

—Realmente espero que así sea. Cuídese. Sé que usted también desea encontrar al joven Wei.

—Es mi hermano. —Suspiró. En ese momento se sentía ansioso por no saber nada de su hermano. Sin embargo, se negaba a creer que este no existiera más.

—Lo entiendo. Cuando estuve escondiendo y buscando ayuda de otras sectas, siempre pensaba en cómo se encontraba Wanji, como estaba asumiendo la muerte de nuestro padre.

Jiang Cheng quiso acercarse más, darle alguna muestra de soporte, pero se vio imposibilitado. Su corazón estaba herido por todas las perdidas recientes, no sabía cómo darle apoyo a otro. Esa frustración le carcomió, ya que un alfa siempre espera consuelo de su omega.

—Debo de irme. —Anunció LanXichen.

Por instinto, el omega le retuvo de su túnica. Le necesitaba, no deseaba dejarle ir. Se sentía ligeramente aliviado cuando sentía su presencia cercana.

—Gracias por encontrar y proteger a YanLi. —Se apresuró a decir.

—No lo hice yo, fue Wanji. Me alegra que pronto vaya a reunirse con ella. Intenten no hacer nada demasiado imprudente y aseguren el perímetro de la zona donde formarán el refugio.

—Todo eso, también gracias. —Continuó Jiang Cheng sin poder soltarle. ¿Porqué no podía quedarse a su lado?

Se sentía vulnerable, deseaba algo a lo que no podía ponerle nombre. Sus defensas bajaban de forma automática ante la presencia de aquel alfa. Ese instinto que le mantenía vivo le dictaba que no encontraría lugar más seguro que al lado del primer maestro. Esto se debía simplemente a su lazo de destinados.

Todo ese cúmulo de sensaciones pasó por su rostro y su mirada turbia. Su aroma delataba una mezcla de necesidad por protección. Le avergonzaba tanto aquello. Pero no podía evitarlo.

—Ahora mismo, Jiang Cheng, deseo hacer algo impropio que quizás no puedas perdonar.

Antes de que pudiera comprender a profundidad las palabras del mayor, el joven omega sintió como sujetaba su mentón con firmeza pero sin dañarlo. En un instante, sus labios fueron tomados, su primer beso era hurtado por el primer maestro Lan sin que pudiese defenderse. Fue un pequeño toque tan suave y dulce que le dejó deseando repetirlo.

— ¿Fue su primer beso?—Susurró el primer maestro a su oído, haciéndole vibrar vergonzosamente. No estaba en un momento en que debería mostrarse como el virginal omega que era.

—Lo fue ¿hay algún problema con ello?

—Debería de disculparme, pero no me arrepiento... también fue mi primer beso.

Jiang Cheng bajó su mirada sonrojado. Un simple beso pero le había aturdido tanto como para terminar apoyándose débilmente en el otro. Los brazos del primer jade le brindaron un segundo de paz en medio de aquel infierno que vivía.

Ambos no se volverían a ver en varios meses.

Fue durante esa mencionada batalla que Lan Xichen conoció a Meng Yao. De hecho, sucedió en el mismo campo de batalla.

Lo vio luchar hasta con el último aliento. Se veía pequeño y de contextura frágil, pero sin importar el daño que sufriera peleaba con valentía y decisión. Sin embargo, fue acorralado. Lan XiChen desenvainó su espada y esta corrió a detener a todos los que habían querido finiquitar al joven beta.

El chico se levantó, pero antes de que pudiera decir algo en agradecimiento, XiChen negó con la cabeza y le señaló los enemigos que aun les rondaban. Casi sin esperarlo se produjo una conexión entre ellos, cuidaron sus espaldas y finiquitaron aquel día infernal.

Una vez descansando en el campamento, Meng Yao se asomó por un lado.

Lan Xichen estaba recibiendo cuidado de un subordinado experto en sanación. Cuando lo vio asomarse tímidamente, le ordenó que los dejaran a solas.

Meng Yao tenía un cuenco de sopa en sus manos.

—Es lo mejor que pude encontrar. Seguramente usted tiene subordinados que le preparen pero quiero mostrarle mi gratitud de esta manera, no la rechace, por favor.

Su voz era dulce, su aspecto sin duda atractivo. Por un momento su nariz buscó un aroma que no existía. No se trataba de un omega ni de un alfa, era un simple beta casi sin olor.

—Te lo agradezco. De hecho, estaba hambriento.

El joven se acercó con el cuenco, poniéndole en la mesita.

—Gracias realmente por haberme ayudado.

— ¿Cómo te llamas?

—Meng Yao.

Solo "Meng Yao" comprendió. La mayoría de betas no ostentaban títulos más que ser los servidores o subordinados de alfas u omegas. No aspiraban por instinto a nada más, se les hacía mucho más fácil aceptar el liderazgo de un alfa y proteger a muerte a un omega. Pero el chico lucía diferente.

—Zewu-Jun, si usted desea a partir de ahora puedo ayudarle con las tareas simples como lavar su ropa o preparar sus comidas.

—No es necesario. —Respondió con una sonrisa.

—Sé que mi vida no vale demasiado al lado de alguien como usted, pero realmente estoy agradecido. —Insistió con tanta urgencia.

—Por supuesto que tu vida vale mucho. —Se vio en necesidad de replicarle. — Más si eres tan valiente como lo mostraste. Tenemos un camino largo por delante. Nos vamos a reunir con las otras sectas pronto. Pero la victoria de Nie Minjue no debe de cegarnos.

—Es usted muy sabio. Realmente me agradaría servirlo. Yo...no tengo un lugar claro. —Parpadeó con un leve rubor en sus mejillas, mientras un aire depresivo le rodeaba.

La imagen del beta era demasiado angustiante como para rechazarle.

—Si estas cómodo con ello...

— ¡Lo estoy!

Vio su sonrisa y se sintió contento por él, aunque ligeramente preocupado por como veía su propia vida ¿Qué clase de secretos ocultaba? Le pareció interesante y su instinto en vez de querer gobernarlo, quiso conocerlo y protegerlo.

No imaginó en ese instante que sus sentimientos avanzarían en otra dirección. Una planeada por el propio beta. Para ese entonces, creía que si sobrevivía a la guerra se declararía a Jiang Cheng. Le gustaba mucho, sentía que sus caracteres podían llegar a la armonía.

Esa noche durmió pensando que tanto su hermano como él podrían formar una familia con los jóvenes de Jiang. Su mente aún era inocente a pesar de ser un adulto.

La forma en qué Meng Yao logró enamorarlo no fue rápida. Fue muy suave, lenta, casi imperceptible, un largo proceso que le llevó a acercarse a Meng Yao y a distanciarse de Jiang Cheng.

............................

La mañana siguiente fue aparentemente normal. Los sirvientes del clan Jiang le trataron con cortesía e incluso le llevaron un recado que llegó desde Gusu. Tenía la excusa perfecta para marcharse ante el protocolo. En realidad no lo deseaba, pero supo que era lo mejor para ambos. Él mismo necesitaba analizar sus sentimientos.

¿Solo sentía atracción instintiva? ¿Era su parte alfa intentando salvarlo de la miserable soledad en que se sumió a la muerte de su primer amante?

A pesar de todo aquello, pidió ver a Jiang Cheng para presentarle su agradecimiento por la semana en que fue su anfitrión. No podía simplemente marcharse sin hacerlo, iba en contra de las buenas costumbres.

Para su sorpresa fue recibido en el estudio de este. Se veía serio, concentrado en un pergamino. Su aroma no delataba algún tipo de sentimiento potente.

—Líder de secta Jiang. —Saludó con respeto.

Wanyin levantó su mirada y le saludó con una venia. Sus ojos no brillaban en rabia como el día anterior, simplemente mostraban indiferencia y una pizca de preocupación.

—Me informaron que recibió una carta de Gusu ¿Hay alguna emergencia? ¿Le sucedió algo a Wei WuXian o su cachorro?

Entonces notó a qué se debía su preocupación.

—No se preocupe, ellos están bien. Solo he sido convocado por problemas en el Norte con apariciones extrañas. Me uniré a la cacería con mi hermano y algunos subordinados.

—Entiendo. Hágame el favor de recordarle a ese ingrato que le extendí una invitación a venir.

Aquello había sido un golpe bajo. Seguramente quería ver a Wei Ying realmente, pero Lan Xichen supo que era un mensaje para él. No deseaba toparse ni siquiera por error con él. Ahora eran solo dos líderes de secta y nada más. Todos los besos, caricias y toques que habían compartido se redujeron a nada. Le estaba tratando como el pariente lejano que era, con la cortesía que merecía por su título.

—Sabe que usted y el joven JinLing son bienvenidos a Gusu. —Se apresuró a responder.

—De igual manera, Wei Ying debe de venir y presentar a su cachorro a mis padres.

—Los sanadores le indicaron que aún no puedo dejar el Receso de las Nubes.

Jiang Cheng rodó los ojos, casi una sonrisa maliciosa afloró en sus labios. Conocía demasiado bien a Wei Ying.

—Están siendo demasiado escandalosos. Wei Ying puede caminar con las tripas afuera sin ningún problema. —Replicó.

—Aun así...—Comenzó a querer extenderse.

—Bien, no me entrometeré. El decidió casarse con un miembro de la secta Lan y debe de seguir vuestras reglas. Yo no tengo nada que ver con la secta Lan, sus absurdas reglas y sus personas, más que un parentesco lejano por Wei WuXian.

Había reafirmado su rechazo ante él de una manera tan clara. Como había mencionado, iba a tener que tragarse todo lo que imaginó junto al omega que tenía enfrente. No existía lugar para él a su lado. Y aunque lo entendiera racionalmente, existía esa penosa sensación de insistir, de luchar como alfa por el compañero escogido.

—Jiang Cheng, deseo hablar contigo sobre lo que sucedió ayer. — Se vio en necesidad de insistir.

—No hay nada más que hablar entre nosotros. Espero que su estadía en Lotus Pier haya sido agradable pese a todo y por supuesto le deseo un buen viaje.

El joven líder de secta sentía que quería reventar ahí mismo, sacar a zidian y sacarlo de su territorio. No era prudente y estaba a punto de quebrarse. En el fondo de su corazón había soñado con que entre ellos surgiría el amor. Creyó que su destinado sería el indicado para ser su compañero.

—Por favor, déjame explicártelo ¿En verdad quieres que todo termine de esta manera? Yo he dejado atrás ese pasado. No hay ninguna razón para que sientas celos e inseguridad de alguien que no está vivo.

El cuerpo del menor comenzó a temblar levemente. Realmente ponía todo su empeño para tragarse la rabia e indignación por las palabras del alfa.

—No deseo hablar más de ello. —Resopló sin mirarle directamente. — Si usted desea seguir amándolo, es su problema. Váyase.

—Me iré cuando hablemos. —Replicó decidido. — Aún pueden esperar por mí. No quiero dejarte de este modo.

—No quiero ser grosero, líder de secta. Pero ahora mismo estoy leyendo una carta de mi casamentera. Me tiene tres proposiciones de cortejo y estoy analizando a cual responder. Como ve, para mi es algo muy importante tener un alfa y un heredero.

Fue amargo escucharle buscar un remplazo tan fácilmente. Había sido uno más en su larga lista de pretendientes. No podía evitar la marea de indignación instintiva de alfa que le atacó.

— ¿Vas a entregarte a cualquier alfa?

— ¡No le incumbe! —Estalló.

—No puedes hacerlo. Tú no puedes aceptar a otro alfa.

— ¿Por qué no puedo? Claro que puedo. Es mi vida, mis objetivos y mi futuro.

—Estas escogiendo guiado por el resentimiento. Arruinarás tu vida si te unes a un alfa del que no sientes siquiera atracción.

— ¡¿Ahora le preocupo?!—Grito furioso e indignado.

—Siempre me he preocupado por ti. Jiang Cheng. A pesar de todo, siempre me mantuve atento a lo que sucedía contigo. —Intentó usar la voz más suave que podía. El omega estaba emanando feromonas que le repelían pero que también le causaban dolor.

Jiagn Cheng no podía seguir manteniendo algún tipo la cordialidad. Había llorado gran parte de la noche hasta quedar tendido sobre su cama, débil. Pero aquello le había traído calma y razón: No debió bajar la guardia y esperar a que el cortejo fuera exitoso. No volvería a cometer ese error nuevamente. Supo que debía de comportarse con dignidad. Estaba en camino de reafirmar su lazo de amistad con Wei WuXian y su sobrino parecía sentir afecto por los jóvenes Lan; así que había concluido que no era conveniente terminar con la fría cordialidad que siempre existió entre ambos.

— ¡Eso es mentira!—Gritó con lágrimas atoradas en los ojos.

— ¿Por qué piensas de esa manera?

—Usted era muy feliz con ese rastrero. —Bajó su voz, avergonzado de aceptar lo siguiente. — No le culpo, era encantador. Incluso, aunque sabía que tenía a mi alfa en sus manos y que poseía una gracia y belleza que muchos omegas envidiarían, me parecía agradable. Le permití estar medianamente cerca de mi sobrino ¿Sabe cuán grande peligro corría JinLing ahí? Que hubiera pasado si Wei Ying no regresaba y lo desenmascaraba. Quizás su siguiente victima hubiera sido él en sus ansias de poder.

—No creo...

— ¿No lo cree? Lo ve, lo defiende a pesar de que fue un ser desalmado, una bajo ser que sabía que usar sus armas y cuerpo. No dudo que seguramente llegó a ser espía y meterse a la secta Wen usando los mismos encantos que uso con usted y con Nie Mimjue. Que se puede esperar de alguien que solo era el hijo de una prostituta.

—No...—Se retuvo de responder una defensa a favor de su ex amante.

Pero Jiang Cheng estaba atento a cada detalle en su expresión.

—Puedo verlo en su rostro. Le hiere cuando hablo de él de esa manera. —Sonrío con malicia. —Pues estoy en mis tierras, lo maldeciré cuantas veces quiera.

—No es eso. —Se apresuró a decir, sabiendo que le causaba dolor al mostrase compasivo con Meng Yao. — No tiene sentido ofender la memoria de alguien que ya está muerto.

— ¿Por qué? Usted aun le llora, le continuará llorando siempre. —Exhaló pesadamente.

Lan Xichen siempre tenía un poder extraño sobre él, tanto para calmarlo como alterarlo en instantes. En ese momento, necesitaba expresar el resentimiento, dolor y soledad que soportó por tantos años. ¿Cómo podría creerle? Se dio cuenta que jamás podría realmente perdonarle el haber sido dejado de lado por tanto tiempo. Había sido invisible para Xichen mientras este fue amante de Meng Yao.

—Yo me siento culpable. —Confesó el alfa. — Quizás yo pude detenerlo. No me di cuenta a pesar que pasaba tiempo a su lado. Tal vez, si yo le hubiera detenido, todo ese resentimiento con el cual creció...

La electricidad proveniente de zidian rugió. Los pergaminos que habían estado sobre el escritorio del omega revolotearon alrededor. Cualquier persona pensaría que Jiang Cheng estaba furioso por sentirse humillado, pero la realidad es que se sentía nuevamente desplazado. Siempre segundo, jamás primero en el corazón de alguien.

— ¿Eso es lo que hubiera deseado verdad?

— ¿A qué te refieres? No me malinterpretes. Lo único que siento yo es culpa no amor...

El joven bajó su mirada mientras apretaba sus puños y contenía sus lágrimas con fuerza.

—Mientras yo estuve solo todos estos años...—Inició con voz inusualmente suave y melancólica, casi mostrando rendición. —... maldije a mi hermano de crianza sin ponerme a pensar que en parte fue mi culpa. LanWanji se la pasaba esperando su regreso, amándolo hasta el fin, respetando su memoria, aguantando castigos, enfrentándose a mí cada vez que había indicios de cultivadores demoniacos. Ambos en un infierno, pero usted...—Sonrío con tristeza y desesperanza —Estaba de lo más feliz al lado de Jian Guang Yao.

Jiang Cheng le había dejado sin palabras nuevamente, sin ninguna defensa, nada que poder alegar para hacerle ver que podían intentarlo. Esos años en que su hermano menor se hundía en su propia miseria, él le brindó su apoyo. Era capaz de iluminar su camino porque se sentía feliz de tener a Meng Yao. Tuvieron partes oscuras, cosas que dejó de lado por su amor hacia él, y aun así mientras pudieran verse era feliz.

— ¡Usted solo me está usando! —Estalló mientras sus ojos no podían contener más sus lágrimas.

—No imagine que lo vieras de este modo.

—Porque usted no pasó trece años solo, viendo que el único posible lazo que podía tener prefería estar con un beta. Sentirse invisible para tu alfa destinado. Lo que usted en verdad sueña es que nada hubiera sucedido, así hubiera podido seguir al lado de la persona que ama. No me ama mí, solo me quiere porque ya no existe Meng Yao. Si nada hubiera sucedido, jamás me hubiera vuelto a notar. Me hubiera dejado hundirme en mi miseria y soledad, y no le hubiera importado. Si me casaba con otra persona, tampoco hubiera movido un dedo por impedirlo —Le enfrentó con los ojos llorosos. — No quiero verlo. Deseo encontrar alguien que sea solo para mí, que me ponga por encima de todos, estoy harto de ser el reemplazo o el segundo en todo. Esa persona no puedes ser tú.

Tan claro como las aguas de Gusu era la situación entre ambos. No existía nada más por decir. Jiang cheng había declarado todo su sentir. Los sentimientos que habían burbujeado, sus miedos sobre tener una familia, aquello había colmado cualquier tipo de apariencia que quisiera mostrar. En ese instante no era el poderoso líder de secta Jiang sino el omega que fue abandonado por su alfa.

—Perdóname. —Fue lo primero que necesitó decir el alfa. — No imaginé que acercarme a ti siguiendo mis sentimientos solo te traería dolor. No quiero causártelo, quiero hacerte feliz. Y si para retribuirte esos trece años que desperdicie, debo de alejarme, tienes razón, es lo mejor. Yo velaré por tu seguridad desde lejos. Quiero que tengan en mente que sigues siendo bienvenido en Gusu, el joven JinLing también.

Jiang Cheng temblaba levemente.

El alfa deseó poder abrazarlo para consolarlo. Su parte animal estaba preparada para brindar consuelo a su pareja de manera inmediata, así que se retuvo. Sabía que su contacto no le consolaría. De hecho, no había nada más que hacer en ese lugar.

LanXichen se sentía confundido como nunca antes, perdido. Se recriminaba a sí mismo por sus acciones nuevamente.

Había sido comparado nuevamente con su hermano menor. No sentía coraje por ello, de hecho le servía de lección para comprender su destino.

¡Que voluble! Al menos debería de serle fiel a Meng Yao hasta el final y no buscar rehacer su vida al lado de su omega destino. Sus acciones merecían un pago. Las recompensas y castigos se solventan en la propia vida. Su hermano obtuvo su recompensa en forma de bella familia, y él debía de recibir su castigo, viviendo los largos años que le quedaba en soledad. Quizás si en su siguiente vida era fiel a su pareja destino, podría estar al lado de su omega elegido.

—Nuevamente lo siento, Jiang Cheng....No, líder de secta Jiang. Nunca pienses que no mereces ser feliz. Yo de verdad pensaba ponerte como mi ser más importante, te lo juro, esas eran mis intenciones. Pero si tú crees que no soy capaz, lo acepto. Espero encuentres al alfa que sea merecedor de tu afecto y de marcarte.

Cuando Lan Xichen estuvo lo suficientemente lejos. Jiang Cheng tiró todo a su alrededor y luego se soltó a llorar, sus cabellos largos cubrieron su rostro. Lo odiaba, aborrecía el dolor de sentirse no amado por su destinado. Por eso no quería aceptarlo. Mientras no se involucraba con él podía contener su lado instintivo, pero una vez que cayó presa de esa emociones era demasiado abrumador todo ese embrollo de instintos y sentimientos de omega.

.................................................................................

No habían podido construir las murallas necesarias para poder enfrentarse cuando nuevamente se encontraron en medio del drama de ambos esposos, sus hermanos. Jiang Cheng había deseado poder estar en paz por un largo tiempo, preferentemente hasta que fuera la siguiente conferencia de líderes de secta. Sin embargo, llegó su hermano de crianza con el adorable bebé en brazos. Solo para que ambos jades se presentasen a las horas. A pesar de todo, Wei WuXian era realmente afortunado de ser amado a ese nivel.

—Líder de secta Jiang, lamento incomodarle con mi presencia, pero temía por mi hermano. —Se inclinó levemente aun con A-Yu en brazos.

—No se preocupe. Mandaré a que le preparen una habitación al igual para sus jóvenes aprendices. A esa cosa, Wen Ning, manténganla en el bosque.

Sus sentimientos por Lan Xichen estaban revueltos. No encontraban un camino adonde dirigirlos. Si planeaba casarse con otro alfa debería de abandonarlos o cometería el mismo error que su padre. Sin embargo, su sola presencia le traía un alivio extraño. Como si siempre estuviera esperándolo y al fin su alfa estuviera cerca para cuidarle.

Llamó a uno de sus subordinados para mandar la orden. JinLing estaba en Lotus Pier, seguramente pronto se encontraría con los jóvenes y se pondría a perder el tiempo con ellos.

—Escuché que se ha estado escribiendo con un pretendiente en especial. —Interrumpió el alfa sin poder contenerse. Los chismes en el mundo de la cultivación recorrían la sectas rápidamente. Escuchó aquello mientras estuvo de cacería con su hermano.

Lan Yu se mantenía ligeramente inquieto en los brazos de su tío paterno. Pero en cuanto dijo aquello se removió aún más. El aroma del alfa adulto se había vuelto agrio.

—Lo es. De la secta Yao.

— ¿Va a aceptarlo como marido?

—No le concierne esos asuntos. —Se defendió Jiang Cheng

—Me concierne, usted mismo dijo que estamos emparentados. Y quizás lo estaremos aún más en el futuro.

Jiang Cheng no prestó real atención al alfa, estaba preocupado por el bebe que emitía breves quejidos mientras que sus ojos se llenaban de lágrimas. No le gustaba ver llorar a un bebe. Había desarrollado ese instinto desde que crío a JinLing.

—Es mi vida personal. —Se defendió sin mirarlo.

—Lo sé, pero yo...

—No importa, concéntrese en controlar su aroma. Está afectando al cachorro.

Lan Xichen bajó su mirada a Lan Yu este se encontraba llorando silenciosamente. Se sorprendió de no haberlo notado.

— ¿Tendrá hambre?—Preguntó asustado por su pequeño sobrino.

—No lo tiene, solo que el aroma de un alfa que no es su padre le afecta. Además usted está emitiendo un aroma demasiado agrio para un bebé.

El omega no lo soportó más. Le arrebató al niño de los brazos al primer maestro Lan. Lo acomodó en su pecho, apegándolo y arrullándolo. El niño dejó de llorar, se aferró a la túnica morada cerrando sus ojitos.

Lan Xichen quedó impresionado con la imagen que proyectaba. Era sublime y encandiladora, sintió su pecho agitarse. "Podría ser nuestro" sintió algo retumbar desde lo profundo. Aun consideraba Jiang Cheng como su omega, no era tan fácil renunciar a ese instinto. Sin embargo, sabía que no podía basarse solo en eso. Quizás se había aferrado a esa posibilidad después de abrir los ojos ante la maldad de Meng Yao.

—Vamos, tus padres no van a salir en mucho tiempo. Y Wei WuXian te dio de comer hace poco. No deberías de necesitar comida. Tampoco parece que necesites que te cambie ¿estás aburrido?

Para Jiagn Cheng el hijo de su hermano era adorable. JinLing armaba escándalo por cada pequeña incomodidad, en cambio el pequeño solo se refugiaba asustado en su pecho. El deseo de tener un bebe creció en él. Lan Yu se parecía mucho a LanWanji. Levemente giró su vista hacia el hermano Lan que tenía. ¿Si ellos tuvieran un hijo, el bebé se parecería a él? Se sonrojó de solo pensarlo pues se dio cuenta que le gustaría tener un cachorro parecido al primer jade. "Un pequeño Lan Xichen"

Mientras tanto, Lan Xichen seguía confundido entre lo que sentía instintivamente y sus propios deseos. No podía forzar a un omega a estar a su lado. Si Jiang Cheng decidía tener un esposo alfa del clan Yao debía de aceptarlo.

—Creo que no me siento muy bien, líder de secta. —Indicó LanXichen con el rostro sonrojado, sintiendo asfixia en el pecho.

Jiang Cheng se preocupó al instante. Se acercó cargando al bebe. Sin notarlo, su cuerpo liberaba deliciosas feromonas que mantenían al bebé calmado y arropado, pero estas también afectaban al alfa soltero cercano.

—Joven líder, lo mejor es que no se me acerque. —Advirtió inclinándose sobre sí mismo, cubriendo su nariz inútilmente.

Vio el ceño fruncido del omega.

— ¡No es por algún razón que se le ocurra!

Ante el rostro confundido del líder tuvo que confesarse.

—Su aroma es muy dulce y me temo que no tengo demasiada fuerza para resistirme. Estoy seguro que a su prometido no le va agradar notar mi aroma sobre usted. Y yo realmente ahora deseo tocarlo.

El corazón del omega retumbó. Sabía que racionalmente Lan Xichen no era el gran partido que todos los omegas soñaban, pero era su destinado y no podía evitar sentirse halagado.

—Tiene razón. Enviaré a un discípulo para que lo guíe a su habitación.

—Gracias. Por favor, si fuera tan amable de llevarme agua para un baño, la más helada posible.

Casi huyó con el bebe en brazos ante esa confesión vergonzosa.

¿Por qué Xichen pensaba que el alfa de Yao era ya su prometido? No lo eran. Si bien era cierto que era el que más le agradaba no le gustaba románticamente tampoco, solo lo veía conveniente. De hecho, él iba a visitarle al día siguiente.

Su hermano de crianza sí que traía problemas.

..

Jiang Cheng se mantuvo cuidando y haciendo jugar a su sobrino toda la tarde. Le tenían encantado por lo tranquilo que era. Aunque pudo notar que tenía ciertos momentos en los que era caprichoso como cuando deseaba un objeto que llamaba su atención.

Le cambió de ropa sin dificultad. Le acarició cuando parecía necesitar de las feromonas protectoras de un omega, y arrulló hasta hacerlo dormir. Finalmente, cuando despertó con hambre, sus padres habían aparecido. Wei Ying fue a la habitación de su hermano y ahí comenzó a amantar al bebe que se prendió ni bien lo sintió con su olfato.

El líder de secta observó con cierta envidia el momento de alimentación del cachorro. Además que el omega dejaba fluir una esencia de satisfacción y sobre todo que el aroma de su alfa estaba impregnado en su piel.

—Ustedes son unos desvergonzados. —Soltó con desagrado.

—Si tú quisieras tendrías el aroma del hermano Lan Xichen pegado al cuerpo—Bromeó

—De ninguna manera.

Wei Ying ladeó su cabeza curioso por la expresión del otro. No solo veía enojo sino también decepción y tristeza.

— ¿Tan mal les fue como para que ya tengas otro pretendiente?

—Fue el peor cortejo que he tenido.

—No seas tan exigente ¿Qué tan malo pudo haber sido?

—Me comparó con JinGuangYao.

No tuvo manera de defender a su cuñado. Incluso él se sentía afectado. Comprendió cuanto dolor sentía su hermano de crianza. Era humillante que tu alfa destino prefiriera a otro.

—Está enamorado de él, claramente. Lo extraña y anhela.

—Pero te estuvo cortejando ¿Cómo puede ser eso así?

—Simplemente se está aferrando a que soy su destinado. Estoy seguro que aún lo quiere, que si no hubiera sido un desgraciado seguiría a su lado. Cuantas veces los descubrí juntos cuando visité LanLin por JinLing. ¿Y ahora yo le gustó? Son patrañas, él mismo quiere creerlo pero nunca me amará ¡No pienso pasar por lo que mi madre paso!

Lan Yu estaba entretenido en el pecho de su madre. Había quedado lleno, pero eso no le limitaba seguir jugando con el pezón. Se exaltó ligeramente ante el grito de su tío.

—Bueno, pequeño, ya terminaste de comer así que ve con papa.

De inmediato, el omega se cubrió, le apoyó en su pecho y le pidió un momento a su hermano. Al poco tiempo, regresó sin el bebe en brazos.

—Se lo di a Lan Zhan. Dije que ahora tendríamos un momento de omegas. —Le guiñó un ojo.

—Lo haces sonar vergonzoso.

—Como sea.

Wei WuXian se acercó y le tomó de los hombros.

— ¿Piensas aún que tu padre no amo a tu madre?—Preguntó en voz baja.

—Eso era evidente. —Desvío la mirada.

—Estas insultando su lazo.

— ¿Piensas que mi madre era una histérica?

—No lo hago, pero quizás desperdició algunos momentos que pudo disfrutarlo al lado del alfa que la amo. Madam Yu era hermosa, fuerte, compensaba muy bien al tío Jiang. ¿Te imaginas que hubiera sido de nosotros sin Madam Yu? Sobre todo yo, me lo hubiera pasado tirado en el bosque si no fuera porque me cayeron algunos latigazos en las manos y piernas.

Ellos poco a poco podían hablar del pasado un poco más sin odiarse. Jiang Cheng sintió que le había necesitado todos esos años.

—Tienes razón, eras un vago.

—Lo era—Admitió con una sonrisa.

—Aun así, creo que mamá se consoló pensando que tu madre era una gran e insuperable cultivadora. Al menos una digna rival. Pero ¿Jin GuangYao? Me niego a ser comparado con ese asqueroso ser. De ninguna manera tolero su memoria y menos un esposo que suspire por él.

No podía replicarle ante ello. A veces, simplemente no se podía gobernar sobre el corazón de los otros.

—Es una lástima realmente. —Suspiró.

— ¿A qué te refieres?

—Me había ilusionado sabes...si tú te casabas con el hermano de mi esposo, nosotros seríamos hermanos nuevamente.

Jiang Cheng sonrío suavemente. Aquel tema era incómodo, pero ya no sentía un repudio ante la idea.

—Aun no puedo llamarte hermano de nuevo. Pero...quizás en un futuro pueda hacerlo.

—Gracias.

Se quedaron un largo momento en silencio, inusual para ambos con caracteres fuertes. La distancia entre ellos se estrechaba, sus emociones volvían a conectarse lentamente. Sin darse cuenta, fue disfrutable permanecer callados, brindándose apoyo.

— ¿Y si te casas con un omega o beta?—Dijo de repente Wei Ying.

— ¡Siempre tienes que salir con tus bromas!

La paz había sido rota.

—No es ninguna broma. Estoy hablando en serio.

— ¿Cómo vas a imaginar que me case con otro omega o un beta?

— ¿Por qué no?—Preguntó con sinceridad.

—Porque no... no está bien visto y...

—Oh vamos.... ¿Qué tienen de malo los omegas y los betas? Creo que te sería más cómodo y conveniente.

— ¿Por qué tengo que conformarme con un beta? ¿De dónde voy a sacar un omega que quiera casarse con otro omega?

—Bueno, Jiang Cheng, sé que eres muy inocente para estos temas...

—Yo sé mucho sobre sexualidad, estúpido

—Lo sabes de teoría. —Apuntó el menor.

—Tú solo te has acostado con Lan Wanji. —Se defendió indignado el de túnica morada.

—Sí, pero Lan Zhan estudió mucho por trece años y yo soy su único alumno. —Respondió pícaro.

— ¿En verdad el segundo maestro solo se ha acostado contigo?

— ¡Por supuesto! ¡Soy su único y verdadero amor!

Al decir aquello el otro omega giró su cabeza, sintiéndose herido. Wei Yig supo que había cometido un error al pavonearse, pero era un tema que realmente le llenaba de orgullo. Su Lan Zhan era suyo y solo suyo.

—A lo que quiero llegar, Jiang Cheng, es que no sabes lo incómodo que puede ser estar con un alfa. Por no decir doloroso y vergonzoso.

El cuerpo del mayor se tensó, su rostro se coloreó.

— ¿A qué te refieres? ¿Acaso te ha maltratado?

—Claro que no. Lo digo porque los alfas son muy dominantes y cuando llevas su marca se vuelven muy sobreprotectores. No es su culpa, es su instinto primario. Además, debes pasar los celos con ellos, y sus épocas de calor donde son demasiado sensibles con dejarte salir de la habitación. Mi Lan Zhan no, pero muchos alfas buscan controlar a su omega y sé que tú no eres del tipo que vaya soportarlo. Además la intimidad que llega haber entre un alfa y omega en el celo es muy vergonzosa. Ni que decir de la anudación...

Cada palabra hizo temblar al líder de secta. Había leído exactamente cómo era la época de celo y de calor cuando alfa y omega estaban juntos, suponía no era igual a cuando lo pasaba solo, intentando controlarlo lo mejor posible. Según leyó, un omega no puede controlar su celo cuando está cerca de su pareja.

—Jiang Cheng ¿estás seguro que quieres que alguien te tenga debajo de su cuerpo aplastado contra la cama mientras te muerde el cuello y anuda dentro de ti? Y tu viéndote tan voluble e indefenso ¿Se lo mostrarás a cualquiera?

— ¡Haces que suene como una tortura! ¿acaso no es placentero?

—Sí, pero tu alfa ve cosas y aspectos muy íntimos de ti. Cuando tienes celo con un alfa tu lado, en lo único que puedes pensar es en retenerlo y tener sus cachorros. ¿No te sentirás humillado luego?

Wei WuXian tenían un gran punto. Quería un hijo, pero para tenerlo con un alfa iba a tener que soportar todo eso. Que alguien extraño, escogido por conveniencia le viera y domine de esa manera le parecía asqueroso.

— ¿A qué quieres llegar?

—Tienes carácter muy fuerte, tranquilamente puedes casarte con un beta.

—Un beta no calma el celo.

—No, pero puedes ordenarle que no lo comparta contigo. La pasas como hasta ahora y listo. Solo tienen intimidad cuando tú quieras.

—Pero un hijo con un beta no es seguro, y además nacen más débiles y mestizos.

—Tienes que escoger cuáles son tus prioridades. Por muy débil y de baja clase que sea un alfa, un alfa es un alfa. En cambio, los betas normalmente nos adoran y son fáciles instintivamente de manipular. Nunca buscarán la supremacía.

—Tienes un punto en ello, pero no quiero un cachorro mestizo. O que nazca débil enfermizo.

—Esos son prejuicios.

—Además los betas no son tan...

— ¿Grandes? ¿Fuertes? ¿Apuestos? No lo son a nuestros ojos e instintos eso sí. Pero tú quieres un matrimonio por conveniencia. Olvídate de esos detalles.

—Tú tienes mucha suerte de que el segundo maestro te adore....

—Eso sí. Pero a mí me daba igual antes, incluso le coqueteaba a omegas sin ningún problema.

—Le coqueteabas a todo lo que se moviera.

—Que malo.

El rostro de Wei Ying hizo una mueca exagerada de ofensa. Lo cual relajó a Jiang Cheng. Era como cuando jóvenes, Wei Ying lograba sacarle sonrisas y relajarlo.

— ¿Y de qué viene la idea de que me case con un omega?

—Bueno, puedes compensar la falta de un alfa. Te buscas un lindo omega criado de buena familia dócil.

—Finjo ser un alfa ¿esta demente?

—Bueno, no puedes ser un alfa, claramente. Pero puede ser un matrimonio conveniente, tranquilo y sin problemas. Ambos tienen los mismos problemas físicos, se ayudan mutuamente. —Explicó suavemente, con paciencia como para un niño pequeño.

—Los omegas rechazan a otros omegas cuando están en celo. — Indicó.

—Bueno, le dejas que tenga un alfa que le calme en sus celos.

—Ahh eres imposible. Además, ninguna familia consentiría que sus hijos omegas se casen con otro omega.

—No está prohibido.

—No importa, no lo aceptarían.

—Tengo el omega perfecto para ti. —Apuntó triunfal.

— ¿Qué?

—Nie Huaisang.

El rostro de Jiang Cheng era un poema lleno de incredulidad como si escuchara a alguien que ha perdido el juicio.

— Es lindo, inteligente, fuimos compañeros de clase, nos llevábamos de maravilla, compartieron momentos. —Comentó— Esta libre, no tiene familia que se interponga, es líder de su propio clan.

—No...no me atrae.

—No digo que te atraiga. Solo es conveniente, aún más que un beta. No buscará someterte como un alfa, no se pavoneara por tenerte como un beta y te apoyará en todo.

— ¿De dónde lo sacaste como opción?

—Bueno, es un omega soltero. Me escribe últimamente y me envía buenas novelas.

—Porno...

—Sí. Y en una de sus cartas me contó que muchos alfas se la viven acosando. Pero él sabe que lo único que quieren es someterlo y hacerse con el clan Nie. Él no tiene tu carácter, así que no puede espantarlos usando zidian.

—Sería políticamente conveniente unir ambos clanes de hecho. —Acotó Jiang Cheng, medianamente enterado de la situación del otro omega.

La secta Nie había quedado bajo el liderazgo del omega Nie Huaisang desde la muerte de Nie Minjue. Había existido omegas como líderes, pero siempre eran medianamente cuestionados por su naturaleza, siempre existía la preocupación de estos por cuando se casaran. Muchos de los omegas líderes se habían mantenido solteros debido a ello. Los alfas creían que podrían escalar rápidamente si marcaban a uno con el liderazgo de una secta.

—Exacto. —Respondió Wei Ying. — Si aún me consideras algo, pues estas emparentado con el clan Lan. Eres tío del heredero de LanLin, quizás mi hermoso sobrino acepte sus sentimientos y se case con algunos de mis discípulos favoritos. Y si te casas con Nie Huaisang te unirías al clan Nie.

A diferencia de todas las demás opciones, Jiang Cheng realmente se puso a meditarlo. Físicamente tendría un esposo agradable a la vista, a pesar de no ser fuerte, sabía que tenía temas de conversación interesante, además manejaba todo tipo de información sobre las vidas de los importantes miembros de otras sectas, era inteligente también. Al menos, no sería un desconocido estúpido alfa sin dignidad ni gloria.

—Pero yo quiero tener un cachorro. —Mencionó con tristeza.

Él realmente deseaba tener un hijo más allá del tema de poseer un heredero.

—Y lo tendrás. Te metes a la cama del hermano mayor, engendras un cachorro y lo crías con Nien Huaisang.

— ¡De ninguna manera! Como crees que voy a engendrar un bastardo.

—No lo harás porque tú lo reconocerás. Sera tu hijo y el de Huaisang. Además así te hubieras casado con el hermano Xichen, tu hijo habría heredado el apellido Jiang ¿o no?

—Sí, pero...no...

—Dices que el hermano no te ama, pero estoy seguro que lo calientas y te desea. Entonces, puedes hacer que se acueste contigo.

Jiang Cheng recordó perfectamente el día anterior y las veces en que se besaron. Si le hubiera dejado seguir, ellos seguramente lo hubieran hecho. Al menos le resultaba atractivo para tener sexo. Lo cual le calentaba pero ofendía a partes iguales.

—No quiero que me tome solo por eso.

— ¡Jiang Cheng, decídete! ¿Quieres hacer que el hermano se enamore de ti? ¿O simplemente prefieres dejarlo ir y hacer tu vida? Ohh por el cielo, te he brindado todas las opciones disponible

Wei Ying se lanzó encima de los cojines agotado.

—No...no podría acostarme con Lan Xichen solo para tener su cachorro, además no es seguro que lo tenga a la primera.

—Lo intentas nuevamente.

—Te estás pasando.

—Bien, sabemos que si lo intentas cerca de tu celo te embarazaras, es tu destinado así que ambos deben ser muy fértiles uno con el otro.

—No podría. Saber que quizás desea que otro esté en su cama aunque sea por una noche. Y luego el recuerdo...

—Pues te gusta, al menos deberías de probarlo y hacerte con el cachorro que tanto quieres.

— ¿Tú crees que un alfa no va a pelear por su cachorro aunque no le guste la madre?

—No tiene que enterarse. Yo no le diré. Estoy de tu lado en esto.

—No

—Entonces, busca un alfa que no te interese demasiado, lo secuestras, te acuestas con él y tienes tu preciado cachorro.

—Hablas como si no fuera lindo tener un bebé.

—Lo es, pero también muy cansado.

—Estoy preparado.

— ¿Por qué no adoptas uno? Te casas con Nie Huaisang y adoptan un niño. Hay muchos huérfanos.

—Pero yo quiero....no es lo mismo. —Negó ante la idea. No deseaba admitirlo, pero deseaba un pequeño Xichen corriendo por los campos de Muelle de Loto.

—Estas siendo cruel. Claro que lo es. Yo quiero a Lan Yuan mucho. Lo amo, lo protegería con mi vida. A pesar de que no pude verlo crecer, le quiero así. Lan Zhan lo crío y mira en que caballero se convirtió. Es todo un Lan lo veas por donde lo veas.

Aquello le hizo pensar. De hecho, su sobrino había tomado parte de su carácter ya que él lo había criado, lo adoraba, ciertamente daría su vida por él. A veces su hermano podía brindarle claridad a su mente. Se dio cuenta que a lo que se aferraba era a la idea de sentir un embarazo, pero también a tener un hijo con el alfa que le gustaba. Pero aquello no iba a suceder.

—Yo también pienso adoptar otro bebe. —Confesó Wei Ying

—Pero tú y Lan Wanji pueden engendrar muchos.

—Sí, pero quiero tener un cachorro de esa manera. Alguien a quien cambiarle la vida, criarlo con amor, protegerlo, un pequeñito que me necesite. Además eso le permitirá a mi cuerpo descansar de un posible nuevo embarazo. Mientras siente que estoy atendiendo a un cachorro parece que las posibilidades de concebir disminuyen.

— ¿Ya se lo has dicho al segundo maestro?

—No, pero no se negará. Crío con mucho esmero a A-Yuan, hasta ahora le cuida mucho y está orgulloso de sus progresos.

—Él realmente te adora más allá de lo racional—Suspiró Jiang Cheng—Mientras estuviste muerto, él se aparecía cada vez que yo capturaba a alguien practicando el cultivo demoniaco. Tuvimos muchos desencuentros por eso.

Wei Ying sonrío lleno de ternura por su esposo. Aunque se habían pasado la tarde haciendo el amor de forma salvaje deseó pronto volver a sus brazos.

—Bueno, Jiang Cheng, te dejó descansar y que lo medites. Sea cual sea tu decisión te apoyaré. Nie Huaisang de verdad estará interesado.

.....

La calma reinaba en Lotus Pier debido a la avanzada hora de la noche. Por su puesto, a pesar de no encontrarse en su tierra natal, los miembros de la secta Lan deberían estar durmiendo, pero Lan Xichen no podía. Se sentía inquieto como si en cualquier instante sus instintos animales de alfa le fueran a dominar.

Casualmente, escuchó que al día siguiente llegaría el pretendiente de su omega. Decidió que debería de marcharse al amanecer para no generar incomodidad. Su hermano tenía motivos para permanecer ahí, igual que los menores, pero a él no le correspondía permanecer más tiempo.

De pronto, captó el aroma más delicioso que siempre lograba turbarle y anhelar tomar más de este. Era Jiang Cheng sin lugar a dudas.

Giró su vista hacia donde su olfato le guiaba y le captó acercándose sorprendido, aun vestido con la túnica. Sabía que los miembros de Lotus Pier descansaban más tarde que los de Lan, aun así era demasiado una hora muy avanzada incluso para ello.

—Pensé que el toque de queda era respetado por todos, incluso fuera de Gusu. —Comentó el menor.

—Lo es, pero realmente no puedo dormir. A pesar de que tomé un baño relajante, medité, toque música, nada logra traerme paz. —Confesó, de pronto se sentía un poco más relajado con la presencia y aroma del omega.

—Me retiró para que ordene sus sentimientos.

— ¿Usted tampoco puede dormir no es así?

—Solo quería dar un paseo, nada más. Y vigilar que mi sobrino se haya ido a dormir. —Comentó, omitiendo que no había podido dormir por pensar en las palabras de su hermano.

¿De verdad debía renunciar a tener un alfa? Viendo lo glorioso que lucía LanXichen a la luz de la luna supuso que jamás encontraría un alfa que pudiese superarle.

Lan Xichen suspiró. No deseaba dejar ir al omega, quería retenerlo. Su aroma le traía paz, pero también ansiedad por no perderlo. Sentía que si tuviera la certeza que no se apartaría de su lado podría quedarse en tranquilidad. El solo imaginar que alguien más disfrutaría de él, le traía una tormenta interior que peleaba con su sentido común.

—Gracias por permitirme quedarme hoy. — Comentó para alargar el tiempo.

—Ya le dije que no tiene que agradecer. Usted es un renombrado líder de secta, un aliado. Es mi deber.

Su pequeño periodo de paz interno acabó. Un rugido imprudente quería escapar de sí mismo.

—Lo sé, pero después de lo mal que lo paso conmigo le deseo éxito en su próxima cita. ¿También se quedará una semana?

— ¿Qué esta insinuando? —Preguntó con el ceño fruncido.

—Nada...—Resopló. — Solo, perdóneme. Su aroma y este ambiente me intoxican. No puedo sentirme tranquilo cuando lo tengo cerca, pero el solo pensar en alejarme también me trastorna. Deseo quedarme e impedir que se vea con ese alfa, quiero besarlo ahora mismo y tocarlo, terminar lo que no finalizamos aquella noche.

Jiang Cheng no tenía palabras para responder. No sabía si reprenderle por el atrevimiento, recordarle sus lugares o lanzarse a besarlo.

"Es solo su instinto. No hay nada más que instinto."

—Pero no es correcto usar mis feromonas en mi favor, ni nuestra atracción de destinados. —Resolvió, apretando sus puños, concentrándose lo más que podía por no dejarse llevar ante el inquietante perfume del cuerpo de Jiang Cheng. — Como usted dijo, merece más que eso. Si siente que encontrará la felicidad al lado de un alfa que no es su destinado, solo me queda desearle felicidad. —Murmuró con dolor.

"¡No quiero que me deseas felicidad! ¡Quiero que pelees por mí! ¡Que me obligues a recibirte de nuevo! ¡Que me beses y toques! ¡Que me demuestras que te gusto más que JinGuangYao! ¿Por qué te rindes? No me amas, no sientes nada tan grandioso por mí".

Todos aquellos sentimientos iban y venían en la mente del omega. Ninguno fue pronunciado...

Era lamentable la situación entre ambos. Se sabían destinados, sus instintos pugnaban por olvidarlo todo y unirse, pero qué quedaría después del acto carnal. Jiang Cheng no quería darse cuenta a través de lazo por mordida qué el corazón de su alfa no le pertenecía.

—Líder de secta Lan, que descanse. —Finiquitó el líder de secta Jiang.

Se dio la vuelta, esperó unos segundos, comenzó a avanzar, apretando sus puños, su aroma salió más dulce y encantador que antes. Pero el alfa utilizó toda su férrea voluntad para guardar la distancia. Sin embargo, Jiang Cheng solo pudo pensar: "¿Qué haces? ¿Por qué no me detienes? ¿Por qué no me besas a la fuerza?"

Se dio cuenta que no sucedería. Él mismo le había aclarado que no era el indicado para hacerlo feliz aunque su instinto pugnara por estar a su lado. Ellos no tenían un futuro juntos en esa vida. Con ese fin en mente, tomó una decisión que llevaría a cabo el día siguiente.

....................................................................................................................................................

Hola a todos!!! Bueno aquí les comparto un poco de cóctel de clorox......

Este capítulo fue más que nada una exploración de los sentimientos de ambos. Jiang Cheng evidentemente no puede aceptar a LanXichen porque siente que jamás podrá ser amado como lo fue Meng Yao. Y bueno nuestro hermano mayor está confundido luego de esa confrontación. 

Creen que debería de alejarse o intervenir en el nuevo cortejo que va a recibir Jiang Cheng como muestra de respeto? 

Debería de rendirse?

Respetar su decisión de no corresponderlo o luchar por quien le gusta?

Jiang Cheng realmente le gusta Lan Xichen desde jóvenes. Me dolió mucho imaginármelos con ilusiones de estar juntitos. 

Ya veremos un poco de como Meng Yao puso al hermano mayor en sus manos. (según yo XD)

Me gustó mucho escribir la conversación de JC y WY, poco a poco vuelven a rehacer su relación, los adoro como hermanitos. Y JC necesitaba ser escuchado y recibir consejos (Aunque estos sean alocados) Tanto que apareció Nie Huaisang en el juego!!!

El extra del castigo del conejito saldrá en Pequeño Maestro Lan, y bueno la conversación entre JC y WY sucedió después de que Wei Ying tuvo su castigo de su esposito.

Me causó ternura JC con su sueño de tener un mini Xichen...Ayy hermano mayor la friegas ...

Creen que JC debería de seguir los consejos de su hermano?

Qué creen que sucederá en el próximo capítulo?? Quiero teorías!!!!

Nos estamos leyendo y no se olviden de compartir esta historia y si desean seguirme en mi fanpage Kaory-Maddnes , el IG y Tumblr.



Continue Reading

You'll Also Like

341K 38.3K 81
✮ « 🏁✺ °🏆 « . *🏎 ⊹ ⋆🚥 * ⭑ ° 🏎 𝙛1 𝙭 𝙘𝙖𝙥𝙧𝙞𝙥𝙚𝙧𝙨𝙨𝙤𝙣 ✨ 𝙚𝙣𝙚𝙢𝙞𝙚𝙨 𝙩𝙤 𝙡𝙤𝙫𝙚𝙧𝙨 ¿Y si el mejor piloto de l...
395K 63.2K 29
Park Jimin, un padre soltero. Por culpa de una estafa termina viviendo con un completo extraño. Min Yoongi, un hombre solitario que guarda un triste...
122K 7.2K 22
Chiara se muda a Madrid en busca de nuevas oportunidades para lanzar su carrera como artista. Violeta se dedica al periodismo musical, trabajando en...
116K 10.3K 31
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...