Academia Bleed (Versión físic...

By nanastyles16

1.6M 102K 6.6K

¿Qué pasa cuando llegas a un lugar y pasan cosas las cuales no alcanzaste a dimensionar? ¿Qué debe hacerse c... More

Comienzos
Llegada
Ed. Física vampírica
¿Irresistible? No lo creo
Invitación
Visión
No me obligarás, idiota
Amable conversación
Extraños comentarios
¿Quién es Gastón?
¿Carola?
¿Mala decisión?
Raíces
Algo más que solo amigos
Vacaciones en la montaña
La sobrina de Drácula
Draculita
Detalles
Reacciones extrañas
Corazonada
Datos de guerra.
Conteo Regresivo
The beginning of the end
Famiglia
Bleed
Epílogo.
Dossier.
Aviso.
Publicación en físico.
Publicación en físico. (II)
¡Publicación en Amazon!
Preguntas a la autora

Sentimientos encontrados

44.6K 3K 176
By nanastyles16

Capítulo 13

—Entonces... ¿Solo yo puedo verte?

—Por ahora... Sí.

—¿Podrías explicarme bien?

—Puedo aparecer y estar donde me plazca. A partir de ahora solo 3 personas podrán verme, tú... Y otras 2.

—¿Y quiénes son?

—... No podría decírtelo con exactitud, no sé quiénes sean.

Hablamos por horas sobre todo lo que siempre quise contarle. Haber perdido a mis padres desde hace más de un siglo es uno de los hechos que no ha dejado de dolerme, muchas veces quise que estuvieran conmigo, poder tener su consejo, su guía o simplemente sus regaños, y nunca había sido posible. No puedo ser una desagradecida con aquellos que cuidaron de mí estos últimos años, pero es un anhelo que mi corazón inerte no deja de pedir. 

Dieron las 6:00 a.m. y la perilla de la puerta se estaba abriendo. Había vuelto a la realidad, una donde estaba sola con Amber, no sabía si mi madre vivía y mi padre era un alma en pena.

—Es Amber.

—Y yo debo irme.

Se giró y llegó a la ventana.

—¡Espera!

—Me miró— Dime.

—... ¿Dónde o quién es mi hermano... O hermana?

Sonrió de lado.

—... No tengo idea. Por ahora, puedo decirte que te amo y lo he hecho siempre.

— Sonreí— Yo igual.

—¿Cat?...

Se abrió la puerta, y la figura de mi padre se desvaneció a través de las cortinas blancas.

—¡Aquí estoy!

—¿Dormis...? ¡Oh Dios!, ¿por qué tienes una herida en el cuello? —Dijo hablándome con extrema preocupación.

Oh Mierda, Gastón.

- ¿Qué?... —Me toqué y un ardor inmediato se hizo presente, fui hacia el baño y me puse de frente al espejo, pero no veía nada.

—No logro ver ninguna herida, Ambs.

—¿Cómo que no?... Tienes una herida cerca de la carótida.

La observé confundida y volví a mirar al espejo, efectivamente había una herida grande que se estaba curando.

—Oh Dios.

Lavé la poca sangra que salió del lugar afectado y Amber me ayudó con un vendaje, era muy extraño, como si la herida hubiera desaparecido el tiempo que estuve con papá.

Pasaron los días y se acercaba Noviembre. Estaba sentada en la cafetería mientras tomaba un chocolate caliente con malvaviscos, agradecía el hecho de que no perdiéramos el gusto por la comida humana y pudiéramos conservar nuestros sabores favoritos con nosotros, era un hechizo complejo pero posible. 

El frío del otoño ya avisaba que las hojas se empezarían a decolorar de rojo, naranja y amarillo. No había vuelto a ver a papá, pero lo más seguro es que él a mí, sí.

En aquel momento una sola pregunta rondaba mi cabeza con insistente angustia, ¿con quién Pasaría navidad si no tenía a dónde ir? ¿Iba a quedarme allí sola?, ¿ o habría posibilidad alguna de irme a casa de Anna?

—¿En qué piensas, pequeña Black? —Salía humo de su aliento por el frío.

—Nada importante... —Mis ojos se perdían en ver las hojas de los árboles caer.

Rio.

—Cat... Sabes que mentir es malo.

—No miento... 

Se sentó a mi lado y siguió mi mirada con la suya.

—Son hermosas, ¿no? —Sus ojos se posaron en un par de hojas que caían juntas.

—Si te refieres a las hojas, sí.

—Se parecen a ti.

—... ¿Opacas y sin vida?

—No. —Arqueó una ceja y ambos reímos— Son hermosas y raras.

—Me... ¿Consideras rara?

—Podía decir que sí, porque lo raro es diferente.

—¿Y qué tiene de bueno ser diferente? —Dije irónica.

—Calló por unos segundos, meditando su respuesta— Me gusta lo diferente.

¿En realidad había dicho eso? Mis huesos se sintieron helados. 

—Frank... Gracias por tratar de subirme el ánimo cuando ni siquiera sabes por qué estoy así.

—¿Quién te ha dicho que no lo sé?

—¿Qué? ¿Cómo podrías saberlo?

—Yo sé muchos idiomas, entre ellos la expresión corporal, y puedo decirte por la manera en que miras, y tu postura al sentarte, que estas tensa por no tener a donde ir en navidad.

Enderecé mi espalda y crucé los pies.

—Sonrió— Eso significa que entendiste, y te has relajado, bajando un poco la guardia.

—Lo miré— Impresionante.

—Gracias... Pero, ¿sabes que es lo mejor?

—... ¿Qué?

—... Que te hice olvidar tu angustia por unos momentos.

Reímos.

—Y tú, ¿con quién pasarás navidad?

—Conmigo mismo.

—Oh, ¿en serio?

—Sí, era hijo único, y el linaje de mi familia murió hace varios años, por ende no tengo familia a la cual darle regalos, ni tampoco una chica para regalarle muérdago. —reímos— Así que supongo que seremos los únicos en la academia.

—Oh... Vaya. —Me ruboricé un poco.

—Se aclaró la garganta— Bien, es hora de irme. Debo arreglar unos documentos con Grace antes de que se vaya.

—Bien, entonces... Nos vemos luego.

—Nos vemos luego. —Repitió con una sonrisa.

Me dio un beso cerca de los labios, y se fue, dejándome una extraña sensación en el pecho, como si hubiera querido que el beso fuera más cerca de mi boca. 

Terminé mi chocolate y fui a mi habitación, quería dejarla organizada por si decidía irme con Anna, pero lo que dijo Frank flotaba por mi mente...

¿Será bueno quedarme sola con Frank en la Academia?


Sentía algo fuerte respecto a él, como si mi aura estuviera completa junto a la suya, pero me asustaba porque nunca había sentido nada parecido, y no creía que le interesara como más que una buena amiga.

Abrí mi closet y me cambié por algo más "sport".

Se estaba acabando la batería de mi celular, así que comencé a buscar mi cargador. Abrí cajones, busqué debajo de la cama, en el colchón...

Hasta que lo vi bajo una pila de ropa, y con él algo que no recordaba.

Tomé el cargador en una mano y lo puse a funcionar. Luego con la otra tome el sobre color amarillento, que parecía haber sido mandado hace años, y fue solo hace unos meses.

Lo miré por un lado y decía con una Caligrafía que obviamente no era la Annabette.

"De: Annabette Smith

Para: Catalaia Black."

Estaba a punto de abrirlo cuando tocaron la puerta.

Fui a abrir y unos rizos se asomaron por la puerta.

Harry.

Estaba a punto de irme. Tenía pensado quedarme, o ir a New York... Pero surgió en Liverpool cierto problema que debo resolver.

Hablé con Grace y recogí mis cosas, solo me falta ir a despedirme de ella. Últimamente he sentido por ella un cariño menos... ¿Pasional, podría decirse? Pero la conexión sigue siendo igual de fuerte.

Llegué a su habitación y toqué 3 veces la puerta, ella me abrió con una sonrisa.

—Hola Cat.

—Hola Hazz.

—Mm... Yo solo... —Me aclaré la garganta— Solo venía a despedirme.

—Oh, claro, y... ¿A dónde irás?

—A Liverpool, mi pueblo. Iré a... Visitar a mi hermana.

—¡Oh!, —Se tensó— y... ¿Cómo dices que se llama el pueblo?

—Liverpool.

—Entiendo... Entonces espero que te diviertas, y nos vemos en 2 meses.

—Gracias, igualmente.

Le di un beso en la mejilla y me fui.

Catalaia.

Cerré la puerta y Me dispuse a abrir el sobre, saqué un papel manchado de sangre con una nota, todo era tan sospechoso que la angustia se apoderó de mí. 

"Si no quieres terminar como ella, espero no verte en Liverpool... Recuerda que te Vigilo.

Gastón.- "

Tiré la nota a un lado y vacié el sobre en la cama...

Mi corazón brincó de cólera al ver lo que esa bestia había hecho con mi amiga...

Eran cuatro fotos tomadas desde distintos ángulos con una misma imagen:

La cabeza de Anna.

Salí al jardín trasero y rasgué las fotos junto con la nota, las quemé mientras varias lágrimas caían por mis mejillas, a partir de ese momento mi corazón había cambiado y oficialmente le declaraba la guerra a ese peligroso extraño.

Continue Reading

You'll Also Like

49K 5.2K 48
Kamila, una chica de 16 años, descubre que no es una chica ordinaria como creía. Al ser secuestrada en el baño de su instituto por dos chicos de ensu...
111K 5.6K 25
Anabelle Saltzman se despierta en una sala de hospital después de estar desaparecida por 2 años, todos intentan averiguar qué fue lo que sucedió con...
110K 6.3K 106
Emilia es una chica hermosa, con una sonrisa encantadora, pero su corazón a sido dañado tras la muerte de su madre, su padre Santiago, conoció a una...
46.3K 1.5K 36
Jessica, una chica de 18 años que ha sido maltratada y odiada por su familia desde su nacimiento, Dada las circunstancias de que su padre obligó a su...