Hoseok sintió como unas grandes pero, delicadas manos se paseaban por sus muslos, haciéndolo estremecer con cada caricia, una que otra mordida en ellos hacia que se sacudiera en la cama; sintiendo como pequeños pero, afilados colmillos raspaban la sensible piel del interior de sus muslos.
Soltó un sonoro suspiro lleno de placer al sentir como una larga y un tanto rasposa lengua deslizarse a lo largo de su falo. De esa manera fue como logro identificar quien era el que se encontraba con la cabeza enterrada en su entrepierna, no podía ser nada más y nada menos que Yoongi. Siendo un hibrido Felino una de sus principales características es su lengua un tanto áspera, algo que realmente llegaba a enloquecer a Hoseok y Namjoon al momento en que Yoongi decide darles una felación. Hoseok enterró sus manos en la cabellera ajena manteniendo el ritmo.
Escucho como Yoongi soltó un leve gemido.
Los días siguientes después del intenso celo que había golpeado sin aviso a sus mascotas, Hoseok descubrió que Yoongi tenía una fijación oral, se esmeraba de tal manera al momento de tener algo que succionar en su boca, en algo con el cual podía mantener ocupada su lengua. Acariciando con rudeza, luego hacerlo con lentitud y suavidad para finalmente tocar ligeramente con sus dientes y así sucesivamente.
Hoseok se sintió en el borde, estaba a punto de venirse. Con un alargado y ronco gemido, despertó de su sueño. Abrió sus ojos con lentitud pero, los volvió a cerrar ante la intensa luz que provenía de la ventana.
Frunció su ceño con confusión, supuestamente había despertado de su sueño erótico con Yoongi. ¿Por qué seguía sintiendo una húmeda cavidad alrededor de su miembro?
Sensible ante su reciente corrida, un estremecimiento le corrió todo el cuerpo que en un acto involuntario alejo su cadera de aquella cavidad húmeda.
— Mmm —Soltó un gruñido ronco en un intento de desperezarse. Repentinamente sintió una tira peluda, suave y esponjosa alrededor de su cuello, enrollándose hasta su cabeza. Enterró su rostro inconscientemente en ella, sintiendo su suavidad, emanaba un delicioso aroma a coco, como su shampoo que recientemente había comprado en el súper mercado.
Abrió sus ojos abrumado e intento levantarse haciendo así que su rostro chocase con unas regordetas y prominentes mejillas traseras, un gran peso se lo evitaba. Ante su choque escucho un leve chillido e intento mirar hacia abajo con su ceño fruncido asimilando de poco a poco la situación en la que se encontraba.
Escucho un fuerte "Plop" dejando así de sentir la cavidad húmeda junto a la lengua rasposa alrededor de sus testículos para seguidamente escuchar un "Buenos Días Amo" de una voz demasiado familiar.
— ¿Yoongi? — Pregunto a la nada Hoseok, paseo una mano por todo su rostro intentando ahuyentar el sueño reciente, dejándola caer inconscientemente en el culo contrario dando así una leve nalgada a este.
Era una manera extraña y para nada común de despertar, con un prominente trasero pálido frente a su rostro perteneciente a un lindo y sexoso hibrido felino quien se encontraba otorgándole minutos antes una tremenda mamada mientras Hoseok seguía en el quinto sueño, soñando cosas húmedas que en realidad estaban sucediendo. Hoseok poco a poco se había acostumbrado a los repentinos ataques de Yoongi y realmente no se podía quejar de ello.
Yoongi movió su cabeza y lo observo por encima del hombro, estando ambos en una posición de 69 como dirían las explicitas lenguas , la vista de Hoseok se encontraba en su mayoría opacada por el gran culo de Yoongi mientras que su cola seguía enrollada entre su cuello y cabeza.
— ¿Cómo has llegado hasta ahí? — Pregunto el dueño comenzando a acariciar con parsimonia aquel prominente trasero frente a él; un acto tan natural que lo había comenzado a hacer sin conciencia de sí mismo.
Yoongi deposito un sonoro beso en el vientre bajo contrario ocasionando un escalofríos a su dueño — Digamos que necesitaba sentir algo en mi boca para chupar. — Se encogió de hombros sonriéndole. — Y qué mejor que tú largo pene. — Dijo al unísono con Hoseok.
Eran tantas las veces que Yoongi había dicho eso cada mañana frente a Hoseok que este ya se había aprendido aquel dialogo. Yoongi realmente no tenía remedio. Deposito un tierno beso en la nalga derecha, comenzando a estrujar con más fuerza ambas mejillas. Amaba el trasero de Yoongi.
Comenzó a acariciar con lentitud la entrada rosada de su felino mientras repentinamente recordó cuando Namjoon los había obligado a usar un consolador, dildo grueso de doble cabeza, por el simple morbo de ver ambos traseros, dueño y felino, chocar con tan frenesí al buscar ambos el clímax mientras se masturbaban al igual que Namjoon observándolos.
Ahora que lo piensa, recuerda haberle visto un celular en la mano desocupada de Namjoon.
¿Qué?
— ¿Qué hay de Namjoon? — Pregunto Hoseok sin dejar de acariciar con una mano la roseta entrada y con la otra la nalga izquierda.
Yoongi restregó su rostro en la entrepierna de Hoseok por el estremecimiento de sentir algo tocando su sensible entrada, soltó un leve maullido para finalmente contestar — Intente pero, me corrió de su cama. — Hoseok soltó una risita. — ¿Sabes? Esta es la posición que más calienta a Namjoon. — Afirmo Yoongi.
Hoseok detuvo su risa. Últimamente se sentía distanciado con Namjoon más bien, sentía como si Namjoon no lo quisiese de la misma manera que quiere a Yoongi. Cuando se encontraba en clases al regresar a casa los encontraba a mitad de acto amoroso, en un principio nunca empezaban si alguno de los tres faltaba pero, eso comenzó a cambiar conforme pasaron los días, Hoseok prefería no interrumpirlos y se hacia el cansado quedándose dormido en el sofá de la sala. Fue así como comenzó a creer que Namjoon tenía cierto favoritismo con el hibrido felino, no lo culpaba era su compinche a pesar de que ambos eran como el agua y el aceite aparte que, Hoseok sabía que antes de que lo atacasen durante la madrugada debido a su intenso celo, habían follado por primera vez el día anterior mientras Hoseok se encontraba en la universidad.
Sabía que no podía culparlos, ambos se encontraban en celo, era obvio que quisiesen acabar con su temperatura caliente con cualquiera que estuviese cerca, es el instinto animal. Pero, eso no evitaba que se sintiese menos importante.
Había decidido no hablarlo con nadie, Hoseok no quería armar un problema, él quería que sus mascotas fuesen felices, con o sin él.
Es lo que alguien haría por sus seres amados. ¿Verdad?
— ¿Amo? — Escucho a Yoongi llamarlo, sintiendo como se levantó posicionándose ahora con sus rostros juntos aun sin quitarse de encima de su dueño. — ¿Pasa algo? Sentí como tu cuerpo se tensó. —Deposito un tierno beso en los contrarios.
Hoseok sonrió ante tal acto — No pasa nada, de verdad. — Observo sus hermosos ojos felinos, pasando a sus pequeñas pero, adorables pecas alrededor de su nariz y ojos.
— Tu sonrisa esta forzada. — Confirmo Yoongi. — ¿Pasa algo amo? — Pregunto nuevamente Yoongi bajando levemente sus orejas en preocupación. Hoseok soltó un suspiro pesado.
Por primera vez Hoseok había decidido contar algo, desahogarse en otra persona que no fuera el mismo, nunca había dicho nada a nadie de sus problemas, ni a su padre cuando sufría bullying de pequeño, creía que no resolvería nada. El recordar esta horrible etapa de su vida hizo que se le hiciera un nudo en la garganta sin motivo alguno, Hoseok ya había pasado por esa etapa y él se aseguraba de haberla superado pero, todo lo que el cargaba de problemas sobre sus pequeños hombros en aquel entonces, sabía que su padre se preocupaba por el así como ahora Yoongi y Namjoon se preocupan por el pero, simplemente acostumbro a no contar nada y guardárselo siempre.
Fue inevitable.
Las primeras lágrimas cayeron.
Sus emociones y sentimientos se mezclaron haciendo un revoltijo en su interior, abrumándolo en el momento. Se sentía tan patético cuando esto le sucedía, siempre procuraba que esto no le pasase frente a sus pequeños híbridos pero, ahora eran tan mayores como el, ahora él se sentía el inferior, el menor de su apartamento que aunque, en edades siempre fue así, Hoseok no lo sentía, siendo el dueño de esos dos peculiares híbridos.
Intentó decir algo, excusarse pero, simplemente su boca se abría para dejar salir pequeños sollozos.
Yoongi lo abrazo con fuerza al observar como repentinamente su dueño derramaba lágrimas en silencio, recargo la cabeza del humano en su pecho, comenzando a emitir fuertes pero relajantes ronroneos en un intento de calmar a su amo, sabía que sus ronroneos eran una gran debilidad para sus parejas. Se encontraba sorprendido ante su amo, sabía que todas las personas tienen un límite pero, reconocer que algo malo le está pasando a su fuerte, rayo de sol y esperanza que tiene como amo, fue simplemente un poco impactante.
Cuando finalmente sintió que los sollozos de Hoseok se calmaban de a poco, pudo sentirse un poco más tranquilo. No sabía aun por qué su amo se había roto tan de repente pero, agradeció que haya sido frente a su presencia que estando Hoseok solo.
Recuerdo que cuando los tres aun vivían junto al Señor Jung, Hoseok tendía a ocultar ciertos golpes que le hacían durante clases debido al bullying constante que recibía, Hoseok nunca decía o comentaba algo acerca del bullying que aun sufría. Yoongi agradece mayormente al Señor Jung por nunca darse por vencido con su único hijo, siendo padre y madre, podría ser una carga muy pesada.
Recuerda que si el Señor Jung no lograba sacar información de Hoseok acerca de lo que le haya pasado, era momento de que entraran Yoongi y Namjoon animándolo a que confesara sus problemas terminando llorando entre los brazos de sus mascotas híbridos.
Tal parece que su caliente amo no había cambiado con el paso de los años. Una vez más después de tanto tiempo, había vuelto a guardar sus preocupaciones y emociones para sí mismo.
Yoongi finalmente decidió hablar. — Hoseok, recuerda que siempre estamos para ti. Las que una vez fueron tus peculiares mascotas, ahora son tus parejas. —
Hoseok negó con la cabeza aun enterrada en el pecho de Yoongi. — Lo lamento bebe, fue un momento explosivo en mí. — Hablo sin levantar la vista.
Yoogi frunció el ceño junto a un puchero en sus labios — ¿Momento explosivo? ¿A qué se debió? — Sintió como el cuerpo contrario se tensaba. — ¿Está sucediendo algo en tus estudios? ¿Tu trabajo? —
Hoseok negó con la cabeza.
— ¿Te molesta que vaya a clases de piano? — Pregunto temeroso, bajando levemente sus orejas gatunas. Yoongi realmente se había enamorado del piano y amaba ir a clases de piano todos los días de la semana aunque, pase un poco de menos tiempo con Hoseok, lo recompensaba por las mañanas.
— No, claro que no. Tú te enamoraste del piano. — Respondió el humano negando con la cabeza y formándose una pequeña sonrisa.
— ¿Entonces qué es? — Pregunto Yoongi un poco desesperado por no dar con la respuesta del problema.
De manera lenta se borró la leve sonrisa que se había formado en el rostro de su amo.
"Tal vez, solo sea yo el problema"
— Hoseok, ¿Esto tiene que ver acerca de ser una pareja dispareja? ¿Una relación de tres? — Pregunto un tanto temeroso Yoongi.
Hoseok no hizo ningún ademan de contestar ante las dudas de Yoongi.
Yoongi lamentablemente lo malinterpreto de la peor manera. Alejándose de Hoseok, se levantó de la cama en completa desnudez. Hoseok lo observo con sus cejas fruncidas, él no había dicho nada como para que Yoongi lo alejara de tal manera.
— Entiendo, ¿Por eso ya no te unes a nosotros? — Pregunto el felino con un poco de brusquedad, observándolo por sobre su hombro.
Respondió Hoseok negando de manera lenta, abrió y cerró repetidas veces su boca pero, no pronuncio nada. Finalmente se sentó en su cama observando a Yoongi aun con su ceño fruncido. La mente de Hoseok se puso a mil por hora, pensando porque repentina acción de su felino hacia él, no le había dado motivos para enojarse o acusarlo de algo.
¿O sí?
— ¡Contéstame Hoseok! — Hablo en alto Yoongi, ignorando que Namjoon seguía dormido. — ¡Dímelo en la cara! ¿¡Acaso no somos importantes para ti!? —
— ¿Qué? ¡Claro que lo son Yoongi! — Respondió el humano poniéndose de pie, igualmente desnudo. — ¡No sé lo que tratas de decirme! —
— ¿¡No sabes!? ¡Acabas de decirme de manera indirecta que tienes algún problema con que seamos tus parejas! — Hablo refiriéndose a él y a Namjoon.
— ¡El problema no es que sean mis parejas! — Respondió Hoseok Apuntándolo con el dedo.
— ¡Entonces dime cual es! — Respondió el felino bajando de un golpe la mano alzada de Hoseok.
Este último mencionado se sorprendió ante el acto de Yoongi, una vez más frunció su ceño. — No quiero causar problemas. — Respondió girando el rostro evitando la mirada de Yoongi.
Yoongi soltó un pesado suspiro. — ¡Bien! — Exclamo alzando los brazos y dejándolos caer. — ¡Si quieres guardarte todos los malditos problemas! ¡Adelante! — Camino hasta el ropero de su dueño y saco unos jeans rotos junto a un jersey gris que en la parte trasera venia el apellido "Jung" — Me largo, se me hace tarde para mis clases. —
Hoseok formo un puchero de manera inconsciente viendo como Yoongi salía de la habitación con su ropa en mano. Por eso mismo no contaba los problemas que traía en su propia mente. Solo agrandaban el problema.
Yoongi se vistió en la sala y tomo un jugo de la nevera. Emprendiendo su camino hacia la universidad de Hoseok pensaba acerca de la reciente pelea, fue inevitable para el felino ponerse a la defensiva puesto que, hace unos cuantos días Namjoon le había confesado que sentía de una u otra manera que Hoseok tenía un favoritismo hacia Yoongi; eso lo puso en duda ante el comportamiento extraño de su humano.
Soltó un suspiro, solo esperaba que ahora que pasarían más tiempo juntos, Namjoon estuviera equivocado.
La tarde comenzaba y Yoongi aún no salía de sus clases de piano. Quedando solamente Namjoon y Hoseok en casa, el último mencionado haciendo la limpieza completa de la casa mientras que el can se encontraba sentado en el sofá.
Hoseok nunca se esperó estar sentado en los fuertes muslos de Namjoon después de mucho tiempo y todo porque el can lo había decidido, no había sido una orden de Hoseok o Yoongi como anteriores veces. Hoseok soltó un resoplido sonrojado — Namjoon, no estoy jugando. — Se cruzó de brazos observando seriamente al menor — Tenemos que recoger, por los estudios no me quedaba tiempo de limpiar bien la casa y ustedes no me ayudan — formo un hermoso puchero — Yoongi es un holgazán, ahora más con sus clases de piano y tu rompes todo NamJoonie — Soltó un suspiro derrotado.
Namjoon bajo un poco sus peludas orejas — No deberías estresarte por eso —
Hoseok sabía que el realmente no estaba estresado por no haber podido limpiar la casa, sino por su reciente pensamiento de Namjoon. No podía sacarlo de su mente, Namjoon solamente lo buscaba cuando Yoongi no se encontraba cerca o dispuesto, Hoseok se sentía como su segundo plato.
Namjoon Tomo con delicadeza la barbilla del mayor haciendo que sus miradas se encontraran de nuevo y deposito un tierno y rápido beso en los esponjosos y delgados labios de su querido amo.
Soltó una risita al ver el rostro sonrojado de Hoseok, inconscientemente Namjoon comenzó a mover su esponjosa cola y deposito otro tierno beso de pico y otro, otro, uno más, dos mas no hacen daño, para el séptimo beso Namjoon lambio el labio inferior de su amo y ligeramente lo mordió, ocasionando que este soltase un leve jadeo, acción que aprovecho Namjoon para adentrar su musculo bucal saboreando todo a su alcance. Los chasquidos y sonidos humeantes era lo único que estaba presente en la sala, la televisión había quedado en el olvido con un "Mute" activado.
— V-Vayamos a la cama... — Pronuncio con su voz ronca llena de lujuria mientras arqueo su espalda haciendo que los dedos de Namjoon volviesen a tocar aquel punto sacándole nuevamente un gemido alargado.
Namjoon saco con lentitud sus dedos, ocasionando un quejido por parte de Hoseok ante el vacío repentino y aun estando con el delantal puesto, el Can lo cargo con delicadeza y lo llevo hasta la habitación principal, mientras repartía besos entre los cabellos castaños.
Lo dejo con lentitud y delicadeza en la gran cama, aquella donde por primera vez juntaron sus cuerpos siendo uno, donde a partir de un inesperado celo, se unieron los tres.
Donde Hoseok se dio cuenta que amaba profundamente a sus mascotas.
Namjoon se posiciono encima de el sin aplastarlo y lo admiro por unos minutos que para el mismo Hoseok fue una eternidad, su rostro se sonrojo en demasía al sentir la profunda mirada de su pastor alemán, lo hizo sentir tan vulnerable, recordando la reciente pelea que tuvo con Yoongi en la mañana, sus inseguridad volviendo a él.
El Can bajo cabeza hasta que sus labios se juntaron con una intensa suavidad que los hizo derretir a ambos, había comenzado con un hermoso y encantado beso lento, donde demostrada su aprecio y amor entre sí, donde ninguno tenía tales pensamientos creyendo que entre ellos había favoritismo en su extraña pareja dispareja; hasta que este se tornó caliente, la lujuria regresando a sus cuerpos hizo que se convirtieran en un conjunto de mordiscos y lambidas de labios, cortos y pequeños gemidos salían de la garganta de Hoseok mientras que Namjoon gruñía en respuesta ante tales actos dulces.
Había pasado demasiado tiempo en el que no se tocaban con lentitud entre ellos.
— N-Namjoon... — Soltó en un leve gemido Hoseok, dirigió su mirada ante la penetrante de su hibrido. Tomando aire profundamente y un repentino valor, hablo con los ojos húmedos. — Quiero... que seamos uno. —
El mencionado movió su cola afelpada con emoción, no podía soportar más el no penetrar a Hoseok con su viril miembro completamente duro. Sentía que habían sido años desde la última vez que hizo el amor con su adorado amo.
Sin saber que Hoseok sentía lo mismo.
— ¿Estás listo? — Pregunto Namjoon directo en el oído contrario posicionándose entre las piernas de Hoseok — Ya te eh preparado, entrare ahora...— Comento con su voz totalmente ronca por la lujuria del acto.
Hoseok solamente había asentido mientras abrazaba el cuello del Can con un poco de fuerza, sentía sus ojos llenarse de húmedas lágrimas.
No podía darse el lujo de llorar en tal situación frente a Namjoon.
Namjoon comenzó a adentrarse con una grata lentitud en la cavidad contraria, había pasado tanto el tiempo que Hoseok se encontraba estrujando de una manera tan codiciosa y placentera el viril miembro de su hibrido. Hoseok abrazo fuertemente a su can.
— Ho-hoseok cariño, debes de relajarte. — Pronuncio de manera ronca Namjoon en el oído contrario. Su amo iba a matarlo de placer. — Como la primera vez. —
Hoseok recordó aquella noche en la que Yoongi por puro morbo placentero decidió observar a Namjoon desvirgar el pequeño y delicioso culo de su querido amo. Aquel suceso hizo que sintiera su alma impregnada en Namjoon al igual que había sentido con Yoongi la primera vez que lo hizo. El felino a mitad de acto decidió colarse entre ellos sorpresivamente adentrando el largo miembro de Hoseok en su cavidad anal mientras besaba de una manera tan animal a Namjoon.
Finalmente asintió a la petición de su mascota con lentitud para seguidamente dar pequeños respiros intentando calmarse.
Namjoon finalmente había entrado por completo en la estrecha y rosada entrada. — Me aprietas tan bien... — Susurro Namjoon contra la mejilla contraria y finalizando con una larga lamida a esta.
A Hoseok le recorrió un escalofrió por su espalda dándose cuenta que la había arqueado minutos antes, debido al tono de voz de su can.
El hibrido canino comenzó con un lento movimiento de pelvis para tantear el terreno, sacando un gutural gemido a su dueño ante su grosura dentro de él, quien sujeto el los cabellos ahora castaños, ocasionando que Namjoon gruñera fuerte.
Llevando pocos minutos estando en el acto, Namjoon levanto sus afelpadas orejas, dejándolas erguidas señalando el techo, sin dejar de moverse frunció su ceño ¿Había escuchado la puerta abrirse?
— ¿Dónde están? ¡Tengo hambre! —
En definitiva era Yoongi. Namjoon observo el rostro de su amo que al parecer, por su oído humano no había escuchado al Felino en la planta baja.
Namjoon en ningún momento había detenido sus lentas embestidas, solo fruncía su ceño al intentar escuchar en que parte de la casa se encontraba Yoongi pero, el placer lo consumía y prefería disfrutar este hermoso momento con su dueño. Volteo a verlo y lo encontró con lágrimas recorriendo por sus mejillas
El can detuvo sus embestidas. — ¿Te eh lastimado? — por un microsegundo Namjoon se sintió la peor escoria del mundo al pensar que había lastimado a su Hoseok pero, este pensamiento se borró de su mente al observar como Hoseok negaba con la cabeza mientras sonreía.
— No te detengas. — Pronuncio en un gemido alargado tirando su cabeza hacia atrás.
Fue la escena más erótica que había visto Namjoon tan cerca de su amo.
Namjoon limpio los rastros de lágrimas de sus mejillas y deposito un tierno beso en los labios contrarios para luego morderlos y comenzando a realizar con más intensidad sus embestidas. Las delgadas manos de Hoseok temblaban ligeramente ante la curiosidad de su cuerpo. Se dirigieron al cuello de la camiseta de Namjoon y se deslizaron dentro de esta, acariciando la carne desnuda. Namjoon soltó un suspiro contra los labios ajenos.
Hoseok vislumbro una figura en el umbral de la puerta y sonrió en tal dirección. Alzo su brazo derecho en modo de invitación a aquella figura, volteando también Namjoon a observar. — Yoongi Bebe, ven con tu Amo. —
Yoongi se sorprendió por unos instantes para luego mostrar una ladina sonrisa donde podía apreciarse sus caninos afilados. Movió su cola con un serpenteo haciendo sonar el audible cascabel que yacía enrollado en ella.
El felino no se encontraba sorprendido ante el acto amoroso frente a sus ojos por sus parejas, lo supo en el instante en que entro a la casa, esta se encontraba inundada por el aroma de la excitación de ambos, can y humano.
Fue tan inesperable la manera en la que Yoongi se mostró ante ellos, que incluso Namjoon dejo de moverse y Hoseok de gemir. El felino vestido con aquellos pantalones ajustados a sus bien formadas piernas, con la pequeña abreviatura al inicio de la cinturilla para que su cola se moviera con libertad y el jersey que había tomado del closet de Hoseok aquella mañana abierto, dejando al aire su hermoso torso blanco. ¿Ya se mencionó sus erectos pezones rosados?
Yoongi no estaba enojado porque aquellos dos hayan empezado sin él, incluso le alegraba en demasía, recordando lo que ambos le dijeron hace tiempo, debían de retomar su cercanía como parejas. Eran tres juntos en este juego, ninguno más, ninguno menos.
Cero Favoritismo.
— Vamos, no se detengan cachorros. — Comenzó a avanzar de manera lenta y sensual sin dejar de obsérvalos. — Quiero ver nuevamente como Namjoon penetra a nuestro querido amo hasta dejarlo sin habla.
Namjoon arrugo su nariz. Yoongi olía diferente.
Hoseok observo el gesto de Namjoon e involuntariamente también olfateo el aire... pudo olerlo.
Olfateo un exquisito aroma entre rosas y limpieza, un aroma que le envió una corriente llena de placer por todo su cuerpo hasta llegar a su larga polla entumecida, instintivamente movió su cadera y estrujo el miembro de Namjoon con su cavidad.
Namjoon soltó un quejido ante tal apretón repentino, gruño al volver a observar a Hoseok. Ambos volvieron a ser cegados por la intensa lujuria que estaban sintiendo elevarse con aquel extraño aroma que invadió la habitación. Retomando el ritmo, Namjoon comenzó a envestir de manera más ruda a Hoseok, dando de lleno en su punto cúspide.
Yoongi sin dejar de sonreír, se detuvo a un lado de la cama y se dispuso a desvestirse con lentitud mientras seguía observándolos, sabía que ellos no se olvidaban de su presencia, Yoongi de vez en cuando serpenteaba su cola haciendo sonar nuevamente el cascabel amarrado en ella.
Una vez desnudo y totalmente caliente que incluso estaba sudando sin aun hacer ningún ejercicio muscular, decidió subirse de sorpresa a la cintura de Hoseok dando la espalda a Namjoon.
Comenzó a formular envestidas encima de su amo, chocando ambos miembros con los movimientos, Hoseok instintivamente lo tomo por la cadera, con la boca en completa "O" por lo abrumado que se sentía al sentir todo ese placer, era humano y el no soportaría mucho tiempo.
Yoongi Chocaba su energética y peluda cola contra el cuello y rostro de Namjoon, volteo a verlo por sobre el hombro y de manera sensual saco su larga lengua lambiéndose los labios seductoramente.
Fue ahí donde Namjoon lo comprendió.
Con la cola de Yoongi enredada alrededor de su rostro, aquel inusual pero, delicioso aroma que repentinamente inundo la habitación proveniente de Yoongi, aroma que jamás había olido en su perra vida. Significaba que Yoongi...
— ¿¡Estas en Celo!? — Pregunto en un grito Hoseok mientras al instante era callado por la mano de Yoongi quien con la libre apretujo la polla de su amo hasta que hizo que este se viniese en ella, observando como Hoseok giraba sus ojos hacia atrás junto con su cabeza soltando un sonoro gemido que fue retumbado contra los dedos de Yoongi sintiendo este su exhalación caliente.
Namjoon no podía pensar con claridad. No mientras la cavidad anal de Hoseok lo absorbía de una manera tan codiciosa combinado con el fuerte aroma que desprendía el cuerpo del felino. Al igual que el humano, dando unas fuertes estocadas alargando el orgasmo de Hoseok al máximo, se vino.
Y sorprendentemente Yoongi también.
Tanto Hoseok como Namjoon se encontraban recobrando el aliento ante sus recientes orgasmos. Namjoon había enterrado su rostro en la curva del cuello del felino mientras que Hoseok seguía con su boca encubierta por la mano contraria y respirando agitadamente por la nariz.
En cambio, Yoongi observo a Hoseok sonriendo y nuevamente sacando su áspera lengua la paso por sus caninos comenzando a elevarse de encima del humano, hizo un apretón al pene de Hoseok en su mano, haciendo que el dueño soltase un reprimido gruñido, dándose cuenta que seguía duro a pesar de su orgasmo.
Hoseok abrió los ojos sorprendido y observo la mano de Yoongi. Efectivamente seguía duro y él no podía creerlo.
Observando la mano de Yoongi, este alzo el miembro y toqueteo la punta contra su entrada. Hoseok encajo las uñas en la suave y blanca piel del felino, adentrando con lentitud el miembro viril, este finalmente se dejó caer en ella hasta quedar sentado encima de Hoseok. Soltando un alargado gemido que trajo de vuelta a Namjoon.
Se había perdido entre sus pensamientos intentando encontrar una lógica ante el repentino celo del felino.
Espera.
Hoseok lo descifró primero que él.
¿Cómo?
— ¿Yoongi cómo es posible...? — Su pregunta quedo sin terminar al ver como repentinamente el cuerpo de Yoongi se meneaba sobre Hoseok. — ¿¡Hoseok sigue duro!? — Namjoon miro impactado a Hoseok por encima del hombro de Yoongi. Esperando por una respuesta.
— Yo... — Intento formar la oración pero, un involuntario gemido salió de su boca y comenzó a elevar sus caderas para embestir con más brutalidad a Yoongi. Exhalo un gemido alargado. — Tampoco... lo entiendo bro... — Logro terminar finalmente sin detener sus embestidas.
Namjoon aun con la boca abierta por la gran noticia, sintió como un brazo pasaba por debajo de su barbilla y luego sujetaba mechones de su cabello llevándose su oreja derecha también. Giro su rostro hacia Yoongi.
El mencionado paso su lengua por los labios carnosos del can para seguido profundizar aquello en un salvaje beso, sin dejar su constante movimiento sobre Hoseok, pero más torpes.
— Namjoon... — Pronunció roncamente Hoseok haciendo que los dos restantes se separasen de aquel lujurioso beso lleno de saliva. — Vamos amigo, muévete. — Succiono la gran polla de Namjoon que aún se encontraba dentro de él. — Sigues dentro mío y estas duro como el infierno. —
Namjoon soltó un gruñido ante la succión de Hoseok y tal como su querido amo se lo pidió, comenzó a moverse nuevamente, marcando el ritmo de los otros dos. Con los ojos cerrados ante el placer, sonrió levemente y comenzó a acariciar la afelpada cola del felino.
Ambos, Namjoon y Hoseok sonrieron ante el alargado maullido que soltó Yoongi.
Yoongi aun sin soltar su agarre del cabello de Namjoon, siguió dando pequeños "Saltos" comenzando a ronronear fuertemente. — Como tu primera... vez. — Sonrió amplio Yoongi — Eh, Hoseok. —
El mencionado soltó un sonoro gemido observando al de piel blanca, con la boca abierta paso su manos por el torso de este mientras que Yoongi a la vez se acariciaba así mismo y una que otra vez a Namjoon que depositaba besos a lo largo de su cuello también acariciándolo, estrujando de vez en cuando esos blancos cachetes traseros volviéndolos rojos.
El felino encontró un movimiento constante en su cadera de tal manera tocaba su punto cúspide con la larga polla contraria, lograba sentirla por completo, su textura. Se lambio los labios.
Hoseok alcanzo los pequeños y rosados pezones de Yoongi y los estrujo entre sus dedos ocasionando que este soltase un maullido alto y se corriese sin previo aviso, ocasionando una tremenda succión al pene enterrado dentro de él.
Yoongo sin aviso, después de su corrida saco de su interior a Hoseok, se colocó a un lado de ellos y avanzo hasta el rostro del humano, posicionando sus rodillas a los lados del rostro de Hoseok, se abalanzo hacia abajo, con una mano deteniéndose en el colchón y con la otra comenzando a acariciar nuevamente el miembro un poco blando del castaño, sintiendo las insaciables embestidas de Namjoon.
Era la misma posición en la que había despertado Hoseok, solo que ahora se encontraba con un Namjoon enterrando hasta más allá de su punto cúspide su tronco.
Namjoon al observar la posición que Yoongi estaba montando para Hoseok, fue inevitable que su rabo se moviese con anticipación de ver aquello. No sabía cómo, pero llegaba a enloquecerlo aquella posición y que mejor estando los tres juntos. Es como un nueve en reflejo a la espalda del seis estando este frente a un nueve.
Era hermoso para los perrunos ojos de Namjoon.
Aunque no quitaba de su primer lugar la posición de a cuatro. Simplemente la amaba con toda su gran polla.
Sujeto el miembro duro del felino y lo adentro en su boca mientras acariciaba su saco con su mano libre, ocasionando que soltase una exhalación alargada.
Yoongi lo imito adentró el viril miembro de su amo, haciendo que sus pequeños colmillos tocaran ligeramente su grosor al momento de ir pasándolo por su húmeda boca, ocasionando que se sacudiera un poco de la cama. De vez en cuando adentrando su lengua entre las frenéticas embestidas del can, en aquel punto donde Namjoon y Hoseok se mantenían unidos. Acariciando el saco de su fiel compañero canino.
Sentir nuevamente la larga y rasposa lengua de su felino era estar como en el mismo cielo para luego caer en picada hacia el caliente inframundo llenando de fuego su cuerpo humano.
Namjoon se encontraba cerca de su orgasmo, observo como Yoongi se había corrido por tercera vez confirmándole su celo repentino. Un hibrido solía correrse repetidas veces solamente en su época de celo, pero también se encontraba la repentina fortaleza de Hoseok ante su miembro duro después de una intensa corrida e inexplicablemente estaba soportando más de lo que anteriormente hacía.
Sintiendo como Yoongi repetidas veces lambia su saco, lleno su boca con dos de sus dedos llenándolos de saliva, se inclinó un poco más sin perder sus embestidas comenzó a adentrar estos en el perfecto y redondo culo del gato.
Logrando recobrar un ritmo casi bestial, siguió haciéndola de las suyas hasta que elevo un poco más su velocidad al estar tan cerca de su clímax, sintiendo como este acariciaba todo su cuerpo entero, aplastando sus orejas en su nuca y sacando su lengua soltando constantes suspiros.
— ¡Ah...! ¡Mierda! — Exclamo Hoseok, comenzando a mover sus caderas inconscientemente atragantando un poco a su felino, Hoseok enterro sus uñas en las pálidas piernas del siamés
Volvió a retomar el miembro ajeno en su boca, sin dejar de pasar entre sus dedos las dos hermosas nueces rojillas de Yoongi, succionando la cabeza de hongo con fuerza.
Observo como el rostro de Namjoon se llenaba de euforia total por su cercano orgasmo canino, Sus dedos adentrándose en la aun apretada y rosada entrada de su felino, de ambos. Sin favoritismos de promedio. Fue donde logro entender Hoseok que tal vez, solo tal vez, él estaba equivocado en juzgar las acciones de Namjoon de tal manera.
Yoongi enrollo su cola felpuda en la cabeza de Hoseok sin impórtale si, a este le molestaba o no el cascabel en ella. Él era un humano después de todo y su reciente descubrimiento de resistencia carnal, no soportaría seguir tal ritmo de –literalmente- animales en celo.
Corrección. Gato en Celo.
Finalmente...
La Manguera de Hoseok vino a apagar los incendios.
Por dos.
— ¡Ah! —
Exclamo en un grito un tanto ronco, cerrando fuertemente sus ojos ante el repentino dolor que recorrió en su parte baja.
¡SLAP!
Contuvo su grito contra la almohada.
¡SLAP!
— ¡Pero que...! — Abrió sus ojos, adornando un surco entre sus cejas.
Miro por sobre su hombro, encontrando a Namjoon detrás de el con evidente furia en sus ojos. — ¿¡Porque mierda azotas mi culo!? — Pregunto de la mejor manera que pudo al haber sido despertado con tales dolores en sus mejillas traseras.
Hoseok giro sus ojos al frente encontrándose con un Yoongi, aun desnudo, boca abajo abrazando una almohada, sus ojos se encontraban levemente húmedos como si hubiese querido llorar. Un abultado puchero adornaba sus hermosos belfos.
Hoseok lo recorrió con su mirada, su cola levantada en una perfecta curva hacia su espalda, su delicioso culo se encontraba rojizo.
¡SLAP!
— ¡Sigo sin saber a qué se debe! — Exclamo Hoseok volviendo a mirar el rostro serio de Namjoon. Hizo ademan que se levantaría de la cama pero, repentinamente el brazo de su can ejerció fuerza en su espalda, aprisionándolo contra el colchón, a la par que sujeto sus muñecas con este.
— ¿Creyeron que no había escuchado su discusión mañanera? — Pregunto Namjoon ronco. Realmente se había enfadado.
— ¿Eh? — Hoseok volteo a mirar cómo pudo con el rostro enterrado en la almohada. — ¿Lo hiciste? —
¡SLAP!
— ¡Agh! ¡Duele! —
— Los azotes deben de doler. — Respondió Namjoon acercando un poco su rostro a él.
Hoseok trago saliva, su trasero ardía, nunca habían hecho enojar a Namjoon como para que los azotara de tal manera.
— Ahora, ¿Me dirán a qué se debió su discusión? — Pregunto Namjoon a ambos. Después de unos leves segundos sin contestación alguna añadió más calmado — Una vez tranquilos se deben de resolver los problemas, la solución nunca es gritarse el uno al otro. Debe de haber comunicación, intercambio de palabras. Especialmente tu Hoseok. —
Hoseok bajo su mirada dolido.
Namjoon tenía razón pero, simplemente en ocasiones no podía evitarlo.
— Hay algo que atormenta a nuestro amo. — Contesto contra la almohada Yoongi. Sus cejas fruncidas en clara preocupación. — Desde hace tiempo. Hoy en la mañana antes de nuestra discusión, el lloro frente mío. —
Namjoon aun en la misma postura sosteniendo los brazos de Hoseok se sorprendió.
— Yo no quería hablarlo con Yoongi. — Respondió el humano con la cabeza enterrada en las almohadas. Sintió como Namjoon soltaba sus brazos, instintivamente abrazo una almohada debajo de él. — Yo... creía. — armándose de valor, ahogo su sollozo. — Creía que preferías mil veces mejor a Yoongi que a tu dueño. —
Tanto Yoongi como Namjoon se encontraron sorprendidos ante tal declaración pero, no mencionaron palabra alguna dejando que Hoseok continuase.
— Yo entiendo que las ocasiones pueden suceder en la ausencia de alguno de nosotros pero... — Dirigió su mirada a Namjoon para seguidamente hacerlo con Yoongi. — Eran mayormente las veces que estabas junto a Yoongi, entiendo que yo estuve ocupado con mi universidad. Había ocasiones en las que anunciaba que llegaría temprano y aun así ustedes empezaban sin mí. —
— Luego me decía a mí mismo que era normal aquello y realmente lo es, somos tres, no dos. Pero, eso no aliviaba el dolor que sentía ante el pensamiento de que estuviesen mejor sin mí, eso constantemente me quitaba el humor de unirme a ustedes. — Termino e inevitablemente dejo escapar un sollozo.
Por un leve momento, la habitación fue reinada por el silencio, que en ocasiones se rompía por los dolorosos sollozos que Hoseok soltaba aun contra la almohada.
Ambas mascotas estaban en su derecho de procesar la información pero, eso no evitaba que Hoseok pensase de la peor manera aquella situación.
Finalmente uno hablo.
— Saben. — Suspiro pesadamente. — Yo pensaba exactamente lo mismo.
Ambos voltearon a verlo y él continuó
— Las actitudes que tú tomaste por tus pensamientos incoherentes yo las tome porque no te gustaba estar junto a mí. — El can bajo sus orejas sin remedio. — Como pasabas más tiempo con Yoongi debido a sus clases de piano, una cosa dio a la otra y comenze pensando eso mismo. Aunque, hoy me había decidido a... — formando una pequeña sonrisa tímida que hizo que sus hoyuelos salieran a la luz termino. — Seducirte. —
Hoseok y Yoongi sonrieron.
— Y me alegra que hayas logrado decir tal declaración frente a nosotros Hoseok. Somos tus parejas, no tienes por qué guardarte los problemas. Siempre estaremos para ayudarte así como sabemos que tú estarás para nosotros en cualquier necesidad. —
— Tus problemas, son nuestros problemas. — Finalizo Yoongi por Namjoon.
Hoseok sonrió ampliamente. De esas sonrisas que hacen que se vea como un completo idiota.
— ¡Ay! ¡Los amo mucho! — Dicho esto se lanzó a abrazarlos a ambos.
— ¡Aléjate! ¡Me arde el culo! — Exclamo el elegante felino.
Aun estando en abrazo grupal, Namjoon comenzó a acariciar Los traseros contrarios, uno con cada mano. Con la repentina confesión de Hoseok no había colocado la pequeña pomada para que les aliviara el ardor.
Comenzó a mover su cola canina. Le gustaba lo que sus ojos estaban apreciando; Yoongi había bajado sus orejas hasta pegarlas a su nuca, mientras lo observaba este acercaba de a poco a Hoseok, quien también lo observaba, para depositar un tierno beso, beso que fue aumentando de nivel convirtiéndose en caliente.
Namjoon observaba sin dejar de acariciar sus traseros.
Hasta que frunció su ceño. — Alto. — Ordeno.
Los dos contrarios se separaron haciendo sonar un pequeño "PLOP"
— Yoongi, ¿Cómo es posible que estés en celo si no es temporada? —
— Yo que voy a saber. — Contesto sin darle importancia el mencionado para seguido volver a capturar los labios de su amo. — Entre a casa y esta estaba llena de sus feromonas. — Comenzó a besar la mandíbula del dueño, haciendo sonar el cascabel de su cola.
— ¿De Hoseok? —
— De ambos. — Confirmo el felino sin dejar de pasar sus manos por el cuerpo desnudo de su dueño, Hoseok soltaba una que otra risita, Yoongi seguía estando en celo después de todo.
¿Hoseok soltando feromonas?
Namjoon frunció su ceño, con anterioridad Hoseok nunca había soltado feromonas, debido a que es un humano completamente a diferencia, de él y Yoongi. En eso recordó la repentina resistencia de Hoseok.
— Oh, espera. — Hablo Hoseok boca arriba con un Yoongi encima de él chupando uno de sus pezones. Hoseok recordó que el también había olfateado un exquisito aroma proveniente de Yoongi. Ese aroma nunca había pasado por su nariz en las anteriores veces.
Olfateo un exquisito aroma entre rosas y limpieza, un aroma que le envió una corriente llena de placer por todo su cuerpo hasta llegar a su larga polla entumecida.
— Yo también... ¡Ah! — Yoongi había pasado de un pezón a otro, deslizando su rasposa lengua en la pequeña protuberancias ajenas — Sentí un aroma muy extraño. —
— Cierto, el aroma distinto de Yoongi. — Namjoon ignoro lo que el felino trataba de hacer con su dueño mientras intentaba resolver sus dudas existenciales.
Namjoon no comprendía por que el aroma de Yoongi de su repentino celo era diferente al anterior. Este era más codicioso, placentero con el simple hecho de olfatearlo.
— Lo estoy oliendo de nuevo. — Contesto Hoseok observando los hermosos ojos azules dilatados de Yoongi. Estando el felino encima de él, sujeto sus pollas juntas y comenzó a masturbarse juntos.
— Namjoon. — Hablo Yoongi mirándolo sobre su hombro.
El mencionado giro a verlo con su ceño aun fruncido, se encontraba sentado en la orilla de la cama dándoles la espalda.
— Deja de pensar. — Yoongi lo recibió con la espectacular vista de su mano izquierda sujetando firmemente su regordeta mejilla trasera dejando a la luz su arrugada y rosada entrada a Namjoon. — E inserta tu gran polla aquí. —
El mencionado se estremeció y dejo sus preguntas para después. Tenía un celo que calmar junto a su dueño.
— Hoseok también se unirá a tu pene. — Informo el pálido.
Tanto Namjoon como Hoseok levantaron los ojos un poco sorprendidos, si Hoseok hubiese tenido orejas largas como las de Namjoon este las hubiera levantado en total atención como hizo su can.
Hace mucho que no hacían una doble penetración.
¡Finalmente, está aquí!
La segunda parte de Favoritismo, la verdad les pido unas enormes disculpas por haberme tardado demasiado.
La depresión me ataco cuando menos lo espere y sin contar que sufrí varios cambios con mis amistades más queridas, entre otras cosas.
El capítulo en si ya casi estaba terminando cuando subí la parte uno pero, me desanime un poco al ver comentarios que decían no estar satisfechos con ello por lo que me fue inevitable tener crisis existenciales en las madrugadas para ver cómo podía resolver aquello por lo tanto, re-hice casi completamente la segunda parte y eso me llevo un poco más de tiempo ya que escribía y borraba. Yo quería darles lo mejor, así que espero que les agrade tan siquiera un poco el final de este especial.
Estoy satisfecha con lo que salio(? y la verdad me sorprendi al sobrepasar el numero de palabras que me llevo la primera y segunda parte del Two-Shot
One shot que ya no es one shot xd
Así que, ¡Feliz Jalowin!
¿Creyeron que Namjoon se quedaría con sus dudas existenciales?
¡Pues no!
/De visita con el viejo y confiable Jin.
Lamento mi fea letra, espero si logren leerla v: junto a mis dibujos qleros.
Feos (qleros) pero, hechos con amor.💝
De hecho, dibuje a Yoongi y Namjoon pensando en ustedes uwur.
Realmente, solo iba a enseñarles a Yoongi puesto que, su dibujo lo estoy coloreando en digital pero, como me tardooooo sigloooooos en terminar un dibujo en digital puej, decidi enseñarselo mejor a lápiz.
Dado el caso que quieran ver el resultado en digital pueden seguirme en mi cuenta de instagram, ahí también encontraran bocetos u dibujos referente a mis futuros One-Shots e incluso material de este Two-Shot.
@txelitx_yelo <--------- instagram
Gracias por leer ^^
Si encuentran algun error ortografico, lo siento x"d
Se les ama 💝