Hola! Primero que nada ¡¡¡Feliz Halloween!!! 🎃🎃🎃🎉🍬🍭🍫
Y segundo...Ya extrañaba publicar en esta historia y de hecho no iba a hacerlo aún, pero muchas personitas me han preguntado: "¿cuándo publicas otro extra en la suerte del capitán?", y pues aquí esta. Es cortito, pero vale la pena ( al menos eso creo yo).
Además Jason lo estaba pidiendo a gritos, pero no se lo digan a Billy porque es un secreto. 😂😂🙊🙊💖
Que lo disfruten.
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Billy gruñó mientras tiraba de la tela que llevaba sobre el cuerpo. Luego se giró con el ceño fruncido para fulminar con la mirada a Jazmín, su jefa y amiga en la veterinaria en la cual trabajaba a medio tiempo. Pero al girar se topó de lleno con el flash de un teléfono.
-¡Jaz!- se quejó cubriéndose los ojos. -Dijiste que no me tomarías ninguna foto, lo juraste por tu jodida comida vegana.
-Hay ya Billy, tampoco es para tanto. -La chica soltó una risita divertida. -Además te queda de maravilla, te ves...miau.
-Ja, ja que graciosa.
-Es por una buena causa, sabes que así vestido animaras a toda la población femenina a adoptar a nuestros bellos mininos.
Billy rodó los ojos y se quejó un poco más pero tampoco iba a negarse. Podía dejar su egoismo y dignidad a un lado y verse ridículo por un rato si eso significaba conseguir que los ocho gatitos que tenían, consiguieran un hogar digno.
Lo hacia especialmente por Amadeus, porque recordar como lo encontró abandonado en una caja le revolvía el estomago. Así que ahí estaba el, enfundado en un ridículo (y demasiado ajustado) disfraz de gato. Y no hubiera hecho tanto escándalo si el condenado difraz contara con máscar, pero solo tenía una capucha con las orejas.
-Pudiste haber conseguido una talla más grande- volvió a quejarse.
-No, de hecho te queda perfecto.
-Pero es incomodo- tiró ligeramente de la tela que se pegaba demasido a su trasero. -Me siento raro.
-Deja de lloriquear y mejor ve a afuera- Jazmín le entregó una pequeña calabaza de plastico repleta de dulces y chocolatinas. - Reparte los dulces a los niños que veas por la calle y recuerdales la importancia de cuidar a sus mascotas y de paso convencerlos de adoptar a nuestros mininos.
-¿Y si mejor vas tú? Serias como una linda y dulce gatita- Jazmín negó y lo empujó fuera de la veterinaria y al ver que el rubio estaba con cara de sufrimiento le dió un codazo- no te olvides de sonreir.
Billy se quedó congelado fuera de la veterinaria al ver la cantidad de gente que paseaba por la calle, pero era normal siendo Halloween había una gran cantidad de niños disfrazdos saltanto por las calles y muchas personas observando los ecaparates de las tiendas y demás comercios.
Y fue aún peor cuando un grupo de chicas se acercarón a él con risitas divertida y coquetas. Internamente hizó una mueca y maldijo de diez mil formas distintas a Jazmín por haberlo obligado a usar el ridículo traje de gato en color caoba.
En general la experiencia fue tortuosa, agotadora por la gran cantidad d fotos que le pidieron, algo que realmente escapaba a su comprensión, porque era un disfraz común y corriente. Lo que Billy no sabía era lo condenadamente bien que se veía metido en ese traje.
Para cuando anochecio, no le quedaba un solo dulce ni una sola chocolatina y todos los gatitos habían sido adoptados. Así que valió la pena el incomodo momento.
-Bien hecho, Billy - Jazmín le dio unas palmaditas en el hombro- solo por eso voy a dejar que te vayas antes.
-¿Sólo por eso? Me merezco una bonificación y por lo menos una semana de vacaciones.
-Exagerado...
-¿Acaso tienea idea de todas la veces que me manosearon? Perdón amiga, pero si quisiera vivir de mi cuerpo entonces estaría trabajando en un club de strepers. -Billy se encogió de hombros- a estas alturas sería jodidamente rico.
-Claro Magic Mike, lo que tú digas. - era obvio lo mucho que Jazmín disfrutaba de la situación. -Puedes ir a descansar o puedes quedarte y vuelvo a llenar la calabaza con dulces, tú decides.
-Eres una tirana, que lo sepas. -Billy fue por sus cosas y no quería tentar a la suerte demorándose más de la cuenta, por eso nisiquiera se cambio, solo se colocó los zapatos y se pusó el abrigo que por suerte le llegaba a la altura de los muslos. -Adiós Jazmín, nos vemos mañana.
-Adiós lindo gatito.
Le hizó una ultima mueca a su jefa mientras la veía reir diabolicamente. Esa mujer era de temer, ¿ cómo es que cabía tanta maldad en ese menudo cuerpo? Se preguntaba el rubio mientras caminaba devuelta a su residencía universitaria.
Para cuando llegó se arrepintió de no haberse cambiado porque inmediatamente fue absorbido por la cantidad de jovenes que bailaban por los pasillos del edificio, con la música sonando estridentemente. Había olvidado la maldita fuesta que organizaban para Halloween. Lo único que Billy quería era una ducha de agua tibía y luego meterse a la cama y hablar un rato con su amor.
Le costo mucho llegar a su habitación y cuando lo logro se sintió tentado a llorar de felicidad. Pero la ducha estaba descartada porque ni loco saldría de nuevo de su habitación. En cambio colocó el seguro de la puerta y después se quito el abrigo y se lanzó sobre la cama mientras se alborotaba el cabello con frustración.
Eran las siete treinta de la noche, a esa hora Jason aún estaba trabajando, le había contado que por Hallowen cerrarían más tarde la cafetería. Pero Billy necesitaba desahogarse con alguien por lo que Jazmín lo había obligado a hacer y por eso se paro frente al espejo en la puerta de su armario y se tomó una foto.
Luego se la envió a Jason.
~~*~~
La noche de Halloween era muy movida en aquella cafetería, especialmente porque el dueño era un fanático de aquella festividad y le daba por transformar todo el lugar en una verdadera cafetería "terrorifica". Además repartía dulces atodos a los niños que pasaban enfrente.
A Jason le gustaba porque el ambiente era bastante agradable, pero después de seis horas se volvía francamente agotador, especialmente cuando había preparado innumerables vasos de mocca y cappuccinos de calabaza con caramelo...ni siquiera llegaba a comprender porque las personas bebian aquello, pero el no iba a cuestionar el gusto de los clientes.
Jason sintió su teléfono vibrar dentro del bolsillo de su pantalón , lo sacó solo para ver que el mensaje era de Billy. La emoción lo inundó de pies a cabeza y no perdió tiempo en ir al baño como excusa para poder hablar con su chico y de paso tomar un respiro.
Le dio su charola a una de sus compañera diciéndole que de verdad le urgía ir al baño y corrió al servicio de empleados. Ya en soledad sacó ansiosamente su teléfono y desbloqueo la pantalla para poder leer el mensaje.
«De: Cariño 💓
Hoy sufrí de injusticia laboral. Tuvé que vestir así toda la bendita tarde, pero al menos Amadeus estaria orgulloso de mi ¿cierto?
Dime mi amor ¿dulce o travesura?
TE AMO. »
Y el mensaje estaba acompañado de una foto en donde podía observarse a un Billy enfundado en un sexy disfraz de gato en color caoba. Las orejas sobresalian sobre su cabeza gracias a la capucha, pero a pesar de eso los mechones rebeldes de su cabello rubio se escapaban por los bordes. Y quizá lo que hizo a Jason cerrar los ojos y rogar por auto control, fue ese jodidamente hermoso y apetitoso puchero que Billy estaba haciendo.
El castaño tuvó que pegar la frente contra los frios azulejos de la pared. De pronto su mente eataba llena de cosas indecentes, principalmente de la manera en la que le arrancaría ese traje a Billy si lo tuviera enfrente.
No lo soporto más, termino maracando el número de su chico.
-Hola guapo, creí que me llamarías más tarde. -respondió la voz catarina de Billy.
-¿Cómo esperas que aguante hasta más tarde cuando me envias una foto como esa?- preguntó el capitán con voz lastimera.
-¿Tan mal me veo?
-No, pero de solo imaginarte así vestido en plena calle, me dan ganas tomar un avión y arrancarle los ojos a todos los que se atrevieron a verte.
La risa de Billy flotó atraves del auricular y un delicioso cosquilleo corrió a lo largo de la espina dorsal del castaño. Como lo extrañaba, enserio que lo hechaba de menos.
-Tranquilo señor cavernícola, sabes que todo esto que vez en la foto, es tuyo.
-Billy- se quejó el castaño llevando una mano hasta su entrepierna para acomodar la semi erección que se había formado dentro de sus pantalones. -No estas ayudándome mucho aquí, justo ahora estoy encerrado en el baño y si sigues diciendo cosas como esas no voy a poder salir sin que alguien se de cuenta del problema en mis pantalones.
-Oh, lo siento mi dulce capitán no era mi intención- Por supuesto que Billy no lo sentía en absoluto, su tono travieso lo dejaba claro- Entonces deberiamos arreglar ese problema antes de que salgas de ese baño.
Jason pudó haber dicho que no, eso era lo correcto. Pero la verdad es que no podía desperdiciar esos preciados momentos que compartía con su chico, así fueran atraves del teléfono, eran muy valiosos. Así que se rindió y sonrio mientras suavemente desabrochaba su cinturón.
-Me gusta la idea, así que ve hacia tu cama- al castaño le hubiera encantado estar en su propia habitación y realizar una video llamada, pero estando en su trabajo lo mejor era mtener las cosa más discretas. -¿Ya lo hiciste?
-Si capitán, estoy en mi cama esperando por sus instrucciones.
"Bueno, vamos a ello" pensó el castaño cerrando los ojos para poder imaginar con toda libertad a su sexy rubio tendido en la cama con ese sugerente traje de minino.
-Bien Cariño, quiero que bajes la cremallera del traje y luego deslices tus manos suavemente por tu pecho, imagina que son mis manos las que se deleitan con tu calor, imagina que eatoy ahí apreciando lo condenadamente caliente que eres, imaginame besando tu cuello...besando tu barbilla, tus labios...
-si...- Billy jadeó justo en su oido y Jason no pudo evitar deslizar la mano dentro de su ropa interior y rodear su propia erección. -Casí puedo sentirte aquí conmigo.
Ambos soltaron un gemido ahogado.
-Ahora, desliza tus manos hasta tu ropa interior y hasla a un lado. -La respiración de Billy se había vuelto entrecortada y Jason no necesitaba verlo para saber que tenía los ojos cerrados y los labios entreabiertos. -¿Estas duro Billy?
-Mmm
-¿Qué tanto?- más gemidos viniendo através del auricular. -Vamos Billy, déjame escuhar esa dulce voz.
-Estoy tan duro que empieza a doler, quisiera que tu boca estuvier alrededor de mi...mhm Jason.
-Mueve tu mano cariño, muevela suavemente imagina que es mi boca y mi lengua saboreandote...joder Billy, eres delicioso...
A partir de ahí ninguno fue capaz de hablar, simplemente se dedicaron a escuchar sus respiraciones agitadas y sus gemidos excitados. Jason movía la mano de arriba abajo imaginando que tenía a Billy tendido sobre la cama con sua hermosos ojos verdes nublados por el deseo. Se imagino entrando y saliendo de su cuerpo mientras lo besa profundamente.
-Jason, estoy llegando...no puedo más.
-Tampoco yo, ahora correte para mi cariño- Escuhó el orgasmo de Billy acompañado de un grito ronco y eso lo elevó a su propia liberación. Cuando volvió en si, sentía como si el cansancio de todo el día se hubiera esfumado. -Amor...¿sigues ahí?
-Si...rayos Jason, ahora creo que debo agradecerle a Jazmín por el traje.
-Creo que deberias- Jason se rió y se encargo de asearse pues debía volver al trabajo. -Gracias por este incrible y delicioso momento.
-Cuando quieras- ronroneó el rubio -¿Debes volver al trabajo?
-Si, pero te prometo que te llamaré en cuanto llegue a mi apartamento.
-Esta bien, te amo Jason.
-Y yo a ti mi precioso gatito travieso.
-Feliz Halloween...
Lo último que escuchó fue la risa calida de su chico y sin lugar a dudas el Halloween no volvería a ser lo mismo para Jason. Aunque había sido el mejor Halloween a distancia.
Cuando salió del baño le preocupo que alguien se diera cuenta de el largo rato que había desaparecido, pero todos estaba demasiado ocupados para notarlo.
El resto de la noche Jason tuvó una sonrisa satisfecha en su rostro, algo que solo Billy podía conseguir.
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Billy se quedó tendido sobre la cama con la sensación de éxtasis aun inundando su cuerpo. Se sentía tan relajado y lo único que necesitaba para que aquello fuera perfecto era a Jason tendido a su lado.
-Muy pronto... -murmuró antes de empezar a quedarse dormido.
Si todo salía bien, en menos de un mes podría ver a Jason, en la fiesta de cumpleaños que le estaba organizando. Y con ese agradable pensamiento se quedo dormido.
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Bien ¿Qué les parecio? 😊😊
Espero poder traeles pronto los capítulos que faltan en esta historia.
Hasta entonces, no olviden que l@s quiero, bye 😘🙋