CAPÍTULO 5
Un chico muy astuto
Caminé con rapidez hasta la cocina y me serví un plato de cereal, apenas y había logrado dormir dos horas. Me sentía feliz y al mismo tiempo como un patán. Feliz, porque había tenido la noche más genial de toda mi vida, porque había estado con él, al fin con él. Y un patán, porque sabía que lo que había hecho no era correcto, no era justo para Loki, él no se lo merecía, y lo peor de todo era que... no planeaba detenerme.
El timbre de mi departamento sonó, probablemente era Loki. Dejé mi plato de cereal a un lado, no había logrado acabarmelo, pero no quería hacer esperar a mi rubio.
Tomé mi mochila, mis llaves y fui a abrirle.
--Mi despertador no sonó, lo lamento -le dije
--No te preocupes -sonrió- aún nos queda tiempo
Me sentía un poco raro ese día, la noche anterior él y yo habíamos compartido tantas cosas, habíamos hecho un vínculo tan especial, aunque él no lo recordara.
Nos subimos al auto y no pude evitar notar que Loki se veía desanimado ese día, él solía estar alegre en las mañanas ¿Será acaso que sospecha algo?
--Estás muy callado
--Lo siento -bajó su mirada- ayer no fue un muy buen día para mí
¿Sabía algo? Imposible, fui cuidadoso. Él... No debe recordar nada.
--Mi cita fue un fracaso -contestó y yo me sentí aliviado, esa era la razón de su cambio de humor- bueno, ni siquiera hubo cita
--¿Qué pasó?
--Ayer me sentía agotado y me acosté a descansar sólo por unos minutos, pero sin darme cuenta me quedé dormido y falté a la cita
--Lo siento mucho
Soy un desgraciado, en serio.
--Le he estado marcando pero no contesta, Sofía debe estar furiosa conmigo
--No te preocupes, ya llegará alguien más
--Ayer... -habló despacio- fue muy raro... El día de ayer
..................
Abrí la puerta de mi departamento con un poco de impaciencia, entré y caminé con rapidez a la sala, aventé mi mochila a un sillón y me tumbé en el sofá. Ese día había sido muy agotador, la escuela cada vez me tiene más ocupado. Y para empeorar, Loki y yo no nos pudimos regresar a casa juntos, mi niño tiene clases extras y se tuvo que quedar en la escuela. Y yo que tenía tantas ganas de que pasáramos tiempo juntos. Pero en fin, hoy en la noche iré a... Darle una visita.
Apenas comenzaba a quedarme dormido cuando escuché el timbre de mi departamento ¿Será Loki? Ojalá sí. Caminé esperanzado y abrí la puerta, pero lo que vi fue totalmente lo opuesto a lo que esperaba.
Era Damián quien estaba ahí ¿Qué rayos hacía en mi departamento? Verlo en la escuela ya era lo suficientemente malo como para tener la desdicha de ahora verlo en mi casa.
--¿Puedo ayudarte? -traté de ser cortés, aunque me hubiera gustado cerrarle la puerta en la cara
--¿Puedo pasar?
¿Quiere pasar? ¿Por qué quiere pasar? ¿Por qué carajos está aquí? Joder, que se largue.
--Claro -dije, pero esta vez no soné tan amable
Entró a mi casa como si de la suya se tratara y el muy confianzudo se sentó en la sala.
--¿A qué se debe tu visita? -me senté yo también
Lo único que quería era que me dijera a que había venido y se largara.
--Sé tu secreto -dijo de golpe y con su expresión de sabelotodo que siempre usaba
Por un momento me sentí nervioso ¿Mi secreto? Imposible. Él no lo sabía, no podía saberlo, debía referirse a otra cosa.
--¿Cuál secreto? -dije en calma
--La hipnosis que usas en la gente, o no sé que rayos sea, pero lo sé
Ahora sí me había quedado helado ¡Sí lo sabía! ¡Lo sabía! ¡Alguien más conocía mi secreto! ¿Cómo era esto posible? ¿Quien rayos es este tipo?
--No sé de que hablas -traté de fingir
--Claro que lo sabes -respondió el castaño- pero si no estás seguro de mí, tal vez debería decirle a Loki las cosas que le haces sin que él se de cuenta
¿También sabía lo de Loki? Esto no podía estar pasado, tenía que ser una pesadilla, no había forma de que él lo supiera. Maldición, mi vida está a punto de irse al carajo. Loki me odiará toda la vida, lo perderé, no puedo creer que lo perderé. Tengo que hacer algo, tengo que hacerlo rápido.
--Tranquilo -habló Damián- lo que hagas con Loki no me interesa. No planeo contar tu pequeño secreto
Este tipo definitivamente no me da confianza ¿Cómo se dio cuenta?
--¿Entonces a qué has venido?
¡¿Cómo carajos lo supo?!
--Quería comprobar si mis sospechas eran verdaderas, y no me equivoqué
--¿Cómo te diste cuenta?
--Soy una persona muy observadora, especialmente con la gente que me cae mal -sonrió cínicamente- Siempre me pregunté cómo era posible que las cosas fueran tan fáciles para ti. El buena onda de la clase, el chico inteligente que nunca se metía en problemas. Yo me daba cuenta de la forma en que le hablabas a la gente, sabía que había algo raro en ti, las personas siempre reaccionaban de forma positiva cuando tú hablabas, ¿Cómo era eso posible? Siempre me lo preguntaba, pero simplemente eran sospechas, hasta el día de ayer -sonrió, como odio esa sonrisa triunfante- te vi en el estacionamiento, vi como Loki y tú se besaban. Al principio pensé que ustedes eran pareja, y sé lo pregunté a Loki
--¿Le dijiste que nos viste besándonos?
Mi vida se va a ir al carajo.
--No, pero le pregunté si ustedes eran pareja. Él comenzó a reírse y obviamente lo negó, así que no insistí más. Pero me puse a pensar y para sacarme de dudas decidí venir.
--Bueno, pues ya lo sabes ¿Qué quieres?
--Quiero que me enseñes, quiero aprender esa hipnosis tan efectiva que usas.
--No es hipnosis
--Pues lo que sea, quiero que me enseñes
--No puedo enseñarte
--No era una sugerencia
--Aunque quisiera no puedo hacerlo
--¿Y por qué no?
Desvié la mirada, no podía ponerme a hablar con él como si nada, no podía contarle todo.
--Eres la última persona a la que le contaría la verdad
--Sé que nos llevamos mal Alain, pero lo cierto es que yo soy la única persona en este momento en la que puedes confiar. Si no me cuentas, créeme que Loki será el primero en saber lo que sé, pero si confías en mí, te prometo que tu secreto estará a salvo conmigo, soy un hombre de palabra.
Traté de analizar las cosas, no quería contarle ¿Cómo hacerlo? Pero si yo no hablaba, si no lo hacía, Loki... Él...
Debía encontrar una solución. Mi gon es inútil en este momento, no puedo hacer que lo olvide. Creo que no me queda de otra que hablar, al fin y al cabo, él ya sabe demasiado.
--Está bien, te contaré, sólo espero que cumplas tu palabra
--Lo haré
Mordí mi labio, lo que estaba a punto de decirle no era algo fácil de digerir, de hecho, aún no estaba seguro de que era la mejor decisión, mis opciones no eran nada buenas.
--No es hipnosis, es una habilidad innata
--Creo que no entiendo
--Puedo manipular las acciones de las personas, puedo hacerlo cuando yo quiera
Damián se quedó unos segundos sin decir nada, me miraba como si no entendiera lo que estaba diciendo.
--¿O sea que simplemente das órdenes y la gente obedece?
--Así es
Damián comenzó a reír.
--No te creo -dejó de reír- será mejor que me digas la verdad ahora, mi paciencia se agota
--Puedo mostrartelo
--¿En serio? -dio una pequeña sonrisa, él no me creía
--Te daré una orden y tú obedecerás
--Estoy esperando -nuevamente esa sonrisa, iba a ser genial borrarla
--Que bonito reloj -señalé el pequeño reloj plateado que llevaba en su mano derecha- dámelo
Damián continuó con esa sonrisa incrédula, pero ésta enseguida desapareció cuando su mano izquierda comenzó a desabrochar el reloj.
--¡Qué carajo! -gritó, pude notar miedo en su mirada- ¡mi mano esta moviéndose sola!
Una vez se quitó el reloj, se levantó y comenzó a caminar hacia mí, su cara de confusión era increíble. Cuando al fin tuve el reloj en mis manos, dejé que él tomara posesión de su cuerpo otra vez.
El castaño caminó hasta el sillón, se sentó y duró bastante tiempo sin decir nada.
--No puedo creerlo, eso fue... Sorprendente -era difícil saber si estaba fascinado o asustado- controlaste mi cuerpo, intenté oponerme pero fue imposible
--Te lo dije
--Estoy un poco confundido ¿Loki permite que le hagas esto?
--No -bajé mi mirada- puedo controlar a las personas de manera consciente o inconsciente
--¿Entonces Loki no recuerda lo que le haces?
--No
--¿Has usado tu habilidad conmigo?
--Jamás
--¿Cómo confiar en ti?
--No suelo usarlo con la gente que respeto
--¿La gente que respetas?
--Me caes mal Damián, pero te respeto como rival
--¿Y que hay de Loki?
--Loki... Él... -mis mejillas se sonrojaron
--Está bien, no necesitas contarme
--Gracias
--Déjame ver si entendí. Naciste con una extraña habilidad que te permite controlar la mente de las personas a voluntad ¿Cierto?
--"Gon", así es como se llama mi habilidad, y sólo puedo controlar las acciones de las personas, no la mente, manipular el pensamiento es difícil, puedo hacerlo pero a un nivel muy bajo
--Explícame, no sé si entiendo completamente
--No puedo hacer que la gente olvide cosas de su pasado. No puedo hacer que olvides el nombre de tus padres o la dirección de donde vives, no puedo eliminar cosas de tu mente. Lo que sí puedo hacer es confundirte, por ejemplo, puedo decirte que huele a rosas, y tú olerás rosas. Puedo decirte que tienes sueño, y tendrás sueño. Pero como ya te dije, es muy difícil hacerlo, a veces no es muy efectivo, la mente es complicada, es por eso que usualmente solo me limito a controlar acciones, más no el pensamiento.
--Muy interesante -sonrió de una manera muy extraña, sentí un mal presentimiento- quiero pedirte un favor
--No sé si estoy dispuesto a ayudarte
--Tómalo como un intercambio de intereses, yo guardaré tu secreto y seré tu confidente a cambio de que me ayudes
--Usar mi Gon es peligroso
--Tranquilo, no voy a pedirte que mates a alguien ni nada de eso -comenzó a reír - quiero lo que tú tienes, quiero que la persona que me gusta esté conmigo
--¿Quieres que manipule a una chica para que esté contigo?
--En realidad es un chico
--Dime qué es exactamente lo que quieres
No estaba de acuerdo en que Damián me usara para sus intereses, pero el mensaje era claro, o hacia lo que él decía o Loki se enteraría. Lo mejor era llevármela tranquilo con este tipo, es demasiado astuto, no debo subestimarlo. Se dio cuenta de mi Gon con el simple hecho de observarme, definitivamente no debía tomarme esto a la ligera.
--Quiero pasar una noche con esa persona, sólo eso
--Está bien, si con eso pago tu silencio lo acepto ¿De quién se trata?
--Dante
Fruncí el ceño, debí escuchar mal.
--Dime que es una broma
--Claro que no
Definitivamente no podía hacerle eso a Dante, no a él.
--Dante es mi amigo, lo que me pides es imposible
--Sólo será una noche y él no recordará nada ¿Cual es el problema?
Mordí mi labio, de todas las personas que hay en el mundo ¿Por qué Dante? Odiaba hacer esto, pero tuve que poner en una balanza las cosas.
--Está bien, lo haré