Sin pecado concebido (Yaoi)

By -susana-

222K 20.9K 2.5K

"Él no existe." Son palabras que suelen repetirme tan constantemente que empiezo a creerlas. Nadie recuerd... More

Sin pecado concebido (Yaoi)
Capítulo 1: Año tras año.
Capítulo 2: El mismo castigo
Capítulo 3: Ellise...
Capítulo 5: Annie.
Capítulo 6: Agonía.
Capítulo 7: Casi
Capítulo 8: Historia de un demonio.
Capítulo 9: Amor.
Capitulo 10: Una explicación.
Hola :3
Capítulo 11: Unido al cielo.
Capítulo 12: Fuga.
Capítulo 13: ¿Muerto o vivo?
Capítulo 14: Hola,Annie
Capítulo 15: Arcángeles.
Capítulo 16: Por favor.
Epílogo.
Holi Panoshi!
Nota 2.

Capítulo 4: El mundo guarda sus secretos.

10.8K 1K 215
By -susana-

"Siempre has sido un gran pedazo de mierda,

si pudiera matarte ya lo hubiera echo,pero es ilegal en los 50 estados...dicho esto:

¡Arde en el infierno!"


Cuatro paredes blancas me recibieron al despertar y por alguna razón me sentí tan decepcionado al verlas, tal vez porque tenía la esperanza de que esto era un sueño...que despertaría en mi casa, con Albert a lado, diciéndome "Buenos días ", y un brazo.

Pero eso no pasaría.

Un objeto verde oscuro se encontraba posado al lado de mi mesa de noche, era una máquina de escribir que contenía una elegante etiqueta colgando de esta en letra cursiva.

"Hugo xx"

Era lo único que decía esta, quería suponer que era mi hermoso regalo de cumpleaños de mi hermano. Lentamente y asegurando que mis manos estuvieran libres la tome posicionándola en mis piernas, noté que contenía un par de hojas sobre este, así que comencé a teclear nerviosamente; solo para distraerme un rato

"Historia de un demonio."

Tecleé sin dudarlo, Albert me había contado un poco sobre ello, sobre nuestro pasado...así que tenía la idea que escribir.

"Dedicado a mi querido amor, mi único y eterno amor. 

Te amo, Albert."

Cambié la hoja antes de seguir escribiendo.

La lanza dio directo en el pie del jabalí, su chillido se escuchó claramente ante los árboles haciendo volar algunas aves ante el inminente llamado de dolor del pobre animal, la sangre comenzó a escurrir permitiéndome ver mi reflejo en el charco que comenzaba a expenderse sobre la tierra seca y pobre donde nos hayamos.

Rocé con la yema de mi dedos el cuello del pobre animal que agonizaba por cada respiro que daba, de un movimiento pude acabar con su dolor susurrando un "lo siento" cerca de su oído por haber quitado su vida para poder mantenerme vivo yo. El crujir de las hojas secas me hizo poner en guardia ante cualquier amenaza.

Con la mirada fija hacía cualquier movimiento a mi alrededor me mantuve con las defensas al máximo, aunque no podía ver nada ni a nadie a mi alrededor. Los pasos aparecieron nuevamente ahora con mucho más prisa y en menos de la exhalación, un lobo me había arrojado al suelo cayendo estrepitosamente ambos.

-¡Ugh!- rodé sobre mi cuerpo mirando a un lobo negro, de dientes afilados y blancos como la misma luna, sus ojos eran tan afilados como el hueso de mi daga; gruñía enojado proclamando mi alimento como suyo. Le mostré los dientes como respuesta. La feroz criatura volvió a arrojarse en contra de mi y antes de que pudiera responder al ataque otra mano me quitó del camino.

El lobo volvió a saltar hacía nosotros y la sangre de este mismo pronto voló por los aires.

.-Tu bonum? .-(Traducción: ¿Estas bien?) Preguntó aquel chico de ojos cafés mirando a la bestía lamer la herida con desespero para perderse por los bosques.

.- Yes, et laus mea Dominus cibum .-(Si, te debo mi alimento)

.- Quod nomen est tibi? Small oculos aqua .-(¿Cuál es tú nombre?, Pequeño ojos agua)

.-Lou...-susurré con la mirada baja por lo patético y enclenque que debí haberme vestido ante la necesidad de ayuda.

.-Azthart.-de igual manera se presentó de igual manera desinteresado.

Era un joven alto, de buen cuerpo y ojos tan cafés como el otoño: calidez y seguridad, ese tipo de mirada que te da a entender que estas en casa, de cabello tan azabaches como el roble del árbol y de piel igual de morena como la tierra bajo nuestros piel.

.-¿Lou?.-me volteó a ver con una sonrisa cargando al jabalí en su hombro.

.-¿Azthart?.-Respondí de la misma manera en que preguntó.

.- Ego dico tibi quia tu mecum es fatum .-(Debo decirte que estas condenado a estar conmigo)

- Quid aliud? -(¿A sí? )

- Ventus et tumultus murmurationum non abscondetur -(El viento me lo susurra)

La puerta se abrió haciéndome saltar de golpe, pude ver a la enfermera con la misma cara de intolerante de todos los días.

- Joven Valentines, hora de comer. – anunció trayendo consigo la silla de rueda para llevarme al comedor.

- ¿Puedo... llevarme esto? -pregunte señalando la máquina, la enfermera se sorprendió, nunca antes le había hablado. Pero asintió.

Me senté en aquella silla de ruedas, junto con la máquina de escribir en mi regazo. En el pasillo se escuchaba la máquina de escribir a cada tecla que iba presionando, esto me iba a ayudar en mi estadía aquí.

- ¡¿Quieres dejar de escribir?! - Preguntó Alex o más bien grito alzando los brazos como un desquiciado. - ¡Estoy cansado del Tiki, tiki, tiki! ¡Swuim! ¡Tiki, tiki, Swuim!

- Oye, está bien... ¿Qué se supone que es esto?- Pregunté señalando la comida con asco, no había notado la presencia de la comida.

- Es una hamburguesa aplastada y frijoles con complicaciones de pudín de chocolate. Dah, es obvio.

Pronto, el comedor se hundió en un profundo silencio, donde pude ver a Ellise entrar y acercarse directo a nuestra mesa; Alex no disimuló nada y exagerado hizo un sonido de enamorado.

-¿Puedo... sentarme?-Preguntó con timidez sin mirarnos a la cara.

- Claro, linda.- Contestó Alex con rapidez antes de hacer espacio junto a él.

-Mi nombre es Ellise.- Dijo ella al momento que se sentó junto a Alex quien la miraba intensamente.

- Alexander.- Se tocó la barbilla Alex con un tono de millonario mientras guiñaba su ojo.- Dime Alex, el de enfrente es mi sirviente no le hagas caso

- Eres un pésimo amigo...- Susurré.

- ¡Lo siento! - empezó a llorar literalmente de arrepentimiento azotando la frente con la mesa.

- Te perdón. - Le toque el hombro para tratar de consolarlo.- Mi nombre es Esteban.

Ellise aprovechó la depresión de Alex para tomarme de la muñeca, quedé sorprendido al ver su sonrisa en el rostro.

-Sígueme.- Ordenó, ni si quiera tuve que tiempo de responderle cuando con una increíble fuerza comenzó a jalarme a uno de los pasillo donde se encontraban unos baños. Alex alzó ambos pulgares guiñándome el ojo.

-¿A dónde vamos...?-Pregunté nervioso, por alguna razón Ellise me daba una pésima espina.

-Shhh....- Entró a un cubico del baño junto conmigo antes de tapar mis ojos de golpe, pude sentir las palmas de sus manos heladas contra mis parpados.- Hasta que yo te diga, no te muevas.

-¿Por qué....?- Ellise no me contestó, solamente sentí de pronto un inmenso mareo y un frío infernal al instante

- Abre los ojos...- Ordenó descubriendo mis parpados. Al abrir mis ojos toda la cara se me contrajo de la sorpresa, inmensas casa y nieve rodeaban el paisaje, un frio que calaba los huesos me comenzó a invadir.

-Bienvenido a Rusia.-Susurró en mi oído antes de poner un saco en mis hombros.

Ellise me tomó del brazo y empezó a caminar junto conmigo. El frío era aterrador, a pesar de que estaba abrigado sentía que en cualquier momento mis piernas se congelarían por le estúpida bata del hospital. Ellise por su parte seguía tan helada como un muerto.

Nos detuvimos antes de cruzar la calle, yo parecía niño al no comprender sí esto era una ilusión o realmente estábamos aquí. Una señora se paró al lado mío con un niño sujetando sus brazos, de inmediato una extraña sensación de familiaridad me hizo voltear a verlo.

-Ah...- Gemí bajo al ver unos ojos ámbar y el cabello rubio sobresaliendo de un gorro de invierno. Todo mi corazón me decía que estaba enfrente del mismísimo Harry.

Volvimos a caminar, aunque Ellise tuvo casi que aventarme para que reaccionara.

-Sí ya sé que estas impresionado, ese mocoso es la reencarnación de Harry.

Nos volvimos a detener, ahora en la ventana de una cafetería adentro pasaba gente alegre y un delicioso aroma a café y a pastelillos salía del lugar, sin duda muy hogareño.

Una chica llamó mi atención y más su acompañante.

- El mundo guarda sus secretos, Esteban...- Ellise me habló al oído.

Adentro de la cafetería, se encontraba Annie y Miguel, tomando una taza de café...

Seh, la historia que está escribiendo Esteban realmente existe xd
Se llama "Historia de un demonio", es una precuela de la historia; desde el inicio de Albert y todas las reencarnaciones de Esteban. 

Continue Reading

You'll Also Like

1.7M 88K 44
Melody Roberts es una chica muy sencilla, no es muy sociable y solo tiene una mejor amiga. Vive sola en un pequeño departamento, el cual debe de paga...
26.3K 1.1K 60
Hola :) bueno esta es mi primera historia, es pero les guste esta historia y siga creciendo ¿no? bueno en la introducción de la historia iré cotando...
6.9K 340 80
Que tan complicada puede ser la vida de un chico de 18 años que se enamora de su mejor amigo? Que no le ha dicho a nadie que es gay... si esta es mi...
21.1K 1.6K 24
Alex se fue a Boston por sus vacaciones, y también para alejarse de Luke, que por cierto le hizo mucho mal. Pero como toda BFF, Hanna se convertirá e...