Tierra De Nieve Y Cenizas© [L...

By lectorac24

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Tercera parte de Infierno Helado... Nada es como al principio. Ella no es la misma, su corazón ha cambiado y... More

Aviso
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15 (I)
Capítulo 15 (II)
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Epílogo
Agradecimientos
Datos Curiosos De La Trilogía
Especial Día Del Padre

Capítulo 31

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By lectorac24

Mauro nos va a estar esperando.
Es algo inevitable.
Él sabe que nosotros no abandonamos a los nuestros, fue justo por eso que decidió no matar a Cam, porque sabía que regresaríamos por él, lo que no sabe es que sabemos cómo despojarlo de su ejército masivo.
El C-15 será la clave de todo.

Luego de varias horas de charla donde a todos se les ha puesto al tanto de las noticias de lo que había en la memoria, sobre la identidad de varios de los soldados que resultaron ser no sólo políticos sino también militares, policías y varios de los Orígenes y Medio Orígenes más poderosos y el rapto de Cam, ha llegado el momento de debatir el plan.

Zack se ha traído la computadora a la habitación donde Devon está acostado y hemos traído sillas y mapas para ubicarnos, Sam ha hecho un dibujo de los planos de la prisión, al menos lo que recuerda de ella.

-Mauro está listo para nuestro ataque, no sabe el día pero sabe que no dejaremos a Cam en sus manos por mucho tiempo.- Sam me entrega el dibujo mientras habla.- Si sabe que vamos, eso significa que nos tenderá una trampa en el pueblo ya que obviamente no sabe que conocemos su ubicación en la prisión. Contamos con que ellos saben que atacaremos pero no cuando.

-¿Cuán seguros estamos de que tienen a Cam en la prisión?- Pregunta Jordy.
Sam y yo nos miramos.

-¿Un ochenta por ciento?- Dice Sam dudoso.- El lugar en donde convierten a la gente en soldados es en la prisión así que lo llevará ahí para el proceso, si atacamos en estos días probablemente él siga ahí. 

-Si hay una barrera como la que tenemos aquí en el búnker ¿Cómo la atravesaremos?- Me pregunta Elis.-¿Hay algún contra-hechizo?

-No todos los hechizos lo tienen, este es uno de ellos. Estoy pensando en algo para romperlo.- Mis ojos buscan a Lukas, lo encuentran en el rincón, luciendo mejor que en los últimos días, su mirada me encuentra y veo la duda en ella. Las preguntas están claras en sus ojos.¿Lo harás?¿No lo harás?

La chica muerte le susurra algo y él rompe la conexión de nuestras miradas. 

-Dejaremos el cómo entrar para después.- Opina Sam.- Ahora hablemos sobre qué haremos una vez estemos dentro.¿Cuál será el plan de ataque?

-División.- Pongo el dibujo que Sam ha hecho sobre la mesita donde Zack está con la computadora, hago un pequeño lugar y les hago señas para que se acerquen, Devon tiene que girarse sobre su costado para ver. Con mi dedo rodeo el edificio.- Un grupo rodeará el perímetro, atacarán cuando la barrera se abra, atacarán a los soldados, no los matarán sólo los dejarán inconscientes, recordemos que muchos de ellos son los que ayudarán a que el mundo sea como antes. Habrá otro grupo esperando a unos kilómetros, será el grupo de apoyo por si estos caen demasiado rápido. Luego estamos nosotros, nos abriremos paso hasta llegar con Cam, luego donde Mauro, él es nuestro objetivo, esta vez no lo dejaremos escapar. No habrá forma de que esta vez nos venza, nunca se ha enfrentado a nuestros dones juntos. Seguramente tendrá soldados para protegerlo de cerca así que eso nos complicará capturarlo. Pero si nos dividimos en esos grupos podemos ganar.
-Bien, suponiendo que ese es el plan oficial para la prisión ¿Cuál es el del pueblo?- Pregunta Sabrina.-¿Quién los liderará?

-Tú lo harás, irás con ellos, el plan será entrar por grupos también, como es un terreno más amplio pueden formar grupos más pequeños y atacar diferente puntos. Cam no va a estar ahí, ni Mauro así que su trabajo será distraerlos, cuando ataquen, Mauro lo sabrá y pensará que toda nuestra fuerza estará concentrada en el pueblo, bajará la guardia o al menos lo suficiente para que nuestro grupo entre.

-Siento que algo no va bien.- Dice Elis.- Algo no concuerda.

-Ella tiene razón.- Dice Natalia con el ceño fruncido.-¿Y si Mauro no está donde pensamos que estará? Siento que nos arriesgamos demasiado a apostar que está en la prisión, el pago será demasiado alto si nos equivocamos. 

-Entonces dividámonos por igual.-Propone Sam.- Que el plan sea el mismo para ambos lados.

Dividirnos en grupos de tres, uno el grupo de ataque, otro de apoyo y otro que sea conformado por varios de nosotros para ir por Cam y atacar personalmente a Mauro, además, Caín y yo podemos treletransportarnos, cada uno llevaría a un par de personas más si son necesarias para luchar contra Mauro.

-Es buena idea.- Le contesta ella.- Debemos dividirnos por igual ya que seremos los que iremos por el premio gordo.

-Siento que planear esto sin Abby no es correcto, por mucho tiempo ella ha querido vengarse.- Dice su hermano Jared. Sus padres no están presentes ya que cuidan a Abby en su habitación, sólo su novio Karum está presente con él.

La chica muerte lo mira con odio.- Ella no es la única, bien puede ponerse en la cola.

-Basta.- Les advierto y mirando a la chica contesto:- Y deja de hablar de ella de esa forma, pensé que era tu amiga.

-No tengo amigos, sólo aliados y ella sabía muy bien que cualquiera que intentara impedirme matar a Mauro iba a resultar muerto.

-¿Es una amenaza?- Le pregunto con los ojos entrecerrados.

-Tómalo como quieras Caín pero que quede claro una cosa. Mauro es mío.

-Si empezamos con esa mentalidad perderemos.- Le advierte Natalia.- Mauro morirá, quien lo mate no importa.

La chica muerte se le acerca, todos nos tensamos por el brusco movimiento. Todos sabemos el alcance de su poder, su toque letal, su toque de la muerte.
Zack se levanta de la silla y con un movimiento de cabeza manda a la chica muerte contra la pared.

-No la toques o estás muerta.- Le advierte con los dientes apretados y la mirada furiosa hacia ella.

Natalia jadea y mira a su compañero mientras que la chica muerte se retuerce en un agarre invisible y le gruñe a Zack.

-Voy a matarte...

-¡Basta!- Lukas se pone frente a la chica muerte, yo me le acerco sin hacer movimientos bruscos, no puedo arriesgarme a que lo toque. Pero a pesar de que quería evitar que ella notara que me muevo entre ella y Lukas, me mira y sus ojos se entrecierran aún más.

-Caín, quédate ahí.- Me pide Lukas. Niego con la cabeza.

-Pero...

-No me hará daño, es mi amiga.- Me dice en un tono suave, como súplica.

Mis ojos viajan hacia la chica muerte. Ella no tiene amigos.

Con su mirada me reta a acercarme, lo noto, hay demasiada arrogancia en sus ojos pero cuando Lukas habla, algo cambia en sus oscuros ojos negros, se vuelven... blandos.

Ella lo mira y su mandíbula se tensa.

-Bájame.- Gruñe.

Miro a Zack, asiento.

Su poder se desliza de ella y la deja libre. Los pies de la chica muerte tocan suelo, Lukas y ella no pierden el contacto visual, siento que están demasiados juntos, sólo un pequeño roce sería una gran diferencia.

Pero ella no se acerca más, todo lo contrario, se aleja, camina lejos hasta que sale de la habitación. Lukas deja salir una respiración profunda, ni siquiera nos nota aquí o sólo no le importa que fuéramos espectadores de lo sucedido.

Cuando se gira, su mirada es dura.

-Continuemos con el plan.

-Uh... sí ¿Qué otro punto debemos cubrir?- Pregunta Sam simulando que nada de lo sucedido fue real.  Le sigo la corriente.

-¿Cuál es la mejor forma de noquear a los soldados?

-Como nuestro ADN fue alterado, nos curamos más rápidos, algo como la decapitación y ... rasgar nuestro corazón sería mortal, sin embargo está la opción de romperles el cuello. Eso los mantendría en el suelo por varios minutos, casi la hora.

-¿Estás seguro que no los mata?- Le digo dudoso.

-No, ya he visto cómo regresan.

-Bien ¿Alguna duda?

-Sí.- Dice Natalia.- Abby había dicho algo sobre las almas gemelas, ella trataba de decidir si anular el hechizo que lanzaron los hechiceros de los Primeros, la cuestión está en ¿Es lo correcto?

-No.- Dice Jesse.- Algunos estamos bien con la conexión de las almas gemelas.

-¿Y qué pasa con los que no pueden elegir? Abby tuvo miedo de ser emparejada con alguien a quien no amara.- Natalia me mira en modo de disculpa.- No podemos decir que ella era la única con ese miedo, todos tenemos el derecho de elegir a quien amar, eso es lo que ella creía. ¿Hay alguna forma de devolverle a los Orígenes el libre albedrío pero sin alterar los sentimientos de aquellos que aman a sus almas gemelas?

-Eso está más allá de mis límites.- Admito.- Abby tenía un punto, pero ni siquiera ella sabía cómo romper semejante hechizo. Nat le haremos un enorme favor al mundo al terminar con la vida de los Primeros, lo del hechizo de las almas gemelas... no nos corresponde a nosotros. No todo tiene que caer sobre nuestras espaldas.

-Caín tiene razón, además, todavía estamos tratando de multiplicar la cura, creo que las personas deben entender que hay sus prioridades.- Dice Sam apoyándome.

-Bien.- Dice Natalia.- Tienes razón.

-Yo tengo una duda.- Dice Devon.-¿Cuándo partimos?

-Tú no vas a ningún lado, estás herido.

-Patrañas.- Me gruñe.- Es mi compañero, mi amigo, mi hermano, iré por él incluso si no regreso con él.

-Ni siquiera lo intentes Caín.- Me advierte Sam.- Impedírselo no logrará nada, él tiene razón en algo. No hay nada que no haríamos por nuestros compañeros.

Y Abby es testigo de ello.

Resignado asiento.

-En ese caso atacaremos en dos día, le daremos tiempo a  Devon de que se recupere, Sabrina tu tienes que ir a los grupos y avisarles de que se preparen, llevarles una copia de los mapas con los lugares señalados, tienes que explicarles el plan de no matar, hay que avisarle a nuestra gente también, alistarnos para partir.

-¿Cómo nos movilizaremos?- Pregunta Jesse.- Creo que lo mejor sería si a los grupos que les toca ir al pueblo se fueran esta noche para llegar a tiempo, son varias horas de camino.

-Será peligroso si se van todos juntos.- Opina su hermano, Zack.- Deberían dividirse en grupos para pasar desapercibidos.

-Es una buena idea.- Opina Sabrina.- Se los haré saber pero primero debemos dividirnos nosotros, quienes irán a la prisión y quiénes al pueblo.
-Quiero confirmar dónde está Cam, lo rastrearé con Devon ya que prácticamente son uno sólo, el hechizo de rastro funcionará, y ya saben, donde esté Cam estará Mauro, después de todo esa es su estrategia. Mientras tanto preparen a la gente en el área de la tarima y reúnan ideas, si se les ocurre alguna otra cosa quiero saberlo.

.....................................................................

La multitud se calla al verme entrar y dejan un camino libre para mi hacia la tarima, enmascaro mis sentimientos para mostrarle a mi gente la imagen de alguien sin temor, de alguien que no titubea y que se siente seguro de sí mismo aunque por dentro los nervios me carcoman.

Cada paso que doy se escucha como un eco por tanto silencio, subo el último escalón y saludo con la cabeza a la hilera que forma mi familia detrás de mi.
Algo me golpea fuerte en el pecho, es el pensamiento de que puede que no vuelva a verlos otra vez así de unidos. Así es la guerra. El precio son las vidas que se pierden, la ganancia es el fin de esta oscura era.

Aquí estoy, mirando a mis soldados, a mi gente.

Soy quien los lidera, quien los mantiene con vida. 

Cuando todo esto empezó jamás me imaginé que estaría aquí, en este momento.

Soy el ejemplo de que algunas personas merecen una segunda oportunidad para cambiar, para mejorar, para derrotar la oscuridad interna o al menos, ocultarla muy bien. 

Ojalá Abby estuviera aquí con todos nosotros.
- Cada uno de nosotros tenía un hogar antes de esto. Una familia, amigos y vivíamos día a día quejándonos siempre de algo diferente. Era una buena vida, pero no lo sabíamos, no todos. ¿Y quiénes éramos? Unos estudiantes, otros trabajadores, amas de casa... Tenían trabajos, una rutina qué seguir, a pesar de que algunos eran diferentes, procuraban llevar una vida normal. Pero los Primeros decidieron robarnos esa tranquilidad, nos hicieron temerle a nuestros hermanos, nos hicieron luchar contra los nuestros y no sólo hablo por los Orígenes aquí presentes, hablo también por los humanos, porque aquí todos somos uno, somos personas que sienten, se enfadan, ríen, viven con impotencia y miedo y que han perdido algo o a alguien como todos aquí. Ellos nos dividieron, pensaron que con tanto poder podían hacernos suplicar de rodillas, y cuando no lo hicimos nos atacaron, nos quitaron nuestra tranquilidad, a muchos de nosotros a nuestras familias, a amigos y lo peor es que utilizaron a otras personas para hacerlo, utilizaron peones, siempre controlando, siempre asesinando. Ellos son los culpables de que los niños no puedan ir a jugar a los parques o aceras, son los culpables de que nosotros no tengamos una vida normal, son los culpables de que tuviéramos que elegir cargar siempre un arma porque de lo contrario no nos sentimos seguros, y lo más importante de todo, ellos son los culpables de nuestro levantamiento. Nos asustaron hasta tal punto de que decidimos dejar de temerles, nos golpearon tanto  que empezamos a devolver los golpe, nos humillaron tanto que tomamos valor para mirarlos a la cara y decirles ya basta. Nos hicieron sangrar hasta tal punto de dejarnos sin una gota de cobardía en nuestro cuerpo. Ellos se buscaron esto, nos llamaron y hemos contestado. Cam, uno de los nuestros se ha sacrificado por traernos la información que tanto necesitábamos para dirigirnos al campo de batalla, de una vez por todas terminaremos con esto, terminaremos con ellos. Nos dividiremos en dos grupos porque abarcaremos dos lugares, tendremos ayuda de otros grupos de supervivientes para combatirlos, es hora de ser valientes, necesitamos de cada uno de ustedes para esto. Los niños y ancianos se quedarán aquí, ellos estarán a salvo. Cualquiera que no quiera participar en esta guerra aceptaremos su decisión, recientemente hemos descubierto que varios de los soldados que Mauro controla son gente con poder. Presidentes, ministros, agentes del ejército... No podemos asesinar a los soldados, ellos no tienen la culpa del control que los Primeros tienen sobre ellos, además, cuando le arrebatemos el control a Mauro ellos serán libres y juntos podremos volver a reconstruir nuestro mundo, podremos recuperar la vida que se nos fue arrebatada. La decisión es suya. Cualquiera que no se sienta capaz de llevar esta responsabilidad sobre sus hombros puede retirarse ahora, no serán echados de aquí, no se les negará comida, no pasará nada si dicen que no, pero aquellos que pueden soportar el peso de esto pueden quedarse donde están para recibir una asignación y un grupo.- Me duele la garganta, es más, lo último fue dicho con una voz más ronca de lo normal, ninguno se ha movido de su lugar, se miran vacilantes entre sí.

Entonces la gente empieza a moverse, algunos rompen las filas y caminan lejos, otros ocupan los lugares vacíos que los otros dejaron y se llevan la mano derecha al corazón.

Una sonrisa torcida aparece en mi rostro pero es más para ellos que para mi, porque en realidad no tengo ganas de sonreír.

Agradezco profundamente la lealtad de esta gente pero sé que muchos morirán en la batalla, somos muchos ahora pero no sabemos cuantos saldremos con vida.

Levanto mi puño hacia el cielo y dejo escapar un grito de lucha. Poco a poco más puños se levantan y en segundos, la sala está llena de gritos de esperanza y ansias de libertad.
El sonido hace eco en las paredes y golpean mi pecho provocando una sensación de hormigueo.

Dejo de mirar a la multitud por un segundo y busco con la mirada unos ojos azules como el cielo, cuando los encuentro, mirándome brillosos con algo de satisfacción y orgullo en ellos, es como mi detonador.

Por breves segundos me siento invencible, por pocos segundos veo nuestra victoria y la esperanza de nuestro nuevo futuro.

Sólo con mirar sus ojos y escuchar los gritos de mi gente, llamándome por mi nombre.

Por breves segundos me veo, tan claro como vi a Abby en un par de años.

Y soy alguien nuevo, alguien mejor.

No por gente que depende de mis acciones, sino por mí mismo.

Y me gusta lo que veo.

..............................................................

-No entiendo por qué  tuvimos que venir aquí, es escalofriante ¿Acaso no temes que vengan algunos Caníbales o soldados al estar fuera de la barrera protectora?

Elis se abraza a sí misma y me mira de reojo.

La abrazo para transmitirle calor.

-No, por eso cree el portal hasta aquí, para que nadie nos viera salir.- Mi respuesta no disminuye su ceño fruncido.
Quería traerla a un lugar espacioso, vacío y silencioso, es nuestro último día de paz antes de la guerra, quería dejar algunas cosas en claro.
-¿Acaso piensas matarme aquí y dejar mi cuerpo escondido para que nadie me encuentre?-Pregunta burlona y yo beso la comisura de sus labios mientras me aparto para que pueda ver mejor el viejo estadio. 

La grava está seca y en tonalidades entre café y naranja, nada comparado a cómo era antes cuando recibía cuidados semanales.
Las bancas están vacías, las verjas sarrosas y en algunas partes desprendidas.

Todo el terreno está desierto, las grandes pantallas están rotas y hay letras dibujadas con pintura blanca. Se puede leer "Muerte a los opresores"

Ella tiene razón, parece un pésimo lugar para estar nosotros solos.

-Cierra los ojos.- le pido en tono serio a pesar de que mi humor, está por así decirlo en buen estado.
Me mira con una ceja alzada.

-¿Qué te traes entre manos, Warner?

Suelto una risita mientras le paso su flequillo detrás de la oreja.

-Nunca lo sabrás realmente.

-Mmm...- Ronronea acercándose y cuando su rostro está cerca del mío, bajo mi cabeza para que nuestras mejillas se rocen. Ella me pasa los brazos alrededor de la cintura y me atrae hacia ella, es mi turno de ronronear.

-Confía en mi.- le pido en voz baja cerca de su oreja.

Se separa escasos centímetros y me mira a los ojos antes de cerrar los suyos con una sonrisa perezosa.

-Claro.

Beso su frente, mantengo mis labios pegados a su piel por unos segundos de más y luego suelto aire despacio para alejar mi nerviosismo. 

Mientras tanto, yo también cierro mis ojos.

-Old Town era mi hogar. Era hermoso, un pequeño pueblo rodeado de un bosque extenso y fresco.¿Puedes imaginarlo?- Le pregunto en voz baja, la siento asentir.

-Se escucha hermoso.  

-Había un lago, a la orilla de este siempre podías encontrar piedras de colores, brillantes, opacas... y la arena, siempre se sentía fresca bajo tus pies. Habían riscos y como no eran tan altos, algunos osados se atrevían a saltar de ellos para zambullirse en las aguas tranquilas y cristalinas. Todos se conocían entre sí, la armonía podías sentirla en tus venas. El cielo casi siempre era gris pero de alguna manera, el ambiente se las arreglaba para parecer brillante. 

Ese lugar fue destruido hace tiempo ya, toda la gente que vivía ahí huyó o murió. Abre tus ojos Elis.

Yo mismo lo hago cuando se lo indico a ella y aunque leve, escucho su suspiro.

Miro a mi alrededor sin soltarla.
Las imágenes de mi bosque nos envuelven, las proyecciones parecen tan reales que si no fuera porque se desvanecerían con mi tacto, las tocaría.

-Oh Dios... es tan hermoso.- Su voz se escucha emocionada y cuando me suelta para caminar y recorrer las proyecciones con la mirada, sus ojos se iluminan.

Mi recuerdo cambia y ahora muestra la imagen del lago.

-Aguas cristalinas.- Ella repite mis palabras como una afirmación.

Le presento las calles, la gente que una vez tuve caminando cerca mientras me dirigía a las cafeterías o tiendas.

-Extrañaba eso, ver a las personas caminar tranquilas...
-Yo también lo extraño.- Admito en un susurro.

-Pero no entiendo.- Se gira hacia mi.-¿Por qué me lo muestras?
-Porque...- La proyección cambia, estamos en el bosque otra vez y ahora en el fondo hay una pequeña estructura, una en la que me sentiría feliz de regresar.- Allá en Old Town hay una casa que quiero reconstruir cuando todo esto termine y quería saber si tú estabas dispuesta a reconstruirla conmigo.

Me siento asustado, a pesar de que he pasado por momentos más amenazadores, sin embargo en este momento es mi corazón quien actúa por mi.

Y luego de un largo, largo tiempo, por fin le sedo el controla a él.

A pesar de los posibles riesgos, a pesar del inevitable dolor.

Elis entre abre sus labios despacio y me mira con ojos abiertos y asustados.

Sus latidos pasan a ser más rápidos en unos segundos y quizá sea por los colores de la proyección que contrasta el tono de su piel con más claridad o simplemente se puso pálida por la sorpresa.

-Caín...- Menciona mi nombre una forma temblorosa y cuando ella se separa de mi hasta que no hay contacto entre nosotros me doy cuenta de que tal vez esto no sea lo que ella quiera.

Somos más que amigos, siempre fuimos algo más que lo que decíamos ser, incluso cuando sólo quería utilizarme sexualmente, le fue inevitable no sentirlo, aquella conexión entre nosotros, tan chispeante y eléctrica.

Doy dos pasos largos hacia ella hasta que le toco el rostro con mis dedos.

-No te pido que pases el resto de tu vida conmigo porque sé que es demasiado pronto y no quiero... no quiero asustarte. Pero te estoy ofreciendo un nuevo comienzo, conmigo si así lo quieres. Quiero volver a mi hogar cuando todo esto termine, mi pueblo destruido me está esperando para restaurarlo, quiero volver a verlo así.- Despliego mis brazos para señalar nuestro alrededor.- Y si aceptas, podemos hacerlo juntos.

Un nuevo comienzo.

Donde no seré un líder, sólo yo viviendo en mi hogar.

-¿Eso es lo que realmente quieres? Pensé que querrías formar parte del nuevo mundo, unirte a la gente con poder y marcar una diferencia.

Niego con la cabeza.- Me di cuenta que no es lo que realmente quiero. Si escojo ese camino no tendré una vida, no como la que mis padres querían para mi. Quiero vivir en mi propio nuevo mundo y quiero que esté ahí.

Una sonrisa se forma lentamente en su rostro y eso me da esperanza de que tal vez diga que sí.

Ella posa sus manos por encima de las suyas.

-No lo había dicho porque se me hace difícil demostrar lo que siento a veces, pero quería estar contigo luego de esto, sin importar que escogieras ser el nuevo presidente o lo que sea que escogieras, yo sabía que de una forma u otra iba a estar rondando por ahí y ahora que tú me has dicho esto...- Se ríe tímidamente.- Me has ofrecido lo que no he tenido desde que todo esto empezó. Un hogar.

-¿Y lo quieres?¿Este hogar?

-Sí, sí lo quiero, contigo.

-Entonces será nuestro, te prometo que cuando esta guerra termine y ganemos, porque lo haremos, tú y yo al fin tendremos el hogar que anhelamos por años de soledad.  



Aquí les dejo este capítulo en compensación de la semana pasada que los dejé sin capítulo.
En defensa ¡Fue mi cumpleaños!
Y si pusieron atención a los detalles de libros anteriores sabrán que también fue cumpleaños de Abby ya que ambas cumplimos el mismo día 7v7

Y como fue su cumpleaños haré un capítulo especial donde ella narra lo que pensó y vio mientras ha estado en coma. Todavía no me decido si incluirlo en estos capítulos o dejarlo al final de la historia como un extra. ¿Qué dicen ustedes?

Hasta el próximo capítulo ❤️



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