Hace 11 años de la batalla, aquella fatídica batalla que rompió miles de vidas inocentes...
Alice se encontraba sentada en Ei sillón de su casa cuidando de su pequeño hijo de apenas 3 años. Era petirrojo y tenía el rostro cubierto de pequeñas pecas.
Tenía una noticia muy importante que contarle a su marido y estava esperando que llegase. Después de unos minutos alguien entró por la puerta y el pequeño pelirrojo fué a abrazarlo.
-Hola pequeño ¿qué has hecho hoy con mamá?
-Hemos jugado todo el día, me tiene agotada, es inagotable -bromeó Ali.
-Te he hecho esto papi -el niño corrió como pudo y recogió un dibujo de la mesa y se lo entregó- ¿te gusta?
-Me encanta, es precioso lo voy a colgar aquí -bromeó su padre poniendo el dibujo en la frente del niño.
-Luke cariño ¿puedo hablar un segundo con papá? -el chico asintió y se fue a su habitación sin rechistar.
-Pareces sería ¿qué pasa Ali?
-Vamos a ser padre, otra vez -explicó emocionada la chica.
-¿Qué? ¿Vamos a tener otro hijo? ¡Vamos a tener otro hijo! -el muchacho agarró a su mujer por la cintura y la levantó del suelo y al acero le dió un beso.
-El pequeñin no lo sabe.
-Ahora se lo diremos, te quiero Ali.
-Te quiero Fred.