LAUREN POV
La doctora movía sus labios, pero no era capaz de entender lo que ella me decía. En mi cabeza solo se repetían una y otra vez como un interminable eco las palabras de "Lo siento mucho Sra. Jauregui" Que rayos significaba eso. ¿Acaso algo le pasó a Camila? ¿acaso le pasó algo al bebé? Pero mi estúpido celebro no reacciona y sigo aquí pensado y no entiendo nada. Era increíble como mi mundo se desvaneció por cinco palabras
- ¿Disculpe qué? - fue lo único que salió de mis labios- ¿Le pasó algo a Camila?-
- Ella está bien Lauren, ahora está bien, hubo complicaciones y perdió mucha sangre, ahora esta en recuperación tan pronto despierte podrás verla- suspiré con alivio entonces me llegó... él bebé-
- ¿Mi bebé? -
- Creo que debes venir conmigo-
Me comencé a sentir muy ansiosa, sentía como mis manos sudaban mientras camino tras la doctora, vi donde me llevaba, era el área de los cuneros de los bebés. Entonces me llevaba donde mi bebé ¿no? Si me llevaba allí es porque estaba bien o ¿no? ¿Entonces que estaba mal? ¿Por qué me dijo que lo sentía? Las dudas golpeaban mi cabeza. Miré los cuneros y me pregunté cual sería mi bebé.
- ¿Ponte esto? - me dijo mientras me daba una bata color rosa de esas que prácticamente son trasparentes y me dió un cubre boca-
La obedecí, me los puse sin pensarlo y volví a seguir a la doctora, me llevó entre los cuneros y solo pensaba cual sería mi bebé y entonces lo ví y sentí el miedo, no podía ser. Me quería morir eso no podía ser. En un cunero apartado, mejor dicho, en una incubadora neonatal había un bebé. Se veía demasiado pequeño indefenso, sus ojos estaban tapados con unas gasas y un tubo estaba en su boca. Mi corazón estaba roto por completo sentía las lágrimas picándome los ojos y ese horrible nudo en la garganta.
- Es mi... es mi...- estúpida voz que no me salía-
- Si... es tu hijo... lo siento mucho... no calculé que la leucemia de Camila afectó el crecimiento del feto-
- No entiendo- realmente no lo hacía, solo miraba a ese pequeño allí, tan indefenso y delicado-
- El, no se desarrolló bien, pese que tiene 8 meses tiene el desarrollo de uno de 7 o hasta de 6. Casi todo se desarrolló, pero sus pulmones no del todo y no puede respirar solo, necesita ayuda hasta que maduren más, aparte nació bajo peso, necesitará un tiempo aquí... Lauren... existe una posibilidad de que no sobreviva, sus signos son débiles-
- ¿El? - fue lo único que pude pensar después de tanta información tan horrible- ¿tengo un varón?
- Si es un varón Lauren-
- ¿Me puedo quedar con el?- pregunté ahora mientras introducía la mano por los agujeros y acariciaba lentamente su bracito-
- Si claro, los dejaré un rato solos-
- ¿Camila sabe?- volví a preguntar con aún más dolor-
- No aún no sabe-
- No le diga nada aún-
Esto era mi culpa, mi hijo estaba así por mi culpa, yo fui quien lo rechazó todo el embarazo, yo fui quien no le dió su amor y lo resintió. Me dolía verlo tan pequeño, sentía como mis lágrimas bajaban sin cesar. Recuerdo cuando Mia nació y la tomé en mis brazos, era tan gordita sus mejillas rosaditas, entraba en todo mi brazo completo. Pero él era más pequeño que mi antebrazo.
- Lo siento- le susurré- lo siento mucho- volví a decir mientras metía mi mano de nuevo- es mi culpa, jamás te dije cuanto te amaba, jamás en estos 8 meses, lo siento tanto, realmente te amo, solo era una tonta caprichosa enojada con la vida y me desquité contigo que aún ni nacías, tienes que ser fuerte hijo, los Jauregui somos fuertes hijo y tú lo serás igual amor- acaricié su escaso cabello negro de su cabecita.- tienes que luchar mi vida, Mia está loca por conocerte y más tu mamá, estas lleno de vida, demuéstralo- tomé su manita que apenas era del tamaño de mi pulgar y sentía como lo apretaba suavemente, pero lo suficiente para yo saber que el luchaba, no sé cuánto tiempo pasó solo quería decirle a mi pequeño cuanto lo amaba
- Sra. Jauregui... su... su esposa ha despertado pregunta por usted-
- ¿Le ha dicho donde estoy? - aún no podía dejar de ver a mi hijo-
- No, solo que la buscaría-
- Bien, ¿ya sabe del bebé? -
- Tampoco, estamos esperando-
- Bien, dígale que fui a nuestra casa a ver a nuestra hija y luego regresaré-
- ¿Está segura? -
- Si por favor-
- ¿Ya tiene un nombre para él bebé? -
- ¿Mi esposa no lo dió? -
- No- seguí viendo a mi hijo fijamente, pesando que nombre y sabía cuál era perfecto para el-
- Vitaliy... Vitaliy David Jauregui Cabello-
- Hermoso nombre-
- ¿Sabe que significa Vitaliy?- le pregunté a la enfermera-
- No-
- Lleno de vida, mi hijo está lleno de vida-
- Sus signos han aumentado, ha mejorado es bueno, está más fuerte-
- Sigue así mi vida- le dije a mi pequeño- puede decirle eso a mi esposa, iré a ver a mi otra hija-
- Cla... claro- me contestó, acaricié por última vez a mi bebé y salí de allí-
Antes de ver a Camila tenía que despejar mi mente y la culpa que ahora oprimía en mi pecho no me dejaba. Salí de allí casi corriendo para llegar a mi casa. Entré sin hacer mucho ruido recién iba ser las 3:00 pm y a veces Mia tomaba siestas a esta hora. Pero obtuve una mayor sorpresa al ver la persona que está jugando con mi pequeña Mia. No sé qué me movió, pero antes de darme cuenta estaba corriendo hacia sus brazos y comencé a llorar. Lloraba como una niña de cinco años. Sentía como sus brazos me envolvían y comenzaba a acariciar mi cabello y baja por mi espalda. Me dejé caer al suelo con ella aún abrazándome. Podía escuchar sus palabras de consuelo mientras me abrazaba más fuerte contra su pecho.
Seguía llorando tan fuerte como aquella vez de pequeña que tuve una pesadilla y entre gritos y llanto llegó a mí y me arrulló hasta calmarme. Lloraba tan fuerte como aquella vez que me caí y me rompí mi brazo y ella sin importarle que estuviera en medio de un desfile y que yo había desobedecido su orden de quedarme tras bambalina corrió a donde yo estaba para cuidarme y calmar mi llanto.
Mi madre estaba allí consolándome como siempre cuando algo en mí se rompe o me asusta y esta vez era ambas, temía perder a mi hijo, mi familia y mi corazón estaba roto. Muchos creen que mi madre es una mujer fría y superficial, pero no es así. Yo la conozco y por eso me dolió mucho cuando me dió la espalda. Mi madre es una mujer que siempre me amó sobre todo. No era la típica modelo que abandona sus hijos, siempre me llevaba con ella y jugaba conmigo mientras la preparaban, incluso escuché que muchas personas decían que no tenía más hijos por no perder la figura y me tuvo a mí para poder amarrar aquel millonario pero no era cierto, cuando yo nací hubo una complicación y ella quedó estéril. Ella realmente deseaba muchos hijos, después de todo era hija única y sus padres habían muerto. Ella era una excelente madre siempre lo fue. Jamás me faltó mi madre a mi lado, siempre que salía me llevaba incluso al desfile de niñas. Ella era la típica madre que se tiraba en el suelo o la tierra para jugar conmigo, que iba a todos mis partidos y jamás dejaba de apoyarme. Ella era y es mi sustento en momentos como este.
Sentí como seguía acariciando mi espalda mientras me intentaba calmar y entonces sentí que otra persona me abrazaba. Miré y también sobre mí estaba mi pequeña que me abrazaba fuertemente intentado que sus "abrazos mágicos" me calmaran. Suspiré y me separé lentamente viendo a mi pequeña que parecía muy preocupada por mí.
- Mami, ¿etas bien? -
- Si amor, gracias por ese abrazo mágico- le di un beso en su frente- ¿qué hacías bebé? -
- Juego con abela, viste vino mi abela- me dijo feliz siempre me sorprendía la fluidez con la que hablaba, Camila siempre la corregía y ahora podía ver sus frutos, apenas una que otra letra se le iba pero eran pocas-
- Si ya veo amor, anda sigue jugando a lo que hablo con tu abuela- le dije y me giré hacia mi madre- ¿por qué estás aquí? -
- Yo... lo siento Lauren sé que es tarde, pero necesitaba volver a tu lado, conocer tu familia, tener tu perdón- me dijo mi madre, sinceramente con todo lo que tenía como podría reclamar ahora- cuando tu nana salió me dijo que vendrías para acá, decidí venir, cambiar con ella y cuidar a esa hermosa niña, en serio es hermosa-
- Lo sé- dije sin más dejándome caer en el sillón- Mia es especial como Camila-
- ¿Tu esposa está bien? -
- Si... está estable- conteste sin ánimos-
- Entonces ¿qué sucedió? -
- Mi bebé- sentí como las lágrimas regresaban- es mi culpa mamá, el está así por mi culpa- sentí como salía las lágrimas de nuevo- sus pulmones no se desarrollaron como debería ser y ahora necesita de un tubo para respirar, ni siquiera se como decirle a Camila-
- Cariño no es tu culpa son cosas que pasan a veces, los bebés no se desarrollan como deben- ella trataba de calmarme-
- No, si es mi culpa porque desde que supe que Camila tenía leucemia rechacé a mi bebé y ahora puede morir- me escondí en su pecho y sollocé.
- No es tu culpa cariño, si Camila tiene leucemia eso afecta al desarrollo del bebé ya verás que estará bien cálmate.
- Es un varón- dije antes volver a romper en llanto.
Deje que mi madre me tranquilizará un poco más y me diera su amor, por un momento fue como si no hubiera pasado 3 años sin vernos. Después de un rato me levanté y fui a mi cuarto y a cambiarme de ropa, Camila ya tenía las suyas en el hospital, después de eso baje y ví a mi mamá jugando con Mia a la comida feliz de la vida. Mi mamá jamás pudo jugar así conmigo, no era la típica niña que jugaba a las casitas, las comidas o la mamá y el papá bueno no de forma típica la última. Así que para ella era difícil tener una niña que amaba hacer más cosas de niños, prefería correr, andar en bici y esas cosas.
- Mamá- la llamé y ella volteó a verme aún con la sonrisa que le dedicaba a Mia- iré al H-O-S-P-I-T-A-L- deletreé para que Mia no se tensara ante la palabra- te importa cuidar a Mia un poco más o no se tal vez me estoy aprovechando, pero si quieres la puedes llevar a la casa por si me quedo con Camila a pasar la noche-
- No es aprovecharse Lauren, no te preocupes quédate con Camila yo llevaré a Mia conmigo seguro tu padre estará contento-
- Gracias mamá- dije antes de abrazarla fuerte- usa el auto de Camila- le di las llave- allí está la silla protectora de Mia- me agaché al nivel de mi hija- amor iré con mamá, pórtate bien con tu abuela si-
- Si, ¿mamá etá bien?-
- Si cariño, pero debe quedarse unos días más-
- ¿Y él bebé? -
- Si tienes un hermoso hermano mi vida-
- Siiii- gritó feliz Mia- ¿quiedo ver? -
- Aún no puedes, pero después tendrás mucho tiempo- besé su cabeza- te portas bien con tus abuelos y los obedeces de acuerdo-
- Si mami- dijo antes de abrazarme-
- Nos vemos mamá- me despedí de ella y fue a enfrentar mi verdadero dolor.
Salí de mi hogar para ir al hospital. Cuando pasaba por le farmacia ví un hermoso osito en un mameluco azul y lo compré para mi hijo. Aún Mia tenía su conejo y eran inseparables, no podía dormir si no era con su conejo el "señor orejas". Así que ahora compré ese peluche y unas flores para Camila. Subí hasta su habitación y la ví, estaba acostada, tan delgada pese que hace un par de horas estaba embaraza, tan pálida que me rompía el corazón aún más-
- ¡¿Lauren?!- preguntó casi asustada, se fijó en mi- Lauren, ¿dónde está mi bebé? Lauren ¿dónde está? ¿por qué no lo han traído? -
- Camz amor tranquila, el bebé está bien, lo ví-
- Pero ¿por qué no me lo han traído? a Mia la tenía junto a mí-
- El estará bien amor-
- ¿El? - interrogó fijándose en el término masculino-
- Si- dije con una sonrisa en mis labios una vez estuve a su lado- es un hermoso niño-
- Lauren ¿dónde está? - podía ver la angustia en sus ojos y a mí se me partía el alma-
- El... está en una incubadora Camz- vi como sus ojos se cristalizaron- el nació bajo peso y sus pulmones no se desarrollaron bien-
- No- dijo en un sollozo- es mi culpa debí esperar, no sé... alimentarme mejor-
- No, no bebé, no es tu culpa es algo que igual pasaría Camz, el está bien, antes de venir aquí volví a verlo y sus signos son más fuerte y sus niveles de oxígeno han aumentado, la pediatra dice que está recuperándose más rápido de lo que esperaban-
- Quiero verlo-
- No puedes Camz- acaricié su cabello- lo siento, perdóname esto es mi culpa- le dije y ella me miró confundida- es mi culpa jamás le di el cariño que el merecía y lo resintió esto es mi culpa-
- ¡No Lauren no lo es!
- No es de ninguna- Cassie había entrado con Lexie- hola hermosas madres- nos dijo- Mila, no es culpa tuya, aunque esperaras los 9 meses el bebé hubiera nacido bajo peso, fue por la leucemia y la anemia que desarrollaste, Lauren no es tu culpa ese bebé te ama, las enfermeras me dijeron que las horas que has pasado con el su salud a mejorado además esta divino el osito ya lo veo como Mia con su peluche para arriba y para bajo- sinceramente sus palabras me tranquilizaron un poco- ninguna de las dos pudieron hacer algo para que él naciera en mejor condición. Ahora claro que esta mejor y estoy segura que seguirá así.
- Hola chicas- saludo Camila- Lolo ¿puedes acostarte conmigo? - me preguntó haciéndose con cuidado hacia un lado, los puntos de la sutura parecían dolerle-
- Claro- me acomodé junto a ella mientras la abrazaba-
- Mila es hermoso tu hijo- dijo Lexie- además que hermoso nombre tiene-
- ¿Nombre? - me preguntó Camila mientras giraba su cabeza un poco estaba más alta que ella-
- Sí, me tomé la libertad de ponérselo ¿te molesta? -
- Para nada, gracias por hacerlo ¿cómo se llama?-
- Vitaliy David Jauregui Cabello-
- Lleno de vida- me ganó el significado Camila- creo que es muy apropiado- se abrazó más fuerte a mí- gracias por amarlo- me susurró-
- Ammm Yo no quiero ser mala ni nada, pero tan pronto Camila sane de los puntos creo que podría comenzar las quimio-
- Mmm yo quería amamantar a mi bebé-
- No creo que puedas Camila, te han puesto medicamentos y no lo puedes amamantar- dijo Cassie y casi pude notar la depresión en Camila-
- En... entiendo- dijo y la abrace más fuerte a mí-
- Tranquila amor si... todo estará bien no te preocupes-
Había pasado una semana desde que nació mi hijo, un hermoso 24 de marzo, había mejorado mucho y eso era lo mejor. Hace dos días me había molestado de ver a mi hijo allí dentro de esa estúpida caja y me importó poco lo que dijeran las enfermeras, lo saqué y lo arrullé en mis brazos. Era tan pequeño que sentía que se podía escapar sin darme cuenta. Lo pude sostener con temor en mis brazos de que lo lastimara, pero sentía que lo que necesitaba era eso, el calor de la persona que lo amaba. Hoy en la mañana después de ese momento le había sacado el respirador artificial, ya respiraba por el solo. Estaba sentada en la silla junto a su incubadora me habían dejado sacarlo solo un rato. Lo mecía mientras acariciaba sus escasos cabellos aún tenía sus ojos tapados, debía estar más tiempo a lo que recuperaba su peso.
- No te dije que un Jauregui siempre es fuerte- le dije a mi hijo mientras sentía como apretaba mi dedo con su pequeña mano- serás todo un matador en la escuela, te apuesto- sonreí viéndolo
- Como tu mami Lolo- escuché una voz tras de mi- traía a todas locas por ella-
- Camz ¿Qué haces caminando? ¿Puedes hacerlo? - pregunté asustada al ver a mi esposa parada tras de mi con un bata rosa que estaba usando ese día-
- Lolo me dan de alta hoy claro que puedo caminar... solo quería verlo-
- Claro ven siéntate- lo puse delicadamente sobre sus brazos, aún tenía la vía a su pies, pero al menos el tubo que lo alimenta por su nariz ya no estaba, hoy comenzábamos a darle leche en su botella- mira justo a tiempo- dije cuando vi una enfermera venir con la botella de leche lista-
- Sra. Jauregui
- Mi esposa se lo dará- La enfermera le dió para que Camila le diera de comer, pude ver como sus ojos se llenaban con lágrimas-
- Es hermoso- me dijo- es tan pequeño-
- Oye Vitya no hagas llorar a mami- vi como el pequeño movía sus brazos inquieto- muy bien anda lúcete con ella-
- Lauren- Camila me miró aún llorando- no me quiero ir sin él-
- Lo sé cariño, pero tienes que ir a casa y descansar, vendremos a diario a verlo-
- No lo quiero dejar solo-
- No lo estará-
Vitaliy estuvo dos semanas más en el hospital y Camila consiguió estar esas otras dos semanas más con él en el hospital, se había recuperado rápidamente y el día que descubrieron sus ojos eran increíblemente verdes, me recordó a los míos en mis fotos de bebé. Realmente sería apuesto cuando sea mayor. Gracias a mi madre y mi abuelo pude tener todo bajo control respecto a Mia, porque hasta yo estaba más tiempo en el hospital con mi esposa y mi hijo, aparte ahora no podía pedir ayuda de Natasha, desde que sé que Daniela está de nuevo aquí, jamás dejaría a mi hija cerca de esa loca. Ese día cuando regresábamos esperaba darle una pequeña sorpresa a Camila con una reunión familiar, hubiera deseado que su familia viniera, pero... fue imposible hablar con ellos. Fui en tres ocasiones a su casa, pero nada sucedió, nadie salió. Incluso llegué a pensar que era la casa equivocada.
- Amor ve entrando, Mia estará feliz de verte a lo que yo bajo a Vitaliy-
- De acuerdo amor- me contestó sin más. Vi como abrió la puerta del garaje que daba al interior de la casa y escuché el gran...
- ¡SORPRESA!!!!!- que gritaron todos en la casa.
Dentro de la casa estaba mi padre, mi abuelo, Cassie, Lexie, uno vecinos que tenían un hijo de la edad de Mia y juraban que de grande se casarían, no sé.... creo que es poca cosa para mi hija y claro estaba mi madre. Miré a mi esposa, se giró y me miró algo sorprendida con los ojos llorosos.
- Mamá- Mia corrió casi llorando y abrazó fuerte a Camila que no podía tomarla en brazos por los puntos de la cesárea. - mamá- repitió Mia sollozando- volviste mamá, no te vayas de nuevo-
- Jamás mi corazón nunca te voy a dejar no llores mi vida- acariciaba el cabello de Mia mientras ella misma lloraba en verdad; Camila tenía los sentimientos a flor de piel. Camila la tomó en brazos y la levantó
- Amor no puedes, tus puntos-
- Tranquila estoy bien- me contestó mientras besaba la cabeza de Mia y estaba abrazaba a su madre como si su vida dependiera de ello-
- Camila bienvenida de vuelta- dijo mi padre abrazándola-
- Eh hija ven abrázame bienvenida- ahora era mi abuelo quien la abrazaba y besaba, así mismo la saludo Cassie y Lexie al igual que los vecinos. Aún Camila no había divisado a mi madre que fue la última en llegar-
- Bienvenida Camila, aunque sé que soy la última persona que esperabas... ¿puedo abrazarte? - preguntó dudosa-
- Yo... claro- mi esposa estaba más que sorprendida- gracias por esta aquí- le dijo luego del abrazo-
- Oh miren tiene los ojos de Lauren- Gritó mi abuelo, miré el cargador que tenía en mano donde estaba Vitaliy y estaba despierto mirando todo, ni lloró al despertar-
- Esperen todos- dijo Camila cuando vió que todos venían casi corriendo donde el bebe- Primero Mia, es la hermana mayor después de todo- Camila bajó a Mia al suelo para que pudiera ver a su hermano- Mia, el es Vitaliy-
- ¿Es mi hermano?- preguntó mi princesa haciendo un hermoso gesto-
- Si amor- le dije yo agachándome para estar a la altura de mi esposa e hija-
- Es muy pequeno- no supo pronunciar la ñ- ¿no puedo jugar con él?- la preocupación en su rostro por como jugar con su hermano era notorio, todo observaban la interacción de la pequeña-
- No aún no mi vida, pero pronto crecerá y jugarán. También lo ayudarás a hacer cosas como hermana mayor-
- Si, yo lo cuidaré y lo querré muuuucho- Mia llevó sus brazos y se abrazó ella misma haciendo un gesto de como amaría a su hermano-
- Lo sé mi vida-
Después todos comenzaron a ver a mi pequeño y pasábamos un rato bastante agradable entre todos. Después de un rato decidí ir a hablar con Lexie y Cassie.
- ¡Hey chicas! - dije algo apenada pasando mi mano por mi nuca-
- Hey nuevamente mamá- dijo Cassie jugando-
- Nada, yo... bueno- mierda estaba nerviosa- es que quería disculparme con ustedes por lo que les hice pasar los últimos meses, yendo al bar solo a sacarme-
- Si bueno, eres nuestra amiga Lauren y nos dolía verte así- me contestó Lexie- imagínate si no vamos aquel día, te viola la mocosa buenota- me reí por su comentario y vi como Cassie le da un golpe-
- Perdona por decir que no eras mi amiga, sé que hicieron lo mejor por mi hijo y mi esposa-
- Tranquila si no fuéramos amigas me hubiera importado poco y seguiría con mi vida, como amiga me preocupe, te acosé- respondió Lexie- y mi novia también me obligó-
Después de un rato todos se fueron excepto mi familia que se quedó. Realmente me preocupaba por Camila así que casi la obligué a recostarse mientras yo era la que atendía a todos en la casa. Aunque no quiso subir al cuarto al menos lo hizo en el sofá de la sala. Vitaliy estuvo todo el tiempo junto a nosotras y Mia era feliz sobre las piernas de mi madre que jugando con ella.
- Bueno- comenzó mi madre- Yo realmente quería pedirles disculpas y darles las gracias por permitirme ser parte de esta hermosa familia- dijo mi madre algo a avergonzada- sé que actué mal y te juzgué Camila, fui más superficial de como quisiera ser, sé que eres una gran mujer, que realmente amas a mi hija y me has dado dos nietos hermosos, perdóname Camila por ser una puta perra insensible con ustedes- Yo había tapado los oídos de mi hija-
- ¡Mamá!!!-
- Perdona cariño olvidé que no debo hablar así-
- Clara, gracias por estar con Mia, te he visto hoy con Mia y ella te adora, como no perdonar a una mujer que hace feliz a mi pequeña- realmente me casé con la mujer con el corazón más grande del mundo era lo único que pensaba.
- Quiero ser sincera con ustedes, quiero que conozcan mi historia- hubo un gran silencio por un momento-
- Estas segura cariño- le preguntó mi padre-
- Si- dijo muy segura- Camila, me asusté por eso no confié, pensé que sería una de esas chicas arribistas que buscaban a una persona rica para tener una gran vida, ¿cómo lo sé?, antes de casarme con tu padre Lauren yo era...... era pobre, más pobre que tú... Mis padres fallecieron cuando tenía 9 años, como no tenía más familia pasé de inmediato a sistema de adopción del gobierno. Estuve en más orfanatos y casas de adopción de lo que puedo recordar. Cuando tenía unos 15 años con un grupo de chicos decidimos escapar y escondernos. Recuerdo que llegamos a esta bodega abandonada y la hicimos nuestro "hogar". No era lo mejor, éramos chicos de 14, 15 y 16 años asustados, enojados con la vida y creíamos que el mundo nos abandonó. Dividimos aquella bodega como si fuera cuartos y fue la "casa". Fue allí que conocí chicas así Camila, chicas lindas con una mirada inocente, supuestas niñas tímidas que seducían a hombres con dinero para que les pagara sus gastos, hasta llegar el punto de embarazarse para amarrarlos. Lo lamento Camila, recordé esas chicas y pensé que podrías ser igual... Camila conozco todo lo de los Jauregui. Se la historia que es muy real de nuestros amores eternos y sé que ahora tú también no puedes mirar a nadie sin recordar esos ojos verdes que te llena el alma- Vi como Camila sonreía- Lo siento mucho si te juzgué antes de conocerte, sé que eres una hermosa mujer de gran corazón que amas a mi hija... de hecho por eso dejé a Lauren en la calle, si de verdad la amas estarías con ella en las buenas y las malas- Vi como Camila se levantó y la abrazó-
- Gracias por cuidar de mi familia aún cuando no lo era-
- Pero... ¿cómo terminaste con papá? - pregunté por saber la historia completa-
- Mmm cuando tenía 17 mi novio tenía 19 creí que lo amaba y siempre estábamos juntos, luego un día llegó un pastor a la bodega y nos repartió propaganda, comenzamos a ir todos a la iglesia pero el... no se... creo que tomó todo muy literal, según el Dios jamás lo dejaría, todo era un pecado ahora... enloqueció no lo sé, comenzó a pegarme a decir que era una pecadora que tenía el pecado original y muchas cosas- vi como Camila se movía incómoda y recordé que ella venía de una familia así de fuerte en la religión- y terminé escapando de el, el creía que la mujer debía estar sometida ante su órdenes después de escapar volví a vivir en las calles, un día una mujer llegó y me dijo que parecía modelo que si no quería trabajar para ella realmente me asusté, conocía esas historia donde te prometen ser modelo salir del país y después te explotan sexualmente, pero ella realmente era una buena mujer, comencé con comerciales, fotos aquí fotos allá y de momento andaba en pasarelas. Una chica que hace casi 10 años atrás estaba en orfanatos y en la calle ahora estaba ascendiendo como la modelo... un buen día estaba en un desfile y conocí a tu padre nos enamoramos y nos casamos. Luego llegaste tú- terminó con una sonrisa-
- ¿Y tu novio? -
- Mmmm no se mucho, solo sé que poco tiempo después se casó y tuvo una hija nada mas-
- Por eso los llamaba hipócritas- dijo mi abuelo- cuando tu padre conoció a Clara no tenía más que un cuarto y un par de pertenencias que todas juntas cabían en una caja mediana... aunque aún cuando se casaron y ella podía dejar de trabajar no lo dejó, siguió trabajando en su carrera para ser una top model, y lo fue-
- Me lo dices a mí abuelo, no sabes las peleas que tuve con cierta persona para que no trabajara y aún así se hizo tutora y trabajó en una cafetería sin decirme para traer dinero a la casa- todos rieron y mi pequeño comenzó a llorar alguien estaba gruñón- iré a preparar la leche-
- Gracias amor- me dijo Camila mientras arrullaba al pequeño que ahora parecía un poco más tranquilo al obtener la atención de su madre-
Después de la cena todos se fueron y la casa volvió a quedar para nosotras sola y nuestros hijos. Creo que jamás en mi vida me sentía tan feliz, Mia estaba encantada con ser hermana mayor y cada que podía le hacía caras a Vitaliy y no parecía celosa de la atención. Realmente era una niña inteligente. Camila también estaba encantada con nuestros hijos juntos y parecía que la sombra de los meses pasados se había desaparecido. Esa horrible nube que nos cubrió se alejó dejando pasar a la brillante luz del sol, pero sabía que eso no iba a durar mucho. Después de unos meses tuvimos que llegar a nuestra tortura Camila debía tener un tratamiento a su cáncer. Ese día estábamos en el consultorio de Lexie esperando por ella. Mi madre seguía feliz de poder cuidar a sus nietos, aunque Vitaliy era muy delicado por ser tan pequeño aún, pero es precioso.
- Chicas que bueno verlas- nos dijo Lexie al entrar- ¿cómo te sientes Camila?- nos preguntó mientras la besaba y abrazaba para luego ir donde mí-
- Exhausta ya no sé qué es de la leucemia y que es de Vitya-
- Me imagino, Dios es hermoso tu hijo- Miró los papeles, suspiró y volvió a vernos- Camila al parecer gracias a Dios la leucemia no avanzó más y creo que es prudente darte una sesión de quimioterapia agresiva-
- ¿Cómo sería?-
- Sería cada semana- parecía algo nerviosa- lo recomendable es entre cada dos a 3 semanas una sesión de quimio, pero puede ser agresivo y se tiene excelentes resultados... lo malo es que es muy fuerte, no descansarás básicamente, será muy intenso y no sé si podrás. Si lo hacemos así lo que tardaría casi 6 meses o más, lo haríamos solo en 3 no más. Luego se hará un receso para ver como reaccionó si no tenemos células cancerosas proseguimos-
- Lo acepto- dijo Camila sin pensar, ¿Que no acaba de escuchar que es fuerte? -
- Espera un momento Camz- dije mirándola- ¿existe posibilidad de efectos secundarios severos? -
- Como todo Lauren, puede que su corazón no soporte la quimio también- pareció pensativa- gracias a Dios Camila parece fuerte, su corazón se ve sano-
- No se...- dudé-
- Yo quiero hacerlo no importa- froté mi cien, mi esposa se quiere suicidar-
- ¿Estás seguras? - esta vez la apoyaría en sus desiciones-
- Si Lauren quiero estar bien para nuestros hijos- suspiré fuertemente-
- De acuerdo, ¿luego que Lex? -
- Bueno... creo que Camila es joven, su médula se destruirá posiblemente en el tratamiento, espero que no por ser joven algo quede y se pueda reproducir sola, si no es así necesitará un trasplante, claro esto solo es si todo va bien en el primer ciclo, si no tenemos que hacer un segundo.
- Bien, de acuerdo- dije- ¿cuándo puede comenzar?
- ¿Ya te sientes bien de tu cesárea Camila? - preguntó y Camila asintió-
- Pues si quieren mañana, ahora el costo de la misma...-
- El costo no importa- me apresuré a decir, ahora tenía todas mis cuentas de nuevo de hecho, si quería hasta mis autos, aunque no me interesaba nada de eso, es era mi antigua yo, desde que trabajo con mi padre como Vicepresidente de las empresas, gano más que bien y ese dinero va todo a una cuenta con Camila, tengo suficiente dinero para pagar sus tratamientos sin importar nada-
- ¿Segura?
- Más que segura-