Secundaria Kohei
-K..Kacchan..ahh...no deberíamos...ahh...hacer esto-gemía Deku, mientras yo le lamia el cuello y con mis manos, dentro de su camisa, pellizcaban sus pezones. Él se encontraba sentado sobre mí, su pantalón y bóxer colgando de su pierna derecha, su camisa abierta y su rostro rojo y cargado de placer mientras lo toco. Ah y con mi polla dentro.
Nos encontramos en la enfermería, mi estúpido omega se cayó mientras hacíamos deporte. Como su alfa, me ofrecí inmediatamente a llevarlo, no iba a dejar que ningún beta o alfa toque lo mío.
No pudieron objetar mucho, la mordisca que el peliverde tiene en su cuello demuestra nuestra unión. Nadie seria lo suficientemente idiota para interponerse entre un alfa y su omega, y sobre todo si ese alfa tiene una particularidad de crear explosiones.
La historia de nuestra unión es bastante simple en realidad. Todo comenzó cuando nos dieron nuestros test de alineación, aquél que, luego de estudios médicos, te notifica si eres alfa, beta o omega.
Flash Back
Primaria Kohei
Veo entrar al docente con una caja sellada por el gobierno, donde se encuentran unos sobres color madera que tiene el resultado de nuestro análisis y alineación.
No estoy en lo absoluto preocupado, ya sé que soy un alfa. Es casi imposible no serlo, ningún beta o omega tendría mi personalidad y particularidad. Y mi cuerpo no podría ser sumiso ante nadie.
Miro al resto de mis compañeros, todos se encuentran nerviosos. Dependiendo de este test, es como se deberán comportar en sus vidas.
-"Estúpidos"- pienso- "No deberían preocuparse por lo que son, si logran ser lo suficientemente fuertes podrán lograr lo que sea".
Mi vista se detiene en una nuca peliverde, Deku se encuentra sentado unos cuantos asiento delante mío, y por el temblor que veo en su cuerpo se que está preocupado en demasía.
Chasqueo la lengua con fastidio. No entiendo su preocupación, yo lo aceptare sea lo que sea. De niños, cuando le puse el sobrenombre de "Deku", le dije que, cuando seamos grandes, nos casaríamos. Así que yo iba a cuidar de su inútil trasero.
Promesa que pienso cumplir sin importar nada, yo lo vi primero, así que yo me lo quedo.
Una sonrisa de autosuficiencia llega mi rostro a la vez que pienso- "De todas maneras dudo que alguien sin particularidad sea un alfa, tendrá que ser mi esposo beta o omega y satisfacerme".
Mis pensamientos se ven interrumpidos por el docente, que va dejando sobre nuestro escritorio el sobre correspondiente a cada uno. Veo que le entrega el suyo a Deku y continúa con los demás hasta mí.
La mayoría no encuentra el valor para abrirlo, pero eso a mi no me importa. De manera salvaje desgarro el sobre hasta ver una gran cantidad de hojas abrochadas con mis resultados. Encima de todas esas, hay una que dice:
"Katsuki Bakugo"
"Compatibilidad de alineación= Alfa"
Mi ego crece hasta las nubes al verme en lo cierto. El docente salió un momento del aula para devolver la caja. Así que aprovecho a levantarme con mi resultado e ir directo al pupitre de Izuku.
De un golpe dejo caer el resultado sobre su pupitre. Este da un golpe fuerte y hace que el peliverde deje de mirar su sobre cerrado para mirar mi test.
-Ahí lo tienes Deku!- digo con orgullo inflando el pecho- Tal como te decía, soy un alfa en toda regla.
Un murmullo de asombro se escucha en la clase, haciendo que mi ego aumente aun más. Pero la reacción que verdaderamente quiero ver es la de la persona en frente de mi. Muchos de mis compañeros comenzaron a abrir sus sobres.
-Waaa!! Kacchan que genial!- dice en un grito emocionado, sus ojos verdes acribillan los míos y la felicidad en sus ojos me sonrojo.
Voltee la cara hacia un lado y extendí mi mano- Ahora te toca a ti Deku...déjame ver que eres.
Un nuevo temblor volvió a Izuku y negó lentamente con la cabeza- No Kacchan, lo abriré en casa con mamá.
La furia me inundó, yo tenía derecho a saber que era. Como su futura pareja no puede ocultarme eso. De un golpe le arranqué el sobre de sus manos, el peliverde abrió grande los ojos a la par que me vio desgarrando el sobre.
En la primera hoja rezaba:
"Midoriya Izuku"
"Compatibilidad de alineación= Omega"
No me detuve a pensar antes de gritar- Deku eres un omega!!- la felicidad de saber que podríamos formar una unión hizo que me olvidara de ser discreto.
La expresión atónita del de ojos verdes se suavizo y una gran sonrisa apareció a la par de unas lágrimas de felicidad. Creo que tenía miedo de ser un beta o hasta un alfa (como si eso fuera posible) y que eso dañe nuestra relación.
Esta vez hubo un silencio en la sala, vi de reojo a muchos de nuestros compañeros ver con curiosidad a Deku, y hasta algunos con un extraño brillo de posesión.
En ese momento entendí. Izuku es un omega lindo y sin particularidad, cualquier alfa podría fácilmente obligarlo a formar una unión contra su voluntad. El terror acudió a mi cuerpo al imaginarme al peliverde en los brazos de alguien más.
-Kacchan estas bien?... pareces medio perdido- eso me despierta de mi ensoñación. Lo miro unos segundos hasta tomar mi decisión. Tomo su brazo y me lo llevo conmigo afuera del aula.
-Es..espera Kacchan- protesta en lo que tiro de él- no podemos irnos sin avisarle al profesor
-Cuando vuelva le diremos que necesitamos ir al baño-concluyo simplemente. No puedo detenerme, no ahora que llegue a la respuesta que necesitaba a mis temores.
Solo queda una solución: debo marcarlo antes que nadie.
Los pasillos se encuentran desiertos al ser horario de clase, así que no tardamos mucho en llegar a los baños. Abro la puerta y posteriormente la trabo para que nadie nos moleste.
Me volteo hacia Izuku y lo veo, mirándome extrañado. Debe parecerle raro mi comportamiento. Me preparo mentalmente para lo que le tengo que pedir. Por más impulsivo que sea, no puedo morder su cuello y obligarlo a estar a mi lado.
-Escucha Deku, ahora sabemos que eres un omega ¿cierto?- pregunto, a lo que él asiente levemente con la cabeza- Así que deberíamos emparejarnos de una vez ¿No te parece?
Sus mejillas se tiñen de rojo ante mi pregunta, con un tartamudeo nervioso responde- P..pero Ka..kacchan, eso debemos hacerlo cuando seamos grandes.
-¿Qué diferencia hay?-respondo-¡¿Acaso pretendes unirte a alguien más?!- Mi propio pensamiento me hace enfadar
-No! Claro que no Kacchan!- niega rápidamente- Yo te quiero a ti...-termina en un susurro, con la mirada gacha y un sonrojo en las mejillas.
-Entonces no hay nada que discutir- finalizo acercándome a él.
Su espalda se choca contra la pared a la vez que lo presiono contra el mío. Nunca habíamos hecho esto, siento las conocidas mariposas en el estomago, que sentí toda mi vida desde que conocí a Deku, pero hay otra sensación rara, son como las mismas mariposas. Pero en lugar de estar en mi estomago se concentran en mi pelvis. Y cuanto más aprieto el cuerpo del peliverde contra el mío, más fuertes son.
Hago lo mismo que hacemos cada vez que nos quedamos solos en nuestros cuartos, choco mis labios con los suyos. Las mariposas en todo mi cuerpo revolotean con mayor fuerza. Deku cierra los ojos y me deja hacer lo que quiera.
Mis manos viajan a sus caderas y rozo nuestras pelvis, una electricidad ataca mi cuerpo y un fuerte gritito escapa de nuestras bocas. Lo veo abrir esa boquita en busca de aire a la vez que me rozo contra él y deseo por primera vez probar un beso de adulto. Vuelvo a estampar mi boca contra la suya, y cuelo mi lengua dentro. Mi peliverde abre grande los ojos a la par que me da unos golpecitos en el pecho.
Me separo ligeramente y lo veo tomar aire con mucha fuerza.
-N..no podía...respirar Kacchan-dice jadeando. Algo en esa imagen me hace querer volver a meter mi lengua hasta su garganta. Pero me detengo, no quiero que se enoje conmigo y no me permita emparejarme con él. Suelto su cuerpo y me alejo solo un poco.
-De acuerdo Deku, hagamoslo...date vuelta y enseñame tu cuello- le digo lo más tranquilo que puedo.
Lentamente se gira y coloca las manos contra la pared, a la vez que baja la cabeza, dejándome una perfecta accesibilidad a su cuello.
Me coloco tras de él y pego nuestros cuerpos nuevamente. Esta vez mi pelvis se frota contra su trasero y eso me genera más descargas eléctricas.
Subo y bajo por su cuello repartiendo besos hasta que logro tranquilizarlo y, cuando lo siento relajado contra mí, le doy un fuerte mordida en el centro de su cuello.
Deku da un grito y siento como si hilos invisibles ataran mi corazón a otro. Siento el palpitar del corazón de Izuku, su preocupación, su miedo, pero también su felicidad de unirse a mí y, para mi sorpresa, siento las mismas mariposas en él.
Nos quedamos un rato así, unidos, hasta que sonó el timbre de descanso. Nos tuvimos que separar para destrabar la puerta del baño antes de que se arme una multitud.
Luego de eso el día transcurrió de una forma bastante interesante. Mis compañeros estaban sorprendidos de ver la marca en el cuello de Deku, que aunque intento ocultarlo con el cuello de la camisa, no pudo hacer gran cosa.
El profesor nos echó la bronca por escapar de clase y se escandalizó al ver la marca. Nos mandó con el director a la vez que llamaba a nuestros padres.
La loca de mi vieja casi me mata al verme, empezó a gritarme cosas del estilo de "Mocoso endemoniado", "Niñato hormonado" y una que no termine de entender "Discípulo de incubo". La madre del peliverde estaba sin habla, solo se dedicaba a abrazar a mi omega y llorar preguntándole que paso.
Mi viejo, tan tranquilo como siempre, se agachó a la altura de Izuku y le preguntó si yo lo había forzado de alguna manera. Él se apresuro a contestar que no, que acepto unirse a mí como habíamos prometido.
Eso logro calmar a su madre y a la mía. Pero luego de ese día, pasó una semana hasta que nos permitieran juntarnos, algo que el nuevo vinculo creado entre nosotros nos demandaba.
Al pasar la semana, mi mal humor y la depresión de Izuku, lograron aceptar la unión que teníamos y nos permitieron juntarnos.
Pasaron unos cuantos años antes de nuestra primera relación sexual, en los inicios de la secundaria.
Fin Flash Back
Y aquí estamos ahora, en plena faena sexual ya tan habitual para nosotros, pero no por eso menos satisfactoria.
Estamos en el último año de secundaria y pronto serán los exámenes de ingreso a la Academia de Héroes. Luego de eso tendremos menos tiempo para juntarnos, yo entraré en el curso de héroes. Deku dijo que hará el examen de ingreso, pese a todas mis protestas, pero sin ninguna particularidad dudo que pueda entrar.
-"Supongo que tendrá que contentarse con ser mi esposa"- pensé mientras empujaba fuertemente en su interior. No estamos usando protección, quiero embarazar a Deku para qué deje de pensar en esas estupideces de "ser héroe" y se dedique en completo a mí.
Con un fuerte gruñido de mi parte, acabo en su interior. Mi orgasmo dispara el suyo, lo cual hace que su semen termine en nuestros rostros y su entrada apriete deliciosamente mi pene, ordeñando hasta mi última gota.
Nos entretenemos besándonos por un buen tiempo, antes de decidir que es momento de sepáranos. Lo ayudo a limpiarse en el baño adjunto a la enfermería y seguimos con nuestras clases del día.
Nunca me pude imaginar que Deku se encontraría con el mismísimo All Might y este decidiera volverlo su sucesor.
No es necesario aclarar que esa fue una gran crisis para nuestra pareja, mi omega me oculto la procedencia de su poder, y como alfa me sentía amenazado ante la presencia de alfas tan poderosos como el bastardo mitad-mitad y el ojeroso. Sin contar la amistad de Deku con el beta de anteojos.
Pero toda crisis acabo en el primer celo luego de ingresar a la Academia. No podía seguir enojado con Deku y dejarlo sufrir solo en su celo. El rencuentro, más que apasionado, zanjó de una vez por todas sus inseguridades. Izuku lo quería a él y solo a él.
Volvieron a su relación de toda la vida y se volvieron un gran dúo heroico. La preocupación de mi alfa por tener un omega en contante peligro nos ha causado unas cuantas peleas (y un mayor deseo de preñarlo), pero nada que haya logrado separarnos.
Una vez vencido All For One, Deku cumplió mi deseo de ser mi esposa. Y para mi mayor deleite, me informo que dejó de cuidarse.
Hoy en día tenemos a una pequeña princesa caprichosa, que es la luz de nuestros ojos. Deku salvo al mundo y se dedico a la familia. Y con la casi total extinción de villanos, mi trabajo como héroe no puede ser más fácil.
Esta es una historia de un amor un poco complicado, egoísta, posesivo y lujurioso, pero amor en fin.
Ahora dejen de joderme y disfrutar de mi omega en paz.