La alarma sonó, era otro día de trabajo, creo que no fue buena idea ir de fiesta en medio de la semana, soy de las personas que necesitan dormir mucho para funcionar, lo bueno es que no amanecí con ninguna resaca, sólo con el cuerpo un poco a dolorido, sobre todo mis piernas por tanto bailar, me bañé con agua muy caliente, mi tía dice me baño como agua para caldo de pollo, lo bueno que en mi trabajo no hay etiqueta de vestimenta, al menos no en la parte donde trabajo.
Bajé a desayunar a la cocina, mi tía estaba en pijama, tomando su café.
-Buenos días princesa- me dice risueña- ¿Estuvo buena la fiesta?
Empecé a comer mi fruta y a tomar mi jugo verde.
-Si, ya hacía falta que me divirtiera así...
-Dónde te escuche Theo...- dijo divertida mi tía, mi mejor amigo era muy celoso si salía con otros amigos, esa era otra razón por la cuál nos decían que éramos pareja.
-Ya está muy ocupado, ya me tiene muy abandonada...- mi voz era triste hace un par de días que ni un mensaje me llegaba de Theo y eso era mucho, por lo regular a cada hora nos mandábamos algo.
Mi tía se río- lo tienes de vecino, no es que lo tengas muy lejos...
-Lo sé, pero siempre estábamos juntos... Lo extraño...
-¿Qué pasó ayer en la noche?- dijo mi tía, dejando su café en la mesa, tomando mi mano- siempre que te pones así es porque pasó algo con...
-Me lo encontré ayer...-empecé a jugar con la granola de mi fruta.
-¿Qué te hizo ese tipejo?
-Nada... Iba saliendo del baño y me lo encontré... choqué con él, me saludo como si nada...
-¿No le dio pena mirarte?- preguntó mi tía, ella se sabía de princio a fin la historia que compartía con Alan; negué con la cabeza- ¿Te dijo algo más?
-Me dijo que deberíamos salir algún día...
-Si te atreves a salir de nuevo con él, en serio Paula- se quedó callada pensando en como seguir- que ya no te llevo tu cereal a tu cuarto ¿Entendiste?- me abrazó y me besó la cabeza.
-No tengo planeado salir con él de nuevo- nos quedamos muy abrazadas hasta que mi tía vio el reloj...
-Se te va a hacer tarde mi niña...-Tomé muy rápido mi jugo, me subí a lavar los dientes y salí corriendo a mi carro.
Llegué, saludé a la recepcionista y subí a mi piso, llegué y mis compañeros se veían muy mal.
-¡BUENOS DÍAS COMPAÑERITOS!- grité desde la puerta, solo para molestarlos.
-Paula shhhh- George estaba detrás de mi con gafas.
Me reí y me senté en mi lugar, me puse a trabajar en lo que me quedé ayer.
Oí el sonido de mi teléfono, la pantalla de mi celular se prendió.
<<Amorcito>>
Era Theo.
El celular sonó de nuevo.
<<Te extrañoo amorcito>>
Sonreí, desbloqué el celular y contesté.
<<Yo también amorcito>>
<<Necesito verte, me haces falta 😔>>
<<Y tu a mi hermosa>>
<<Traidora ya me enteré de que estás saliendo con otras personas>>
<<Me debes una salida y una penitencia>>
<<Claro que si... Tu dime cuando 😉>>
<<Hoy paso por ti a las 9:30, y no me puedes decir que no>>
<😱😱😱>
<Bueno... Te espero a esa hora en mi casa 😘😘>
Salí de whatsapp y bloqué mi teléfono.
Ya era muy tarde, fui la última en salir con unas de mis compañeras, su novio vino por ella, me esperé a que llegara su chico, porque ya era muy tarde.
Tuve que meterme de nuevo y bajar al estacionamiento, mi carro lo dejé un poco lejos, vi a un hombre con traje que caminaba muy raro, venía a mi dirección, busqué en mi bolso mi gas pimienta, hasta que lo vi viendo mejor... Era Demian, no podría estar otra vez así, él me vio, su mirada era muy fría, me quedé congelada, el me vio de una manera muy desagradable, que me hizo reaccionar y me fui hasta mi auto.
Ya adentro de mi auto, con las manos en el volante, respiré profundamente un par de veces para relajarme, ya que me sentía mejor conduje hasta mi casa, ya casi no tenía tiempo para cambiarme, agarré algo que tenía olvidado en mi closet y me lo puse, me maquille y me puse perfume, acababa de terminar cuando mi puerta se abrió.
-Estás hermosa- me besó el hombro desnudo.
-Gracias tu también estas muy hermoso- le di un beso en la mejilla.
Me paré del banquito que estaba frente a mi tocador y tomé su mano, entrelazamos nuestros dedos, caminamos hasta su auto, me abrió la puerta.
Condujo hasta el club, no hicimos fila, el habló con el cadenero y entramos al club, caminamos hasta un grupo de personas, al parecer eran sus compañeros, me presentó con todos, me sirvieron un shot, me la tomé y Theo me sacó a bailar, extrañaba ya estar con Theo de esta manera.
Estábamos bailndo bien pegados hasta que nos dio sed, otra vez nos fuimos a la mesa de sus compañeros.
Me dieron ganas de ir al baño, el me acompañó, se esperaba fuera de la puerta.
Hice todo lo que tenía que hacer, mientras estaba lavando mis manos unas chicas estaban platicando.
-Saben a quien me encontré en la zona VIP....- una rubia alta empezó a decirle a su amiga, esta negó- Estaba Damian James...
-¿Por qué no te le acercaste?
-Porque se estaba metiendo una linea, tal vez más al rato me le acerque...
Otra vez esta en esas cosas Demian, tenía que decirle a su hermano, Theo aunque sea el menor siempre estaba al pendiente de su hermano que no volviera a caer en las drogas y más ahora que estaba teniendo mucho éxito con su empresa.
Fui con Theo y le conté lo que estaba pasando, el se enfureció, tomó mi mano de nuevo, me jaló hasta la zona VIP, habló con el cadenero de esa zona y subió hasta donde estaba su hermano, yo estaba tratando de ver lo que pasaba allá arriba en el tapanco, no pasó tantos minutos para que un Theo realmente molesto bajara con un Demian muy malhumorado, ellos caminan enfrente de mi y yo los seguía.
Theo lo subió a su auto.
-Maldita sea- pegó con la palma a su auto- se me olvidó mi celular en la mesa, deja ir a ver si todavía lo encuentro...
-Mejor voy yo -lo tomé de la mano para que no se fuera- no quiero quedarme con él si está así...
-No amorcito, voy rápido no te va a hacer algo...- así se fue dejándome con un Demian drogado, Theo se fue corriendo, me subí en la parte del copiloto del auto, lo miraba por el retovisor, por ratos, el me veía muy feo, su mirada me intimidaba, pareciera como si me odiara.
-Quieres dejarme en paz, de una vez -dijo Demian- te lo he dicho varias veces, tu no me gustas, cómo alguien como tu me pudiera llegar a gustar, eres tan insignificante, tan grande como para alguien como yo se fije...- no puede ser, es como si la noche de hace años volviera a estar pasando, me quedé helada al oírlo.
-¡Basta! no me vuelvas a hablar así- nos retábamos con los ojos, qué pasaría si él me recordara, qué pasaría con mi trabajo...
-Si lo pude encontrar- salté en mi lugar- ¿Todo bien?- dijo subiendo a su carro.
-Todo bien susurré- voltee a ver a Demian y este ya estaba dormido.