Haciendo uso de todo su poder y agotando sus últimas fuerzas, las Sailor y los caballeros celestiales lograban destruir a unos cuantos demonios, pero cada vez que los eliminaban, estos volvían a reconstruirse nuevamente.
Cosmos: ¡Resplandor del Cosmos! – se escuchó, seguida de una brillante y poderosa luz que eliminó a la mayoría de los demonios dejando solo sus semillas estelares. En ese momento apareció Sailor Cosmos quien nuevamente las absorbió entre sus manos
Uranus: ¿¡Por qué les robas sus semillas! – grito
Jupiter: ¿Acaso tú envías a esos demonios a atacarnos? – replicó.
Cosmos: Ustedes no conocen como funciona el universo – susurró mientras comenzaba su lucha con otros demonios que habían resistido su ataque.
Figther: ¡Si no eres un enemigo entonces déjanos ayudarte!
Cosmos: Lo siento, ustedes no tienen el poder suficiente, ya se los dije – y en un momento de distracción un de los demonios la tomó por la espalda atacándola con un rayo de energía--Grave error, sabes que no eres un digno oponente para mí – susurró son una pequeña sonrisa, en el momento en que hacía aparecer sus alas y partir al demonio en dos – Otra semilla para mi colección – comentó con una sonrisa dirigida a las Sailor haciendo desaparecer la nueva semilla.
La lucha continúo, más y más demonios la asechaban, mientras las Sailors, los caballeros celestiales y Endimion eran nuevamente derrotados y aprisionados contra un muro.
Cosmos: Esa es la ayuda que pueden prestarme? No se dan cuenta ¡Solo son estorbos! – exclamó mientras era atacada por una decena de demonios que la comenzaron a aprisionar.Entonces se escuchó un grito a la distancia –
Luna: Majestad, confíe en las personas, ellas pueden ayudarle y usted lo sabe- se dejó ver la silueta de la gatita junto a Rini.
Mercury: ¿Majestad? ¿Luna a que te refieres? – preguntó intrigada
Rini: Eso es lo de menos en este momento – contestó
- Cosmos por favor, escucha a tu corazón, confía en ellos – suplico
Endimion: Por favor Cosmos, confía en nosotros– exclamó-Tal vez no seamos tan fuertes como tú, pero… –
Mina: Amamos este mundo como nadie! – finalizo
Plut: por favor dejamos ayudarte!!!
Figther: ten confianza! Sabes que no somos los malos!
Cosmos posó su mirada en cada uno de ellos y vio la determinación de estos, no se darían por vencidos.
Cosmos: ¡Ráfaga del cosmos! – gritó golpeando con su báculo mientras los demonios salían eyectados fuertemente a distintas partes- de mi Si es lo que quieren. No me dejan otra opción – les dijo con mirada fría – ¡Yo los liberaré de su sufrimiento! – dijo mientras hacía desaparecer su báculo y en sus muñecas aparecían brazaletes similares a las usadas por Sailor Galaxia y unía sus muñecas en posición de ataque.
Uranus: ¿Esos brazaletes son…? – exclamó horrorizada
Saturn: ¡No puede ser! – la siguió
Mientras de los brazaletes comenzaron a salir pequeños destellos dorados dirigidos a todos los guerreros.
¡Ahhhgg! – se quejaron todos mientras su semilla estelar era expulsada de sus cuerpos y su transformación desaparecía.
Endimion: ¿que haces? – exclamó entre lágrimas y sorprendido sin poder hacer nada.
Luna: Qué hace majestad? – exclamó con preocupación
Rini: ¿Qué estás haciendo Cosmos? – preguntó
Cosmos: No se preocupen – dijo dedicándoles un leve sonrisa – era necesario, un nuevo poder siempre se presenta después de una situación de peligro y miedo.- Diciendo esto hizo que los brazaletes desaparecieran e hizo aparecer su báculo nuevamente comenzando a levitar junto a él, mientras su cuerpo era cubierto con un gigantesco resplandor.Todos los presentes observaban sorprendidos e incrédulos la situación mientras aún mantenían sus semillas fuera de su cuerpo, entonces el resplandor de Cosmos comenzó a tomar diferentes colores dirigiéndose a cada una de las semillas estelares de las Sailor y de los caballeros según el color de su uniforme tomando un resplandor aún más potente, luego de esto, la semilla de cada una regreso a su cuerpo haciendo desaparecer el resplandor que emanaba de Sailor Cosmos.
¿Qué les hiciste? – preguntó intrigado Endimion.
Cosmos: Lo que ellos me solicitaron nada más y ahora… ¡Sigues tu!- Le dijo mientras traspasaba el pecho de darien con su gigantesco báculo.
Rei: ¡Darien! – gritó horrorizada
Setsuna: ¡¿Por qué… por qué mataste al príncipe? – dijo entre lágrimas
Amy: ¡No puede ser! – decía desconcertada
El báculo comenzó a desaparecer lentamente en el inerte cuerpo de Darien dejando a la vista el hermoso cristal dorado del príncipe de la tierra. Cosmos lo tomó entre sus manos admirando su belleza un par de segundos, para luego absorberlo en su cuerpo
Haruka: ¡Lo sabía! Esta fue tu intención desde un principio – recriminó
Seiya: no lo creo, si fuera esa su intencion nos habria matado desde un principio – reclamó
Rini: ¡Basta chicas! – Gritó – Yo confío en ella, por favor ustedes también – volteando hacia Cosmos.
Cosmos no ponía atención a lo que todos le recriminaban ni en Rini que intentaba defenderla, solo se concentraba en su tarea, cerró los ojos comenzando nuevamente a levitar siendo nuevamente cubierta por una potente energía, después de unos momentos el cristal dorado fue expulsado fuera de su cuerpo, este venía con un nuevo y fuerte resplandor.
Cosmos: Creo que con esto será suficiente – susurró débilmente mientras devolvía el cristal a su dueño.
Lita: No lo entiendo – dijo inquieta
Nicolas:¿Por qué lo está devolviendo? – dijo aún más intrigados
Mientras el príncipe de la Tierra volvía a reaccionar poco a poco y poniéndose de pie.
Darien: ¿Qué… qué nos hiciste? – preguntó el tomando a Cosmos de ambos brazos.
Cosmos: Lo que ustedes me solicitaron… confiar – susurró débilmente mientras comenzó a desvanecerse cayendo desmayada en los brazos de Darien
Haruka: Es nuestra oportunidad de acabar con ella – exclamo
Darien: ¡No te atrevas! – La detuvo el– no creo que nos haya hecho daño.
Taiki: Es verdad, si hubiese querido nosotros no estaríamos vivos ahora – dijo pensativo.
Andrew: No sé que nos hizo, pero sé que no es nada malo – comentó en el momento en que Cosmos comenzaba a despertar.
Cosmos: Siento haberlos asustado – susurró apenas – pero era necesario para su transformación.
Haruka: ¡¿Transformación? – preguntó
Cosmos: Así es, les he dado un poco de mi energía – dijo mirándolas a todas y deteniéndose en Rini – he escuchado a mi corazón – le dijo con una sonrisa.
Darien: Por eso estás tan débil – dijo preocupado.
Cosmos: No se preocupen, yo me repondré pronto. --En ese momento los demonios que habían sido lanzados lejos comenzaron a acecharlas
Cosmos: Chicas – dijo seriamente – ahora ustedes son Supremas Sailors, ¡Concéntrense y vuelvan a transfórmarse
¡Sí! – exclamaron todas juntas transformándose
¡Suprema Sailor Mars transformación!
¡Suprema Sailor Mercury transformación!
¡Suprema Sailor Venus transformación!
¡Suprema Sailor Júpiter transformación!
¡Suprema Sailor Uranus transformación!
¡Suprema Sailor Neptune transformación!
¡Suprema Sailor Plut transformación!
¡Suprema Sailor Saturn transformación!
Y todas comenzaron a transformarse rodeadas de una potente energía, sus uniformes mantuvieron el color que las caracterizaban, pero con tonos más metalizados, los lazos de su cintura se alargaron y en su pecho aparecía una estrella de cinco puntas con alas, las mangas de sus uniformes cambiaron haciendose mangas largas, pero con el color característico de cada una, y sus faldas tomaron su color distintivo metalizado con bordes color plata y color blanco en el centro, a los caballeros celestiales solo les habia aumentado el nivel de poder ya que ellos no poseian mas transformaciones.
Uranus: Siento, como una nueva energía recorre mi cuerpo – dijo
Neptuno: si, un nuevo poder dentro de mí – repitió.
¡Un gran poder! – repitieron todas al unísono mientras desprendieron una potente energía que eliminó a todos los demonios dejando solo sus semillas estelares
Darien: Eso fue increíble! – dijo sorprendido, quien aún sostenía a Cosmos entre sus brazos.
Cosmos: Ahora es tu turno – dijo separándose de él, mientras este comenzaba a transformarse, así permaneció unos segundos hasta que el Cristal Dorado comenzó a envolverlo con su energía, el traje comenzó a cambiar de color, volviéndose a un tono lavanda, y su espada era reemplazada por el baculo del rey Endimion con su distintiva mascara.
Plut: Rey Endimión! – exclamó
Rini: ¡Increíble! – Exclamó observándolos a todos.
Cosmos: Les pido nuevamente que me disculpen no fue mi intención asustarlos, pero era necesario – dijo mientras se dirigía a las semillas de los demonios derrotados – ahora por favor, confíen ustedes en mí – decía mientras débilmente trataba de alcanzar las semillas y caí nuevamente al piso
Endimion: Yo confío en ti, Sailor Cosmos – dijo mientras comenzó a depositar las semillas en las manos de Cosmos, siendo absorbidas por ésta.
Si, nosotras también – exclamaron todas, con excepción de Uranos que aun no confiaba en ella.
Cosmos: Ahora necesito descansar un poco – dijo tratando de ponerse nuevamente de pie cayendo desmayada, inmediatamente Endimión la sostuvo y la alzo entre sus fuertes brazos
Endimion: Esta muy débil, debemos llevarla a un lugar tranquilo a descansar – dijo mientras la observaba con dulcura
Mars:Llevémosla al Templo para que descanse – dijo
Endimion: Sí, creo que es lo mejor, con Rini en casa no creo que logre descansar mucho, además mañana podemos reunimos todos allá y podremos aclarar las cosas con Cosmos.