Advertencia: Aparición de algunos OC (Original Character). Capítulo de relleno :v
Una multitud estaba rodeando el gran árbol, muchos de ellos eran ninjas médicos. La mayoría de las personas que salían de los capullos estaban en su mínimo, por lo que se instaló una especie de campamento improvisado. Si parpadeabas tan solo un instante, perdías de vista a al menos cien personas; en pocas palabras: el sitio era un completo caos.
---¡Traigan a los mayores de sesenta por aquí! ---gritaba Sakura a sus ayudantes.
---¿Y a los de cincuenta a dónde los envíamos? ---preguntó uno de ellos. La pelirrosa continuó aplicando chakra a una señora y luego respondió.
---Algunos miembros del escuadrón de Shizune-san están cerca, llevenlos allí, la tienda tiene su símbolo escrito.
---¡Sí! ---respondieron ambos subordinados antes de marcharse.
---¡Sakura-chan! ---Entró Naruko a la abarrotada tienda---. ¿¡Viste a Ero-sennin por algún lado!?
---¡No grites en un hospital Dattebane! ---regañó Kushina, apareciendo tras ella.
---Pero esto no es un hospital Kaa-chan ---lloriqueó, adolorida ante el repentino golpe propinado por la Uzumaki mayor.
---Ustedes dos ---intervino Minato, siendo el último en entrar---, por favor guarden silencio, molestarán a las personas heridas ---pidió un tanto avergonzado a causa de la actitud de su familia.
La joven Haruno fue incapaz de acostumbrarse a ver a tan peculiar familia, incluso si ya los había visto reunidos unas horas antes.
Kushina definitivamente dejó la mayoría de su personalidad en su prole, Minato por otro lado, sólo influyó legó su apariencia e ideales. Pero aun así, se veían muy similares y diferentes al mismo tiempo.
---No he tenido noticias suyas, lo siento ---se disculpó Sakura, ya habiendo concluido con la paciente---. ¡Koizumi! ---llamó a una de las egresadas chunnin más recientes---. Por favor lleva a la señora Yoshino al área de descanso, su pulso es normal, pero la vigilancia no está de más.
La muchacha procedió a trasladar a la anciana con cuidado, para después dejarlos.
---Sin embargo ---prosiguió ella---, bien podría estar en el área 20, que se encuentra a una distancia considerable de aquí ---meditó ella, llevándose un dedo al mentón.
---¡Sakura! ---pudo escucharse la llegada de alguien más, era una voz masculina.
---¡Onii-chan! ---dijo la ojiverde, sorprendida. No se esperaba la aparición de su hermano mayor. Hasta donde sabía, se encontraba localizando a los criminales peligrosos junto a los demás ANBUS--- ¿Qué haces aquí?
---No me llames Onii-chan, llámame Aniki ---suspiró agotado---, da igual, te venía a avisar que hay- ---la frase quedó inconclusa cuando observó a las otras personas, quienes estaban allí antes que él, al Cuarto ya lo conocía del campo de batalla, Kushina, en cambio, era la primera vez que la veía.
---Kaa-chan, Tou-chan, ---dijo la de coletas, con absoluta seriedad---, éste es Sakurai Haruno-kun "Sakkun" para abreviar, y será el hombre que engendrará a sus nietos.
No pasaron ni cinco segundos hasta que la situación explotó. No era posible decir quién estaba más rojo, si Minato o el joven.
---Entonces estos son tus gustos ---analizó la pelirroja al joven de pies a cabeza.
Si no fuera porque era cuatro años mayor que Naruko y su hermana, podrían pasar perfectamente como gemelos. Sakurai poseía los ojos y cabello de colores similares a los de Sakura, sólo que en su caso, eran más opacos. Éste último, lo llevaba corto, rapado a un lado y más largo en el otro. La vestimenta que lucía era el uniforme ANBU, cuya máscara aún sostenía en la mano. Y la bandana la llevaba en el hombro izquierdo, ajustada sobre la marcada musculatura. Pero el detalle más curioso era que la parte usualmente expuesta del calzado, estaba cubierta.
---Bien. ---Asintió Kushina---, lo apruebo Dattebane.
El rostro de Sakurai se volvió indistinguible de su cabello de manera instantánea.
---Ajem ---aclaró su garganta, en un esfuerzo por recuperar la compostura---, Naruko, no me llames "Sakkun" ---hizo énfasis en el apodo---, es Sakurai o Haruno Taichou.
---¡Como digas, Sakkun!
---Olvídalo... ---dijo resignado, para después llevar su mirada hacia Minato y hacer una leve y respetuosa inclinación ---. Es un honor verlo otra vez, Yondaime-sama ---luego miró a Kushina---. Usted debe ser Kushina-sama, ¿verdad?.《¡Kushina-sama!》, pensó deleitada la anterior jinchuriki del Kyūbi, nunca nadie le había presentado tanto respeto.
---Lo mismo digo, Haruno-kun ---sonrío Minato, aunque distaba de ser una sonrisa amistosa...
El mencionado tragó en seco.
---L-la razón por la cual estoy aquí, es que encontramos a un individuo muy mayor merodeando por- ---no pudo terminar la expresión, ya que fue interrumpido por Sakura.
---¡Eso es malo Onii-chan! ¿Por qué no lo trajiste antes? Es muy peligroso que alguien en la tercera edad ande vagando sin cuidado, y más en éste estado ---regañó ella.
---No estuvo en nuestras manos hacer mucho, incluso en las condiciones en las que se encontraba, era muy fuerte ---dirigió por segunda vez, su atención a la familia---, de hecho es muy oportuno encontrarlos aquí, lo encontramos espiando en la tienda de descanso perteneciente a las enfermeras... a pesar de albergar todavía una gran cantidad de líquido en los pulmones. ¡Shin, Sei, ya pueden entrar! ---anunció levantando un poco la tela que hacía el papel de entrada.
Enseguida dos muchachos exactamente iguales, de cabello negro y ojos grises entraron, con una alguien que parecía estar herido a cuestas.
---Malditos mocosos, como se atreven a arruinar mi inversión ---dijo el hombre, casi sin aliento.
La visión del Sannin vivo era algo que su aprendiz llevaba deseando desde mucho tiempo atrás, sin embargo, ahora que lo tenía en frente, le tomó unos instantes reaccionar.
---¡Ero-sennin!
---¡Sensei!
Corrieron a abrazarlo sus dos mejores alumnos, dejando una leve sorpresa en los presentes.
---Ustedes dos... ---los miró, conmovido de momento--- ¿¡Quieren librarse de mí tan pronto!? ¡Casi no puedo respirar! ---dijo el ermitaño fingiendo llevarse la mano a la garganta en señal de asfixia.
---¡No digas estupideces después de tanto tiempo 'ttebayo! ---dijo la actual jinchuriki, llorando literalmente a moco tendido.
---¡Que asco, usa un pañuelo! Parece que no te volviste más femenina en el tiempo que no estuve ---rió acariciándole la cabeza de modo fraternal.
---¡Esa es mi esencia, y así todos me amam, viejo tonto! ---se defensa ésta, aún usando la ropa ajena como pañuelo.
---Naruko ten un poco más de respeto ---pidió Minato, preguntándose si en verdad era el único callado en esa familia.
---Bueno, supongo que en una ocasión como esta se puede permitir Dattebane ---Kushina sonrió. El resto sólo contemplaban felices la escena hasta que una tos hizo que todos se pusieran alerta.
---Jiraiya-sama, por favor venga por aquí ---Sakura indicó---, todavía debe tener algo de agua en los pulmones.
Los alumnos del viejo sannin reemplazaron a los ANBUS, y lo llevaron hacia la zona de tratamiento.
Unas horas después...
Ya eran horas seminocturnas, el atardecer estaba en su máximo apogeo, y el "campamento improvisado" estaba irreconocible. Tenía un aspecto más cercano a un festival, que a un lugar donde se trataban heridos. Cada establecimientos brindaba un servicio gratuito, esto era debido a que principalmente, muchos mercaderes y algunos daimyos locales ofrecieron su ayuda dada la situación, también ellos tenían familia instalada allí.
Entre el montón de tiendas, se alzaban numerosos farolillos y podían verse decenas de puestos de comida, cada uno de un tipo diferente.
---¡Sakura-chan, Sakkun, deprisa! ¡Escuché que hay una variedad muy extraña de Ramen al estilo de Iwa! ---dijo Naruko, arrastrando a ambos pelirrosas de cada mano.
---Pero sí ya te has comido cinco platos diferentes en la última media hora ---recordó Sakurai---. Vas a enfermarte del estomago.
---¡Está bien, mi estómago es más resistente de lo que parece!
---Eso ya lo sabemos... ---replicó la de cabello corto---, pero deberías tener cuidado de todas formas...
---¡Miren, allí está! ---Naruko señaló una carpa sin "paredes". La cual parecía tener una gran clientela.
Tuvieron que hacer fila durante al menos veinte minutos, la mayoría de los clientes estaba constituida por familias, y personal en su descanso. Los platos, por otro lado... eran más grandes de lo esperado.
Cuando finalmente lograron entrar, les tocó una mesa en el centro, y en cuestión de instantes llegó una mesera a tomar la orden.
---¿Entonces, en verdad está segura de participar en el desafío del Mega Tazón? ---preguntó por segunda vez, algo nerviosa la mesera.
---¡Por supuesto, Dattebayo!
---Oye, Naruko... no hay ninguna vergüenza en retirarse ---le aconsejó el mayor de los Haruno---. Si te comes eso estarás vomitando en cuestión de segundos.
---Onii-chan tiene razón, el tazón es del tamaño de un balde, piénsalo mejor ---.Lo secundó la joven medic-nin.
---¡Ya me decidí! Por favor tráelo ---le indicó a la mesera, quien, aún dudosa asintió y fue a hacer su trabajo.
---Esto no va a terminar en nada bueno... ---negó Sakurai---, además ---hizo como si estuviera recordando algo---. ¿Quién habrá sido la que al subir de peso, prometió que no volvería a tocar otro tazón de ramen?
La víctima de la indirecta se sonrojó.
---Jaja, no recuerdo cuando pasó algo así ---rió nerviosa---, e incluso si hubiese pasado tal cosa, ¡que no pasó! Sólo tendrías más para abrazar~ ---dijo pasando un brazo alrededor del cuello del ANBU.
---Tonta... ---masculló Sakurai, cuyo rostro tomó un color similar al de su cabello.
《De alguna manera acabé siendo la tercera rueda... 》---se resignó Sakura, un tanto incómoda.
---Mi descanso casi termina, creo que será mejor que me vaya. No puedo dejar a Ino y a Shizune-san cargar con todo el trabajo ---anunció levantándose de la silla.《Onii-chan, esta va por ti, más te vale aprovecharla》 ---pretendió hacerle entender con la mirada.
---¿Qué? Deberías quedarte al menos hasta que traigan la comida, Sakura-chan ---dijo la Uzumaki, notablemente decepcionada.
---Descuida, podemos venir todos juntos en otra ocasión. Nos vemos luego ---se despidió casi demasiado rápido, desapareciendo calle abajo.
---Es una lástima, también quería comer con Sakura-chan ---musitó bajando la vista. O eso pensarías...《Gracias Sakura-chan, tu marcha no será desaprovechada》, fue el pensamiento instantáneo que invadió su mente, al verse a solas con el objeto de su afecto.
---No te pongas así, de seguro mañana vendremos, a propósito, no he visto a tus padres desde hace un rato, ¿también están recorriendo los alrededores? ---cuestionó curioso, para después beber un vaso de agua.
---Están poniéndose al día, o al menos eso dijeron antes de perderse entre unos arbustos ---respondió con normalidad, consiguiendo que Sakurai casi escupiera el agua.
---¿¡Estás bien, Sakkun!? ---le dio varias palmadas en la espalda, hasta que la tos cesó.
---E-es Sakurai o Haruno Taichou ---rectificó, hablando dificultosamente---, y ten cuidado con lo que dices...
---¿Por qué? ---giró la cabeza a un lado---¡Ah, lo dices porque ellos están f...-! ---la palabra final nunca salió, puesto que el muchacho puso su mano en su boca.
---En serio... piensa mejor lo que dices ---dijo, viendo como ya le demás clientes y trabajadores comenzaban a mirar hacia allí, después quitó la mano.
---De acuerdo ---suspiró ella---. ¡Oh, por ahí viene nuestra orden!
Mas la cara del ojiverde se tornó blanca, ¡esa cosa tenía el tamaño de un balde encima de otro! ¿no se suponía que debía de ser más pequeña?
---¡Es incluso mejor de lo que imaginé ttebayo! ---miró el recipiente casi con amor, mismo que debido a su tamaño, estaba siendo traído por dos meseros.
---Oye, no es por ser pesimista, pero no hay posibilidades de que logres comerte esa cosa...
---Marca tus palabras Sakkun, si gano deberás obedecer cualquier cosa que te pida ---dijo luciendo una mirada sospechosa, que no le transmitió nada bueno al mencionado.
---Un momento, nunca accedí a hacer algo así ---pero fue demasiado tarde, porque la chica ya había comenzado, bajo la observación de toda la carpa.
Cinco minutos...
Diez minutos...
Nadie podía creer lo que estaba viendo... : el gigantesco tazón estaba ahora vacio.
---¿Qué te dije, Sakkun? ---se regodeó la fémina.
---Normalmente estaría sorprendido, pero mira la cara que estás poniendo ---y no mentía, el rostro ajeno estaba entre el azul y el verde, como si estuviera a punto de devolver todo en cualquier momento ---. Será mejor irnos rápido, no te ves nada bien ---le ofreció su hombro.
---Creo que tienes razón, mi estómago se siente raro... ---se quejó, apoyándose en él.
Antes de irse Sakurai agradeció a los trabajadores, para luego marcharse junto a Naruko.
Debido al estado en el que la de marcas en las mejillas se encontraba, trató de encontrar un lugar tranquilo. Tras analizar algunas posibles opiniones, se decide por un mini-puesto de taiyakis, que al parecer había sido opacado por los otros treinta que servían el mismo platillo.
---Espera aquí, iré a traer una medicina para tu estómago ---dijo dejándola sentada en una mesa simple.
Ella asintió y se recostó contra el espaldar de la silla, respirando profundo en un intento de evitar vomitar.
《Cuanta calma... 》---dijo para sí misma, viendo a algunas personas pasar en silencio. En demasiado silencio....
Cuando las visualizó con mayor detenimiento pudo darse cuenta del porque.
Eran ANBUS de Iwa. Contó veinticinco de ellos, ¿qué hacían tantos en esa área en específico?
Inclusive el gerente del negocio era uno, sus notables cicatrices, físico prominente y semblante serio le recordaron instantáneamente a Ibiki Morino.
《Deben estar pendientes de alguien muy peligroso》 ---su vista viajó hacia la poca gente sentada hasta que encontró la razón, o mejor dicho, las razones. Eran tres.
Recordaba a la perfección cuando fue su encuentro final.
---¿Nagato, Konan? ---los llamó sin esforzarse por contener la sorpresa.
Los dos giraron de igual forma. Pero había una tercera persona con ellos, su parecido con el que llamaban "Pain" era increíble.
Continuará...
A continuación, avances de los próximos cinco capítulos:
---Nunca pensé que podría ser tan feliz ---le dijo a su padre cuando terminaron de pintar su nueva casa.
---Acostúmbrate ---respondió Kushina recogiendo algunos recipientes de pintura vacíos---, porque nunca nos iremos de nuevo Dattebane.
Cambio de escena
El antiguo y tradicional castillo tenía una vista imponente, dentro se estaba a punto de tomar una importante decisión.
---Tal parece que la moción ha sido aceptada ---dijo suavemente el hombre conocido como Kirai Miwa.
---¡Te arrepentirás de esto! ---gritó el antes Daimyo del Fuego, siendo arrastrado hacia afuera por los guardias--- ¡Nos llevarás hacia nuestro fin!
---Nos llevaré hacia una nueva dinastía ---aseguró a los restantes e la sala, quienes lo observaron con una mezcla de temor y respeto---. Bien ---produjo una leve palmada---, ¿quiénes serán los candidatos a Shogun?
Los otros diez observadores, quizás no lo sabían del todo, pero en ese momento la historia había comenzado a cambiar...
Cambio de escena
---Quiero empezar una vida nueva ---dijo Sasuke mirando seriamente a su hermano---, una que no tenga que ver con nada ninja.
Itachi sonrió.
---Nosotros te apoyaremos con eso.
Cambio de escena
---¿¡De verdad están diciéndonos que está aldea no se erigió sobre tierra manchada por el sufrimiento de inocentes!? ---gritó alguien de dentro de la multitud.
La situación se tornaba cada vez más incontrolable. Hashirama decidió tomar la palabra.
---Estamos conscientes de su descontento, es cierto que ignoramos sus deseos y opiniones durante mucho tiempo, pero ya es momento de cambiar eso ---dijo con la autoridad que lo caracterizaba, a su lado estaba Minato, quien lo miró preocupado. Sus palabras no parecieron surtir efecto alguno.
---¡Palabras, palabras, sólo eso nos dan! ---esta vez fue una mujer, la que expresó su descontento--- ¡Yo digo que se vayan, no queremos más ninjas!
---¡Sí, eso!
---¡Fuera, fuera, fuera, fuera! ---los gritos escolarizados sólo fueron expandiéndose.
La rebelion había comenzado...
Cambio de escena
---Estoy harta ---expuso Sakura---, a veces curar no lo es todo. Y lo que pasó ayer me hizo darme cuenta de ello. Siempre he sido la más débil del equipo ---durante mirada se tornó decidida---, es hora de cambiar eso. ¿Me enseñarías tus habilidades?
El mejor entre los titiriteros rió.
---Pensé que nunca me lo ibas a pedir ---dijo, tomando su bolso, y desaparecer junto a la kunoichi en la oscuridad de la noche.
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Se acerca un random:
---Señorita. ¿Qué acaba de escribir?
---Una mentira ---hace una pausa---, o tal vez un final feliz, un final feliz muy fumado....
He aquí el tan esperado capítulo. ¿Qué les pareció? Sobre el siguiente únicamente lea diré que para bien o para mal, a partir de ahí comenzará la verdadera historia.
Debo decir también que me he llevado una enorme sorpresa, resulta que (como ya dije en otra historia mía), si los nombres de usuario al votar y agregar no me mienten, hay muchos onvres leyendo esto :v, honestamente no me lo esperaba, así que sólo he de decir: Bienvenidos My Lords :D, espero que les esté gustando la historia.
PD: Comenten de vez en cuando, cualquier queja o sugerencia será aceptada de buena gana. Yo atesoro más sus comentarios que sus votos :'(
Eso es todo, Bye