Capítulo 16: Todas las cartas sobre la mesa
Viernes. Por fin viernes. Ese mágico día que todos los estudiantes estamos esperando ansiosamente. Durante la semana, se habla de lo que se va a hacer el viernes, con suerte el sábado también, y de lo que pasó el viernes pasado. El sábado, vuelta a empezar, junto con el domingo, a comentar lo sucedido el viernes y planeando el próximo.
Pero este viernes es diferente. Tengo una cita-no-cita con Zac, y no sé si estoy nerviosa porque hace mucho que no le veo o por otra razón...
¿Pero que digo? ¡Es Zac! No puedo estar nerviosa por él, es sólo Zac.
Después del incidente de la cremallera (el cual se sigue comentando en clase y otros cursos), la semana fue relativamente tranquila. No pude ir a mis clases de tennis con Redfield "desgraciadamente" porque la entrenadora se puso enferma.
Cuando llego a la parada, veo a Zac hablando animadamente con alguien.
"Por favor que no sea él, por favor que no sea él, por favor que no sea..."
-Buenos días princesa, ¿cómo has amanecido esta mañana? Espero que estés descansada para esta tarde.
Me guiña un ojo y me empiezo a reír, este chico es demasiado. Oigo un bufido y me giro para ver a Lucas poniendo los ojos en blanco y cruzando los brazos. Pues vale, como si me importara lo más mínimo lo que piensa.
-Pues la verdad es que me apetece mucho lo de esta tarde. Además hacía tiempo que quería ir a ver esa peli.
-¿ves? Si es que no sé porque no hemos ido antes, princesa...
-No sé, ¿porque estabas en Australia, tal vez? Se me ocurre, ¿eh?
Ambos nos giramos para ver a Redfield mientras contesta.
-Pero tío, ¿qué te pasa? ¿Te molesta o algo? Oye, que si te molesta me lo dices, ¿eh? Pero que sepas que es una cita de amigos, no tienes de que preocuparte Luke.
Noto como me pongo un poco colorada, de la rabia debe ser. Sí, eso. ¿Cómo se le ocurre insinuar algo así?
-¡Pero-pero que dices tío! Sabes de sobra que yo no quiero nada con la... rana esa.
-Uau, me ha llamado rana... Creo que jamás podré superar eso.
-Ya, bueno, tendría más sentido un par de días atrás, pero si quieres te vuelvo a hacer el favor. Después de todo, es imposible que te empeore con las pintas que llevas hoy.
Vale, puede que tuviese un poco de ojeras, y puede ser que esta mañ
ana no me haya peinado muy a fondo, ¡pero eso no le da derecho a decirme prácticamente a la cara lo fea que soy!
-Al menos yo no tengo un grano asqueroso en la cara...-sonrío con suficiencia cuando veo que por un mili segundo entra en pánico, pero hace ver que le da igual mientras se mira en el móvil.- ¡Ay, no! Es tu cara, perdona, lo habré confundido.
Zac empieza a reírse mientras Lucas me mira furioso. 'Yo sólo juego para ganar, Redfield'.
-Tranquila, princesa, que estás tan guapa como siempre. Lo que pasa es que Luke está celoso de que esta tarde seas toda mía.
Me guiña un ojo y se sienta junto a Redfield. 'Este chico nunca cambiará...'
-¡Buenos días! A ver, ¿Qué me he perdido ya?
Alex me pasa el brazo por los hombros mientras me sonría ampliamente. Si es que no hay nada que le guste más a esta chica que los cotilleos y mis peleas diarias con Redfield.
-Nada nuevo, Alex. ¡Mira! Por ahí viene el bus, has llegado justo a tiempo.
Alex me mira sospechando, y sé lo que me espera en el día de hoy: preguntas e interrogatorios de que me voy a poner, que vamos a hacer, y lo que siento hacia Zac (la respuesta, obviamente, es que sólo somos amigos), y luego tendré que darle un detallado reporte de todo lo ocurrido durante la cita-no-cita, como lo llama ella. A esto, hay que sumarle que tendré que soportar a Redfield todo el día, lo que supone que me pondrá de los nervios, cmo siempre.
Menudo día me espera.
***
-¡No me lo puedo creer!- Alex salta de alegría en medio del pasillo del colegio, mientras nos dirigimos al jardín trasero.
-¿Verdad? ¡Es fantástico!
La razón de que todos estemos tan contentos y dirigiendonos al jardín es simple: no hay clases en toda la mañana.
Al parecer, la entrenadora estaba enferma debido a una tarta, tarta que trajo la profesora Winkle como despedida. Resulta que dicha tarta, alabada y adorada por todos los estudiantes, tenía ciertos ingredientes caducados, por lo que varios profesores no habían podido ir a clase, y no había tenido tiempo para llamar a sustitutos.
-Muy bien- empieza Zac- ya que estamos todos reunidos aquí, creo que es el momento perfecto para hacer una cosa.
-Zac, te das cuenta que tan sólo estamos sentados los cuatro en el césped, ¿no? Parece como si anunciaras una ceremonia. -Zac sonríe mientras hablo. Esto no me da buena espina. En absoluto.
-Lo sé, princesa, pero es perfecto. Sólo necesitaba que estuviesemos los cuatro juntos, con mucho tiempo libre ¡Y el destino me lo ha concedido a la primera!
-Tío-empieza Redfield- ¿de qué va todo esto?
Bueno, parece que no soy la única que sospecha de Zac.
-Veréis, ayer me pasa por casa de Luke, y me estuvo contando su punto de vista sobre vuestra pequeña riña.
Un momento, un momento. Para empezar, ¿pequeña riña? Una pequeña riña es lo que tengo con Alex cuando no nos decidimos para ver una peli. Otra cosa, ¿Para qúe necesitaba saber su punto de vista de la historia? ¡Sí lo que le conté era todo cierto! No me puedo creer que dudase de mí...
-¡Tío! Se supone que ayer dejamos todo atrás. No quiero hablar de eso, me piro.
Redfield se va a levantar, pero Zac lo coge enseguida y le sienta.
-Sí, bueno, como si yo estuviese ansiosa o algo. Alex, vamos a la cafetería o cualquier sitio.
Antes de que me levante si quiera, Alex tira de mí seriamente y me lo impide.
-Lo siento, Vic, pero Zac tiene razón. Me mandó un mensaje ayer explicándome su plan, y la verdad... no me parece mala idea. ¿No crees que toca dejarlo todo atrás?
¡Pero si eso es lo que yo quería! ¡Me cambié de colegio por eso! ¡No fui al colegio que quería desde que tenía uso de razón porque pensaba que es donde iría él!
Pero en vez de decir lo que estaba pensando, me quedo callada mirando a Zac. 'Bueno.. llegó la hora. Pongamos todas las cartas sobre la mesa'.
-Tienes razón, Alex... Bien Zac, ¿Qué propones?
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Hola!
No, no estoy muerta (para aquellos que me lo habéis preguntado por mensaje). Sé que hace meses que no subía, pero no por voluntad propia, creerme. La mitad de este capítulo estaba escrito desde hace tiempo, pero se me rompió el móvil, y al intentar meterme por el ordenador, (a parte de tener que escrbirlo todo de nuevo) no me acordaba de la contraseña.
Por si eso fuese poco, tampoco me acordaba de la contraseña del mail, ya que lo tenía todo en el móvil, y hasta hoy no he podido entrar.
Sé que debéis estar enfadadas conmigo, y lo entiendo. Pero ya está todo solucionado, y planeo escrnir tan a menudo como lo hacía antes. A partir de ahora subiré cada lunes. Elegí los lunes básicamente porque a nadie le gustan ¿verdad? Así que pensé en poner algo bueno en los lunes.
Como hace tanto que no escribo, el próximo capítulo lo subiré o mañana o pasado como muy tarde.
Muchas gracias a todos por leer y por los comentarios, de verdad. Aunque no pueda contestarlos todos, los leo. Muchas gracias.
También quería agradeceros por todos los votos! Sois increíbles.
Hasta el próximo capítulo!