La sesión de fotos había terminado mas rápido de lo que pensé. Creo que el frío había influido mucho.
Las chicas se habían sentado en una mesa gigante a ver las fotos que elegirían para la promoción de nuestro come back así, que me senté al lado de Chaeyoung. La tome por su brazo y coloqué mi cabeza en su hombro derecho, sentí el aroma de su perfume y sonreí.
-¿De que te ríes? – preguntó.
-Extrañaba el olor a tu perfume – las demás chicas se rieron.
-No entiendo la broma – Chaeyoung estaba confundida.
-Creo que lo que Nayeon quiso decir es que extrañaba el hecho de que andes dejando tu aroma por todos lados – Jeongyeon explicó y todas nos largamos a reír – cuando te colocas perfume toda la casa queda con ese olor.
-Pero no es un olor malo – Chaeyoung se defendió.
-Nayeon no quiso decir que era malo – habló Momo – creo que le dio nostalgia sentirlo ¿No es así? – Momo y yo cruzamos miradas.
-¡Oh! Ahora entiendo, es porque pasaste mucho tiempo sin nosotras – Chaeyoung arrugo su nariz de manera tierna y me lanzó un beso. Solo sonreí.
-Woow – Mina estaba asombrada mirando una foto – en esta foto Nayeon y Momo parecen una pareja de verdad – fruncí el ceño casi por inercia hasta, que sentí los ojos de una de las chicas encima de mí. Era Momo – se ven muy hermosas.
-Creo que a Nayeon no le gusta – Momo habló sin dejar de mirarme.
-Ni siquiera la he visto – extendí mi brazo izquierdo para poder verla. Mina me entregó la foto y cuando la vi mi sonrisa me delató. No recuerdo el contexto de la fotografía, ni cuando la tomaron. Ni siquiera me acordaba de haber posado de esa forma ¿Por qué me pasaba esto?. Durante firmas de autógrafos, conciertos y promociones las fans lograban sacarnos fotos de las cuales, muchas. No recordaba en que momento fueron sacadas. Momo tenía ese efecto en mí, lograba que todo lo que estaba en mi mente y alrededor desapareciera y solo fuéramos ella y yo. Claro, ella no tenía idea alguna de eso.
-¿Cómo salen en la foto? – preguntó Tzuyu.
En la foto Momo estaba sentada en la esquina de un sofá gigante que se había conseguido la producción mientras yo, estaba entre sus piernas. Mis brazos abrazaban su cuello mientras que Momo tocaba la punta de mi nariz con uno de sus dedos y sonreíamos.
-Me gusta – respondí sin bacilar – nos vemos felices – respondí mirándola.
-Una pareja feliz – Jihyo le puso la pizca de broma y todas respondieron con una risa.
-Deberían adoptarme – Dahyun nos hacía caras tiernas desde un lado de la mesa.
-Creo que es hora de irnos – uno de los productores había interrumpido nuestra felicidad. Tomé la foto mía con Momo y me la lleve. Después de todos ellos tendrían unas 500 copias.
Nos fuimos en dos van diferentes y, como este día era mi día de suerte me tocó irme con Jeongyeon, Sana, Chaeyoung y Momo. Me senté en la parte trasera creyendo que nadie se sentaría ahí pero me equivoqué.
-Te he visto – me dijo Momo luego de sentarse a mi lado.
-¿Me viste haciendo que? – Ella se acercó a mi cautelosamente y susurró en mi oído izquierdo.
-Te trajiste la foto – mis mejillas se ruborizaron – que tierna te ves avergonzada – eso no ayudaba.
-¿Te molesta? – saqué la foto de uno de los bolsillos de mi abrigo.
-Mmm no – se sacó el abrigo – solo me dio curiosidad.
-¿Qué cosa?
-Que al principio cuando Mina dijo que parecíamos pareja te molestaste.
-No, no me molesté.
-Te estaba observando – en ese momento las dos nos atravesábamos con las miradas – te vi enojarte.
-No estaba enojada Momo – ordené mi cabello completo hacía mi lado derecho.
-¿Compartirás habitación conmigo? – Momo estaba muy seria.
-¿Qué? ¿Por qué hacen cambios de habitación sin avisarme? – Jeongyeon había escuchado.
-Lo siento – Momo se disculpó – pero llevamos mucho tiempo siendo compañeras de cuarto, necesito nuevos aires.
-Qué manera tan fea de despreciarme – Jeongyeon fingió estar enojada y así parecer tierna. Si había algo que Momo no podía decirle que no. Aparte de la comida claramente era, un rostro tierno así que, sin pensarlo mucho, se abalanzó sobre Jeongyeon y comenzó a abrazarla y tratar de besarla – aléjate, Momo sabes que no me gustan los besos – Sana, Chaeyoung y yo solo nos reíamos y entre risa y risa Momo terminó sentada en mis piernas y yo, sin darme cuenta tenía mis manos rodeando su cintura.
-¿Entonces te molesta que yo y mi futura esposa compartamos habitación? – Momo se acercó a mi rostro y lo besó muy fuerte.
-No, hagan lo que quieran pero, después no vengas corriendo a mí cuando no puedas con el desorden en ese cuarto. No iré a limpiar – solo sonreí.
-¿Ves? – Momo, aun sentada en mis piernas y yo abrazándola volteo a mirarme y quedamos solo a centímetros – te dije que no le iba a molestar – su aroma, su manera lenta de hablar, su tono de voz me tenían embobada.
-Tenías razón – dije mirando sus labios, era algo que las dos hacíamos mucho entonces no llamaría su atención.
-¿Qué es lo primero que quieres hacer cuando lleguemos a la habitación? – de repente el tono de Momo era muy seductor.
-¿Qué clase de pregunta es esa? – Elevé una ceja – dormir. Estamos levantadas desde las 4 de la mañana, al menos yo.
-¿Podemos dormir abrazadas? – para ese momento sólo, tenía miedo de que Momo se percatara de lo loca, estúpida y enamorada que me tenía.
-¿Por qué querrías dormir conmigo? – acaricie una de sus rodillas y ella se quedó mirando mi mano. Por un momento creí que ese movimiento me traerías problema pero ella siguió coqueteándome porque, era lo que estaba haciendo ¿verdad?.
-¿Por qué no? Sana dice que eres muy cálida durante las noches de frío – sonreí – me gusta hacerte sonreír – algo me decía que ese comentario no lo pensó antes de decirlo – Oh... yo... lo siento – sentí como su cuerpo se alejaba de mi para volver a sentarse al lado mío y entonces reaccioné.
-Creo que eres la que más me hace reír – Momo detuvo su movimiento y solo me miró – gracias por eso y si, si quiero dormir contigo. No soporto el frío y abrazar un peluche no es opción en invierno, no al menos para mí.
-Es mejor que busquen una habitación – Sana había interrumpido desde los asientos de adelante. Todas nos largamos a reír.
-Tú lo que tienes es envidia – le respondió Momo sacándole la lengua.
-La verdad es que sí. Vas a tener la suerte de dormir con Nayeon. Una persona hermosa, tierna, cariñosa – miré a Sana para tratar de hacer que se callara pero fue inútil – probablemente lo pasarán muy bien juntas – nos guiñó un ojo y Momo volteo a mirarme.
-¿Qué? – pregunté nerviosa.
-Nada – esta vez sí se salió de mis piernas. Se sentó a mi lado y apoyo su cabeza en mi hombro izquierdo. El resto del viaje fue solo mero trámite. Silencio entre ella y yo, risa con las demás del grupo.
Al llegar a la casa que compartiríamos con las demás chicas pedí permiso para ir a ducharme. Antes de comer me gustaba una buena ducha, hábito que había descubierto durante los 2 meses que viví sola.
Cuando entre a la habitación noté que habían dos camas así que pude respirar por fin. Deje mis cosas en la que estaba más cerca del baño. Elegí la ropa cómoda que me iba a colocar para almorzar y la coloqué sobre la cama y me dirigí a la ducha.
Dentro de la ducha dejé que mis músculos se relajaran con el agua caliente, cerré los ojos y me dispuse a tratar de no pensar. Llevaba solo horas con las chicas y mi cabeza no dejaba de pensar, sacar conclusiones. Llegué a creer que quizás, sólo quizás a Momo le podría pasar algo conmigo pero era imposible. Deje escapar un suspiro al darme cuenta de que lo que sentía por ella tenía que desaparecer, teníamos que ser amigas, compañeras. Como lo que veníamos haciendo. Tenía que ponerle un stop a mis sentimientos, especialmente por mi bien.
Corté la ducha y caminé hacía habitación. Mi cabello estaba envuelto por una toalla. Comencé a secar mi cuerpo dándole la espalda a la puerta. Salté dejando escapar la toalla con la que me secaba cuando sentí que algo en el cuarto se había caido. Al voltear me di cuenta que Momo estaba parada en la puerta, mirándome de pies a cabeza. Noté que su maleta se había caído y que ese era el ruido que había sentido.
-Yo... este... - Momo tenía sus mejillas coloradas y en cuestión de segundos me dio la espalda – lo siento, tendría que haber golpeado – era tan tierna cuando realmente quería serlo.
-No te preocupes – me mostré indiferente – no es cómo si nos hubiéramos visto por primera vez – me acerqué a ella y le di golpecitos de ánimo en su hombro derecho a lo que ella volteo.
-Deberías... deberías – noté que estaba teniendo dificultades en expresar lo que realmente estaba pensando con lo que quería decir – toma – agarró la toalla que se me había caído y me la paso – no te puedes enfermar ahora que haremos nuestro come back – sonreí.
-Eres muy amable Momo, gracias – mi plan de tratarla como una más de las chicas ya había iniciado – terminaré de vestirme.
-¡Oh! Si, claro. Solo venía a dejar mis cosas y a decirte – noté como la mirada de Momo me recorrió por completo.
-A decirme... a decirme ¿Qué? – posé uno de mis dedos en su barbilla e hice que me mirara. Ella seguía muy sonrojada.
-Que la cena esta lista, me voy – dejo su maleta en el suelo, tal y como se había resbalado de sus manos y cerró la puerta detrás de ella. Su reacción al verme desnuda me sorprendió un poco, no es primera vez que nos vemos. Cuando entrenábamos juntas solíamos bañarnos todas en los camarines peor ahora, ahora su reacción me había tomado por sorpresa.
Cuando llegué a la mesa donde íbamos a cenar todas juntas después de largos dos meses. Me di cuenta que había un espacio entre Jeongyeon y Dahyun así que decidí sentarme ahí. Pude notar que todas estaban felices de que por fin nos hubiéramos reunidos y, aunque, para nuestros fans todo lo que paso hoy día era sorpresa esto, se venía planeando hace mucho.
-Creo que deberíamos contarles a nuestros fans que volveremos dentro de un mes – Jihyo había hablado y todas las quedamos mirando.
-¿Ahora? – preguntó Sana.
-Si ¿Por qué no?. Estamos todas juntas, después de mucho tiempo – Jihyo me miró.
-No tengo problema – respondí sonriente, me paré para alcanzar mi celular y lo coloqué en modo selfie - ¿Listas? – Las chicas se colocaron en posición y noté que Momo estaba algo distraída – Momo... - ella buscó mi mirada - ¿Estas lista?.
-Si... lo siento – se veía algo cansada ¿Tendrá sueño?.
-Oh la pequeña Momo – Mina la abrazó y besó una de sus mejillas – debe estar agotada. Durante todo este tiempo ella ha sido la que mas se ha esforzado en la casa – el ambiente de selfie se había esfumado.
-No es para tanto – Momo se avergonzó y bajó la mirada.
-Ella realmente quería que todo siguiera funcionando cuando te fuiste así que, ayudo en todas las tareas de la casa – agregó Chaeyoung.
-Incluso me ayudaba a ordenar el cuarto sin que se lo pidiera – cuando Jeongyeon dijo estas palabras todas rieron, incluso ella – decía que todo tenía que estar en orden para cuando tu llegaras – Momo me volvió a mirar y le regale una sonrisa.
-Creo que ya no es necesario que te esfuerces mucho – caminé hacía donde estaba y la miré – ya volví – le sonreí.
-¿Y si te vuelves a ir? – volvió a bajar la vista y por el tono de voz noté la desconfianza en su pregunta. Miré a Sana que estaba detrás de Momo abrazándola por la espalda.
-Yo... - un sentimiento de culpa me invadió. Quizás Momo no era la única que se sentía así. Quizás las otras chicas igual pero no me lo decían. Nosotras sabíamos que la persona que más demostraba sus emociones era Momo y ya no se pudo seguir conteniendo – Hey – agarré su rostro con cuidado e hice que me mirara – No me volveré a ir – su rostro mostraba cansancio – ahora come para que nos vayamos a la cama – le lancé un beso a distancia y ella solo sonrió.
Me había prometido a mí misma tratar de mirar a Momo como una más de las chicas, y era lo que estaba haciendo pero, su ternura era algo que pocas personas podían esquivar. Yo por ejemplo, no era unas de ellas.
La cena continuó tranquila. Llena de bromas y anécdotas que las chicas me quisieron contar para ponerme al día ya que, según ellas, me había perdido de muchas cosas. Entre risas, comidas y unos tragos sin alcohol la hora comenzó a pasar rápidamente. La selfie grupal la dejaríamos para otro día. Ya eran las 2 de la mañana y se acercaba la hora de descansar, de descansar con Momo... en la misma habitación ella y yo.