Chanyeol corría desesperado por los pasillos del instituto tratando de encontrar a su pequeño novio, Baekhyun.
Llevaban solo dos semanas de relación, pero el alto había estado enamorado del más bajo desde hace dos años. Sin embargo, Baekhyun lo había ignorado cruelmente todo ese tiempo, ya que el rubio estaba obsesionado con Kim jongin, quien solo lo buscaba para un polvo y después volvía con su eterno novio, Kyungsoo.
Kyungsoo era amigo de Chanyeol, y era quien en esos momentos lo estaba ayudando a buscar a Baekhyun. El bajito sabía que su novio lo engañaba, sabía que follaba otros cada vez que discutían, pero el amor lo mantenía ciego, y el estar al lado de alguien tan popular como Kim Jongin le daba cierto status dentro del instituto al que no estaba dispuesto a renunciar. Muchos podrían pasar por los brazos de su novio, pero el siempre volvía a Kyungsoo. Una relación enfermiza que no incomodaba a ninguno de los involucrados.
Por su parte, Chanyeol siempre había estado al lado de Baekhyun, aunque a veces el más bajo lo sintiera como una pegajosa molestia, Chanyeol no se daría por vencido. Dos semanas atrás, Baekhyun por fin le había dado una oportunidad a Chanyeol. Si bien no eran la pareja más cariñosa, habían pequeños detalles de parte del más bajo que hacían que el corazón del alto de calentara. Últimamente, Baekhyun había estado mucho más cariñoso con Chanyeol, se preocupaba de que el alto comiera bien, no tuviera frío, y descansara correctamente; haciendo que Chanyeol se sintiera querido por el más bajo.
No obstante, la llamada de Kyungsoo derrumbó su idílico mundo con Baekhyun.
-Jongin está en el salón de artes con Baekhyun. Puedo escuchar su celular sonar dentro.
Chanyeol cortó la llamada y corrió hacía donde estaba su amigo, quien solo lo miró con lágrimas en los ojos. Con la respiración agitada y las manos temblorosas, Chanyeol tomó su celular, marcó el número de su novio... y su mundo se vino al suelo.
La melodía del celular de Baekhyun llegaba a sus oídos desde el interior del salón, junto con los gemido de la pareja que follaba dentro, la canción de ambos, Creep, se escuchaba de fondo, como burlándose del dolor de su corazón.
El alto cayó sobre sus rodillas, y un sollozo desgarrador dejó sus labios irrumpiendo sobre los gemidos del salón. Kyungsoo se había arrodillado junto a su amigo para consolarlo, pero al mirar hacia al frente se congeló.
Por el pasillo venía corriendo Byun Baekhyun con la mirada fija en el alto, que estaba temblando en el suelo. Kyungsoo se levantó de un salto, haciendo que Chanyeol saliera de su miseria, solo para ser rodeado por unos brazos y un aroma muy conocido para él.
Chanyeol levantó la vista y se encontró con la mirada preocupada de su lindo novio.
-Porqué lloras gigante?- preguntó la dulce voz.
-Baekhyun? Tú...
Al frente de él estaba su pequeño novio vestido pulcramente,lo cual hizo que el dolor de su corazón se calmara, ya que no se veía con alguien que hubiera tenido sexo recientemente, y el propio Chanyeol conocía el estado en el que quedaba Baekhyun después del sexo.
-Yo...- El más bajo se vio interrumpido por un gemido con el nombre de Jongin que provino desde el salón de clases. Sus mejillas se sonrojaron, y captó el por qué de la tristeza de Chanyeol. Su novio pensaba que era él quien estaba con Jongin.
Baekhyun no podía culpar al más alto por no confiar en él. Su anterior actitud con Chanyeol le había dado al chico más de una razón para desconfiar de su amor. Fueron varias las veces que había cedido a sus impulsos y había follado con Jongin, no por amor, no por placer, sino que por orgullos; el orgullo de no perder ante nadie, ni menos ante Do Kyungsoo, quien le había arrebatado a Jongin cuando este estaba a punto de ceder a los encantos de Baekhyun.
Sin embargo, Baekhyun se dio cuenta que Jongin no valía tanto como Chanyeol. Jongin no lo hacía sentir cálido como Chanyeol. Y por último, Jongin no despertaba los sentimiento de amor que despertaba Chanyeol en él. El alto le instó a valorarse a sí mismo, a ser algo más que un par de piernas abiertas y un culo dispuesto, a querer algo más que un revolcón en el baño. Chanyeol logró llegar a su corazón de la manera más inesperada posible con pequeñas palabras y acciones, y Baekhyun no estaba dispuesto a perderle, no a él.
Por esto, el más bajo se armo de valor y decidió confesar sus sentimientos a su novio.
En ese instante la puerta del aula de artes se abrió, y de su interior salió un muy despeinado Taemin, seguido de Jongin, quien se arreglaba la ropa. Al ver la escena del pasillo, Jongin los ignoró a todos y se alejó hacía la salida del instituto, seguido de Taemin, quien miró a todos con un aire de superioridad, sobre todo a Kyungsoo.
Baekhyun se levantó rápidamente para buscar su celular. Se sintió como un completo idiota por hacer estado obsesionado con un tipo como Jongin, quien solo buscaba un culo dispuesto.
Se dirigió a Chanyeol, y tomando su mano, se alejó del lugar rápidamente, tirando de su alto novio consigo. Sólo se detuvieron cuando llegaron a un parque cercano al instituto, en donde el más bajo sentó a su novio y él se posicionó sobre las piernas del alto, posando su cabeza en la curvatura del cuello del contrario.
-Perdóname Chanyeollie- dijo el más bajo- Jongin me citó en la salón de artes. Pensé que me diría algo sobre ti, pero en cuanto entré me acorraló contra una pared y comenzó a besarme.
Chanyeol apretó los ojos mientras más lágrimas salían de ellos. El más bajo levantó su rostro y le dio una mirada avergonzada.
-Tú...- quiso intervenir el alto, pero Baekhyun posó un dedo sobre sus labios, pidiéndole mudamente que lo dejara terminar.
-Me sentí asqueado. Tú rostro apareció en mi mente, tus besos, tus caricias, y me sentí mal. Quería que fueras tú quien me besara - Baekhyun miró a Chanyeol tan intensamente, que el alto sintió que su corazón latía cada vez más rápido- Sin darme cuenta, terminé mordiendo a Jongin, y cuando me vi libre, corrí. Corrí tan rápido que no me di cuenta que mi celular no estaba en el bolsillo. Lo único que quería era un poco de aire, así que corrí a la azotea y estuve ahí, mirando el paisaje, hasta que te vi corriendo y escuché mi nombre y yo...
-Tenía miedo- interrumpió Chanyeol, limpiándose el rostro- tenía miedo de perderte, tenía miedo de que Jongin te tocara, te besara...
Sin previo aviso, el alto juntó sus labios con los de su pequeño novio. Baekhyun no reaccionó inmediatamente, pero al sentir esos labios tan familiares para él, se dejó llevar. Liberando aquellos sentimientos que guardaban el uno por el otro, pareció que el tiempo se detuvo. Sólo eran ellos dos, una pareja de adolescentes, que trataban de transmitir su amor.
Cuando finalmente se separaron para tomar aire, ambos se miraron a los ojos y se sonrieron, compartiendo otro beso.
-Te amo
Chanyeol quedó estupefacto. Era la primera vez que Baekhyun le decía esas dos palabras.
-Estoy soñando?- preguntó el alto peñizcando una mejilla a su novio.
-Ya...- dijo Baekhyun con un lindo puchero en sus labios que Chanyeol no pudo resistir a besar- Se supone que debes peñizcarte a ti, Gigante bobo.
Chanyeol solo sonrió como bobo, y el más bajo no pudo resistir a besarlo. Cada beso acompañado de un "te amo" que tenían al alto feliz, porque entendió que Baekhyun estaba listo para amarlo. Todo el tiempo que había esperado había valido la pena, y el premio más grande era tener a Baekhyun completamente enamorado de él.
Y no importaban las veces que el más bajo se había entregado a Jongin, ya que solo Chanyeol había logrado que su unión fuera más que sexo. Cada suspiro, cada gemido que salía de la boca de Baekhyun con el nombre de Chanyeol, era un "te amo" que quedaba grabado en la mente y en el corazón del alto. Y Baekhyun entendió que solo con Chanyeol llegó a hacer el amor. En la cama de Chanyeol, rodeado del el olor de Chanyeol, y en la calidez de los brazos de Chanyeol, que era el lugar más seguro del mundo para Baekhyun.
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Al otro día, lo primero que escuchó la pareja fueron los rumores del quiebre entre Kyungsoo y Jongin. Ambos buscaron al amigo bajito de Chanyeol, pero no esperaban encontrarse a Jongin con un ojo morado y una pierna rota.
-Tal parece que Kyungsoo se aburrió de Jongin- comentó Chanyeol, buscando con la mirada a su amigo, quien se encontraba tranquilamente leyendo un libro, ajeno a todo los comentarios que lo incluían a él y a Jongin siendo empujado a un tacho de basura.
Kyungsoo nunca admitiría lo bien que se sintió ver una cascara de plátano en la cabeza de Jongin, y otros líquidos de dudosa procedencia empapando su delicado cuerpo. Porque la fama puede ser placentera, pero lo es más el amor, sobre todo si es dirigido a uno mismo.