Los primeros en llegar a la sala del trono fueron Poseidón, Percy y Annabeth. —Tranquilo hijo, no tienes por que estar nervioso — dijo al notar la mirada de su hijo, Percy esbozo una sonrisa rogando a las Moiras que se apiadarán de él.
— Hola chicos, ¿todo bien? — preguntó Thalia al entrar en la sala.
— ¿Dónde está Phoebe? — preguntó Annabeth al no ver a la cazadora con su amiga.
— Ella se fue cerca de la media noche, me pidió que la despidiera de ustedes. — respondió Thalia con una sonrisa.
— ¿Y si es muy diferente? — preguntó la rubia con curiosidad.
— Demasiado, la Phoebe que conozco nunca se habría atrevido a ser amiga de un chico y por si fuera poco me ha revelado algo muy loco — dijo en voz baja esperando que Poseidón y Percy no la escucharán.
— ¿Qué es? — preguntó la rubia sin poder ocultar su curiosidad. Pero Thalia se quedó en silencio ya que Artemisa apareció en la sala sin dejar de observar a las chicas, en ese mismo momento Jason, Piper, Calipso, Leo, Hazel, Frank, Nico y Reyna llegaron uniéndose a la plática de las chicas.
— ¿Quién crees que sea el siguiente en aparecer? — pidió Thalia evitando la mirada de la Diosa de la Caza.
— Sólo espero que no sea Leo, imagínense tener que soportar a dos de ellos — dijo Piper con una sonrisa al ver la mirada de su amigo.
Nuevamente un destello de luz dorada iluminó la sala, obligando nuevamente a los presentes a cerrar los ojos, tan pronto como Zeus recuperó la vista bajó de su trono caminando a la mitad de la habitación. — ¿Cómo estás? — preguntó, había algo raro en Hera, lucía completamente diferente.
— ¿Dónde estoy? — preguntó la Diosa observando a todos los presentes aunque su vista se quedó fija en una cierta rubia. — Este no es mi mundo, ¿verdad? — Zeus solo asintió, incluso se veía un poco afectado.
— Alguien debería de comenzar con la lectura — ordenó Zeus, Hera observó a su alrededor y al percatarse que ninguno de los presentes se animaba a hacerlo decidió tomar el libro.
"El reencuentro."
Percy apareció en el bosque en Saratoga Springs, Utah, miró a su alrededor antes de iniciar su camino por la ciudad, había algo en aquella misión que le preocupaba, Hestia estaba bastante enojada cuando le dio la misión. Incluso lo había animado a castigar al mortal, algo que jamás había oído hablar de la bondadosa Diosa del hogar.
Sospechaba que no iba a encontrar algo agradable, solo esperaba que no hubiera ningún tipo de abuso sexual. Tenía bastantes problemas para controlar su ira cuando veía evidencia de ello. Percy comenzó a caminar más rápido mientras buscaba Turner Street. Quería sacar a la chica de allí lo más rápido posible. Finalmente vio Turner Street y rápidamente encontró la casa que estaba buscando, examinó a su alrededor tratando de encontrar alguna señal de peligro. La casa era grande, pero no estaba muy cuidada, parecía que había sido descuidada en los últimos años.
Atenea por primera vez se notaba bastante preocupada, aquel sitio le resultaba bastante familiar, solo esperaba que no fuera el mismo lugar que ella creía.
Cuando se acercó a la casa se percató de varias latas de cerveza esparcidas por todo el lugar.
"¡Chloe! ¡Chile! ¿Dónde estás? ¿Dónde te estás escondiendo mocosa?" gritó una voz masculina desde el interior de la casa.
La Diosa de la Sabiduría apretó los puños con furia, solo estaba agradecida que su hija estaba bien, -¿Por qué su contraparte nunca se había preocupado por el bienestar de sus hijos? - pensó furiosa
Percy frunció el ceño, era mediodía y estaba claro que el hombre ya estaba borracho, vio como una pequeña sombra corría a través de la ventana frente al porche, unos segundos después una sombra grande camino en la misma dirección. Percy apretó sus puños furioso al ver como la sombra se acercaba a la puerta, el chico no lo pensó dos veces y pateó la puerta, para golpear al hombre en la cara con la puerta.
De inmediato entró, mientras el hombre sostenía su nariz rota en estado de shock sin dejar de ver a Percy furioso.
"¿Quién coño eres tú? ¡Lárgate de mi casa!" gritó furioso antes de intentar golpear a Percy.
- Genial por fin hay violencia en este libro, ya me estaba aburriendo. - dijo Ares acomodándose en su trono.
El hombre lanzó un puñetazo en dirección a Percy, pero este se movió a su costado antes de empujarlo al suelo. Un suave gemido en la esquina de la sala llamó la atención de Percy. Una niña pequeña con el pelo rubio y ojos grises lo miró, con miedo evidente en su rostro. Percy sintió un nudo en el estómago. La niña se veía exactamente a Annabeth, excepto que era unos años más joven que cuando se conocieron.
Annabeth le dio un abrazo rápido a su novio, odiaba a su contraparte no entendía por que ella había hecho tanto daño a Percy.
— Tu no eres así Listilla — dijo Percy, dándole un beso rápido a su novia.
Entonces Percy pudo ver mejor la cara de la chica, el lado izquierdo de su cara estaba muy golpeada, su ojo estaba cerrado por la hinchazón, su labio partido y aún sangrando.
— ¡Maldito! — exclamó Artemisa furiosa, mientras a su izquierda Atenea intentaba mantenerse relajada pero su mirada de enojo la delataba.
Cuando Percy vio a la chica sintió como poco a poco perdía el control.
El hombre aprovechó que estaba distraído para darle un golpe en la cara, que hizo que perdiera el equilibrio, este intento golpear nuevamente.
Pero Percy detuvo su puño antes de quemar la mano de este. El hombre gritó de dolor intentando soltarse pero Percy respondió lanzando un puñetazo. El hombre cayó al suelo sujetándose su mano. Otro gemido suave llamó la atención de Percy, la chica trató de esconderse evitando que este la pudiera ver.
"Date la vuelta y quédate oculta pequeña. Estoy aquí para ayudar." dijo en voz baja esperando que eso calmara a la niña. Los ojos de la muchacha se agrandaron y se escondió detrás de una silla.
Percy se volvió hacia el hombre, al que pensó que se trataba del padre de la chica, quería hacerle pagar por lo que le había hecho pero tenía que darse prisa, ella ya estaba bastante asustada. Percy se acercó al hombre colocando sus manos sobre su cuello, en un rápido movimiento, rompió su cuello.
— Ese chico sí tiene estilo — dijo Ares con una sonrisa, por fin había acción en aquel libro.
"Voy a hacer que mi primo se aseguré de que te den el peor castigo que el Hades puede dar." murmuró mientras dejaba caer el cuerpo muerto del hombre.
— Créeme que ellos se llevan el peor de los castigos — dijo Hades con una sonrisa maliciosa.
Percy agarró el hombro del hombre para teletransportarlo a otra habitación. Luego camino hacia la silla donde la niña se estaba escondiendo.
"¿Chloe?" preguntó en voz baja, una mano temblorosa apareció en la parte superior de la silla antes de que dos ojos llorosos siguieron como la chica miró por encima de la silla.
Atenea desapareció de pronto dejando a todos los presentes bastante confundidos.
"No voy a hacerte daño Chloe, me enviaron aquí para ayudarte." dijo en voz baja.
Atenea regreso de pronto, estaba bastante aliviada de ver que el padre de Chloe seguía con vida, aunque se aseguraría de que su hija nunca estuviera cerca de su tío.
"Estás mintiendo, vas a hacerme daño al igual que mi tío." dijo la niña sin poder ocultar su miedo.
Percy se quedó viendo como la niña se volvía a esconder atrás de la silla, "Chloe, tu mamá me pidió que viniera aquí para llevarte lejos. Ella no estaba enterada de lo que te pasaba, pero tan pronto como lo supo, me envió para llevarte a un lugar seguro." dijo Percy esperando que fuera suficiente para ganar la confianza de la niña.
"Es mentira. Mi mamá está muerta." respondió de nuevo con voz temblorosa.
Percy negó con la cabeza, "Eso no es cierto Chloe. Tú mamá es muy especial. Ella es tan especial que no se le permite estar cerca de ti o de tu papá. Pero me mandó para llevarte con su hermana. Ella tiene un grupo de niñas que son iguales que tú."
"¿Qué quieres decir con especial?" preguntó mientras se asomaba por detrás de la silla.
Percy le dio una cálida sonrisa, "Tu mamá es una Diosa, pero ellos no pueden visitar a sus hijos. Es por eso que me envían para llevarlos a lugares donde puedan estar a salvo."
La niña miró a Percy, con sus ojos grises analizando sus palabras para ver si decía una mentira. El estómago de Percy se retorció dolorosamente. La chica lo estaba analizando exactamente como Annabeth lo hacía.
"¿Prometes que no me harás daño?" preguntó tímidamente.
Percy asintió, "¿Tienes hambre Chloe?" preguntó mientras miraba su frágil cuerpo flaco de la muchacha. Los ojos de Chloe se abrieron antes de salir de su escondite, aún temerosa de la presencia de Percy.
"¿Qué te gusta comer? ¿Cuál es tu comida favorita?" preguntó en voz baja mientras la chica se sentó en el suelo a unos metros de distancia de él.
"Macarrones con queso." susurro como respuesta. Percy asintió y sonrió antes de dar una palmada. Un gran plato de macarrones con queso apareció delante de Chloe junto con un tenedor y un vaso de agua.
— ¿Por qué tú no tienes ese poder? — preguntó Nico, logrando que Percy esbozará una sonrisa.
El chico arrojó una ráfaga de agua, empapando al hijo de Hades, — Perdona, no te escuche — añadió Percy sin dejar de sonreír.
Los ojos de Chloe se agradaron sorprendida, "¿Cómo hiciste eso?"
"Te lo dije, tu mamá es una Diosa, al igual que mi padre. Pero además tengo un trabajo especial donde ayudó a encontrar a personas como nosotros y llevarlos a lugares donde estén seguros. Y debido a eso algunos de los Dioses me dieron poderes especiales para poder ayudar. "
Chloe observó a Percy con cautela mientras hablaba. Ella tentativamente agarró el tenedor antes de tomar un bocado de la comida. Una pequeña sonrisa apareció en su rostro antes de que empezará a comer más rápido.
Percy se sentía bien cuando la cara de la chica se contorsiona en una sonrisa mientras comía el resto de su comida. Una vez que terminó, Chloe miró a Percy de nuevo.
"Entonces, ¿Qué pasa ahora?" preguntó nerviosamente.
Percy le sonrió al ver que estaba más tranquila, "Ahora te llevaré con tu tía, ella es una señora muy agradable que dedica su vida a ayudar a las niñas. Después de eso, depende de ti si te quieres quedar ahí o en un campamento para gente como nosotros."
Chloe asintió, "¿Y tú? ¿Dónde te quedas?"
Percy miró un poco sorprendido, "Voy a donde pueda seguir ayudando."
El rostro de Chloe decayó pero asintió.
Percy miró con tristeza el rostro lastimado de la chica, "¿Hola?" Ella lo miró curiosa.
"Mi nombre es Percy, quiero hacer algo para ayudar a su rostro. Puede parecer un poco extraño al principio, pero te prometo que no te haré daño." dijo amablemente.
Chloe lo miró con nerviosismo, pero asintió con la cabeza. Percy sacó una botella de agua de la mochila, la destapó y sacó el agua fuera de la botella.
Los ojos de Chloe se agrandaron y se alejó temerosa de lo que veía.
"No voy a hacerte daño Chloe, esto ayudará a tu cara, pero tienes que confiar en mí." explicó Percy al ver la mirada de temor de la niña.
Chloe miró a Percy antes de asentir. Éste caminó lentamente hasta donde estaba la niña, una vez cerca alzó su mano y tocó el lado de su cara. Después de un minuto Percy envió el agua por la puerta rota al porche.
Chloe levantó su mano y se tocó la cara tentativamente. Su rostro se contrajo en una mueca de asombro antes de abalanzarse sobre Percy colocando sus pequeños brazos sobre el cuello de este. Percy lentamente se puso de pie y se llevó a la niña de la casa, decidió que había tenido suficientes sorpresas para un día y que tendría al menos que viajar a pie.
Para el resto del día Percy llevó a Chloe hacia Chicago. Después de un rato, Chloe perdió su nerviosismo y se subió a los hombros de Percy mientras caminaban. Mientras tanto él le explicó todo acerca de los dioses, lo que hará su sorpresa lo tomó bastante bien. Percy se enteró de que tenía sólo siete años de edad y que su padre había sido un autor muy famoso pero murió en un accidente de coche. Después de que su padre muriera, fue enviada a vivir con su tío, el primer año había estado bien, pero después de que se gastó el dinero que recibió del seguro de vida de su hermano, fue cuando se volvió más cruel. Empezó a beber en exceso y luego comenzó a golpearla, culpándola por no tener dinero o una esposa. Percy se sintió aliviado al saber que nunca la había tocado sexualmente.
Se detuvieron en la noche cerca de la frontera de Colorado y Kansas. Percy hizo una fogata y cenó con Chloe. Después de la cena, Chloe cayó dormida inclinada contra Percy. Percy la levantó para ponerla en la cama cuando un mensaje Iris apareció detrás de él.
"¿Perseo?" llamó Artemisa, casi le da a Percy un derrame cerebral del susto.
La sala estalló en risas, a excepción de dos personas, Percy, quien se le borró la sonrisa al ver la mirada furiosa que le daba la Diosa de la Caza, había tenido la esperanza que los próximos capítulos fueran más tranquilos, los semidioses también dejaron de reír al ver la mirada preocupada de su amigo. — Todo va a estar bien — dijo Annabeth, Percy solo rogaba a las parcas que su novia tuviera razón.
Percy se volteó encontrándose a la Diosa, que lo miraba expectante.
"Espera, solo la acuesto en la cama, ahora vuelvo." dijo en voz baja tratando de no despertar a su compañera. Artemisa miró con extrañeza antes de asentir.
Un minuto más tarde regresó para ver a una Diosa bastante furiosa. "¿Qué?" preguntó confundido.
"Habías dicho que estarías aquí hoy. ¿Qué ha pasado?" preguntó Artemisa.
— ¿Creo que alguien está preocupada? — dijo Afrodita, aunque se ganó un golpe en el brazo.
— No digas eso — murmuró Hermes, señalando en dirección en donde estaban Apolo y Artemisa que observaban furiosos al hijo de Poseidón. Afrodita le dio una sonrisa triste intentando animar a Percy, temía que todo aquello fuera a empeorar.
"Oh, lo siento. Me tomó un tiempo conseguir que ella confiara en mí, no estaba en buena forma cuando llegué y no quería confundirla más, así que decidí caminar por hoy y ya mañana teletransportarnos a su campamento, lo siento. " explicó Percy.
Artemisa miró a Percy con curiosidad: "¿Ella está bien?"
Percy asintió: "Sí, estaba algo golpeada cuando llegué."
Artemisa sonrió, aliviada. "¿Así qué mañana llegan al campamento?" preguntó.
Percy asintió: "Sí, debemos estar allí en la mañana, una vez que le explique como teletransportarnos. Solo un favor, te puedes asegurar de que tus cazadoras no sean demasiadas agresivas cuando lleguemos, ella está muy nerviosa."
Artemisa entrecerró los ojos ofendida de la declaración, "Mis cazadoras nunca actuarían así con una chica."
— Claro que no, pero no me imagino lo que le podrían hacer a Percy — dijo Dionisio con una sonrisa.
Percy sonrió tranquilamente, "Me refería a mí. No creo que ella quiera ver cómo esquivó una lluvia de flechas de plata."
Artemisa sonrió y asintió con la cabeza, "No te preocupes, las mantendré a raya. ¿Qué edad tiene la niña?"
"Ella es una hija de Atenea de siete años." respondió, con la voz quebrada un poco cuando habló.
Artemisa lo miró con simpatía pero al ver la cara de Percy decidió no decir nada.
"Está bien Percy, sólo quería asegurarme de que estabas bien." dijo mientras se preparaba para terminar con el mensaje.
"Espera, Artemisa." dijo deteniéndola, Artemisa se quedó en silencio viendo expectante a Percy.
"Creo que ya rompió nuestro acuerdo." dijo sonriendo.
Los ojos de Artemisa se abrieron, "Percy ni siquiera ..." comenzó Artemisa antes de que Percy la detuviera.
"No te preocupes Artemisa. Voy a dejar pasar este desliz." dijo sonriendo a ella antes de terminar el mensaje antes de que esta le pudiera decir algo. Lo último que vio era una Diosa de la Caza con el ceño fruncido mirando a él antes de que la imagen desapareciera.
Percy se rió antes de subir a la tienda para dormir por la noche.
Percy se despertó a la mañana siguiente con un lío de pelo rubio en su rostro. Sus ojos se abrieron antes de darse cuenta Chloe se había acostado con él en la noche. Percy sonrió cuando miró a la niña, se veía tan inocente y pacífica, frunció el ceño cuando pensaba en su tío.
Tendría que asegurarse de que Nico comprobará su castigo en el mundo terrenal. Todo aquel que se atreviera a golpear una niña como ella, se merece el peor de los castigos que puede ofrecer el Hades. Percy fue sacado de sus pensamientos cuando sintió el pequeño revuelo de la chica. Ella abrió los ojos con sorpresa, nunca se imaginó que Percy iba a despertar primero.
"Yo ... yo lo.. siento Percy." dijo pero antes de que pudiera seguir, Percy la interrumpió con una sonrisa cálida.
"No hay nada de qué disculparse por Chloe. Tú no has hecho nada malo. Ahora, ¿qué te gustaría para el desayuno? Es tu elección de nuevo." dijo amablemente.
Chloe sonrió y su rostro se transformó, "Um ..... ¿Qué tal? Panqueques con tocino y frutas con un poco de jugo de naranja." Ella respondió con timidez.
Percy asintió y dio una palmada, dos platos aparecieron delante de ellos, casi exactamente cómo Chloe había ordenado.
"¿Um ... Percy? ¿Los panqueques son azules?" Ella preguntó confundida.
-Bueno en algo si nos parecemos- pensó el chico recordando la comida de su madre.
Percy sonrió con tristeza, "Lo siento, es un hábito. Mi mamá siempre me alimentaba con comida azul por lo que es como yo lo hago. Te traeré algunos normales."
"No, está bien, solo estaba confundida." dijo antes de darle una mordida . Su cara se transformó en felicidad.
"¡Estos son increíbles Percy!" dijo emocionada.
"Bueno, termina de comer. Hoy finalizamos nuestro viaje." le dijo Percy con una sonrisa.
Chloe asintió y se volvió hacia su comida. Una vez que terminó el desayuno, Percy tenía todo empacado, se sentó en un tronco y le indicó a Chloe que se uniera a él.
"Chloe, hoy no vamos a caminar. Tengo una manera diferente de llegar a lugares pero necesito que confíes en mí otra vez." explicó Percy detenidamente.
Chloe asintió, "Confío en ti Percy." dijo con confianza.
Percy estaba sorprendido, pero asintió con la cabeza: "Está bien, vamos a teletransportarnos, sólo necesito que cierre los ojos y tomes mi mano. Se puede sentir un poco raro pero sólo durará un segundo. Cuando se termine estaremos donde tenemos que estar." explicó Percy esperando no alterar a la niña.
Chloe asintió, pero luego miró confundida, "¿Por qué no lo hicimos ayer?"
Percy se encogió de hombros, "Todo era nuevo para ti y no quería asustarte."
Los ojos de Chloe se abrieron antes de abrazar con fuerza a Percy.
"Gracias por ser tan amable conmigo Percy." Ella dijo en voz baja.
Percy sonrió, "Bueno, ahora voy a cambiar mi aspecto. No te preocupes, tu tía sabe quién soy realmente. Y voy a mostrarme a todas mi verdadera apariencia, pero primero te llevaré con Artemisa. Ella te explicará todo."
Chloe asintió, pero se veía preocupada, "¿Quieres venir conmigo Percy? No quiero ir sola." pidió suplicante.
Percy quiso rechazar pero una mirada a la cara de súplica de la niña y se derritió.
"Bueno iré contigo hasta que te sientas cómodo con Artemisa. No te preocupes. Ella es muy agradable y es una amiga mía." Percy respondió.
Chloe asintió alegremente, antes de tomar la mano de Percy, "Vale cierra los ojos, no los abra hasta que yo te diga. ¿de acuerdo?"
Chloe cerró los ojos y asintió. Desaparecieron en un destello de llamas, reaparecieron unos pocos cientos de metros de distancia del campamento de Artemisa.
"Está bien, puede abrir los ojos." dijo Percy.
Chloe abrió los ojos y sonrió: "Eso se sintió raro." Percy se echó a reír ante su rostro se puso serio: "Está bien, voy a cambiar mi apariencia. No te preocupes, es sólo temporal y sigo siendo yo."
Chloe asintió y Percy chasqueó los dedos. Sus ojos se volvieron de color marrón, así como su pelo. Su rostro cambió ligeramente, pero aún se podía decir que era él.
"¿Cómo hiciste eso?" Chloe preguntó sorprendida.
Percy se rió entre dientes, "Otro poder especial que los Dioses me dieron para ayudar a rescatar a la gente como nosotros."
— ¿Cuántos poderes tiene? — cuestionó Thalia.
Percy se volvió hacia el campamento de las cazadoras, después de un par de metros, sintió como una pequeña mano lo sujetaba.
Miró a Chloe y se dio cuenta que estaba bastante nerviosa. Percy le dio una sonrisa tranquilizadora y comenzó a caminar de nuevo, sosteniendo su mano para reconfortarla.
Después de unos minutos, una flecha de plata voló por la cabeza de Percy lo que le obligó a agacharse. Chloe de inmediato se escondió detrás de Percy, temblando ligeramente. Percy vio a unas cazadoras se le acercaban con sus arcos apuntando hacia él.
Un nuevo destelló iluminó la sala, interrumpiendo por un momento la lectura.
— ¿Phoebe? — preguntó Thalia sin entender por qué razón habían regresado a la cazadora, aunque había algo diferente en aquella chica. La cazadora observó con nerviosismo la sala antes de ver fijamente a Percy, la chica de inmediato corrió abrazando a un sorprendido hijo de Poseidón.
— ¿Estás bien? — preguntó la cazadora con lágrimas en los ojos, Percy se mantuvo en silencio sin lograr comprender aquella situación.
— ¿Phoebe? — preguntó Hera, al igual que el resto de los presentes estaba igual de sorprendida de la actitud de la cazadora.
Phoebe dio un paso atrás notando a la hija de Atenea, — ¿Estás viva? — preguntó, aunque no sonaba molesta, la cazadora dio un par de pasos más antes de caer desmayada. Artemisa bajo de su trono, aunque no le gustó la actitud de la cazadora estaba aún preocupada por su bienestar.
— ¿Ella está bien? — preguntó Artemisa observando a Apolo, quien también había acudido a la ayuda de la cazadora.
— Hay que continuar con la lectura — dijo Hera tomando nuevamente el libro.
Percy gruñó. Él entrecerró los ojos para después congelar los pies de las cazadoras más cercanas. Artemisa de inmediato apareció delante de Percy viendo a este con enojo. Pero este movió la cabeza en dirección a la flecha que había quedado incrustada en el árbol que estaba detrás de él. Los ojos de Artemisa se abrieron antes de darse la vuelta para ver a sus cazadoras.
"Phoebe." gruñó molesta. "Te dije que lo dejaras pasar. Usted se acaba de ganar 6 meses de castigo en la lavandería." dijo la Diosa con severidad antes de pasar a las otras dos cazadoras. "Vuelvan a lo que estaba haciendo a menos que quiera unirse a Phoebe."
Phoebe miró sorprendida pero se fue después de enviar a Percy una mirada asesina junto con las otras dos cazadoras.
"Lo siento Percy. Phoebe tiene problemas para seguir órdenes si se trata de no atacar hombres." dijo Artemisa en tono de disculpa.
Percy asintió y se arrodilló junto a la ahora muy asustada niña de siete años.
"No te preocupes Chloe, ella es Artemisa es mi amiga. Sólo vamos a ir a hablar con ella en su tienda de campaña." dijo confortablemente.
Chloe miró a Artemisa la cual se parecía a una niña de doce años, y miró a Percy con nerviosismo, pero asintió con la cabeza. Ella agarró la mano de Percy como si fuera su salvavidas mientras entraban en el campamento de las cazadoras.
Artemisa se dirigió a una cazadora que actualmente estaba mirando a Percy con desprecio, "Atalanta, ve a buscar a Thalia, dile que la quiero ver en mi tienda. Nadie más va a entrar a menos que yo lo autorice."
Atalanta miró a Percy con disgusto antes de alejarse para encontrar a Thalia, mientras Artemisa llevó a Percy y Chloe a su tienda.
Cuando Thalia entró en ella se sorprendió al encontrar al hombre en la tienda, "Señora Artemisa, ¿por qué él está aquí?"
Artemisa se rió de la actitud de su teniente, "Él trajo otra chica al campamento. Ahora Thalia necesito que controles hasta que hables con Blake. ¿Puedes hacer eso?"
Thalia se quedó en silencio confundida, pero asintió con la cabeza.
Artemisa sonrió, "Recuerda, es una orden Thalia." ordenó antes de hacerle una señal a Percy para que hablará.
"Thals, yo lo siento." dijo en tono de disculpa antes de chasquear los dedos.
Los ojos de Thalia se abrieron antes de las lágrimas brotaran de sus ojos, ella de inmediato se abalanzó sobre de este para darle un caluroso abrazo. Percy no pudo evitar esbozar una sonrisa, la había extrañado demasiado.
Después de un minuto, Thalia se apartó de Percy, su mirada de la felicidad había cambiado.
"¿DÓNDE HAS ESTADO?" exigió la hija de Zeus furiosa.
— Bueno creo que tu mal humor si se da en todos los universos — dijo Jason con una sonrisa, observando a su hermana.
"Ahora no Thalia, usted puede tratar con Percy después, pero por ahora, tenemos una nueva amiga con nosotros." dijo Artemisa haciendo un gesto hacia la niña de siete años que la veía con temor.
Cuando todo el mundo la miró rápidamente agarró la mano de Percy y se escondió detrás de su pierna.
Percy se arrodilló y suavemente la sacó delante de él.
"Chloe, esta es tu tía Artemisa. Y ella es mi prima Thalia. Las dos son muy lindas y no van a dejar que nadie te haga daño." dijo en voz baja esperando calmar los nervios de la chica.
"eh...este .....si" dijo él en voz baja
Chloe asintió y se volvió hacia Artemisa y Thalia ambas le sonrieron alegres.
"Artemisa va a hablar con usted acerca de lo que pasa en su campamento." explicó suavemente. Chloe asintió, pero agarró la mano de Percy con fuerza. Percy miró a Artemis que le dio una inclinación de cabeza, haciéndole saber que estaba bien quedarse.
Artemisa le explicó que era la caza y luego le ofreció un lugar dentro de ella.
Chloe miró a Artemisa luego de vuelta a Percy, "No sé. Esas chicas intentaron hacer daño a Percy. No me gusta eso. Él me salvó y luego se ocupó de mí."
Percy sonrió, "No te preocupes por eso. Ellos no sabían que era yo, realmente son buenas personas. Solo pensaron que te podría haber estado haciendo daño."
Chloe asintió, pero todavía se veía insegura, "¿Nunca voy a ver a Percy?" preguntó en voz baja.
Artemisa le sonrió cálidamente, "Sí, por supuesto que sí. Percy es el único chico que se le permite venir aquí. Él puede venir a visitarte siempre que lo desee."
Percy miró sorprendido, pero sonrió un poco. Chloe volvió a Percy, "¿Va a venir a visitarme?" Ella preguntó nerviosamente.
Percy asintió con la cabeza mientras sostenía su mano, "Voy a venir las veces que me sean posibles. Una vez que te instales, la Señora Artemisa te mostrará cómo enviar un mensaje Iris. De esa manera, si quieres que venga a visitar puedes mandarme un mensaje y voy a llegar tan pronto como me sea posible". dijo Percy antes de meter una mano en su mochila y sacar una pequeña bolsa la cual se la entregó a la niña. Chloe lo miró confundida pero Percy sólo sonrió y sacó un dracma de la bolsa.
"Este es un dracma. Se te mostrará cómo usarlo para enviar un mensaje Iris. Hay alrededor de 50 en esta bolsa. Eso debería de durar durante un tiempo, pero si alguna vez se te acaba, voy a darte más para que siempre me puedas mandar un mensaje si pasa algo ". explicó Percy con una sonrisa.
Chloe miró y sonrió antes de envolver sus brazos alrededor del cuello de Percy. Este miró hacia arriba para ver que Thalia le sonreía, pero él sabía que una vez que Chloe se fuera iba a desatar su furia. Miró a Artemisa para encontrarla con una mirada extraña, ella lo miró con una mezcla de sorpresa, asombro, alegría y algo Percy no pudo identificar.
— Espero que ninguno de ustedes piense en atacar a Percy — añadió Hera, levantando la mirada de aquel libro, Artemisa apretaba su arco con furia, sin apartar la vista del hijo de Poseidón.
— Solo como recordatorio, nada de lo que estamos leyendo tiene que ver con mi hijo — añadió Poseidón colocando su tridente frente a Percy.
— Creo que todos estaremos más tranquilos si ambos entregan sus arcos — añadió Hera, en esta ocasión observando a Zeus, esperando que el Rey de los Dioses aceptará aquella petición.
— Artemisa, Apolo me pueden entregar sus arcos — añadió Zeus, ante la mirada furiosa de ambos Dioses.
— Está bien — espetó Artemisa, aún sin dejar de ver con furia a Percy.
— Tranquilo — dijo Annabeth dando un beso rápido en la mejilla del chico, esperando que aquello fuera suficiente para calmar los nervios de su novio.
Cuando Chloe finalmente soltó Percy se dio la vuelta para ver a Artemisa sonriendo, "Está bien, me uniré a usted Señora Artemisa." dijo la niña feliz, tanto Artemisa como Thalia sonrieron alegres de tener una nueva cazadora.
"Vamos te voy a mostrar el campamento y te presentaré al resto de la Caza." dijo Artemisa amablemente mientras conducía a Chloe fuera de la tienda. Chloe se detuvo en la entrada de la tienda viendo insegura a Percy.
"Espera, Percy no te vayas todavía ¿quieres?" Ella preguntó nerviosa.
"No voy a irme sin decir adiós, te lo prometo." dijo ganándose una mirada de alivio de Chloe. Artemisa finalmente llevó a Chloe fuera de la tienda. Percy se giró para ver a Thalia, sólo para ser golpeado por una descarga eléctrica.
"Cinco años, cabeza de alga. Cinco años sin saber si estabas bien o no. Es mejor que tengas una buena excusa o de lo contrario podría matarte." gruñó furiosa Thalia.
Percy se levantó lentamente sin dejar de ver a su prima, "Lo siento Thalia. Sólo necesitaba un poco de tiempo para superar algunas cosas."
Thalia entrecerró los ojos antes de lanzar otra descarga eléctrica, "¿Crees que eres el único traicionado por lo que Annabeth hizo? Me dolió aún peor cuando desapareciste. Yo podría haberte ayudado". gritó Thalia airadamente pero había lágrimas en sus ojos.
Percy miró a su prima con vergüenza, "Lo siento tanto Thals. Hubo algunas otras cosas que tenía que superar." dijo en voz baja.
Thalia entrecerró los ojos, "¿Y qué sería eso?" preguntó con enojo.
Percy la miró con lágrimas en sus ojos, "Ella mató a mi mamá y a Paul." dijo con una voz casi inaudible pero Thalia lo pudo escuchar y fue algo que no esperaba.
Annabeth nuevamente abrazó a su novio, solo esperaba que su contraparte fuera enviada, deseaba poder golpearla — Te amo — dijo Percy, logrando que su novia sonriera. El resto de los semidioses se mantuvieron en silencio, aquella lectura estaba siendo bastante complicada para sus dos amigos.
Ella de inmediato se abalanzó sobre Percy abrazando a este con fuerza.
"Lo siento mucho Percy, no sabía." dijo ella con tristeza mientras sus lágrimas caían de sus ojos. Percy sólo abrazó a su prima más fuerte La única otra persona que había hablado antes había sido Hera. Pero Thalia era como una hermana para él y la necesitaba de nuevo en su vida. Después de unos minutos Percy retrocedió, sonriendo a sus amigas.
"Lo siento Thals. No debería haberme ido sin despedirme, estaba tan destrozado que no pensé en los demás." dijo con tristeza esperando que su prima lo perdonará.
Thalia negó de inmediato con la cabeza, "No importa Jefe Alga. Estoy feliz de saber que estás bien y que estás de vuelta." Percy le dio una sonrisa triste, pero asintió con la cabeza.
"Necesito encontrarme con Nico, echo de menos al pequeño niño gótico." dijo con una sonrisa recordando al hijo de Hades.
Thalia sonrió; feliz de que Percy por fin haya vuelto.
"Él me manda un mensaje Iris cada semana para ver si encuentro alguna pista de tu ubicación. Estoy segura de que una vez que se sepa que estás aquí no dudará en entrar en el campamento, incluso si eso significa terminar con una flecha donde no da el sol." dijo Thalía soltando una sonora carcajada.
Thalia y Percy se quedaron encerrados en la tienda de Artemisa por las próximas dos horas, este le explicó lo que había estado haciendo durante los últimos cinco años. Dejó de lado la parte de los romanos y la parte de Hera, decidiendo que lo último era mejor guardarlo para después.
Él también tenía algo que necesitaba discutir con Artemisa sobre el campamento romano. Ambos salieron de la tienda de campaña cerca del mediodía, ya que era la hora de comer. Percy se acercó con su prima recibiendo un montón de miradas conmocionadas mientras las cazadoras los veían. Cuando llegaron a la zona del comedor, Chloe quién estaba esperando a Percy sonrió al verlo.
"¡Percy! ¡Percy! Muchas gracias por traerme aquí. Todo el mundo es muy agradable como me has dicho. Incluso me dieron un arco y me van a enseñar a disparar después de la comida." dijo la niña sin poder ocultar su emoción.
Percy se echó a reír y le sonrió feliz de verla tan animada.
Todas las cazadoras comenzaron a mirar a Percy extrañamente, todas ellas estaban bastante confundidas. Hasta donde recordaban Percy no la había llevado hasta allí. Artemisa se dio cuenta de sus miradas y reunió la atención de todas.
"Niñas, el hombre que vimos ayer y hoy no era un extraño después de todo. En realidad, era Percy. Él sólo se disfrazó manteniendo su identidad oculta." explicó la Diosa ante las miradas de la Diosa.
"¿Por qué? ¿Qué tienes que esconder el muchacho?" preguntó Phoebe desconfiando del hijo de Poseidón.
"Eso es suficiente Phoebe. Percy debe ser tratado con respeto. Él será bienvenido a regresar a nuestro campamento cuando quiera, además continuará trayendo nuevas cazadoras." dijo Artemisa severamente.
"Percy, ¿vas a quedarte a comer?" Chloe preguntó esperanzada.
Percy la miró antes de mirar al resto de las cazadoras, algunas parecían bien con la idea, mientras que otras no estaban muy contentas con la idea de que un muchacho comiera con ellas. Phoebe en cambio lo estaba mirando con disgusto.
— ¿Qué es todo esto? — preguntó Phoebe, — ¿Cómo es que ella está viva?
Todos observaron a la cazadora, no se habían percatado que la cazadora había despertado. — ¿De qué hablas? — preguntó Hera.
— Esperen, ¿Ustedes no son del mismo universo? — preguntó Artemisa, extrañada por aquella interacción, Hera se mantuvo en silencio viendo fijamente a la cazadora.
— No — añadió Hera, algunos de los Dioses sacaron sus armas.
— ¿Por qué todo lo quieren resolver con violencia? — preguntó Cronos irrumpiendo en la sala, aunque para sorpresa de todos, la cazadora sacó su arco, disparando un par de flechas las cuales se detuvieron a escasos centímetros de la cara del Primordial.
— Pelea cobarde — rugió Phoebe disparando más flechas aunque todas estás se detuvieron antes de herir al Primordial.
— No soy el mismo Cronos que tu conoces — añadió Cronos tranquilamente, pero la cazadora no dudó por ningún momento, algo que sorprendió a los Dioses. — Te he traído aquí porque ustedes también necesitan estar preparados.
— Él tiene razón Phoebe — añadió Artemisa, Phoebe lo observó fijamente antes de bajar su arco.
— Se lo que ha hecho mi contraparte en tu mundo, pero es fundamental que ustedes también estén enterados de esto — añadió Cronos, Phoebe solo asintió pero se alejó del Primordial. — Pueden continuar.
"No puedo hoy Chloe, lo siento. Tal vez la próxima vez." dijo mientras miraba a Phoebe.
Chloe miró molesto cuando Percy dijo que no podía, algo que le rompió el corazón. Percy se arrodilló a su lado y le susurró algo al oído. Chloe le sonrió y le susurró algo a cambio. Percy juntó las manos, produciendo otro plato de macarrones con queso junto con una gran rebanada de sandía en la mesa delante de Chloe.
"Lo siento, no puedo hablar ya Thals. Quizá la próxima vez no haya tanta tensión." dijo mientras miraba a Phoebe de nuevo que todavía los estaba mirando. "Tengo que ir a buscar a Nico de todos modos. Me envías un mensaje Iris si quieres hablar."
Percy se volvió hacia Artemisa, "Gracias por evitar que no me maten esta mañana. Te enviaré un mensaje Iris tan pronto encuentre otra chica."
Artemisa y Thalia parecía que estaban a punto de protestar, pero Percy les dio una pequeña sonrisa y se desvaneció en un destello de llamas antes de que pudieran decir nada. Lo último que vio fue a Thalia volviéndose a Phoebe con una mirada asesina en su rostro.
— Ha terminado — dijo Hera, observando la reacción de Apolo y Artemisa, solo esperaba que Cronos la dejará en aquel mundo cuando todos se enterarán de la revelación, no le agradaba para nada la idea de que Percy resultará lastimado.
— Deberíamos tomar un pequeño descanso — dijo Zeus, algunos de los Dioses abandonaron, a excepción de Artemisa y Hera que se mantenían cerca de Phoebe y también Poseidón permaneció en la habitación, no quería alejarse mucho de su hijo.
— ¿Estás mejor? — preguntó Artemisa, Phoebe se mantenía observando a Percy. Algo que puso demasiado nervioso al chico, aunque la cazadora no le lanzaba las miradas de furia como la Diosa de la Caza.
— Si, es solo que es raro — dijo Phoebe.
— ¿Eres novia de Percy? — preguntó Thalia, tal vez aquello explicaba la actitud extraña de la cazadora, aunque se arrepintió de haber dicho aquello al ver la mirada furiosa de Artemisa.
— ¿Qué? Claro que no, nunca sería la novia de mi hermano — añadió de pronto Phoebe, Percy solo permaneció en silencio odiando a las parcas, ¿por qué todo lo tenían que complicar?
Hola, sé que ha pasado mucho tiempo desde la última actualización, he intentado encontrar a alguien que continuará con la historia pero no he tenido suerte, trataré de estar actualizando más seguido, una disculpa por hacerlos esperar tanto tiempo.