Quiero que sepas,
que estarás viviendo
en mi memoria,
cada día al despertar.
Soñaré contigo,
indecente y atrevida.
Juro solemnemente
que seré tuya de nadie más.
Los momentos no vividos durante esta vida imparcial.
Hoy es tu día nueve de abril,
convertido en un regalo otoñal.
Te regalo mis besos húmedos
en tus labios,
espero el momento
de que han de llegar.
Es tu día,
el más brillante
y profundo sueño hemos tenido.
Ya no quiero despertar.
Te dedico mi amor,
te voy mi libertad.