CANCIÓN: BETEER SAID - CINEPHILE
*Dale click a la canción antes de leer el capítulo (lo recomiendo).
Lentamente abro mis ojos y la primera imagen que me llevo es la de Dustin, apoyado encima mio,sosteniendo mi mano, mi movimiento lo hace despertar haciendo que voltee su vista hacia la mía, luce una pronunciada barba,y como si tuviera dias sin dormir,aún así,luce perfecto para mí.
- Danielle.. al fin despiertas.
- Si estoy algo mareada ¿cuanto tiempo estuve asi?
- Una semana.
- ¡¿Una semana?!
- Así es,la operación fue complicada, el médico y yo temiamos que no despertaras, trata de no moverte demasiado o la herida se abrira.
- ¿Y todas esos ramos? - Digo al mirar los ramos de rosas blancas que están por toda la habitación.
- Algunos los han traído Laila y Wiliam, otros yo.
- ¿Mis padres saben?
- Por supuesto, sólo que evite mencionar que fuiste herida en la casa de un mafioso - Sus palabras suenan cargadas de rabia.
- Yo..
- En un momento vengo, voy a hablar con el médico, para que nos de tu reporte y decirle que has despertado.
- Vale.
Espero que Dustin entre junto al doctor y este me da una leve revisión, después de eso ambos se dirigen hasta la entrada de la habitación e intercambian algunas palabras,el doctor se retira de la habitación y Dustin se acerca hasta donde estoy.
- ¿Que ha dicho? - Pregunto.
- Podrás irte hoy, pero tendrás que pasar un tiempo en cama.
- ¿Un tiempo en cama?¿Porque?
- Estas embarazada - Sus palabras son cortantes, serías, frías..
¿Que?
- La bala rozo la placenta, es un embarazo riesgoso.
No se que decir, estoy tratando de asimilar todo.
- ¿Cuando te enteraste?
- El mismo día que te traje, tienes una semana.Preparare todo para tu salida,no tardare- Dice mientras sale de la habitación.
¿Un bebé? No se si llorar de la alegría o preocuparme por lo que se avecine. Dustin debe estar enojado,no sólo porque me arriesgue con Lombardi, si no por el embarazo.
Paso varios minutos pensando en todo lo que pudo haber pasado en la semana que estuve inconsciente, en la reacción de Dustin cuando se entero dele embarazo, ninguno de los dos sabíamos.
Dustin abre la puerta y una enfermera entra una silla de ruedas, con cuidado me ayuda a bajar de la cama y me conducen hasta la salida del hospital, hasta subirme a su auto. Puedo divisar que Scott y los otros chicos están esperándonos.
Me coloco el cinturón de seguridad y Dustin pone en marcha su auto, durante todo el camino al departamento no pronuncia ni una sola palabra, tomo su mano, pero él quita la mía de la suya suavemente.
Esta enojado, furioso, conozco esa expresión en él.
- Apoyate en mi - Dice en cuanto llegamos y aparcamos a las afueras del edificio.
Obezco y me sostengo de él, delientandome con su olor, con el aroma que extrañaba.
- Le he ordenado a Lisa que tenga lista la habitación, no salgas de ella ni hagas ningún movimiento brusco ¿entedido?
Asiento con la cabeza,porque no se que más decir.
- Bienvenido señor Eigner y señorita Johnson - Dice Lisa al vernos entrar.
- Hola Lisa - digo saludandola.
- Todo está como ordeno señor.
- Gracias Lisa.
Dustin me conduce cargada hasta la habitacion y me deja sobre la cama.
- Todas tus cosas están como las dejaste he mandado a comprar algunas otras, si quieres algo, sólo dile a Lisa - Dice mientras se dirige para cruzar la puerta de la habitación.
- ¿Estas enojado? - Pregunto sin rodeos, aunque ya se la respuesta que me dará.
Él voltea su vista hacia mi de nuevo.
- ¿Enojado Danielle? Estoy mas que eso ¡Estoy cabreado! - Sus palabras escupen enojo y furia.
- Dustin..
- ¿Cómo pudiste arriesgarte de esa manera? Te trato de proteger a toda costa, y lo que haces es ir en mi contra siempre, fuiste a la casa de Lombardi ¡A la casa de un mafioso Danielle!
- Yo.. solo.
- Danielle,casi te pierdo ¿Sabes lo que me dijo el médico? Que si no despertabas, tendría que elegir entre tú y el bebé y ¿sabes que? Ya tenía una decisión clara te elegiría a ti,porque no imagino un mundo si no estás en él, y menos uno criando a un bebé solo.
- ¿Estas enojado por el bebé cierto? No lo quieres.
- No confundas las cosas Danielle.
- ¿Qué no las confunda? No quieres ser padre, una vez me lo dijiste.
- Y aún me mantengo en esa postura.
- ¡Pues ya lo eres! Ahora sal de la habitación ¡No te quiero ver!
- No discutire esto contigo, sólo no te muevas de la cama - Dice saliendo de la habitación y cerrando la puerta bruscamente.
- ¡Maldito imbecil! - Digo tirando una almohada que choca contra la puerta.
Me hundo en las sábanas de la cama, dejando que el llanto se apodere de mi, no quiere al bebé, me odia, odia a mi hijo.
Lloro, lloro desconsoladamente, crei que su reacción sería otra, imaginé que le agradaría la idea, pero en cambio, obtengo su frialdad e indiferencia.
- Señorita Johnson, le he traído la cena - Dice Lisa del otro lado de la puerta.
- Ahora no, Lisa.
- El señor me ha mandado.
- Esta bien, déjala a un lado de la cama.
- No debería llorar, es malo para su salud.
- Gracias Lisa, pero me siento triste en este momento ¿Qué está haciendo el señor Eigner?
- Esta en su oficina bebiendo whisky, ordenó que nadie lo molestará.
Lo hace de nuevo, siempre se encierra en su dolor y su furia, como siempre lo hace.
- Gracias Lisa.
- Me retiro señorita Johnson.
Lisa sale de la habitación y empiezo a comer la cena que ha traído, ella tiene razón, no deberia estar así, le hace daño al bebé, pero es inevitable llorar, sabiendo que su padre nos es indeferente.
Me recuesto en la cama y me tapo con las cobijas y entonces lo veo entrar. Saca algunas cosas de su closet y se cambia de ropa.
- Dormiré en el sofá, buenas noches - Dice saliendo de la habitación.
Sus palabras me parten el corazón en mil pedazos, dormira lejos de mi, aunque fui yo la que le pidio que saliera de la habitación.
Trato de dormir mientras paso mis manos tocando mi vientre, no puedo creer que este embarazada, me estaba cuidando, pero después de lo de Leonard, olvide por completo tomarme las pastillas, y Dustin y yo teníamos sexo a cada instante, era claro que sucediera.
Los días pasan. Dustin y yo cruzamos muy pocas palabras, sólo entra a cambiarse de ropa, es difícil para mi ver como el hombre que amo me es ignora, verlo como se aleja de mi lado, cuando lo que deseo es su cariño, sus besos y sus abrazos.
- Te he traído algunos libros para que te distraigas - Dice colocandolos encima de la mesa de noche.
- Gracias.
- Nos veremos en la noche.
- De acuerdo.
Me dispongo a leer uno de los libros que Dustin me ha traído, "El principito" de Antoine de Saint-Exupéry, el libro me atrapa desde el instante en que empiezo a leerlo y lo termino todo ese mimo día.
Me quedo con una de las frases que hay escrita en el.
Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante.
Así sucede con el amor, sólo se fortalece, cuando atraviesas junto a esa persona los malos y los buenos momentos.
Paso toda la tarde sumida en mi tristeza, y también pensando en mi bebé, el es inocente, y ¿que si lo hubiera perdido? Hubiera sido mi culpa, Dustin tiene razón, me arriesgo sin pensar en nada, cuando él, lo único que quería era protegerme.
Me quedo dormida en la cama, y siento como unas fuertes manos pasan suavemente por mis cabellos, abro mis ojos, pero no me encuentro a nadie, era sólo un sueño, un sueño que parecía tan real, podría jurar que era él.
Una lágrima se me escapa, aún sigue sin dormir a mi lado, desde que le dije que se fuera de la habitación.
A la mañana siguiente, me levanto y me doy una suave ducha, paso mis dedos por la herida, un poco más y hubiera perdido a mi hijo, no puedo imaginar que lo puse en riesgo a el tambien.
Justo cuando me voy a meter en la cama de nuevo, escucho que la puerta se abre.
- ¡Dan!
- ¡Laila!
- Oh Dan..¡Te extrañe amiga! Dustin dijo que estabas deprimida.
Me suelto a llorar.
- Danielle no llores, le hará mal al bebé captan todo en los primeros meses.
- Lo odia, Dustin odia al bebé,Laila.
- No digas tonterías Danielle ¿Cómo crees que Dustin va a odiar al bebé?
- No quería tener hijos, no quiere a nuestro hijo.
- Danielle, Dustin tiene miedo a fallar como padre, porque no desea que su hijo atraviese por lo mismo que él paso, tiene miedo a responsabilizarse de otro ser,sin él antes entenderse y perdonarse, ya veras que se solucionaran las cosas, los hombres se encariñan con el primer hijo.
- No creo. Laila, él sólo entra a cambiarse de ropa y duerme en el sofa.
- ¿Cómo es eso de que duerme en el sofá como si fuera un perro?
- Le pedí que se fuera de la habitación.
- Danielle.. tú necesitas a Dustin, el bebé los necesita a ambos.
- Lo se, por mi culpa casi pierdo a mi hijo.
- Danielle, sabes que nunca le doy la razón a Dustin, pero él la tiene esta vez ¿Cómo pudiste arriesgarte yendo a la casa de un mafioso? Dustin estaba desesperado por encontrarte, bebió hasta perder el conocimiento, la paso muy mal Danielle, Wiliam tuvo que intervenir.
- Fui en contra de lo que me pidió, pero sólo por salvarlo.
- Se que lo amas, pero eso no justifica que te coloques en riesgo. Bueno ya.. no hablemos de más cosas tristes, vine a hacerte compañia, le he traido algo al pequeño Furby.
- ¿Pequeño Furby?
- Si, tu amas los Furbys, asi que tu bebé es un pequeño Furby.
Suelto una risa.
- Eres una loca.
- Ese bebé tendrá una tia muy loca, ¡ten! -dice dándome una sonaja en forma de trebol.
- Laila, es hermosa.
- Así iritara más a su padre, ya sabes como es Dustin de amargado.
- ¿Donde la has conseguido?
- Internet.
- Vives metida en Internet.
- No se que obsesión tengas con los treboles pero sabía que te gustaria.
- Gracias - Digo dándole un abrazo.
- ¿Te parece si vemos una película? Los chicos están hablando afuera.
- Me parece buena idea ¿Cuál has traído?
- Una de amor.
- Laila..
- ¿Que?
- No quiero estar triste y traes una película de amor.
- Es los "Los puentes de Madinson" te gustara.
- Esta bien - ruedo los ojos.
Laila y yo vemos la película y ella termina yéndose junto a Wiliam, al anochecer.
- ¿Que tal estuvo la tarde con Laila?- pregunta Dustin mientras se cambia de camisa.
- Bien, he pasado una tarde agradable. Gracias por traerla.
- Me alegra escuchar eso. Colocare esto por aquí - dice mientras toma el sonajero y lo coloca a un lado de la mesa.
- ¡No! Dejalo, me gusta.
- De acuerdo. He traído esto, en vista de que no puedes moverte - dice mientras deja un altavoz encima de la mesa de noche-. Si quieres algo puedes pedirlo por aca, Lisa lo traerá, que descanses - Dice saliendo de la habitación.
Pero lo único que quiero es su compañia, su amor, sus abrazos, quiero al padre de mi hijo abrazado junto a mi, los tres juntos como una familia.
Saludos treboles de la buena suerte 🍀
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