Caminé despacio hasta la cama de Liam. Él estaba todo enyesado. Solo podía ver su rostro que estaba inflamado y magullado. Mis ojos se llenaron de lágrimas. Quise pronunciar su nombre pero mi voz no emitió ningún sonido. Con indecisión me puse a su lado y contuve mi aliento. Se veía tan mal.
- Li-liam---dije tartamudeando pero él no me respondió---Liam---repetí su nombre mientras tomaba sus dedos, ya que era lo único que no tenía yeso. Liam no hizo ningún tipo de movimiento. Mis piernas temblaban pero resistí para no caerme--- Liam lo siento mucho---terminé diciendo llorando---debí hacerte caso, pero no fui tan ingenua. Ahora mira como estas.
De mis ojos seguían saliendo lágrimas sin parar. Ya no podía con mis piernas, así que acerqué una silla y me desplomé en ella. Mientras lloraba acariciaba sus dedos. Estuve así algunas horas. Luchaba por no quedarme dormida. Esperaba impacientemente que Liam despertara. Pero no fue así. Lo último que me acuerdo fue que soñé con Liam, Karen y el nuevo bebé.
***
Sentí como acariciaban mi cabello. Eso fue lo que me despertó. Recordé donde estaba y levanté mi cabeza de un tirón, y al hacerlo, mis ojos se fijaron en los hermosos ojos de Liam, quien me miraba dulcemente. En mi garganta se formó un nudo. Como lo amaba.
- Hola cariño---dijo Liam con voz ronca y una pequeña sonrisa. No pude aguantar las ganas de llorar. Mis lágrimas caían sin parar--- shu, shu, cariño, ya todo está bien.
- No, Liam no todo está bien, mira como estas---dije llorando--- pudiste haber muerto. Y todo por mi gran estupidez. Lo siento mucho. Puse en peligro nuestro futuro como pareja y familia.
- Cariño por favor deja de llorar—dijo Liam acariciando mi cabello--- lo importante es que ahora estamos bien y Domenico las va a pagar todas. Él fue el culpable de todo--- limpié mis lágrimas y me levanté para besar sus labios.
- Te extrañé mucho, pensé que todo estaba acabado y Domenico lograría salirse con las suyas---dije con voz rota
- No pensemos más en eso cariño---dijo Liam con una triste sonrisa
- Liam, pero ¿Cómo fue que ocurrió todo? ¿Cuándo planearon venir a Roma? ¿Cómo fue que me secuestraron? ¿y Karen? ¿Dónde están Deborah y Zayn? Y ¿Cómo tuviste el accidente?---pregunte con desesperación—no sabes cómo me sentí cuando desperté en la embajada y no saber nada. Zayn y Deborah no me dieron ningún tipo de información. Luego Domenico me secuestró y pensé que todo estaba acabado.
- Lo siento cariño---dijo Liam con una mueca--- yo les dije a los chicos que no te dijeran nada. El plan era que al llegar a Roma contrataríamos a unos ex militares para que te secuestran a ti y la pequeña Karen el día de tu boda. Mientras yo iba con mi amigo Julián, embajador de Inglaterra, para los tribunales y conseguir una cita para resolver el problema de la custodia de Karen. Y así lo cumplimos, pero lo que no calculé fue en la rapidez de Domenico, y su intento de asesinarme, mandando a sus secuaces a que nos voltearemos en la autopista. Y que te secuestrara. ¿te hizo algo Anne?--- recordé todo lo que paso con Domenico y mi cuerpo tembló por el miedo.
- No, no paso nada---mentí para que Liam no se alterara.
- Anne no me mientas---dijo Liam poniendo su entrecejo
- Liam...--- pero el sonido de la puerta abrirse me interrumpió.
- Con que se encuentra aquí señorita Bennett----dijo la enfermera que me había atendido hace rato—no desaparezca así por favor, estuve un buen rato buscándola.
- Lo siento enfermera---dije apenada
- Bueno ya es hora de que regrese a su habitación—dijo ella tomando mi suero y poniendo su mano en mi hombro
- Pero quiero quedarme con Liam—dije testarudamente
- Anne debes obedecer a la enfermera---dijo Liam sonriendo--- después nos veremos.
- Está bien---dije suspirando--- pero prométeme que todo estará bien
- Por supuesto que si cariño, regresa a tu habitación. Debemos recuperarnos para volver a casa con Karen---dijo Liam con su hermosa sonrisa. "Y con nuestro nuevo bebé" pensé feliz, aunque no se lo dije
Asentí con la cabeza. Me acerqué a él y besé sus labios. Le dediqué una sonrisa y salí con la enfermera para regresar a mi habitación.