- Por favor firmen aquí y aquí. Nos pidió el notario.
- ¿Os dan su casa? Bonnie estaba en casa de los Salvatore con nosotras, bueno la casa de los Gilbert ahora.
- Sip. Era un bonito gesto, podía dormir tranquila de ahora en adelante, saber que estábamos protegidas.
- No querría limpiarla. Bonnie y su chispa. Reímos las tres, los ánimos se habían calmado.
Acompañamos al Sr. Smith a la puerta para invitar a Stefan y a Damon.
- Stefan puedes entrar. Le dijo Elena.
- No somos críos. Dijo Damon mirándome.
- Algunos sí - Lo estaba disfrutando - Si te dejo entrar prometes obedecer a la dueña de la casa.
- No. Odiaba perder el control.
- Enserio, prometiste que se haría a nuestra manera. Ni mentiras ni planes secretos. Asintió y lo dejé entrar.
- Vamos. Me dijo Elena mientras cogíamos nuestros libros.
- ¿A dónde vais? Preguntó Stefan, sabía que no les iba a gustar.
- A clase.
- No os dimos un refugio para que salierais de él. Damon estaba llegando al fin de su paciencia.
- ¿Dónde está Klaus? Ninguno de los dos me respondió.
- Exacto.
- No vamos a ser vuestras prisioneras. Razonó mi hermana.
- Tú decides. Damon estaba odiando la situación y yo la disfrutaba enormemente.
- Si aparece puedo desarmarle. Bonnie parecía segura y nosotras confiábamos en ella.
- Al lado de Bonnie es donde estamos más seguras. Además prometí ayudar a Caroline, es más peligrosa que Klaus.
- Esperad yo también voy. Stefan no se rendía fácil.
En el instituto todo el mundo estaba pendiente del baile de la década, no tenía pareja y no pude evitar pensar en el último baile, había sido un desastre. Pero Bonnie y Elena estaban empeñadas en ir, y ni hablar de Caroline, me había tenido las dos primeras horas colocando adornos y guirnaldas para un baile que no sabía ni si iba a ir.
- No tengo pareja, no sé ni para que debería ir.
- Vendrás, lo pasarás bien. Estamos en el siglo XXI, puedes ir sola a un baile de instituto. Además hay un montón de chicos que quieren ir contigo - Ya, pero yo no quería ir con ningún chico del instituto -Puedes venir conmigo y Stefan, lo necesitamos Sara, desconectar o nos volveremos locas.
- Hola Sara, no te lo vas a creer pero un chico guapísimo me ha pedido que te preguntase si tienes pareja para el baile. ¿Qué?
- Ahí lo tienes, no tiene pareja, ¿Quién es? Mi hermana estaba encantada de hacer de cupido, mi vida daba más pena por momentos.
- Se llama Klaus, dijo que le reservaras todos los bailes.
- ¿Qué? Estábamos pálidas y apenas podíamos respirar.
- Lo sé el nombre es un poco anticuado pero está buenísimo. No esperamos a que Cintia se fuera, nos levantamos rumbo a casa de los Salvatore con Bonnie.
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- Tenemos que ir al baile, es nuestra oportunidad de matarle. Damon parecía confiado, pero yo no estaba tan segura.
- No lo sé, no sabemos cómo es.
- No es tan fácil como creíais eh. Stefan tenía razón, quizás estábamos demasiado confiadas.
- ¿Por qué solo se ha referido a Sara?, es espeluznante. Elena estaba preocupada por mí, demasiado.
- Os lo he dicho, soy la última replica viva.
- Siento llegar tarde. Alaric había llegado.
- Tienes que apuntarme al baile, Klaus ha movido ficha. Damon lo puso al día, pero había algo raro en él. No dejaba de mirarme, ¿Ocurría algo? ¿Creía que iba a morir? ¿Era eso?
- Stefan irá con Elena y yo protegeré a Sara. Damon me miró intensamente y yo asentí.
- Os acompañaré. Dijo Rick demasiado brusco.
- ¿Y si hablamos con él? Todos me miraron como si estuviera loca, menos Alaric que me miraba con curiosidad. Quiero decir nunca ha dicho que quería, solo lo supimos por otros, y si hubiera la manera de decirle que quizás no sea necesaria toda la sangre. Negociar.
- ¿Te has vuelto loca? De eso nada. Damon estaba furioso.
- No hagas eso, no sientas pena por él, no es un proyecto de caridad Sara, mató a toda la familia de Katherine, es un monstruo. A Elena tampoco le había hecho gracia, solo pensé que quizás habría una salida menos mortífera.
- Ya. Solo era una idea.
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Damon y Stefan se preparaban juntos, anudándose el nudo de la corbata el uno al otro. Hacía décadas que no estaban tan unidos. Damon pensó que no era el mejor momento, con Klaus respirándole en la nuca, pero en ese instante, con su hermano, con Sara en su casa, escuchando su risa, su olor, podría acostumbrarse a esto.
Cuando se reunieron los cuatro en el rellano, Sara y Damon se miraron intensamente. Algo que no pasó desapercibido ni para Stefan ni para Elena.
Damon me ofreció el brazo y yo lo acepté en silencio. Seguía sintiendo la distancia que se había instalado entre ambos, pero de su brazo me sentía segura, por extraño que parezca.
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- Gracias a todos por venir - Una chica de la clase de Elena, Cindy creo que se llama, nos daba a todos la bienvenida - Esta noche tenemos una petición especial, esto es para Sara, de Klaus.
Era mi canción favorita. Colors de One Republic. ¿Cómo lo sabía?
Damon bailaba con Bonnie ¿Qué tramaba? Cuando Alaric se acercó.
- ¿Me permites?- Me tendió la mano y cuando la tomé un escalofrío subió por mi espalda dejándome casi sin aliento. No quise darle importancia ya que después de la espeluznante dedicatoria mis nervios estaban de punta.
- ¿Cómo estás? Seguro que todo se arregla con Jenna. Una vez escuché que cuando es de verdad no puedes escapar.
- Si, todo se arreglará, ¿decías en serio lo de hablar con Klaus? Lo de negociar. ¿Qué pasa si él quiere sacrificar a Elena y no a ti? ¿Qué pasa si tiene otros planes para ti?
- Lo dudo, no me conoce, no soy la persona de la que él estuvo enamorado, no traicionaría a mi familia por él jamás. Rick se puso muy serio, sus ojos brillaban intensamente, por un momento ni siquiera me pareció él, pero llegó Damon.
- ¿Me devuelves a mi pareja? Alaric tardó unos minutos en reaccionar, miró fijamente a Damon y me soltó lentamente.
- ¿Cómo estás?
- He estado mejor.
- ¿Te acuerdas del ultimo baile de la década? Los vampiros estaban en plan grgrgr y nosotros ahh pero al final...
- Al final ganamos. Sonreí.
- Hacía mucho que no sonreías para mí.
- Tenías quién te sonriera, Andie, Katherine... Todas las mujeres de Mystic Falls... Damon dejó de bailar, paró en medio de la pista con todas las demás parejas rodeándonos.
- Cuando esto acabe, cuando mate a Klaus para ti, tú y yo vamos a aclarar todos los malentendidos.
- ¿Y si no ganamos esta vez? Al decirlo en voz alta mi pecho se sintió más libre.
- Perdonad que interrumpa pero no encontramos a Jeremy. Alaric parecía preocupado.
- ¿Qué?
- Quédate con ella iré a buscarlo. Damon se fue dejándome sola con un Alaric un tanto extraño.
- ¿Y si Klaus lo tiene?
- Vamos, en mi despacho tengo armas.
Cuando llegamos al despacho me pidió que entrase primero y cerró la puerta tan pronto pasé.
- ¿Qué haces Alaric? déjame salir
- No puedo Sara, no quiero que seas un daño colateral, necesito a mi réplica favorita a salvo.
- ¿Qué? Klaus...
- Prefería que me conocieses con mi cuerpo pero tendremos más oportunidades, sé una buena chica y quédate aquí hasta que los Salvatore te encuentren.
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Damon alcanzó a Bonnie y Elena totalmente confuso, algo estaba pasando, algo que estaba fuera de su control.
- ¿Qué pasa, donde está Sara?
- No lo sé, es Klaus, ha poseído el cuerpo de Alaric. Bonnie y Elena estaban aterradas, Klaus iba un paso por delante.
- ¿Qué? Dejé a Sara con él, ve a buscar a Stefan ahora.
Le dijo Damon a Elena, y salió corriendo en busca de su chica, no sin antes tener unas palabras con Bonnie.
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Bonnie se enfrentó a Klaus, no permitiría que nadie saliera herido.
- ¿Dónde está Sara?
- A salvo, no le haría daño a mi réplica, hoy la fiesta es solo para ti. Klaus iba a por Bonnie.
✾
Una hora después Stefan la sacó de la clase y la llevó con su hermana.
- Elena ¿qué ha pasado?
- Es Bonnie, ha muerto.
- No, no...
- Stefan llévatelas de aquí, yo me deshago del cuerpo. Respondió Damon.
- ¿Cómo que te deshaces del cuerpo? No daba crédito, ¿Cómo? Ella había muerto por mi culpa, los ojos me picaban, no podía moverme o hablar hasta que escuché a mi hermana chillar.
- ¡¡¡¡¡¡¡Es Bonnie!!!!!!
- Jeremy, ¿qué le diremos? No soportará otra novia muerta.
- Yo le encontraré, iros a casa. Agradecí el tacto de Stefan.
Una vez en la pensión, Stefan nos dio una copa de coñac.
- No puedo creerlo, es culpa nuestra, murió para salvarnos. Me lamenté. Mientras las lágrimas bajaban silenciosas por mis mejillas.
- Quise impedírselo, pero no fui capaz, si hubiese insistido más.
- No, no es culpa vuestra. Ha sido Klaus, lo ha hecho Klaus. Stefan también estaba afectado, aún así seguía siendo él, siempre siendo la sensatez en la locura.
Cuando Damon entró Elena se lanzó a por él.
- ¿Dónde está? ¿Qué has hecho con ella?
- Puedes calmarla por favor.
- No hables como si no estuviera en la habitación.
- Lo sabias, sabias que si utilizaba todo ese poder acabaría muerta ¿verdad? No reconocí mi voz cuando salió por mi boca, áspera, agria...
- Si, lo sabía. Y lo abofeteé con todas mis fuerzas. Posiblemente ni siquiera sintió dolor físico, pero la furia estaba ahí, el dolor estaba ahí, entre los dos.
- No estábamos preparados para lo que hizo Klaus, no iba a parar hasta matarla, tenía que creerlo. Hizo un hechizo, Bonnie está bien. Y se fue, abandonó la habitación dejándome confusa y culpable, Stefan le siguió mientras nosotras asimilábamos que Bonnie seguía viva.
- Podías habérmelo dicho. Le reprochó Stefan a su hermano.
- ¿Para qué, para que se lo soplaras todo a tu novia? Se defendió Damon.
- ¿Sabes el mal trago que les has hecho pasar?
- Había que hacerlo. No me malinterpretes, yo tomaré las decisiones importantes, hasta dejaré que Sara me odie, pero al final del día seguirá con vida.
Cuando me armé de valor subí las escaleras hacía la habitación de Damon, escenario de tantas muertes en el pasado. Cuando me vio en el umbral enseguida habló.
- Ah, oye, Klaus tenía que creer que estaba muerta tu reacción tenía que ser real. Parecía cansado.
- Entiendo por qué has hecho esto, engañamos a Klaus y Bonnie está viva.
- Es un dos por uno.
- Pero dejemos una cosa clara, no dejaré que Bonnie muera por mí.
- Hay que matar a Klaus, al de verdad.
- Encontraré otra forma, lo haré. Siento haberte pegado.
- Disculpa aceptada, pero déjame dejarte algo claro, si un día tengo que escoger, dejaré morir a Bonnie, yo siempre te escogeré a ti.
- Damon...Nuestros pechos rozándose
- ¿Interrumpo? Era Elena. ¿Podemos hablar? sigo algo afectada.
- Claro.
- Buenas noches Damon.
- Buenas noches Sara.
Mientras me preguntaba una y otra vez que me había dicho Klaus escribió algo en su móvil
Despertemos a Elijah, es la única manera, en unas horas en el sótano.
Asentí, lo había pensado más de una vez. Poco después estábamos quitándole la daga a Elijah esperando que él nos salvara.