Solo fue cuestión de tiempo para que los medios averiguaran sobre nuestra relación, aunque me extrañó que no lo hubiesen descubierto antes, pues Seijuro, por ser el heredero de una de las empresas más grandes del país, siempre estaba en el punto de mira de los focos.
Al parecer, un informante anónimo mandó fotos comprometedoras de nosotros juntos en la universidad a la que asistía Sei, y la noticia se regó como pólvora, haciendo de nosotros un escándalo y tratándonos como la noticia de último momento.
Fue un caos total. El señor Masaomi fue uno de los primeros en enterarse de nuestra relación gracias a los medios y se opuso vehementemente, pues no quería que su hijo siguiera con "un pobre doncel que no tiene nada destacable que ofrecer y solo se quiere aprovechar para subir de nivel social".
Aparte de eso, el acoso se hizo presente a cada momento, por lo que no podíamos ir a ninguna parte sin ser acorralados por los paparazzis, asi que Sei contrató guardaespaldas para cuidarnos mientras durara el furor. Fue realmente duro escapar de las cámaras, y también incómodo con la atención indeseada en la universidad.
Por supuesto, no faltaron los mensajes de odio, burla y envidia de extraños. Llegó a tal nivel que tuve que cambiar mi dirección de correo electrónico para que pararan, aunque el daño ya estaba hecho. De hecho, no tengo ni la más minima idea de cómo consiguieron mi correo, pero de algo estoy seguro: si lo desean, la sociedad puede convertirse en la peor pesadilla que hayas conocido.