Sumario: Cuando un zombie no tiene nada que hacer, ¿tiene una cita?
| Suchen/chenho; kaisoo!side | fluff, trash!au, gore rosa¿ | 875 palabras.
De esos días en que el apocalipsis había llegado para quedarse por años, quizá un siglo, quizá un milenio, quizá por toda la eternidad. Noticias situadas en el pasado, supuestamente decían que todo sería pavor, cuerpos por aquí y por allá, sangre, vísceras, muerte, extinción total de la raza humana; no obstante, sucedió todo lo contrario—para algunos.
Pasos lentos, sonrisas torpes a escondidas, besos acaramelados por sobre labios esponjosos adornados con algunas cuantas cicatrices y moretones en tonos rositas y rojos suaves. El amor se consume entre sesos rosas y sangre con grandes cucharadas de azúcar. Jongdae, a pasos lentos y palabras inentendibles—al menos incomprensibles para los pocos seres humanos que aún sobreviven y respiran apenas un poco de oxígeno detrás de máscaras en colores altamente oscuros—, llega hasta Junmyeon, o al menos recuerda vagamente aquel nombre, porque su lengua tiene adherido esas hermosas sílabas, lo sabe decir, lo está diciendo, y el otro lo entiende. ¡Ah! Se escucha tan bien su nombre en la voz de Jongdae.
"¡No!, ¡no caeré otra vez!" murmura; sin embargo, el de sonrisa gatuna zombificada le escucha perfectamente bien.
"Por favor."
Solo entre ellos dos se comprenden aún sin usar lo que en el pasado se le llamaba lenguaje, y a veces se le asignaba como idioma—solo aquellos que viven en el alma de sus corazones pueden comprenderse, porque fueron, años antes, una pareja destinada; el hilo rojo del destino los había unido incluso antes desde el nacimiento y hasta la muerte, al menos parcialmente.
"Suho, escúchame" dice cantando.
"Déjame en paz, eres un mentiroso..."
"De verdad no era mi intención" le interrumpe.
"¡Cállate!, no quiero escucharte, no quiero escuchar tus estúpidas excusas, ni tus tontas disculpas y justificaciones..." dice rápidamente, en un santiamén, como si estuviese rapeando igual que el dios de rap: Eminem, o algo así; bueno, si es que Eminem es el dios o si es que lo fue, porque la gente en el pasado nunca se puso de acuerdo; que el mejor era tal tipo, que el patrón siempre fue fulanito y un largo etcétera. El punto aquí es que Junmyeon está molesto, muy molesto con Jongdae, pues no es la primera vez que éste le deja esperando como un zombie idiota cuando se ponen de acuerdo para una cita.
"Pero es que..."
"Ya, no digas más..."
El de cabello lacio y negro le deja con la palabra en la boca, saliendo de la cocina para adentrarse a algo más parecido a un chiquero que a una recámara—y es entendible, en estos tiempos quién rayos sería muy-demasiado ordenado...nadie, a todos les importa poco cómo luce el interior de lo que se llama hogar.
"¿Qué te parece si te invito a comer un exquisito dulce de sesos en escabeche?"
Junmyeon se vira interesado hacia su pareja.
"¿Y también un helado con intestinos delgados aderezados de sangre fría y corazón combinado con grasa corporal fresca?" musita apenado por el drama total—como siempre suele actuar.
"Sí, además te invito un manjar hecho de carne humana y lengua..."
"Ya no digas más, vamos a comer" finaliza, dando un pequeño beso en los labios putrefactos y algo hediondos; pero tan dulces—al menos para Junmyeon.
Ambos salen, caminando, riendo como dos jóvenes zombies enamorados perdidamente. Tratan de pasar entre otros zombies en busca de la mejor comida; sin embargo, es costoso a veces conseguir sus sagrados alimentos, sobre todo porque algunos de su especie mueren en el intento—ellos han logrado salvarse como pueden, los pocos sobrevivientes humanos no son buenos.
—Kyungsoo, corre, ¡aléjate! —grita un chico de piel morena a su pareja, metiéndose en uno de los tantos resguardos —¿qué te pasa?
—¿Has pensado que ellos también podrían comunicarse?
—¿Qué? Estás diciendo locuras.
—Tal vez... —se resguarda junto a Jongin—; pero mira, parecen comunicarse a pesar de ser unos muertos vivientes y cerebro podrido...
El de ojos grandes señala con su índice a una pareja. Aquellos solo parecen decir incoherencias, y pese a los balbuceos, ese par de zombies parece entenderse perfectamente bien porque sus miradas se cruzan cándidamente y responden cuando el otro termina sus "frases".
—Aaaaaaaaaaaaaaaa.
—Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa aaaaaaaaaaaaaa aaaaaaa.
—Kyungsoo, tal vez tengas un poco de razón —le responde confuso.
"Suho, mira encontré un delicioso aperitivo"
"Comamos"
Ambos comen, mirándose dulcemente a los ojos, a ese transeúnte—quien chilla eufóricamente; por mala suerte no logró escapar.
Jongin y Kyungsoo gritan aterrados a lo lejos, su vecino ha sido atrapado, la sangre sale a chorros, el vientre le es mordido y la piel arrancada, sacan las vísceras con sus filosos y dientes, y disfrutan.
—Jongin... creo que me he equivocado, ellos ya no razonan en absoluto —clama, sollozando y abrazándose de su novio.
Mientras tanto, Junmyeon y Jongdae disfrutan de una fuente roja. Pueden admirar estrellas luminosas en el líquido carmín brotando más y más. Desgarran y despedazan, muerden y degustan, y en sus ojos descompuestos solo se percibe amor; reflejos de dos corazones unidos, porque después de todo, el amor puede estar incluso en personas en donde el corazón ha dejado de latir, la razón no se concibe más y el alma podría ser una utopía en una vida paralela. Porque quizá, el amor puede ser eterno en la vida-muerte.
Notas finales: Jajaja, pues qué puedo decir, perdón por esta tontería :'v (aunque a mí me gustó), pero espero les haya gustado/? Entretenido suena mejor. Solo eso x'D yo disfruté escribirlo :'D
Gracias por su lindo tiempecito en leer este drabble lleno de amapolas rosas ; ^ ;