Jesús.
Aún sigo medio "borracho" pero aún así Angie sigue estando preciosa con su pijama rosa de ositos. Es mirarla y no poder evitar sonreír. He estado dandole vueltas a lo que pasó entre nosotros pero supongo que el tiempo o te ayuda a olvidar o te vuelve a poner a esa persona de nuevo. Y es evidente que me han vuelto a poner a Angie en el camino. No sé muy bien de que manera, si como amiga o como lo que eramos antes. Lo pasé mal, realmente mal después de enterarme de lo de la apuesta, pero eh, no he estado muy tranquilo desde entonces, quiero decir, he estado de lío con unas cuantas, no me juzgueís pero necesitaba tener la cabeza ocupada para dejar de pensar a la chica que me trae y traía loco. Después de tanto, no sé exactamente que quiero con ella, en todo este tiempo hemos hablado unas ¿dos veces tal vez? Pero me la ponen en mi camino y no sé que quieren que haga con la chica borde. Ella camina a mi lado en silencio y se abraza así misma debido al frío que hace en Sevilla. Me quito la chaqueta y se la doy, la coge y me sonríe a modo agradecimiento que le haya dado la chaqueta.
- Bueeeno... -dice y yo la miro- ¿y a donde vamos?
- No lo sé, donde nos lleve el destino -digo y ella se ríe-
- Que poetico estás tu ¿no? -me dice y yo me enojo de hombros-
- Lo que hay -digo y le sonrío- ven vamos, es por aquí -le digo, la cojo de la mano y nos metemos por una calle-
- Tienes la mano congelada -me susurra y yo sonrío-
Llegamos por fin a el lugar que estaba buscando, joder, vaya cambio, ¿cuantos años habran pasado desde la ultima vez que vine? Unos 8 o algo así. Nos sentamos bajo el arbol del parque que yo considero más especial, al menos de mi infancia/adolescencia. Angie me mira interrogante y se sienta a mi lado en el césped. Pasan unos segundos y me pregunta. Mucho estaba tardando.
- ¿Que hacemos aquí? -me pregunta-
- Aquí me di mi primer beso con una chica -digo y sonrío-
- ¿Y por que me has traído aquí? -vuelve a preguntarme-
- Porque es un sitio especial para mí y... bueno olvidalo.
- ¿Y...? -me pregunta y yo sonrío-
- Que tu eres una persona muy especial para mí -le digo y ella me mira con una sonrisa- aún no sé muy bien en que sentido pero eres especial para mí, y... joder.
- ¿Y qué, Jesús? -dice ella y se muerde el labio-
- Y que te voy a besar, porque desde el momento que te vi no te haces una idea de las ganas de besarte que tengo.
Ella me sonríe tímida, y yo me acerco aún más a ella y acorto la distancia que por pocos centimetros nos separaba. La beso y joder, ella me besa con tantas ganas como yo a ella, sus labios, dios, por muchos que haya probado cuando la beso a ella es tan diferente a besara a cualquier otra tía. Su besos me saben a hogar, y su lengua tímida busca la mía para hacer aún más bonito este beso. Siento que no es un beso cualquiera si no que es un beso con sabor a reencuentro. Un reencuentro que a los dos nos hacía falta. Porque realmente nos hacemos falta.
Dani.
Me despierto a la mañana siguiente y veo a África dormida a mi lado, tapada hasta el cuello con la manta y veo que lleva mi camiseta puesta. No puedo evitar sonreír al verla. Le doy un beso en la frente y ella se gira hacia el otro lado. Me levanto de la cama y me pongo una camiseta y un chandal que había traído por si me quedaba aquí a dormir. Salgo de la habitación para ir a buscar algo de desayunar y me encuentro a mi querido hermano saliendo de la habitación de Angie.
- Pero bueno mira quien está aquí... -lo miro y él me mira intentando no sonreír- el borrachillo.
- Tío, necesito tener una de nuestras conversaciones -se peina frustrado y me mira- no sé que mierdas hacer con esto.
- Ven, vamos a por algo de comer para las chicas -le digo y él asiente- ¿que hora es?
- Las nueve y media -me dice y asiente-
Caminamos en dirección a una chocolatería cercana, la cual está dos calles por detrás del hotel donde se quedan las chicas y Jesús comienza a contarme lo sucedido anoche y de lo que se acuerda bien, otras cosas en su mente estan borrosas.
- Joder, Dani, la besé tío, no sé que hacer cuando la vea, sólo recuerdo llevarla a algún lugar, besarla, y quedarme dormido en su habitación. ¿Y si está enfadada conmigo? ¿Y si cree que estamos juntos de nuevo? ¿Y si anoche le dije todo lo que sentía? Dani, sólo espero no haber jodido nada tío.
- Relajate de una vez, me estresas Jesús, no tienes porqie rayarte tanto, cuando le lleves el chocolate y las porras hablaís del tema, y no creo que se piense que hayaís vuelto por haberos dado un beso ¿o fueron más? -le pregunto y él me hace un gesto como que no tiene ni idea- bueno, volviendo al tema, tranquilizate, es Angie, Jesús, sabes como es, no tienes porque temer tanto, y no creo que esté enfadada contigo, puede que igual o incluso más confusa que tu sí. Pero joder, relax macho. Ahora intenta recordar algo de lo que hablasteís anoche y ya luego hablareís con tranquilidad.
- Dani, te quiero.
- Y yo a ti Jesús.
- Somos uno -me dice Jesús dandome unas palmadas en la espalda-
- Eso nunca lo dudes, brother.
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HOLAAAAAAAAAAAAA
No me mateís por haber tardado tanto en subir jejejejjej
EPIC BESO ENTRE JESÚS Y ANGIE.
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