¡My Secret! [Completo]

By samiramirez1

146K 8K 1.9K

Soy una chica un tanto peculiar... ¿guardarías mi secreto? Esta hermosa historia continua en "My No So Secret... More

Información
⚠️Aviso⚠️
Sinopsis
El comienzo (1)
Una noticia (2)
Un nuevo hogar (3)
Primer día de Instituto (4)
Sospechas (5)
¿Que sucede..? (6)
La desaparición de Mia Cooper (7)
¿Qué hice mal? (8)
Controlando (10)
Viajemos en el tiempo (11)
Más y más revelaciones (12)
A Prueba (13)
¿Señales de Humo? (14)
Más poderosa que nunca (15)
El trato y... (16)
La poción (17)
¡ARRÉGLENME! (18)
Portales (19)
Ay, no... (20)
No quiero que me hables (21)
Cazadores (22)
¡Déjalo! (23)
No te dejaré, nunca(24)
Cuidado, cazadores a la vista(25)
Más peligro (26)
Quiero un día como cualquier otra persona normal (27)
¿Qué me esta pasando? (28)
Ser invisible no es tan malo (29)
¿El fin? (30)
⚠️AVISO⚠️
Extra #1
Extra #2
Extra #3
Extra #4

La Respuesta (9)

3.9K 225 35
By samiramirez1

Llegué a la librería y me dirigí a mi lugar favorito: los archivos privados. No encontré nada interesante, como era de costumbre. De pronto, un ruido hizo que me sobresaltara y diera un pequeño respingo. Un libro se había caído de la estantería a mi lado. Lo tomé entre mis manos, limpié el polvo que tenía y leí el título: "Mitos de los vampiros". ¿De dónde salió este libro? Lo inspeccioné un poco más y me senté en una mesa vacía. Era un libro muy antiguo y se veía interesante así que empecé a leer: "Los vampiros no se alimentan de la comida que los humanos acostumbramos, sino que lo hacen de sangre". Sí, eso creo que es una de sus principales características. "Poseen una fuerza sobrenatural", "no se reflejan en los espejos", "tienen un aspecto que para los humanos es irresistible", "poseen rapidez sobrehumana". A medida que iba leyendo, todos los recuerdos y dudas sobre los Bartholy pasaban por mi mente, conectando con lo que el libro mencionaba. Era tanta coincidencia... No, no puede ser. ¡Es imposible! Riley, deja de inventarte cosas, ¿es tan aburrida tu vida que necesitas inventar cosas sobre los demás? Además, vampiros, ¿en serio? Tranquilízate, esto es una locura. Bueno, en realidad, al ver que yo tengo poderes, no se ve tan raro que sean vampiros. Pero... ¿será cierto? Es decir, hay varias cosas que coinciden con lo que ellos hacen y no hacen. Ese efecto de belleza que vi en los tres hermanos y Lorie debe ser por esa atracción que poseen, la que, según el libro que leí, los vuelve irresistibles. Además, esto explica el porqué Lorie no se reflejó en el espejo. También, el porqué nunca los vi comer. Ahora varias cosas tenían sentido. No estoy totalmente segura pero creo que encontré las respuestas que buscaba. Cerré precipitadamente el libro y salí de ahí. ¡Estoy ansiosa por decirles lo que descubrí! Me frené en seco. Pero... ¿cómo reaccionarán ellos? ¿Se lo tomarán bien? ¡¿Y si quieren deshacerse de mí para que nadie descubra su secreto?! Ay no, ay no, ¡AY NO! Ya me volví loca... Lo mejor será volver a casa a relajarme y pensar todo esto y...

-¿Riley?-Gracias Dios o quién sea que esté allí arriba, se nota que estás de mi lado. Ironicé en mi mente.

-Drogo...-dije lentamente y tratando de sonreír. ¡Bravo, Riley! Te mereces el Oscar.

-¿Todo bien?-Me miró de arriba a abajo con una ceja elevada, como si estuviera enferma o algo por el estilo. Sí, Drogo, estoy loca.

-Ah... em... Sí.- reí nerviosamente.- Esto... yo...- murmuré inentendiblemente. Damas y caballeros... ¡un aplauso a Riley! ¿Alguien puede abofetearme, por favor?-¡Tengo que irme!-Estaba a punto de escapar pero Drogo me tomó por el brazo e hizo que volviera a retroceder. Mierda.

-¿Quién evita a quién ahora, cosita?

-¿Evitar? ¿Yo?- solté una risa más falsa que las uñas de Samantha. Basta Riley, estás quedando como una idiota.

-Ya, suéltalo. ¿Qué te sucede?

-¿Podríamos ir a otra parte a hablar?- dije más bajo.

-Está bien.-asintió entendiendo que es serio. Una cosa como ésta no se dice en un lugar así sin más.

-Vamos a mi casa.-dije comenzando a caminar.

-¿No crees que estamos yendo muy rápido, cosita?-escuché su voz burlona. Acabo de entender que no sonó muy bien lo que dije.

-¡Cállate y deja de llamarme cosita!-seguí caminando mientras escuchaba sus pasos y su risa melódica, lo cual me quitó una sonrisa que traté de ocultar.

***

Nos fuimos a mi casa. ¿Qué estás tramando Riley? ¿Acaso no te escuchas? ¡Te dejarán sin una gota de sangre si lo descubren! Supongo que no tengo elección, y, en cualquier caso, tengo mis poderes para defenderme en cualquier emergencia. Tengo suerte de que todos estos días haya podido controlarlos y manejarlos mejor. No puedo creer que esté diciendo estas cosas. Si alguien me escuchara pensaría que soy una completa lunática. ¡Yo ya lo pienso!

-Llegamos.-murmuré en la entrada de mi casa. Lugo introduje la llave en la cerradura y entramos.

-Está bien, ¿qué querías contarme?- dijo mirando a su al rededor.

-Yo no quería contarte nada. Más bien me veo obligada a decírtelo.- dije un poco dudosa.

-Pues dímelo.- insistió, enfocando su mirada color avellana en mí.

-Pero tienes que prometerme que si te digo esto no te enojarás conmigo, ni me harás nada, ni me tomarás por loca.

-No comprendo.- Ya debe pensar que soy una loca. De pronto está muy serio. Esto no me da buena espina.-¿Qué tienes que decirme, Riley...?- Bien, no utilizó su estúpido apodo, está serio.

-Yo...- jugueteé con mis dedos. Ya no siento tanta seguridad.

-Riley...

-Sé quiénes son.- solté sin más.

-¿A qué te refieres con "Sé quiénes son"? Explícate.

-¿Quieres que sea más específica? Sé qué son.- dije resaltando el qué. Se puso tenso de repente, es obvio que di en el blanco. Pero, sorprendentemente, se relajó al instante.

-Y... ¿qué somos exactamente?- dijo con una sonrisa burlona, volviendo a su postura de siempre.

-Vampiros...- tal vez haya quedado como estúpida o tal vez acerté, nunca se sabe.

-Sabía que eras inteligente pero... no tanto.-Arqueó una ceja en modo burlón. ¿Entonces mi teoría era cierta?-Pero no eres la única inteligente aquí.- la sonrisa victoriosa que tenía en el rostro desapareció. No me jodas...-¿Crees que no sentí tu magia?- ví como su sonrisa se fue expandiendo.

-Yo... Espera un momento, ¿es por eso que siempre se ponían raros cuando los usaba?- lo apunté con el dedo.

-Puede ser, pero... no pude saber qué eres exactamente.

-¿Sabes una cosa? Yo tampoco.- dije mirando mis guantes.

-¿Qué? ¿En serio?-me miró sorprendido.

-Sí.- dije volviendo a mirarlo.

-Y... ¿desde cuándo sabes que tenías tus dones?

-Desde muy pequeña, supongo.- Me encogí de hombros.

-¿Nunca descubriste lo que eres?

-No pero estoy en medio de la investigación.-solté un suspiro.

-¿Y Hugo qué opina?

-Em... tal vez él no esté enterado...-sonreí inocentemente, a lo que Drogo rió.

-¿Y no sospecha nada?-preguntó incrédulo.

-No lo sé. Nunca me dijo nada al respecto.

-¿Sabes? Creo que Nicolae te puede ayudar con tu investigación.

-¿En serio?- respondí esperanzada. Eso me serviría mucho.

-Sí. Si quieres vamos ahora.

-Está bien.-Esperen un momento... ¿y si es una trampa?

-Tranquila, no es una trampa.

-¿Disculpa? ¿Cómo supiste..? ¡No leas mi mente! Leí en un libro que podían hacer eso. Tengo poderes y no temo usarlos.-lo amenacé.

-Vamos.-respondió riendo. Seguí a Drogo hasta su coche. Nos subimos en su auto y nos fuimos hacia su casa. Cuando llegamos, ya no sabía si era buena idea estar ahí, ya que ahora sabía su secreto.

-Cálmate, Nicolae jamás haría daño a alguien.

-¿Y tú?- rió.

-Tampoco. De hecho, es una de nuestras reglas.

-¿Tienen reglas?

-Solo nosotros. Hay más vampiros y no todos son buenos como nosotros. No te fíes de todos.-Me advirtió. ¿Eso quiere decir que hay muchos más en el pueblo?

-Bien, lo tendré en cuenta.- Estacionó el auto y nos bajamos. Al entrar a la gran mansión ya no sabía ni quién era, ni qué hacía ahí.

-Buenas tardes, Riley. ¿No terminaron el trabajo aún?- Me saludó cortésmente Nicolae. Como una tonta me quedé mirándolo con la boca abierta.

-Y-yo... ah... em...- tartamudeé. Ya no estaba muy segura de querer su ayuda. Nicolae, por más inofensivo que fuera, intimidaba mucho.

-¿Va todo bien?-me miró preocupado.

-Lo que Riley...-buscó las palabras.-..intentó decir es que quería preguntarte si le podías ayudar con una cosa. ¿Cierto?- dijo dándome un codazo.

-Sí, lo que Drogo dijo.

-Tranquila, somos todos amigos aquí. ¿En qué te puedo ayudar?-No puedo pronunciar ninguna palabra. El miedo se apoderó de mí. Carraspeé.

-Quería pedirte si podrías ayudarme con una investigación que estoy haciendo sobre mi pasado.-hablé rápidamente.

-Claro. ¿Específicamente en qué?

-Lo que la señorita Sherlock quiere decir es que descubrió nuestro secretito y ahora quiere que le ayudes a saber quién es, perdón, qué es.-Nicolae se quedó sorprendido. ¿Cómo pudo Drogo decir tal cosa así como así? Al ver su expresión, di un paso hacia atrás.

-No te preocupes, no te haremos daño. ¡Ah! Por cierto, claro que te ayudaré con tu investigación.- Me sonrió para tranquilizarme.

-Gracias.-dije un poco menos tensa. De todos modos seguí alerta.

-Hay algo que no sale de mi cabeza. ¿Cómo descubriste nuestro secreto?-preguntó Drogo.

-No son muy discretos...- elevé ambas cejas, mirando mis zapatos.

-Bueno, hasta ahora eres la única que lo descubrió.-Me di la vuelta y vi a Peter apoyado sobre la baranda de la escalera. Al parecer, no se perdió nada de la charla. Y como no, tiene un gran oído.

-También fue un poco de casualidad. Estaba buscando unos libros y escuché un ruido. Cuando me fijé de dónde provenía, me di cuenta de que era un libro de mitos de vampiros. Entonces...

-Espera, ¿salió de la nada ese libro?

-Supongo que se habrá caído de alguna estantería. Fue solo una coincidencia.- Los tres hermanos parecen estar reflexionando sobre algo. Sus miradas pasaron de unos a otros. ¿¡Y ahora qué carajos sucede!? De pronto llegó Lorie. ¿Reunión familiar? Me hubiesen avisado e invitaba a Hugo también...

-Nicolae tengo hambre.- se quejó la pequeña. Pude notar los ojos color sangre de la niña. Bien, parece que ya no van a fingir conmigo. No se si sentirme halagada o sentir miedo.

-¿Tus ojos acaso están..?-Cuando estaba a punto de acercarme, Peter me tomó por el brazo.

-No te acerques.-Asentí un poco aturdida por su reacción y retrocedí. Fue un sentimiento extraño.

-No Riley, acércate...-La niña de pronto empezó a dar pasos hacia mí. Cuando estaba a punto de saltar sobre mí...-¡Ouch!- se quejó.- ¡¿Qué te sucede?!- Me gritó. Utilicé mis poderes involuntariamente y con una fuerza sobrenatural evité que se me lanzara encima. Ahora se encontraba tirada en el suelo, frotándose la cabeza.

-Lo siento. Fue por instinto.- Me disculpé. Nicolae parece furioso.

-¡LORIE! ¿QUÉ TE SUCEDE? ¡¿CUÁNTAS VECES TE DIJE QUE TE CONTROLARAS?!- sus ojos también se empezaron a inyectar de un color sangre. Retrocedí por instinto. Por más que no me estuviera gritando a mí, jamás lo había visto de esa manera.

-¡Ahora la prefieren a ella más que a mi! Peter y Drogo solo se la pasan hablando de ella y... ¡AHORA TÚ!- Lorie, con los ojos entre lágrimas, se fue corriendo escaleras arriba. Supongo que a su habitación.

-Yo... no quería que...-empecé a balbucear.

-Está bien. Lorie es así siempre. Es muy celosa.- Me tranquilizó Drogo.

-¿Quieres que comencemos hoy?- Me habló Nicolae, ya calmado. Era totalmente otra persona.

-¿Hm?- murmuré confundida.

-Con... la investigación.- Me aclaró.

-¡Oh! Sí, claro. Pero... ¿No es muy tarde? Hugo se va a preocupar y...

-Puedes quedarte a dormir. Hay una habitación de invitados arriba. Además, mañana es fin de semana.- Me ofreció Peter. Arqueé una ceja.

-¿De verdad creen que Hugo me va a dejar dormir en una casa con tres chicos...?- Me reí.

-Dile que te quedas con Sarah.- Drogo se encogió de hombros.

-Hmm... está bien.-Llamé a Hugo y le dije que me quedaba con Sarah. No tuvo ningún problema con ello, por suerte.

-Está bien, Riley. Hoy tenemos que ir a cazar y...- empezó a decir Nicolae pero le dejé de prestar atención. ¡Ay Dios! Había olvidado ese pequeño detalle. ¡LOS VAMPIROS BEBEN SANGRE! Al ver mi cara de espanto, entendió que estaba preocupada.

-Tranquila. No cazamos humanos, cazamos animales.-Peter sonrió.

-Te lo dije. Regla número uno "no hay que hacerles daño a los humanos".- Me recitó Drogo con un tono teatral que me sacó una sonrisa.

-De acuerdo.-Me relajé y les dediqué una sonrisa tranquila.-Y... ¿qué pasa si no cazan?

-Nos agarra hambre, y nos dan ganas de comer a las cositas frágiles como tú...- respondió Drogo. Lo miré enojada.

-Número uno: ¡no soy frágil!.- dije resaltando el "No".- Número dos: ¡no me subestimes!- volví a resaltar el "No".- Y número tres: NO. ME. LLAMES. COSITA.- dije remarcando cada palabra.

-Tranquila... cosita.- se burló Drogo.

-Drogo...- le advirtió Peter.

-Ya, ya...- levantó los brazos en modo de rendición.

En ese momento entró Nicolae al salón, el cual se había ido a buscar algo. No me había percatado de su ausencia.

-¿Y esos libros?- apunté con el dedo índice el pilón de libros que llevaba entre sus manos.

-Son para la investigación.-Le sonreí agradecido. Una idea pasó por mi cabeza.

-Gracias. Oye, perdón que te pida tanto pero... ¿podrías ayudarme a mejorar mi capacitación para utilizar mis poderes? Es que aún no los controlo muy bien.

-A mí no me diste esa impresión...-murmuró Drogo. Al decir eso, recordé que utilicé mis poderes varías veces sin dificultades. Pero eso no quiere decir que sea una experta.

-Tal vez los haya utilizado en alguna que otra ocasión pero...

-¿¡Que qué!? ¡NO PUEDES UTILIZAR TU MAGIA EN PÚBLICO! ¡ES MUY ARRIESGADO!- Al escuchar los gritos de Nicolae pegué un pequeño respingo. De pronto me siento como una niña a la que la regañan por haber hecho una tontería.

-Y-Yo...- tartamudeé y desvié la mirada.-Lo siento... es la costumbre y...

-¿¡COSTUMBRE!? ¿Los usas todo el tiempo?

-Ya... no tienes por qué regañarla. Ella toma las decisiones que ella quiere.- le dijo Drogo, serio.

-Cállate Drogo. Tú más que nadie debes saber el riesgo.- le advirtió Nicolae. Drogo abrió la boca para replicar, pero no le salió ninguna palabra. ¿A qué riesgo se refiere Nicolae?

-No tienes por qué saberlo...- Me regañó Nicolae. Me sobresalté. ¿Acaba de escuchar mis pensamientos?

-Hay una última cosa que quiero pedirte, no, pedirles.- Me corregí.

-¿Qué es?- preguntó Nicolae.

-No utilicen sus poderes conmigo. Nada de leer mentes.

-De acuerdo.-aceptó Peter de inmediato.

-...Ajá...- murmuró Drogo.

-Hablo en serio, Drogo.- lo apunté amenazante.

-Nunca dejan que me divierta.- se quejó cual niño pequeño.

-¡Dejen de hablar y vayan a cazar que tengo hambre!- gritó Lorie, que no se había perdido nada de la conversación. Tiene los ojos color sangre, que ahora entiendo que es cuando tienen mucha hambre.-¿Saben qué? No vayan, hay algo mejor frente a mí...-No dejó de mirarme y acercarse. Pero antes de que dé otro paso, Peter la tomó por el brazo y se la llevó. ¿Y esta niña por qué quiere matarme?

-Tranquila, Lorie no te hará nada.- Me quizo tranquilizar Nicolae.

-Ahora ya no sé si es tan seguro dormir aquí. Es la segunda vez que me quiere matar.

-Vámonos antes de que Lorie pierda el control.- murmuró Drogo.

Esperamos a que Peter volviera y nos dirigimos hacia el patio trasero. La mansión está tan lejos de la ciudad que viven en pleno bosque. El patio trasero es tan lindo como la mansión. Tienen un lugar de juegos que supongo es para Lorie, una piscina, una pequeña casita en la cual parece que guardan herramientas y otros objetos, flores y un bosque. Entramos al bosque tranquilamente. Se miraron los unos a los otros y en una milésima de segundo desaparecieron. Es gracioso verlos cazar, sé que suena raro, pero lo es. Yo, por mi parte, decidí caminar un poco por el bosque, por más gracioso que sea verlos moverse como depredadores, sigo siendo una amante de los animales y no me gusta ver como los matan. Luego de unos minutos caminando llegué a un arrollo. Hay un árbol que está torcido, da la impresión de que es un asiento sobre el agua. Sonriente, decidí subirme ahí y disfrutar un momento a solas. Nada mejor que el sonido del agua, del bosque y de los animales, las estrellas y la luna brillante, y yo. Al cabo de unos minutos disfrutando de la brisa nocturna, un ruido me sacó de mi zona de confort. ¿Volvieron tan rápido?

-Si que cazan rápido.-Pero un gruñido me aclaró que no son los chicos.

Continue Reading

You'll Also Like

103K 13.1K 73
˚→ ˚→ ˚→ Ann Taylor una joven mexicana de 22 años, llena de sueños viaja por primera vez a Italia, en medio de su recorrido en las ruinas antigu...
55.7M 3M 26
TERCER LIBRO Jack Ross y el compromiso nunca se habían llevado bien. Cosa que, siendo sinceros, le había facilitado muchas situaciones en la vida. Si...
141K 18.9K 67
Sinopsis Tras encender el gas para perecer junto a quienes codiciaban la fortuna de su familia, Lin Yi transmigró a otro mundo, ¡y estaba a punto de...
567K 22K 93
Hace algunos años los chicos descubrieron una maravillosa clase de Biología, que cuando metia cierta parte de su cuerpo en la nuestra le daba cierto...