NANA SOFÍA
Minutos antes de la tragedia...
Las llamas envolvían aquella casa como si de madera vieja se tratase, yo lo había visto, intente que no sucediera, pero no pude ir en contra del destino, ellos mismos habían sellado su propio camino.
—¡No, basta, tengo que ir, ella hasta ahí, no puedo dejarla así!— Se liberó de todos y corrió hacia el fuego sin importarle nada.
Le grite con todas mis fuerzas para que no fuera, pues de todos modos ya nada se podía hacer, esto estaba escrito, al menos si el me hubiera obedecido, su final hubiera sido otro. Vi al hombre que crie como si fuera mi hijo perderse en aquella casa que se desmoronaba entre llamas ardientes y peligrosas, se estaba llevando mi vida con el, sin embargo, ¿Quién podría culparlo? Un amor como el suyo solo se da una vez en la vida.
—¡Al suelo, va a estallar!— Grito James y todos nos lanzamos sobre el cemento.
La casa explotó y nada quedó de ella, ninguno de los dos logró salir con vida y es que así debía ser, pues las historias de amor como el suyo, las cuales comenzaron mal, por ley deben terminar igual.
Aún así, se dice que para aquellas almas que comparten un amor frustrado, suelen otorgarle una segunda oportunidad para amarse en otra vida.
»Mis visiones son algo confusas, suelen cambiar a medida de las decisiones de las personas, aún así estaba segura de una cosa, lo que veía ahora con respecto al pequeño Adler me tranquilizaba, el destino lo uniría a la persona con la que siempre debió estar, al menos, si hace las cosas bien...«
ENERO 26, AÑO 2020
— La mayoría de los accidentes automovilísticos ocurren en Nueva York cariño, es una ciudad bastante ajetreada— Me decía Tía Victoria por llamada, mi teléfono estaba conectado al auto y podía escucharla en alta voz.
— Soy un hombre lobo, no voy a morir por un maldito choque, además, una de las causas de accidentes automovilísticos es esto, las llamadas mientras manejas, así que ya te voy a colgar, adiós…— Iba a colgar pero su voz me interrumpe, algunas veces tía Victoria solía ser muy molesta.
— Okey, okey, pero prométeme que vendrás con los chicos a pasar las vacaciones de invierno al país— Insiste con el tema y ruedo los ojos aunque no pueda verme, el semáforo se pone en rojo y freno.
— ¡Como jodes Victoria!— Grito algo exasperado— No te prometo nada, sabes que tengo que trabajar— Miro la pantalla ansioso por colgar cuando siento que el semáforo cambia a verde— Y por última vez, ya déjame en paz— Vuelvo a manejar pero un grito me saca fuera de mi burbuja y miro hacia el frente.
Una hermosa y joven mujer está frente a mi auto, muy cerca y me di cuenta de que casi la atropello, su ceño está fruncido y se ve furiosa.
— ¡Ten más cuidado idiota!— Dice lanzando el café que traía en un vaso térmico sobre mi parabrisas, me queda viendo por un par de segundos y se va.
Me quedo inmóvil sin saber que hacer, siento las bocinas de los autos detrás de mi sonar y como los otros vehículos pasan por mi lado y sus conductores me gritan insultos pero no le prestó atención a nada, esa chica, aquella chica de ojos negros, intensos, tenía un maravilloso olor a chocolate, era dulce, muy dulce, ella era mi mate, era mía, después de tantos años había perdido la esperanza pero aquí está, además, esos breves segundos en los que nos miramos a los ojos pude sentir que ya la conocía, que mi vida siempre a estado con ella.
— Adler, cariño, ¿Qué ocurre?— Pregunta Tía Victoria algo preocupada sacándome de mis pensamientos.
— Nada, estoy bien, luego te hablo ¿Si?— Colgué y comencé a conducir otra vez.
Chica de ojos hermosos, te voy a encontrar…
°°°
Hola:
¿Que tal? Les gustó el capítulo? Espero que sí, la segunda parte del Alpha Rey se llamará: “Decendientes”, dentro de poco estará lista así que prepárense!!
Un beso😘 los amo😍 bye✌️
RubiaApasionada♥️