—¿Stan, puedes quedarte un segundo?—El chico se acercó con una sonrisa a la albina.
—Seguro, siempre tengo tiempo para ti—Ella hizo una sonrisa diminuta.
—Leandra te veo preocupada—Agarró su mano.
—Pienso en el futuro—Habló mirando el cielo.
—¿Nuestro futuro?—Pregunto Stan haciendo que ella devuelva su mirada.
—Ire a la universidad de inglaterra pero por alguna razón no quiero irme de tu lado—La mano de Stanley viajo a la mejilla de la chica.
—Hablamos de esto, irás a la universidad y cuando nos reencontremos nos casaremos—Corto la distancia dandole un pequeño beso en los labios de la chica.
—Solo tenía un poco de miedo—Stan la miro con curiosidad.
—¿Miedo de que?—Pregunto.
—De no volver a verte al irme a la universidad—Contesto, el chico rió.
—Eso no va a pasar, Leandra. Deberíamos ir a tu casa a buscar tus valijas e ir a la central—Ella asintió haciendo una sonrisa más segura.
Se sentía algo ridícula en pensar que jamás vería al chico, tanto había llegado su amor que habían planeado hacer su vida juntos lejos de Derry, tener su familia y olvidar los traumas del pasado. Leandra se despidió de Stanley antes de irse, habia hecho una vida estable en Inglaterra, después de terminar su estudias de a poco habia olvidado recuerdos en esos años hasta olvidar todo completamente hasta recibir esa llamada que hizo que los recuerdos vengan uno tras otro, en ese momento afirmó que iría, pensaba que era una locura pero marchó hacia derry, se sentía nerviosa por que sabría que vería a Stanley o eso esperaba. Después de tanto llanto, ella término aceptando que Stan estaba muerto y no volvería, eso la había convencido de luchar contra Pennywise.
—¡Lean, cuidado!—Gritó Richie pera era tarde.
—Flotaras como él lo hizo—Sonrió macramente.
—¡Lean!—Gritó Richie, lo último que escucho antes de cerrar sus ojos, estaba segura en ese instante que la promesa se cumpliría.