Fantasías Eróticas

By UKnowLis

415K 8.8K 3.2K

Quisieron llevar a la realidad sus más oscuros deseos; pero... todo se les fue de las manos. ¿Qué sucede cua... More

1. Buenas intenciones.
2. Esperando la cena
3. Deliciosa negociación
4. Encuentro forzado
5. Lanzando el anzuelo
6. ¿Piscina nudista?
7. Inocencia perdida
8. Tu corazón es solo mio.
9. Amantes
10 ¿Descubiertos?
11. Consecuencias
12 Arrepentimientos
13 ¿Una nueva vida?
14. ¿Quieres ser mi amante?
15. Sí, acepto
16. Solo para mí
17. ¿Ella sigue aquí?
18. Quédate conmigo
19. Quiero ser tu prioridad
20. Te odio, ¿lo sabes?
21. ¿Ya no me deseas?
22. Ya me perdiste
23. Dime que me amas
24. Malas nuevas
25. Latidos
26. Manipulación
27. Acorralado
28. ¿En la calle?
29. Malditos celos
30. ¿Secuestrada?
31. Esperanza disipada
32. Matrimonio disuelto
33. Desesperada
34. Tan solo un error
36. Cayendo otra vez
37. Cambio de juego
38. De mujer a mujer
39. ¿Oportunidad o venganza?
40. Amor a primera vista
41. ¿Dulce venganza?
42. Separación definitiva
43. ¿Nuevo amor?
44. ¿Podemos hablar?
45. ¿Por qué viniste ahora?
46. Eres mi todo
47. ¿Tú de nuevo?
48. El intercambio
49. Decidido a todo
50. El rescate
Capítulo Final

35. Quitando obstáculos

3.3K 146 42
By UKnowLis

Cuando Yunho terminó de armar la cuna, no se detuvo allí, acomodó el resto de los muebles. Y aunque le tocó llamar a la tienda para cancelar la cuna que había comprado, fue a su auto y trajo el corralito y el moisés que BoA había rechazado. Ella se había encerrado en su recamara para tomar una siesta y aun no despertaba, por lo que aprovechó para dejar todo listo. También sacó los juguetes de las cajas y acomodó la basura en los recipientes afuera. Cuando terminó, tocó a la puerta de BoA varias veces; pero al no tener respuesta, giró el pomo y entró a la habitación. La vio recostada en la cama, profundamente dormida. Sabía que no era correcto entrar; pero lo hizo, se sentó en el borde, junto a ella y acarició su mejilla. Ella frunció la frente pero continuó dormida. Entonces aprovechó la situación y acercando su rostro al suyo le dio un beso. BoA despertó con la sensación de unos labios sobre los suyos; pero cuando abrió los ojos no vio a nadie, se levantó con rapidez y se dirigió hacia la habitación del bebé. Se quedó inmóvil al abrir la puerta, Yunho no solo había armado la cuna, sino que también acomodó el resto de los muebles, los juguetes, sacado la basura y dejado la habitación prácticamente lista. Y aunque las cosas no estaban donde ella había imaginado, se veía mucho mejor donde estaban. Se acercó al moisés, no podía negar que su ex marido tenía buen gusto. Luego se acercó al corralito, hasta había colocado algunos animalitos de felpa y otros juguetes dentro de él. Pero no iba a dejar que aquello le confundiese, estaban divorciados y así debían continuar las cosas. Él era un mentiroso infiel, debía mantener eso en su mente.

Jayden estuvo con los padres de Yunho apenas un par de días, él no la quería viviendo en casa de sus padres, no quería ni imaginar que pasaría si BoA se enteraba de ello. Aunque tampoco podía dejarla en la calle estando embarazada. Llamó a Yura, sabía que los padres habían dejado un fideicomiso con el que ella pagaba sus estudios; pero ahora que no estaba estudiando, lo justo es que su hermana le diera el dinero para que pudiera utilizarlo en su subsistencia.

─Lo siento ─dijo Yura firme─, pero no pienso soltar ni un solo centavo a menos que ella desista de la idea de tener ese bebé.

─No puedes obligarla a hacer algo que no quiere.

─Tú deberías ser el primero en estar de acuerdo conmigo, si yo sé bien que tanto Jayden como su hijo son una carga para ti.

─Quizás sea un desgraciado en muchos aspectos; pero no voy a obligar a Jayden a abortar, solo porque me es más conveniente, yo pienso hacerme cargo de mi hijo.

─Entonces hazlo, pero Jayden no verá ningún centavo del fideicomiso hasta que cumpla los veinticinco.

─¿De verdad estás pensando en el bienestar de tu hermana?

─¡Por supuesto que sí! ─exclamó ella levantando la voz─. Pero ella es demasiado tonta y se ha empecinado en tener a tu engendro.

─Tu sobrino, te recuerdo que es tu sobrino.

─Mientras no haya nacido no es nada, ni nadie.

─Creo que estoy perdiendo mi tiempo. Si las cosas van a ser así contigo, entonces mejor mantente alejada de Jayden.

Yura rio al otro lado de la línea.

─¿Ahora te crees su caballero de reluciente armadura? ─su tono era sarcástico─. ¡Por favor! si los dos sabemos que lo único que te interesaba de ella era el sexo. Maldito pervertido, ella tan solo era una adolescente cuando la sedujiste, realmente espero que pagues por todo el daño que le has hecho. De no ser por ti, ella estaría estudiando, siempre fue muy buena alumna, sobresaliente, incluso ganó una beca que cubría gran parte de sus estudios universitarios; pero todo lo perdió gracias a ti. Así que no vengas con tu discurso moralista. Y como dije antes, no soltaré un solo centavo a menos que se deshaga de tu engendro.

─No quiero a mi nieto viviendo en malas condiciones ─le advirtió su madre, cuando le dijo que buscaría un sitio para Jayden─. Además, ella no puede vivir sola, me preocupa que no se alimente bien o no siga los cuidados prenatales adecuadamente.

─¿Entonces qué sugieres?

─Comprar una casa y ponerla al nombre del niño cuando éste nazca.

─Me preocupa lo que pueda pensar BoA si hago eso, e incluso Jayden. No quiero que ella interprete eso como que tenemos una relación.

─Creo que es un poco tarde para preocuparte por lo que pueda pensar tu ex mujer.

─Quizás... pero no quiero seguir lastimándola.

─Entonces dile cuanto antes que vas a tener un hijo con otra mujer.

Yunho sabía que su madre tenía razón, era algo que él mismo se decía casi a diario; pero simplemente no encontraba las palabras ni el momento. No quería verla sufrir, menos cuando aquello podía afectar al bebé. Pero si no lo hacía y ella se enteraba por otros medios, sería mucho peor.

Literalmente, se hallaba entre la espada y la pared.

─¡Es muy pequeño! ─se quejó Jayden, cuando entró al apartamento que Yunho le alquilara─. ¿Dónde se supone que van a caber las cosas cuando el niño nazca? ¡Ni siquiera es la mitad del tamaño que el otro apartamento! ¡Quiero una más grande!

─Es suficientemente grande. Además, tiene todo lo que necesitas, está ubicado en una zona segura, y mi madre puede venir a verte de vez en cuando.

─¿Y tú qué? ¿No piensas venir a verme?

─Estaré pendiente de lo que puedas necesitar; pero no Jayden, no vendré a verte.

─¿Por qué no? ─Jayden se pegó a él─. ¡Yunho, yo te necesito tanto!

─No empecemos de nuevo.

─Yunho, por favor...

─Ya he sido claro contigo, solo estamos en contacto por el bebé, nada más.

Ella llevó una de sus manos hasta su entrepierna y lo acarició por encima del pantalón.

─Pero que tenso estás.

─¡Jayden ya basta! ─gritó él, apartando su mano.

─Vamos Yunho... será solo una mamada, te la haré así como a ti te gusta.

Jayden intentó soltar su cinturón; pero Yunho se alejó de inmediato, sacó un par de tarjetas de crédito y se las entregó.

─Úsalas para tus gastos.

Ella tomó las tarjetas.

─Deja que te de las gracias ─dijo mostrándole la lengua de un modo seductor─, los dos sabemos que lo deseas.

─Si necesitas algo, házmelo saber por medio de mi madre ─dijo Yunho dirigiéndose hacia la puerta─, que como dije, de ahora en adelante se ocupará de ti.

─Aunque te hagas el difícil, sé que estás bien necesitado, pude sentirlo.

Yunho prefirió marcharse en silencio, era peligroso caer en su juego. 

En la oscuridad de su nueva habitación, Jayden se quitó la ropa, esa noche se le apetecía dormir desnuda. Se miró al espejo, aunque su vientre se notaba más voluminoso, su cuerpo continuaba teniendo ese toque erótico, centró su vista en sus pechos, ya empezaban a abultarse. Hacía tanto tiempo que no tenía sexo, la última vez había sido en la oficina de Yunho. Se recostó en la cama y cerró los ojos rememorando aquella escena, aunque no tenía experiencia con otros hombres, estaba segura que Yunho se salía de lo común, ese hombre follaba demasiado rico y no se imaginaba un futuro sin tenerlo nuevamente dentro de ella.

Sin pensarlo mucho, deslizó una de sus manos por su vientre hasta llegar cerca de su clítoris, deslizó sus dedos por los pliegues de su sexo, tan solo con pensar en Yunho ya estaba húmeda.

Empezó a tocarse con dos de sus dedos, al inicio con algo de timidez, luego de manera más agresiva. Llevó su otra mano hasta su centro e introdujo uno de sus dedos en su interior. Lo sacaba y metía, imaginando que era Yunho quien la embestía, que le tenía dentro.

─¡Oh...! ¡Yunho...! ─gimió su nombre a medida que el placer aumentaba.

Movía sus caderas, dos de sus dedos entraban y salían, su otra mano se movía con mayor rapidez, sus gemidos eran cada vez más audibles... Entonces lo vio, de pie frente a su cama, con su miembro erecto y listo para penetrarla. La tomó por las caderas y la embistió salvajemente, se movía casi con la misma rapidez que los perros que copulaban en las calles.

Un grito de placer se escapó de su garganta.

─¡Yunho follas tan rico! ─gemía, mientras él colisionaba contra su cuerpo─. ¡Demasiado rico!

Cerró los ojos, casi gritó cuando el placer llegó a su máximo nivel.

─¡Oh... Yunho...! ¡Yunho...! ─gimió hasta que poco a poco fue quedándose quieta.

Abrió los ojos esperando encontrarse con los de él; pero en lugar de eso, se halló con la soledad de su habitación. Se levantó de repente, Yunho no estaba por ningún lado, se decepcionó al darse cuenta que su presencia había sido producto de su febril imaginación.

Después de dos semanas de vivir en aquel apartamento, fue habituándose a él. Aunque estaba amoblado cuando lo recibió, fue comprando algunas cosas para darle su toque. Mandó a cambiar las lámparas por unas más modernas, compró unos cuantos almohadones de colores vibrantes y juveniles, para contrastarlos con el blanco de los sillones. Después, se fue a la habitación del bebé, esta estaba vacía y las paredes eran todas blancas.

Yunho se hallaba en la oficina cuando recibió su llamada.

─Sé que me dijiste que te llamara solo en caso de una emergencia; pero se trata de algo importante.

─Habla, ¿de qué se trata?

─Es sobre la habitación del bebé.

─¿Qué hay con ello?

─Necesita un color diferente en las paredes.

─¿Para eso me llamaste? ─Yunho sonaba fastidiado─. Te di dos tarjetas de crédito, ¿no? Solo contrata a alguien.

─Claro ─dijo ella sintiéndose un poco tonta─. Pero, ¿crees que podemos comprar los muebles juntos? También quisiera que me ayudaras a decorar la habitación. Estaba pensando en que el color predominante fuera el azul turquesa.

─Jayden, no tengo tiempo para esas cosas, contrata a un diseñador que yo pagaré los gastos.

─Pero a mí me hacía ilusión que pudiéramos hacerlo juntos.

─Entiende algo Jayden, no somos una pareja ─su tono era cortante─, ve a la tienda, compra todo lo que necesitas y cárgalo a las tarjetas, es lo único que puedo hacer.

Jayden sintió que se le hacía un nudo en la garganta.

─Al menos... ─dijo con la voz entrecortada─, ¿puedes escoger algún mueble tú?

─¿No entendiste que no tengo tiempo para eso? ─sonaba cabreado─. Ahora por favor discúlpame, que tengo que seguir trabajando.

"Pero para follarme si sacabas tiempo", dijo Jayden para sí, cuando él ya había cerrado la llamada.

Pasó la mañana totalmente desanimada, le resultaba difícil pasar su día a día sin él. Cuanto extrañaba sus visitas durante la hora del almuerzo, ahora todo parecía tan distante. Las palabras que Yunho le dijera a su padre vinieron a su mente:

"Lo de Jayden fue tan solo un error".

Imaginaba que lo mismo pensaba de su hijo, ambos eran un error del que seguramente querría deshacerse si pudiera. Pero no iba a darle ese gusto, tanto él como BoA tenían que pagar, ella se les había acercado con la única intención de ser amable.

Ellos, sin embargo, tenían otras intenciones.

Y aunque ciertamente, al final ella decidió participar en su juego, tampoco era menos cierto que le habían seducido.

Ambos.

Porque en un inicio BoA fue parte de ese juego.

Acababa de cumplir dieciocho, les había hecho un pastel y fue hasta su casa para obsequiárselo. Pero para su desgracia, llegó en un mal momento. Ellos estaban teniendo sexo en medio de la sala. Bo Ah se hallaba de rodillas sobre un sillón gimiendo, Yunho la sujetaba por la cintura al tiempo que la embestía desde atrás con toda la maquinaria de su cuerpo. Su cuerpo era fuerte y varonil, la magnitud de su erección era deliciosamente intimidante. Y aunque fueron solo unos segundos, como un gif, aquella escena se repitió en su mente por mucho tiempo. Desde ese primer instante deseó estar en el lugar de su mujer, que él la desease como la deseaba a ella.

Y por un tiempo lo consiguió.

Pero la maldita perra no pudo tolerarlo, y se inventó lo del divorcio para manipularlo. Sin embargo, para su deleite, pasaron algunos meses sin ella de por medio para joderles la vida. Fueron unos meses maravillosos, donde casi se sintió como su esposa, como su mujer. Aquel era su sueño, ser su legítima esposa; pero mientras BoA existiese eso jamás iba a suceder. Ella era un obstáculo que debía quitar de en medio para siempre, aunque eso significase acabar con su maldita existencia.

Llevaba mucho tiempo pensando en ello. 


CONTINUARÁ 

Nota de autor

Tengo una historia corta finalizada que quiero publicar cuando termine esta, trata de una estudiante universitaria que seduce a su profesor, para luego chantajearlo. La chica se llama Elizabeth; pero quisiera que me dieran sus sugerencias para el nombre del profesor, ando demasiado metida en lo asiático  y no se me dan los nombres occidentales. 

El nombre del profesor debe ser occidental. 

En cuanto al capítulo de hoy, espero sus comentarios y me regalen sus estrellitas. 

Continue Reading

You'll Also Like

619K 103K 76
Kylian Craig tiene claras dos cosas: enamorarse debilita y todo se puede negociar, así que cuando se da cuenta de que una de sus más grandes inversio...
454K 29.4K 29
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca. -¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen. -Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a e...
1.9M 135K 90
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...
72.6K 3.5K 39
Un baile de máscaras. Allí comenzó todo. Alesha podía poseerlo todo, pero así como lo obtuvo... Lo podría perder. Emiliano siempre obtuvo lo que qui...