El sol y la Luna se encuentran separados hace muchos años, pues los habitantes de ambos mundos se odian, pero en todo este odio surgió un amor entre Dasha que era una hermosa mujer del planeta Luna y Hebdark del planeta sol; su amor superaba cualquier clase de odio, ellos sabían que encajaban el uno con el otro, como estaban distanciados por mucho tiempo siempre se comunicaban mediante estrellas fugaces las que servían como mensajeras, eran las únicas testigos de su amor, un día cuando hubo un eclipse y los dos iban a estar juntos los habitantes del planeta Luna descubrieron su amorío; Dasha fue llevada a el juzgado de su Mundo y desde ese día perdieron contacto, nunca más volvieron a estar juntos, Hebdark creyó que ella había conseguido a alguien más en su mundo pero siempre enviaba cartas mediante una estrella fugaz, pero nunca obtenía respuesta, así que perdió esperanzas aunque nunca olvido a Dasha.
El Rey de todos los planetas le había dicho a Dasha que el futuro de ella iba a ser para salvar a los dos mundos, ella no lo comprendió en ese momento; él Rey le había hecho escribir una carta que para Dasha no tenía sentido antes de que todo terminara.