Salmón, un pez que sobresalía entre los demás, era agraciada y propia. Todos la deseaban, pero ella quería algo más, una aventura.
Un día, aburrido como siempre, decidió ir a la superficie, pero no se percató de que Caballito la siguió.
Salmón iba feliz hacía el peligro, apenas llegaba y vió una figura de media luna, le llamó tanto la atención, nunca había visto eso, a menos que fuera cierta la vieja historia que contaban, "comida", lo más prohibido del mundo marino, agarró valor y subió, salió disparada del agua, haciendo que casi el susodicho cayera al agua.
Recuerdo:
- Había una vez un amorío, pero no cualquiera, era un pez y la comida, todo iba bien, hasta que llegó "la temporada", el iba normal a verla, llegó a la superficie y vió algo increíble, vió a la comida volando, por fin estaría con su amada, sentiría su tacto, ese aroma que tanto le gusta, pero grata fue la sorpresa que se llevó, esa no era su comida. Y gracias a la comida, nuestro pez cayó en las redes.-
Taco muy espantado empezó a maldecir. -¿COMO SE TE OCURRE, ESTAS LOCA O ENFERMA?, YA SÉ, LAS DOS, PEZ TONTO...- calló porque vió la belleza de aquel "pez tonto".
Salmón empezó a sollozar y a recordar...
Pasado:
-Eres un pez tonto, no sirves para nada, hubiese dejado que te comieran los tiburones-.
Aquella aventura la lastimó mucho...
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JAJAJAJAJA, ME MAME V: