Jamás me pasó por la cabeza que mi padre se casara de nuevo, y mucho menos que yo sería parte de ella como dama de honor, me siento feliz por mí padre pero al mismo tiempo... Me entristece aún por mi madre, pero Shawn tiene razón, todos se merecen una segunda oportunidad y supongo que mi madre estaría de acuerdo. Suspiro y sonrío a Melissa a través del espejo.
—Te ves muy linda Melissa—ella se voltea para abrazarme.
—Gracias Alissa, sé que es bastante difícil para tí, para todos...
—Todos se merecen una segunda oportunidad de ser felices—alzo un hombro, ella sonríe más.—no vayas a llorar o arruinarás tu maquillaje—ríe y mira hacia arriba mientras parpadea varias veces.
—¡Ya es hora!—entra Perrie exclamando, detrás de ella entra Logan vestido de traje azul marino, sin corbata, se para junto a su madre para que esta la tome del brazo.
—Te ves hermosa mamá—besa su mejilla, yo alcanzo a tomar una fotografía llamando la atención de ambos, Logan me fulmina con la mirada y su madre me sonríe.
—No me veas así—le reprocho y me despido con la mano para ir con mi padre, ya que yo lo acompañaré al altar.
Todo se hace en el enorme patio de la casa, las familias de ambos están aquí por lo que debe haber bastantes personas en el lugar. Entro a la habitación donde se encuentra mi padre y lo encuentro hablando con William.
—Ya es hora papá—ambos voltean a verme y sonríen.
William besa mi frente y se va, yo le ofrezco mi brazo a mí padre con una sonrisa, él ríe y lo entrelaza con el mío para comenzar a caminar.
—Estoy nervioso—dice después de un rato.
—No es como si la hubiera amarrado en la habitación para que pareciera que te dejó plantado, pff—ruedo los ojos, él me fulmina con la mirada y suelto una leve carcajada.—solo juego papá, todo saldrá bien.
Suelta un suspiro pesado, sonrío de nuevo, se supone que en un futuro el debería decirme estas cosas y yo no.
Salimos al patio y como si todos lo supieran, voltean a vernos con una sonrisa, yo sonrío en modo automático mientras camino a lado de mi padre, unos segundos después la clásica canción comienza a sonar, lo que significa que la novia ya viene detrás de nosotros, Perrie aparece jadeando del lado que nos corresponde a ambas con dos pequeños ramos, le sonrío y suelto a papá para ir a mi lugar y tomar el ramo que Perrie me tiende.
—Creo que voy a llorar—susurra detrás de mí.
—El amor—comienza el sacerdote con una sonrisa mirando a los prometidos.—un lazo muy fuerte entre dos personas...
Siento que la voy a pasar muy aburrida durante estos próximos minutos, me arrepiento de haber aceptado ser madrina, debí recomendar a Michelle. Ahora que la menciono no deja de tomar fotos mientras me saluda eufórica, sólo sonrío y paso mi mirada por todas y cada una de las personas invitadas a la ceremonia. Todos mis hermanos se encuentran sentados mientras hablan con alguno de nuestros familiares, por otro lado, la familia de los Malik se encuentra mirando atentos a los futuros esposos, excepto un chico de cabello cenizo y ojos azules, él me mira a mí con una extraña sonrisa, me saluda con la mano y yo sólo le sonrío incomoda mientras volteo al frente donde se encuentran los padrinos, James y Logan, le sonrío al primero y el me guiña un ojo.
—Tenemos cosas de qué hablar querida hermanita—susurra Perrie detrás de mí, a lo que asiento levemente apartando la mirada de James fijándola en mi mellizo, quién me mira con el ceño fruncido y le hace una seña discreta en dirección a James, alzo mi hombro izquierdo indicándole que le contaré después.
Lo bueno de ser mellizos es que nos entendemos a la perfección. Suspiro y miro a los novios con una sonrisa, Perrie pasa junto a mí con el lazo en sus manos para colocarselos con ayuda de Logan, después James sube con los anillos en manos y el padre continúa.
—Si alguien tiene algún impedimento para que esta boda se realice, que hable ahora o calle para siempre
Silencio mientras todos de miran entre sí, sonrío divertida.
—Bien, con el poder que Dios me concede, los declaro marido y mujer, ya puedes besar a la novia—dice el padre con una sonrisa y todos aplauden felices.
Creí que llevaría más tiempo, lo bueno es que Melissa fue muy amable en comprar dos vestidos diferentes, uno largo para la boda y uno sencillo para la mini fiesta, donde las familias se conocerán. Qué emoción.
Después de un asqueroso beso se retiran mientras se les lanza arroz y nosotros vamos detrás de ellos, yo del brazo de James y Perrie de Logan. La fiesta será en un enorme salón en el centro de la ciudad.
—Te ves linda con ese vestido—susurra en mi oído causandome escalofríos, sonrío un poco y le doy un codazo leve.
—Tú no te ves nada mal...
—Lo sé—ruedo los ojos.
Nos adentramos a la casa y es cuando nosotros nos separamos para ir a las habitaciones, los novios se fueron directo a la limosina junto al resto de los invitados.
Cuando estoy por abrir la puerta, me empujan haciendo que entre a la fuerza y casi caiga al suelo, cierran la puerta detrás de mí y me doy la vuelta para ver al culpable.
—¿Qué demonios Perrie?—ella me sonríe maliciosa.
—¿No pensabas contarme o qué?
—¿De qué hablas?—frunzo más el ceño.
—De James y tú—rueda los ojos.
—Oh... Eso—rasco mi nariz mientras sonrío, ella chilla emocionada y me abraza mientras da saltitos.
—¡Lo sabía! ¡Fueron tan predecibles! Bien dice la frase que del odio al amor solo hay un maldito paso—me suelta y sonrío incomoda.—y soy la primera en saberlo...¿Sí, verdad?
—Eh... Supongo...
Chilla de nuevo y me abraza, pero la alejo.
—Perrie, está bien que estés emocionada y eso, pero tengo hambre y en esa fiesta habrá mucha comida, así que debemos cambiarnos
—Cierto—me señala, y sonríe.—nos vemos haya Aliss, me iré con Logan—me guiña un ojo y sale, ruedo los ojos mientras sonrío y comienzo a quitarme el vestido mientras camino al armario.
Saco el vestido corto y ceñido, es el mismo color que el largo, pero éste es de escote de corazón y completamente liso, y gracias a Dios con el cierre de un costado, así no se batalla. Conservo los tacones y cambio el peinado por una coleta alta que cae en rizos por el peinado que Michelle me hizo para la boda, tomo mi bolso a juego con el vestido y abro la puerta para salir encontrándome con James, le sonrío y me besa.
—Ya vámonos—digo divertida y me da un corto beso.
—¿Y si nos quedamos?—hace puchero.—casa sola—mueve las cejas varias veces, niego riendo y lo hago a un lado para caminar.—¿No te gusta la idea?
—No, me agrada más el hecho que voy a comer todo lo que quiero porque habrá bufete en esa fiesta, así que vámonos ahora o me iré por mi cuenta—resopla.
—¿Sabes? Se irán por dos meses a Bora Bora de luna de miel
—¿Tendremos un mes para todos nosotros solitos?—pregunto emocionada y sonríe.
—Iremos a nuestra casa en la playa, todos nosotros, y...—me toma de la cintura sin dejar de caminar.—me temo que compartiremos habitación
—¡Ja! Quiero ver que mis hermanos te dejen.
—Verás si no.
Subimos a su auto y salimos de ahí.
—¿Ya sabe alguno de tus hermanos?—asiente.
—Shawn, Connor y Logan
—Y Perrie—agrego y frunce el ceño.—me siguió hasta mi habitación para sacarme la sopa—ríe mientras niega.
—Tus hermanos no se lo van a tomar muy bien, menos Paul y Aidan—resoplo, porque tiene razón y no había pensado en ello, asesinaran a James.
—Veremos que pasa...
—Por cierto, antes de que lleguemos, quiero explicarte—asiento mientras se detiene en un semáforo, voltea a verme.—hay una... Amiga de mamá que vino—asiento.—y tiene una hija de mi edad, ella cree que somos algo por el simple hecho de que nuestras madres nos emparejan a cada rato.
Bueno, tarde o temprano tenía que salir alguien.
—No quiero que te molestes—me toma de la mano, sólo niego y aparto la mirada.
—Ya está en verde...—me suelta y pone el auto en marcha de nuevo.
Lo bueno es que lo aclara desde un principio. Suspiro mientras cierro los ojos.
Estaciona el auto y bajamos encontrándonos con la señora Clark y sus hijos, hace días que no veía a ninguno de ellos. Me detengo para saludarlos y James se sigue derecho.
—¡Qué gusto verlos!—exclamo feliz con los brazos abiertos.
—¡Lo mismo digo querida!—me dice Sandra y me abraza, después abrazo a Madison y por último Chris, a quien sonrío y no sé si abrazar o gritar de felicidad.
—Yo también quiero un abrazo, mujer—me jala del brazo para acercarme a él, río mientras lo rodeo con los brazos. Al separarnos besa mi mejilla y los cuatro caminamos dentro del lugar.
—Te ves hermosa Alissa—me dice Sandra.
—Muchas gracias, y que decir de usted—la señalo.—viene muy guapa también.
—Ay, me ruborizas—las tres reímos, Chris sólo rueda los ojos divertido.
El lugar está repleto de personas, algunas caminando de un lado a otro y otras platicando animadamente en las mesas, hay una mesa de comida, otra de postres, la de bebidas y la principal donde la novia y los padrinos deben estar, dónde debo estar. Me despido de la familia Clark para ir hacia la mesa cuando me toman del brazo.
—Al fin llegas, quiero presentarte a mí familia—me dice Melissa con una sonrisa, a lo que asiento con el mismo gesto y me hace caminar a la primera mesa que ve, donde hay más adultos que adolescentes.—familia, quiero presentarles a la hija de mi esposo, Alissa—todos en la Mesa me sonrien y asienten en forma de saludo, yo devuelvo el gesto.—el es mi hermano George y su esposa Stella
—Mucho gusto, tiastro—bromeo a lo que ellos ríen.
—El es mi primo, el más pequeño, Jason
Es el mismo que me saludo en la ceremonia, se ve bastante joven ahora que lo veo más cerca, de unos veinte o veintitrés.
—Mucho gusto—sonrío mientras tomo su mano, él me devuelve el gesto y se levanta para besar mi mejilla.
—Igualmente—murmura y vuelve a sentarse. Eso fue extraño e incomodo.
—Mi madre Beatriz y mi hermana Stephanie
—Mucho gusto abuelita—la señora me sonríe con ternura y se levanta para abrazarme, algo que me sorprende.
—Que bella eres, corazón—pellizca mi mejilla y vuelve a sentarse.
—Tiastra—sonrío y ella me devuelve el gesto.
Vamos a una segunda mesa después de una corta charla, después a una tercera y así casi paseándome por todo el salón, hasta que finalmente me dejó ir gracias a mí padre, ahora a ella le toca conocer a la gran familia Miller. Suelto un suspiro mientras me recargo sobre la mesa de bebidas y acomodo mi zapato enorme, ya no aguanto los malditos pies y desearía poder estar descalza, pero mi padre y Melissa me asesinaran si me los quito. Resoplo y volteo al mesero con una sonrisa.
—¿Podrías darme una piña colada por favor?
—Por supuesto—sonríe y comienza a hacer su trabajo.
Suspiro mientras veo a mi alrededor, veo a lo lejos a una Michelle sonriente a lado de uno de los Malik mientras habla animadamente y él hace todo lo posible para alejarla, sonrío divertida.
—Aquí tiene señorita
—Gracias
Comienzo a caminar pero soy detenida por una mano en mi antebrazo, me detengo y me doy vuelta con el ceño fruncido encontrándome con el rubio cenizo de hace unos minutos.
—¿Hola?—digo y sonríe.
—Soy Jason, el de..
—Ya se quién eres, no soy tonta—ruedo los ojos y bebo de mi copa, el sonríe de nuevo.—¿Qué se te ofrece?
—Mira, no veo a nadie más de mi edad, así que...
—¡Oye! Sólo tengo diecisiete—frunzo el ceño.—casi dieciocho—digo orgullosa.—te equivocaste amigo, tengo una prima que...
—Pero yo quiero hacer amistad contigo—sonrie con inocencia mientras mete las manos a sus pantalones negros. Alzo una ceja.
—Pareces un niño, ¿Qué edad dices que tienes?
—Veintiuno
Casi le atino.
—¿Y cómo por qué alguien mayor de edad quiere hacer amistad con una menor?—alzo una ceja de nuevo y bebo de mi copa, la cual me es quitada de las manos, por él.—oye, ve por la tuya—frunzo el ceño y ríe.
—Esto tiene alcohol, eres menor de edad—la deja en una bandeja de un mesero que va pasando, me cruzo de brazos.—me pareces interesante—se encoge de hombros.
—No soy ningún objeto exótico ni nada por el estilo.
—No, sólo digo que...
—¿Qué tal Jason?—aparece James con una notable sonrisa fingida hacia Jason, quién rueda los ojos con la presencia del primero.—Aliss, mamá y tu padre te buscan para que nos acompañes en la mesa—dice sin dejar de ver a Jason.
—Bien, nos vemos Jason y me debes una piña colada—lo señalo y asiente sonríendo, me alejo de ambos.
Espero que James no haga un alboroto o algo por el estilo.
No mire malas intenciones de parte de Jason, es agradable aunque un poco raro, ¿Qué tipo se acerca así a una chica de diecisiete?